Por Brenda Austin. Ferviente defensora de los derechos de las mujeres, la diputada radical detalló el programa anunciado el viernes por el Gobierno nacional.
Los hechos que conocimos esta semana y nos conmovieron profundamente tienen que servir para hacernos actuar.
La historia de Thelma y la de tantas otras, nos permiten tomar dimensión de la violencia, el acoso y las situaciones de abuso a la que a veces están sometidas las mujeres. Pero el problema es más amplio, por que existen todavía barreras que impiden a las mujeres ejercer plenamente sus derechos.
Por eso, y con la decisión de hacer algo para cambiarlo el gobierno anunció el “PLAN DE IGUALDAD DE OPORTUNIDADES Y DERECHOS” que contiene 34 acciones clave y más de 200 compromisos asumidos por parte de los Ministerios y organismos de la Administración Pública Nacional.
El objetivo es generar condiciones para que todas las personas, independientemente del género, tengan las mismas posibilidades de acceder y ejercer sus derechos y desarrollar su proyecto de vida libremente.
¿Cómo propone hacerlo? Trabajando desde cuatro ejes:
1. Autonomía física para garantizar que las mujeres puedan vivir libres de todo tipo de violencia y alcancen el nivel más elevado de salud en todas las dimensiones
2. Autonomía en la toma de decisiones para que más mujeres participen en espacios de poder en condiciones de igualdad
3. Autonomía económica con medidas que apuntan a lograr el empoderamiento y plena inclusión en el mercado laboral, alentando la co-responsabilidad en las tareas de cuidado.
4. Y finalmente, un compromiso transversal resultado de la interrelación de las autonomías para apuntar a transformar los valores culturales que naturalizan las diferencias entre los géneros.
Cada uno de estos ejes contiene acciones concretas sobre violencia de género, licencias parentales, brecha salarial, primera infancia, educación sexual integral, acceso a anticonceptivos, incentivos para la inclusión de mujeres y población lgbtiq en el mundo del trabajo, capacitación de funcionarios públicos, entre muchos otros.
¿Por qué hacerlo?
Los datos son evidentes: en Argentina las mujeres cobran en promedio 26,2% menos que los hombres, solo ocupan 5 de 23 gobernaciones, 1 de 5 cargos en la Corte Suprema, hay un 9% de mujeres Intendentas y pocas en los gabinetes. Además, en el ámbito privado de diez altos cargos, sólo tres son ocupados por mujeres y los índices de desempleo y empleo precario son más altos en mujeres que en hombres.
Celebro la iniciativa que es un paso más en la dirección correcta. Seguiremos de cerca su implementación y acompañaremos con iniciativas legislativas que nos permitan reforzar el compromiso de todos en materia de igualdad de género, de forma articulada, estratégica e integral.
