Sigue levantando polvareda lo sucedido el sábado en la noche en el programa de Mirtha Legrand, por El Trece. Allí estuvo la polémica Natasha Jaitt, que prendió el ventilador y no dejó títere con cabeza, involucrando a todo el mundo en una trama de sexo y pedofilia.

Consultada sobre el tema, Elisa Carrió abonó la teoría que ya han sugerido otros, como el periodista Carlos Pagni -mencionado también en la catarata oral de Jaitt-, al señalar respecto de esa figura invitada a la mesa de Mirtha que “seguramente la señora esa forma parte de estas operaciones de inteligencia, y puede ser una operación contra el Gobierno”.

Entrevistada por Jonatan Viale en la señal CNN, la diputada confirmó también su postura en el debate sobre el aborto. Al principio se mostró sinuosa, al aclarar que “en su oportunidad voy a dar mi opinión”. Luego de transitar un espacio filosófico, admitió que “la opción es muy difícil de tomar; yo creo que hay que discernir bien las situaciones”.

“Uno es el caso del aborto legal en caso de violación, pero tengo mucho miedo a toda la experiencia genética que viene, hay un racismo en ciernes, hay una irresponsabilidad enorme”, expresó la legisladora. Luego recordó que ella es autora de la Ley de Salud Reproductiva y remarcó que “el aborto no es un método anticonceptivo”.

Dicho lo cual, finalmente confirmó lo que claramente era un hecho: “Yo voy a votar en contra, porque además no tengo mandato”, dijo, y explicó a qué se refería: destacó que a ella la votaron gente de todos los sectores, de los que quieren el aborto, los que lo rechazan, quienes militan a favor y en contra, ante lo cual se preguntó “de dónde saco mi mandato (a favor del aborto) si no está en la plataforma popular”. En esas circunstancias, sugirió que “se decida popularmente”, esto es a través de una consulta popular.