En su prematura campaña electoral hacia la presidencia de la Nación a la que aspira, Felipe Solá se sacó una foto frente a la Casa Rosada al anunciar la presentación de 35 medidas que le sugiere al Gobierno para salir de la crisis. Entre esas medidas figuran algunas para reducir la fuga de dólares, para lo cual sugiere un impuesto del 25% al consumo con tarjetas de crédito en el exterior, compra de pasajes incluida. También propone límites mensuales a la compra de divisas, con el fin de “combatir la fuga como limitación estructural a nuestro desarrollo”. Y también restaurar la obligatoriedad de la liquidación de divisas generadas por las exportaciones en el mercado en un tiempo cuyo plazo promedio debería ser de 180 días.

Eso es para el diputado nacional Diego Bossio nada menos que la restauración del “cepo cambiario”. Según expresó en el programa Terapia de noticias, que se emite por LN+, el diputado del bloque Justicialista señaló que lo que propone su colega “es un cepo, eso está mal; cuando le ponés un límite a la compra de divisas aparece el famoso dólar paralelo y eso ya lo vivimos en la Argentina”.

En otro orden, Bossio llamó a “salir de la lógica de la grieta”, y recordó que en nuestro país un 67% de personas vive debajo de la línea de la pobreza, lo cual a su juicio es “un fracaso del conjunto de los argentinos”, y sin embargo “ese dato no escandalizó a nadie”.

Dijo hablar “con la legitimidad y la autoridad moral de haber aportado a que a la Argentina le vaya bien, que los argentinos tengamos democracia saludable en términos de diálogo, con esa misma capacidad testimonial de habernos sentado en la mesa infinidad de veces para discutir temas que creíamos que teníamos que discutir en la Argentina, le decimos al presidente Macri y a muchos argentinos, que lo que vinieron a proponer hace 3 años fracasó”.