En el cierre de las exposiciones de presidentes de bloques tras el informe del jefe de Gabinete, el titular del interbloque Cambiemos, Luis Naidenoff, pidió tener en cuenta “cuál fue el punto de partida” para esta administración. Y apuntó directamente a las tarifas, recordando que en la anterior gestión “pisaron las tarifas de 2003 a 2015”. En ese tiempo, detalló, el incremento de los salarios fue del orden del 1.600%, mientras que el las tarifas de Edesur apenas fue de 2,5%, mientras que el del gas fue del 30%.

“¿Cuál fue la respuesta que encontró el gobierno anterior? El subsidio”, recordó el formoseño, aclarando que “compartimos la política del subsidio, la discusión es hacia dónde se direcciona”. Advirtió en ese sentido que “de 1.185 millones de subsidios en 2005, terminamos en 139.400 millones en 2015… De cada 3 pesos, 2 iban a los sectores de mejores ingresos y uno a los sectores vulnerables”.

Tras semejante ejemplo, señaló que “ese combo nos dice que si se hubieran destinado (los subsidios) a los que lo necesitaban, nos hubiéramos ahorrado más de 49 mil millones de dólares”. Apuntó entonces que “el combo terminó con falta de inversión, perdimos el autoabastecimiento energético; de ser un país exportador, terminamos con un déficit energético de 5 mil millones de dólares”. Y concluyó: “Había que hacerse cargo con un sentido de gobernabilidad”.

Naidenoff recordó que “lo primero que se hizo fue declarar la emergencia en materia energética; focalizamos los subsidios a los sectores que lo necesitaban”. Recordó además que todo eso el kirchnerismo lo hizo en el contexto de “una Argentina excepcional en ese momento, que tenía que ver con el precio de los commodities”.

Respecto de las discrepancias en materia de las tarifas expresadas dentro de la coalición gobernante, a las que se había referido previamente Miguel Pichetto, Naidenoff resaltó que “la mayor fortaleza de Cambiemos es la diversidad”, y remarcó que “el disciplinamiento sin marcar la cancha nos generó enormes costos en la economía Argentina”.

Reconoció no obstante que “soy de los que creen que el debate hay que darlo adentro”, en lo que sonó como una velada crítica hacia la líder de la Coalición Cívica. Con todo, consideró que “el debate fue muy profundo”, y consideró que el mismo “ha servido”. También es cierto, agregó, que “necesitamos una oposición con fuerte sentido de responsabilidad, que es lo que yo valoro. Valoro la posición del bloque Justicialista”.

El titular del bloque oficialista se manifestó a favor de “discutir todo, que vengan los gobernadores, las distribuidoras, que acerquen sus cuadros tarifarios… En una Argentina federal, discutamos todo”.

Sobre el final, recordó que su Gobierno eligió el gradualismo, y en ese marco se optó por un endeudamiento que “creímos responsable”. Así las cosas, consideró que “el gradualismo tiene un fuerte sentido de realismo”, y resaltó que la “hoja de ruta” de Cambiemos es “un modelo republicano con una visión de desarrollo”.

“Todos sabemos de donde venimos. En materia de federalismo se han dado enormes pasos; se ha recuperado el diálogo parlamentario en el Congreso, que no es un tema menor”, afirmó.

Y para concluir señaló que “no hay modelo de desarrollo que no se pueda lograr sin un fuerte componente social. Fue este gobierno el que amplió las asignaciones familiares. Algunos lo cuestionan la Reparación histórica, yo la reivindico. Porque a algunos jubilados se les iba la vida”, para terminar reivindicando “algo que no ocurría hace 20 años: los créditos hipotecarios”.