El interbloque Argentina Federal, a través de su presidente, Miguel Angel Pichetto, elevó una nota a la presidenta de la Cámara de Senadores, Gabriela Michetti, objetando el giro del proyecto de ley sobre el régimen de interrupción voluntaria del embarazo a cuatro comisiones, un número que consideran “excesivo y dilatorio”, tal cual había expresado el jueves propio jefe de esa bancada a través de declaraciones periodísticas.

Las observación formal se basa en los términos del artículo 90 del Reglamento del Senado, considerando que con la decisión adoptada no se ha tenido en cuenta que el proyecto venido en revisión contempla en primer término una modificatoria del Código Penal y a consecuencia de ello un régimen de interrupción del embarazo, “razón por la cual debería ser comisión cabecera la Comisión de Justicia y Asuntos Penales y en segundo término la Comisión de Salud”.

Es por ello que el giro a las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Presupuesto y Hacienda es considerado por el interbloque Argentina Federal “excesivo y dilatorio, toda vez que la competencia -fijada por artículo 61 y 65 respectivamente- no guardan vinculación directa con el objeto del proyecto”.

Pichetto recuerda que en la cámara de origen el proyecto no fue girado a las comisiones de Asuntos Constitucionales, ni a Presupuesto y Hacienda, cuyas competencias son similares a las del Senado. Así las cosas, el rionegrino considera que “esta múltiple competencia atribuida desde la presidencia (de la Cámara) al proyecto no enriquece su tratamiento, por el contrario lo entorpece; más aún cuando el Reglamento que rige el funcionamiento de este Cuerpo establece como regla general que cada asunto o proyecto debe ser girado a una sola comisión”.

“De hecho, el giro dispuesto implica la participación de 45 senadores, que representan prácticamente los dos tercios del total de los miembros de la Cámara”, advierte Pichetto, para quien resulta “equivocado sostener la idea de que, como las comisiones trabajarán en forma conjunta en el plenario, con el giro dispuesto no hay dilación posible”, ya que recuerda antecedentes en los que “una iniciativa fue largamente dilatada en virtud de la falta de una o más firmas en el dictamen”. Remarca el senador Pichetto que la medida dispuesta por Michetti “aumenta considerablemente el número de firmas necesarias para que la iniciativa sea dictaminada y pueda llegar así al recinto, circunstancia que puede generar una demora innecesaria en el tratamiento del tema”.

Por otra parte, Pichetto recuerda que al habilitar el tratamiento del tema en el Congreso, el presidente Mauricio Macri consideró que se trataba de un tema “importantísimo” y en el cual “debe haber total libertad para opinar”. Por eso Pichetto reclamó que “se debe allanar el camino” para que el proyecto sea debatido en recinto. El senador considera “ciertamente contradictoria la actitud de un presidente de la Nación que impulsa el tratamiento de un tema y la de una vicepresidenta que intenta dilatar el debate”.

Miguel Pichetto concluye admitiendo que es atribución de Michetti el giro de los asuntos ingresados, como asimismo “el hacer observar el reglamento en todas sus partes”, que es lo que le plantea formalmente, dejando abierta la posibilidad de llevar el planteo al pleno de la Cámara.