“Sabemos que parte de nuestros envases termina en el lugar equivocado. El compromiso es hoy. No hay excusas” es el mensaje central de la nueva campaña digital de Coca- Cola, que reafirma la responsabilidad y compromiso de la Compañía para lograr #UnMundoSinResiduos.

La pieza audiovisual, que se está difundiendo a través de las redes, reunió la opinión de jóvenes y adultos de distintos países de la región a quienes se les consultó sobre la problemática del plástico y su impacto concreto en el planeta. Las respuestas señalan la responsabilidad que tienen las grandes empresas para encontrar una solución.

En este contexto, Coca-Cola informa sobre sus esfuerzos concretos y cotidianos a través del programa #UnMundoSinResiduos, que tiene como objetivo recolectar y reciclar para el 2030, el equivalente al 100% de los envases puestos en el mercado y alcanzar un portafolio total de envases reciclables para 2025.

Para lograr estas metas, la compañía trabaja principalmente sobre tres pilares: el diseño de envases, su recolección post consumo y la acción conjunta con autoridades, empresas, ONG’s y comunidades. Este enfoque holístico, basado en el modelo de economía circular, se destaca en diversas piezas audiovisuales que completan la campaña y narran las historias de vida de miembros de las comunidades locales.

Al respecto, la Directora de Asuntos Públicos. Comunicación y Sustentabilidad de Coca-Cola de Argentina Mariela Alvarez manifestó que “la economía circular es el objetivo de todas nuestras acciones. Cada envase tiene valor. Si algo puede ser reciclado, debe ser reciclado. Buscamos producir y consumir de manera que el valor de los materiales y de los productos se mantenga durante el mayor tiempo posible, y el uso de los recursos y la generación de residuos se reduzcan al mínimo”.

La compañía informa que hoy en Argentina todos sus envases son 100% reciclables y además puntualizan que impulsan una red de puntos de reciclaje a los que los consumidores pueden llevar envases de plástico, vidrio y tetrabrik para su clasificación, almacenamiento y empacado. Las cooperativas retiran los materiales y los transfieren a las plantas de clasificación, donde se convierten en materia prima a través del reciclaje. En 2018, se recolectaron 232 toneladas de materiales, de las cuales 72 fueron PET.

Por otra parte, participan también junto con Avina y otras empresas en el desarrollo de cooperativas de recolectores informales en 10 ciudades de todo el país. Mensualmente, 1900 toneladas de materiales son recuperadas; 120 de ese total es PET.