El hecho fue expuesto por una diputada de La Cámpora, que sostuvo que la “represión” llegó a tal punto que uno de los vecinos desalojados amenazó con quemarse a lo bonzo.
La diputada nacional Gabriela Estévez presentó un proyecto de resolución para expresar su más enérgico repudio ante “la violencia física e institucional ejercida por la policía de la provincia de Córdoba” en el procedimiento de desalojo llevado a cabo este viernes contra vecinos del Barrio Parque Esperanza, ubicado en la localidad de Estación Juárez Celman, de la provincia de Córdoba. La legisladora afirmó que allí habitan 120 familias desde hace 4 años, que vienen realizando un proceso de organización comunitaria “con el único fin de garantizar una vida y una vivienda digna”.
“Una vez más la policía reprime sin miramientos ni distinciones: madres, niños, mujeres embarazadas fueron víctimas de esta violenta acción. A tal punto llegó la represión que uno de los vecinos del barrio se roció con combustible y estuvo a punto de incendiar su cuerpo para lograr detener el desalojo y la crueldad con la cual se manejó este procedimiento”, sostuvo la diputada de La Cámpora, que agregó: “No conformes con esta situación, las autoridades rodearon el barrio con topadoras para arrasar con todo lo que estuviera en pie, viviendas, pertenencias de las familias y hasta un comedor comunitario que alimentaba a los niños que residen en el lugar”.
Estévez aseguró que “hasta hace algunas horas el paradero de los once vecinos detenidos era incierto”, y reclamó su inmediata liberación, además de exigir a las autoridades que den explicaciones acerca de lo sucedido y lo actuado con las familias que viven en el barrio.
La diputada denunció las prácticas que consideró “anti democráticas”, que a su juicio tienen como fin “imponer, a como dé lugar, una decisión nefasta que viene de un insensible poder político al cual no le interesa ofrecer ningún tipo de remedio, solo reprimir y castigar a quienes menos tienen”.