El presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara baja, Diego Mestre (UCR-Córdoba), celebró que el Senado diera el miércoles sanción definitiva al proyecto de ley de Subrogancias. “Es una norma muy necesaria para el país, para la independencia de los poderes y estamos, además, cumpliendo con una sentencia judicial”, explicó Mestre, quien recordó que “la Corte Suprema estableció, en el fallo Uriarte, la inconstitucionalidad de la ley 27.145. En la comisión recibimos los juristas más destacados de la Nación”. El proyecto había sido aprobado por Diputados el 22 de noviembre de 2017, ocasión en la que Mestre fue el miembro informante del oficialismo.

“La ley tiene como objetivo que el modo de cubrir las vacantes transitorias sea concordante con la Constitución nacional, que no haya más discrecionalidad, que no sea más facultad del Consejo de la Magistratura, que se despoliticen estas designaciones transitorias y que vuelva la institucionalidad, la independencia de los poderes, el sistema de pesos y contrapesos que nuestra Carta Magna establece para tener una democracia vigorosa”, explicó el legislador cordobés.

“Lamentablemente, el kirchnerismo con su mayoría automática sancionó la ley 27.145 y en esa oportunidad la oposición planteó que era inconstitucional y que no se respetaba la división de poderes ya que no se cumplía con la participación de los tres poderes en la designación de jueces subrogantes. No fuimos escuchados. Lamentablemente, llegamos a una situación que es un botón de lo que pasó en la Justicia Federal. Se llegó a designar como juez subrogante a un secretario de un juzgado para hacerse cargo, ni más ni menos, del juzgado con competencia electoral de La Plata. Se puso en riesgo, así, la democracia ya que es el juzgado que controla las elecciones en el principal distrito electoral del país”, recordó Mestre.

“Estamos convencidos de que esta ley es muy importante para que no haya más jueces subrogantes sin parámetros de elección objetiva, sin parámetros técnicos precisos”, agregó.

Qué dice la ley sancionada ayer:

“Se establece cómo es el procedimiento de subrogancia, el cual vuelve a estar en poder de las cámaras federales de cada una de las jurisdicciones. Éstos cuerpos deberán designar como subrogante a un juez titular de la misma jurisdicción y de la misma competencia que el magistrado que deja la vacante”, explicó Mestre. “Pero si esto no fuera posible, deberá ser de una jurisdicción cercana y competencia similar, siempre que no tengan atrasos en sus juzgados”, continuó Mestre.

Subsidiariamente, si estos pasos no fueran posibles, la cámara federal acudirá a la lista de conjueces que será elaborada por el Consejo de la Magistratura, garantizando el piso técnico. Esta selección que hace la Cámara se hará por concurso público. En tercer lugar, podrán designarse jueces titulares que no estén en funciones cuando el juzgado no haya sido creado. Por último, se puede designar un juez jubilado, siempre que no haya superado los 75 años.

“De este modo, se delimitan las facultades del Consejo de la Magistratura para elaborar las listas de conjueces. Obviamente, el Senado deberá aprobar estas listas. Así, los tres poderes del Estado intervendrán en la designación de subrogantes, como manda la Constitución”, concluyó el legislador cordobés.