Gracias a una iniciativa impulsada por el diputado de Vamos Juntos Claudio Cingolani, la Legislatura porteña realizó la jornada “Fútbol sin violencia”, en el que se reflexionó sobre esta problemática y se trazaron lineamientos para seguir trabajando en la implementación de políticas públicas que ayuden a combatir ese flagelo.

En el evento estuvieron presentes distintos disertantes especializados en la materia, entre los que se encuentran: el diputado nacional Waldo Wolff; el secretario ejecutivo de la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (APREVIDE), Juan Manuel Lugones; el director de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos, Guillermo Madero; y los periodistas Gustavo Grabia y Hernán Poggi -quien modero la actividad-.

Al respecto, Cingolani explicó que “tenemos que ir a un cambio cultural; el fútbol es reflejo de cómo nos comportamos como sociedad, en él se ven plasmados cada uno de los vicios de la mala cultura de valores: como por ejemplo el sometimiento de un equipo a otro, la discriminación, el machismo, el antisemitismo, entre otros” y remarcó que “romper con cada uno de los malos hábitos deportivos, que alteran la sana competencia, implica desarrollar políticas públicas para revertir esta situación”.

“El Ejecutivo desde hace tiempo trabaja para combatir este flagelo, como consecuencia de las medidas tomadas se han registrado fuertes disminuciones en este tipo de actos delictivos”, sentenció el oficialista.

Por su parte, Madero estimó que el problema está en las barras bravas y el crimen y también en la organización del fútbol, donde están involucrados dirigentes y tradiciones socioculturales. Además insistió en que a largo plazo debe lograrse “el cambio cultural” donde se deje de “creer que el rival es el enemigo” y destacó el programa Tribuna Segura que apunta a una reforma normativa para que se incluya en el nuevo proyecto del Código Penal, “la tipificación del barra”, que en su momento gozaban de “impunidad, que les dieron los contactos políticos, judiciales y policiales”.