El encuentro se realizó en el recinto y fue encabezado por Dalmacio Mera, quien reivindicó a Fray Mamerto Esquiú.
El presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado, Dalmacio Mera, encabezó una actividad que reunió a los principales referentes del derecho constitucional del mundo, quienes disertaron en el marco del XIV Congreso Iberoamericano de Derecho Constitucional, que se llevó a cabo en nuestro país recientemente.
El encuentro se realizó en el recinto y participaron, entre otros, Daniel Sabsay, presidente de la Asociación Argentina de Derecho Constitucional; Pedro Salazar Ugarte, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM de México; y María Pía Gallinato, ministra del Tribunal Constitucional de Chile.
La jornada contó además con la presencia de Gonzalo Salerno, decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Catamarca; y Diego Valadés, presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional (México).
Durante su exposición, Mera hizo un repaso por la historia del derecho constitucional argentino y destacó la figura de Fray Mamerto Esquiú.
“El derecho constitucional argentino tuvo un fraile, un joven humilde de 27 años, que cuando había que jurar la Constitución el 9 de julio de 1853, fue invitado a dar un sermón. Se imaginan que en aquel tiempo hablar de libertad de cultos, que era uno de los principios que garantizaba la Constitución que se iba a jurar, era un tema revolucionario, delicado, complicado en el derecho público argentino. Fray Mamerto Esquiú llegó con sus 27 años al púlpito de la Catedral de Catamarca, y sorprendió con su claridad y con su elocuencia”, resaltó Mera.
Y continuó: “Si tuviera que elegir un concepto que definiera su sermón -que obra en cada uno de sus bancas- elegiría el de entender que la Constitución es el lugar donde todos debemos encontrarnos, dónde el principio de organización debe contener a cada uno más allá de su religión, más allá de su raza, de su talla, de su identidad de género”.
Los participantes de la jornada recibieron cada uno un ejemplar de la Constitución Nacional Argentina y del sermón que pronunció Fray Mamerto Esquiu, en donde reza su popular frase que Mera citó en su alocución: “Obedeced, señores, sin servicio no hay ley, sin ley todo es anarquía y no hay patria”.
