Durante la sesión del Senado, la peronista Norma Durango calificó de “disparate” la propuesta de la ministra Patricia Bullrich, y sostuvo que eso no se puede hacer sin tratamiento del Congreso.
Previsiblemente, la resolución anunciada el martes por el Gobierno nacional de crear un Servicio Civil Voluntario generó resistencias de parte de la oposición. Y las mismas fueron exteriorizadas también en la sesión de este miércoles del Senado a través de la senadora Norma Durango.
En su condición de vicepresidenta de la Comisión de Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes, la peronista pampeana cuestionó la resolución 598 anunciada por el Ministerio de Seguridad a cargo de Patricia Bullrich. “La verdad que estamos perplejos”, dijo, advirtiendo que “nos preocupa mucho este intento de militarizar a los adolescentes argentinos. La puesta en funcionamiento de un servicio voluntario por la vía administrativa atenta contra las funciones de este Congreso”.
Una decisión de esas características, dijo, “requiere que lo discutamos en este poder, escuchando el aporte de todos los sectores involucrados”, y valoró al Parlamento como “caja de resonancia de todas las opiniones”.
Durango recordó también que el Senado había aprobado en 2010 un proyecto en la materia, y aunque el espacio que ella integra no lo acompañó en esa oportunidad, merece que “semejante disparate” sea tratado ahora en el Congreso.
Para la senadora pampeana, “quieren institucionalizar un sistema de control y de vigilancia”, dijo, cuestionando también al ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, que justificó la medida señalando que alcanza a aquellos chicos que “hoy no están haciendo nada”. A su juicio, el Ministerio de Educación es el que debe controlar a “estos adolescentes que no estudian ni trabajan”. Aclaró además que no irán a ese servicio los chicos que viven en Recoleta, sino “los chicos más vulnerables”.
“No queremos chicos fuera del sistema educativo; si están así, hay que ver los modos para que ingresen”, sostuvo, para preguntarse luego si “los gendarmes van a formar en valores democráticos y republicanos a nuestros chicos”. Y concluyó expresando que “yo quiero a nuestras niñas y niños con sus maestros y maestras; no los quiero en los cuarteles”.
