Un día después de que el Senado aprobara la autorización al juez Claudio Bonadio para allanar propiedades de Cristina Fernández de Kirchner, en el marco de la causa de los “cuadernos de las coimas”, el presidente Mauricio Macri se reunió este jueves por la noche en la Quinta Presidencial de Olivos con diputados y senadores de Cambiemos en un encuentro que incluyó cena.

El encuentro fue a partir de las 19, con “agenda abierta”, según confiaron a parlamentario.com, pero claramente la intención original era recomponer los lazos hacia el interior del oficialismo luego de las tensiones que generó el debate por el aborto legal.

Asimismo, se busca retemplar los espíritus de cara a la segunda parte del año en la que el tema principal será el Presupuesto 2019.

En ese contexto, según pudo saber este medio, Mauricio Macri les pidió básicamente a sus legisladores que en este momento los necesita “más unidos que nunca y con mucho optimismo”. Les dijo que sabe que “estamos pasando momentos difíciles”, pero que confía en que “vamos a salir adelante”.

El presidente aseguró que él sabe que cuando toma “algunas desiciones que nos duelen, pero que son las que hay que tomar, a veces dan ganas de bajar los brazos”, pero les pidió que tengan confianza, que la salida del déficit es importante para que Argentina en serio pueda crecer para siempre”.

Macri también felicitó a los legisladores de Cambiemos “por lo que hemos logrado”, y garantizó que “tenemos un mundo mucho menos complejo que hace cinco años nomás”.

“Estamos todos madurando y creciendo en este proceso en el cual tenemos que seguir mejorando para revertir décadas en las que la Argentina decía una cosa y después hacía otra”, dijo Macri.

Macri advirtió que los continuos errores del pasado fueron “los que nos llevaron a la pobreza, la falta de desarrollo, de infraestructura y de federalismo”.

“Si realmente queremos un cambio profundo, como el que aspiramos, no podemos pensar que todo iba a suceder en tan solo dos años y medio después de décadas de hacer las cosas mal”, aseveró. Sostuvo que los males de la Argentina “se profundizaron y se agravaron durante el Gobierno anterior, pero vienen de mucho tiempo atrás”, y puso como ejemplo el problema del desequilibrio fiscal, que el país arrastra “desde hace 70 años”.

Indicó que “en el camino de la búsqueda de los valores” pueden surgir complicaciones en lo económico, como ha quedado en evidencia en estos días “con este sistema de corrupción tan degradado” que está investigando la Justicia y que ha llegado a “un nivel que nunca se había visto en forma tan sistémica y global”.

Macri dijo a los legisladores que “tenemos que sentirnos orgullosos porque hay que tener coraje para sacar la verdad y ponerla sobre la mesa y los argentinos lo estamos haciendo”. Afirmó que “esto lo hemos permitido nosotros, desde la ley de arrepentido, hasta dar un mensaje claro a la Justicia para que actúe en forma independiente”.

Señaló que “todos hemos trabajado para que algunos jueces que estaban muy ligados al 'todo pasa'” dejaran de funcionar con esa lógica y “hubo un jury que cambió la historia y que permitió que las cosas empezaran a funcionar como tienen que funcionar, con independencia de los poderes”.

“Hoy más que nunca tenemos que trabajar con la convicción de que el camino que hemos tomado es el único posible, con mayor o menor velocidad, con mayor o menor gradualismo, pero es el único”, destacó. “Todo lo demás son las mismas sanatas que siempre hemos escuchado y que nos llevaron al fracaso”, alertó.

Advirtió que en la tarea cotidiana “nos toca convivir con dirigentes que tienen una capacidad de negación espantosa”, pero exhortó a continuar trabajando con la certeza de que no hay más espacio “para el engaño, porque el futuro depende de nosotros, de desarrollar las cosas que tenemos, como lo estamos haciendo en Vaca Muerta”.

Sostuvo que “el kirchnerismo tuvo la suerte de descubrir Vaca Muerta, pero estuvo sentado sobre Vaca Muerta seis años sin hacer nada”.

“Nosotros, en cambio, la estamos desarrollando y en dos años y medio estamos dando vuelta la ecuación de la energía”, remarcó.

También habló el presidente del interbloque Cambiemos, Mario Negri, quien sostuvo que “el desafío de Cambiemos es ordenar la economía, siendo además minoría en el Congreso”, como así también “ganar la próxima elección para consolidar las transformaciones que lidera Mauricio Macri”.

También expuso el titular del interbloque en el Senado, Luis Naidenoff, quien fiel al estilo macrista alentó la condición de contar con “un gran equipo trabajando juntos para salir adelante”.

Participaron de la reunión el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el secretario general de las Presidencia, Fernando de Andreis, y ministros del gabinete nacional.

En la previa del encuentro con el presidente, los legisladores se encontraron con el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, quien según pudo saberse les describió el escenario económico actual y el que se prevé para el próximo año con el Presupuesto.

Algunas fuentes consultadas por este medio reconocieron que ese diálogo no dio lugar al optimismo que posteriormente trató de infundir el primer mandatario.

Ya son tradición estos encuentros del presidente con los legisladores nacionales. Periódicamente diputados y senadores son convocados a la residencia presidencial. Antes del inicio del año parlamentario, Macri había compartido una reunión con su tropa de diputados y senadores, también en Olivos, en la que adelantó en ese momento la discusión que se venía por la despenalización del aborto y les había pedido dar un debate “tranquilo” y “responsable”.