Y un día el diputado radical K Leopoldo Moreau hizo un mea culpa en pleno debate por un grueso error suyo cometido en el mismo ámbito. Fue en el marco de su intervención por el proyecto de ley que regula la fabricación, comercialización y distribución de pasta celulosa y papel de diarios. Pero fiel a su estilo, la autocrítica incluyó palos a Clarín, objeto habitual de sus embates.

“Cometí un error, mostré una fotografía de una manifestación que no era la que se estaba desarrollando”, admitió el legislador ultra K, que en octubre pasado -cuando el debate del Presupuesto en la Cámara baja- sorprendió exhibiendo durante su discurso una foto que atribuyó a los incidentes registrados durante esa jornada. En la misma, según dijo esa vez, se veía a un sargento de la Policía Federal al que se le había caído el pañuelo que tapaba su rostro, como prueba de la presencia de infiltrados del Gobierno en los incidentes. Lo cierto es que la foto no era de ese día, sino de incidentes del año anterior, en la Legislatura porteña.

“El error no era que había infiltrados. Había infiltrados en una manifestación anterior”, se defendió Moreau este jueves, para emprenderla luego contra el diario de más venta en el país: “Logré por primera vez una tapa de Clarín. Tapa de Clarín que no tuvo la diputada (Elisa) Carrió cuando dijo que había entrado al país un comando iraní-venezolano en Buquebus, y la desmintió Buquebus y la República Oriental de Uruguay. Tapa que no logró (Patricia) Bullrich cuando decía que (Santiago) Maldonado había desaparecido en una peluquería en La Rioja, o en un supermercado en Paraná, o en una ruta haciendo dedo”. Y remató: “Estos medios hacen oposición de la oposición, pero no interpelan al oficialismo cuando mintió prometiendo jardines de infantes o dijo que iba a suprimir el impuesto a las Ganancias”.

Por cierto, fue una autocrítica muy sui generis…