Distintas figuras del tradicional partido Demócrata se dieron cita para inaugurar el busto que recuerda a Emilio J. Hardoy, figura icónica del conservadurismo del siglo XX, quien fuera destacado abogado, legislador y periodista, donado por la fundación que lleva su nombre, que preside Gastón Pérez Izquierdo. El emplazamiento fue consecuencia del accionar del diputado Eduardo Santamarina, que finaliza su mandato.

Estaba previsto que hablara el senador nacional Federico Pinedo, pero no pudo asistir por haber sido convocado a la despedida de los legisladores en Olivos. Sí hablaron los dirigentes demócratas Mónica Alonso y Alberto Allende Iriarte, y agradeció Emilio Hardoy (h.) ante una nutrida legión de correligionarios y amigos, entre los que se encontraban los exlegisladores Ricardo Balestra, Eduardo Conesa e Hilario Muruzábal, los académicos Gregorio Badeni, Alberto Taquini, Eduardo Sadous y Guillermo MacLoughlin, el saliente presidente del Banco Ciudad, Javier Ortiz Batalla, el secretario de Comunicaciones, Héctor Huici, y los demócratas Alberto Arancibia Rodríguez, Diego Ibarbia y Juan José Guaresti (n.).

Llamó la atención la ausencia de dirigentes del Pro; en cambio, estuvieron presentes el titular de la UCeDe, Gonzalo Mansilla y Luis Rosales –compañero de fórmula de Espert-. En el encuentro conversaron sobre la factibilidad de un posible armado político con vistas a las próximas elecciones, teniendo en cuenta que el partido Demócrata es nuevamente una agrupación nacional, la que elegirá sus primeras autoridades el sábado venidero (14/12) en San Luis, las que estarán encabezadas por el exdiputado mendocino Carlos Balter.