El senador nacional Ernesto Martínez (Pro) consideró “excesivas” las críticas por parte de la Iglesia Católica a la ley de interrupción voluntaria del embarazo, y cuestionó que se califique entre “asesinos y no asesinos” a los legisladores que promueven o rechazan el aborto legal.

Para el cordobés, la postura de la Iglesia “tensa la relación y el sistema democrático”. No obstante, señaló que “es entendible y lógica” porque “siempre el aborto, desde 1921, fue un delito contra la vida. Siempre fue el ataque al feto”.

“Hoy también estamos en un delito contra la vida, simplemente que el legislador, por motivaciones de política criminal, decide que en determinadas circunstancias ese delito no es penado, no tiene sanción. Es entendible y lógica la posición de la Iglesia, de defender las dos vidas, pero no comparece con lo que ha sido la legislación argentina”, sostuvo en diálogo con radio Cultura.

Por otra parte, el legislador mencionó las modificaciones a la media sanción de Diputados que propondrá junto a sus pares de Córdoba -Laura Rodríguez Machado (Pro) y Carlos Caserio (Unión por Córdoba)- para el dictamen propio que presentarán en comisión.

Los principales cambios tendrán que ver con “no perseguir a los médicos” que se nieguen a realizar abortos; insertar en la causal de aborto no punible por violación el requisito de la denuncia penal; la objeción de conciencia institucional y “la previsión presupuestaria” ya que “esto tendrá que ser atendido por los municipios y las provincias”.