El 4 de julio de este año se sancionó en la Cámara de Diputados por unanimidad la llamada “Ley Brisa” que otorga una reparación económica para los hijos e hijas de madres víctimas de femicidio. La reparación equivale a una jubilación mínima que hoy ronda en $8.600 pesos y se cobra hasta los 21 años.

La normativa lleva el nombre de Brisa Barrionuevo, una niña que vive en Moreno junto a sus hermanos gemelos, cuya madre, Diana Barrionuevo, fue asesinada a golpes por su pareja en 2015 y su cuerpo fue arrojado al río en una bolsa.

Conforme los datos estadísticos elaborados por el Observatorio de la Violencia de Género Ni Una Menos, presidido por Raquel Vivanco, al 9 de septiembre del presente se registraron 178 femicidios, lo que arroja el triste dato de un femicidio cada 33 horas. 187 niños han quedado sin su madre, quienes fueron asesinadas por femicidas.

Sin embargo, y a más de un mes de su promulgación, la Ley Brisa aún no fue reglamentada por el Ministerio de Desarrollo Social ni fue implementada.

Al respecto Raquel Vivanco advirtió que “no puede hablarse de políticas públicas destinadas a combatir la violencia machista si las mismas carecen de presupuesto para su aplicación. La partida presupuestaria que el ejercicio anterior fue destinado al Instituto Nacional de las Mujeres muestra la falta de voluntad política del Gobierno nacional para luchar contra la violencia hacia las mujeres.”

En este sentido, la excandidata a diputada nacional señaló que la falta de reglamentación de la Ley Brisa “es una clara muestra del desinterés del Gobierno de Macri para frenar la violencia de género: en horas donde el presidente se reúne con gobernadores para discutir el Presupuesto nacional, exigimos que manden al Congreso la partida presupuestaria necesaria para que el Instituto Nacional de las Mujeres pueda llevar adelante las políticas públicas eficientes para eliminar la violencia machista que hoy se cobra a vida de una mujer cada 33 horas”.