“La inflación está bajando”, aseguró Mauricio Macri en su discurso en el Congreso este jueves. Al referirse a la cuestión económica, blanco de todas las críticas a su gobierno, el presidente dijo que “la inflación del 2017 fue menor a la del 2016. La de este año va a ser aún menor, y la del año que viene, aún menor a la de 2018”.

En esta línea, sostuvo que “no queremos sólo bajarla. Queremos que nunca más sea un instrumento de la política como lo ha sido durante más de 70 años”, porque “la inflación castiga a la mayoría, dificulta la competencia y nos mantiene presos del corto plazo” ya que no permite “tomar crédito” y “ahorrar”.

En otro tramo, afirmó estar llevando adelante “un camino de desarrollo en el que estamos combatiendo la pobreza para que nadie quede atrás”.

“Ustedes escuchan que algunos nos critican por ir demasiado lento y otros por ir demasiado rápido. Los primeros piden un shock de ajuste, y a ellos les digo que acá vinimos a reducir la pobreza y a asegurarnos que ningún argentino pase hambre. Y los otros nos piden que nada cambie, y yo les digo: si nada hubiese cambiado estaríamos como otro país hermano que está en una desintegración social (en referencia a Venezuela)”, expresó.

Por eso, defendió el “gradualismo” y aseguró tener “metas para bajar la inflación, para reducir el déficit fiscal”. “Y como las vamos a cumplir, vamos a dejar de endeudarnos y se van a multiplicar las inversiones en un país confiable”, prometió.

Por otra parte, le pidió al Congreso que “tenga en sus prioridades para este año” la ley de Financiamiento Productivo (reforma de Mercado de Capitales), que cuenta con media sanción de Diputados y aguarda por su tratamiento en el Senado.