La iniciativa contempla el recambio y modernización de la flota vehicular convencional, pública y privada, para el transporte de personas y mercancías.
Diputados del interbloque Cambiemos presentaron este jueves en una audiencia pública un proyecto de ley para promover la movilidad eléctrica y sustentable, impulsado por Juan Carlos “Cali” Villalonga (Pro).
La iniciativa cuenta con las firmas de José Cano -presidente de la Comisión de Transporte-, Fabio Quetglas, Alejandro Echegaray, Josefina Mendoza, Facundo Suarez Lastra, Fernando Iglesias, Federico Zamarbide, Brenda Austin, José Riccardo y Julio Sahad.

El proyecto establece un régimen de promoción de la movilidad sustentable, para el recambio y modernización de la flota vehicular convencional, pública y privada, para el transporte de personas y mercancías, mediante vehículos impulsados por motor eléctrico, a hidrógeno, o híbridos.
También contempla la elaboración de un Plan Estratégico Nacional de Movilidad Sustentable acorde a los compromisos asumidos en el Acuerdo de París sobre Cambio Climático, con metas de recambio y modernización de la flota vehicular.
Asimismo, se declara de interés nacional la política de reducción de emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero derivados del transporte automotor terrestre.
“La movilidad es un derecho y es una obligación pública de primer orden concebirla de manera sostenible en términos ambientales y de la salud, inclusiva y accesible. Es necesario alinear respuestas técnicas, socio urbanas y culturales para poder garantizar ese derecho”, afirmó Quetglas.

Según se explicó en la audiencia, las ventas mundiales de vehículos eléctricos crecen constantemente -incluyendo los híbridos enchufables y a celda de combustible- y superaron el millón de unidades en el año 2017.
Las proyecciones indican que la flota vehicular en América Latina y el Caribe puede superar los 200 millones de unidades en el año 2050.
En el mercado global, las principales automotrices ya tienen objetivos de electrificación de su flota para 2030 y 2050, porque el propósito fundamental es la reducción de emisiones de CO2 en los vehículos que produzcan y comercialicen.
Los sistemas de movilidad actuales en nuestra región tienen una fuerte dependencia de los combustibles fósiles y generan un impacto considerable en las emisiones de gases de efecto invernadero y en la salud pública, a causa de la exposición a contaminantes del aire y la emisión de ruido de los motores de combustión interna.
En Latinoamérica y el Caribe, según el “Informe MOVE 2018 sobre Movilidad Eléctrica” de ONU Medio Ambiente, se estima que el sector transporte es responsable de un 19% de las emisiones de CO2 en la región.
A lo largo del año pasado se realizaron en la Comisión de Transporte distintas reuniones informativas en las que participaron la industria automotriz, instituciones relacionadas al sector y el Poder Ejecutivo Nacional -Ministerio de Transporte, Secretaría de Industria y Secretaría de Ambiente-.
El proyecto de ley fue enriquecido con los aportes y sugerencias de varias de los actores más relevantes en la materia, como la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), la Federación Internacional de Automotor (FIA), Región IV, ONU Medio Ambiente y la Asociación Argentina de Vehículos Eléctricos y Alternativos (AAVEA), entre otros.