En pleno debate planteado por la firma del dictamen del Presupuesto, el diputado oficialista Eduardo Amadeo respondió a los gritos de “cipayo” que se escuchaban durante la destemplada reunión de la Comisión de Presupuesto. A propósito de los mismos, el legislador del Pro dio que “me divertiría mucho recordándoles otra forma de cipayismo, como por ejemplo ser cipayo de los bolsos… Pero no voy a entrar en esa discusión”.

Sin que cesaran los gritos, continuó, remitiéndose a su experiencia legislativa: “Podríamos recordar la última votación a la que asistí en el año 2013, donde la diputada (Graciela) Camaño mostró el tamaño relativo de los presupuestos anteriores y un cuadernito de este alto (mostró con los dedos pulgar e índice un tamaño pequeño) que nos fue entregado en ese momento para poder discutir, para poder discutir. El presupuesto de 2014 tenía 50 páginas”.