Desde Casa Rosada, el senador nacional apoyó la decisión del Gobierno de revisar el informe, el cual consideró “tiene muchas falencias”. Además opinó sobre la intervención de la AFI y dijo que en Cambiemos “se pinchaban los teléfonos entre ellos”.
El senador Oscar Parrilli (Frente de Todos) consideró que la pericia que determinó que el fiscal Alberto Nisman fue asesinado, realizada por la Gendarmería Nacional, “fue un truchaje total” y “tiene muchas falencias”.
En diálogo con la prensa acreditada en la Casa Rosada, por donde pasó este martes, el legislador apoyó la decisión del Gobierno de hacer una revisión técnica al informe elaborado por la fuerza de seguridad.
“Es una decisión acertada”, opinó, al tiempo que evitó referirse a la causa judicial. “El peritaje de Gendarmería fue un truchaje total. No pasa el menor análisis, ni de estudiantes” de Derecho, sostuvo el neuquino.
Por otra parte, el extitular de la Agencia Federal de Inteligencia destacó la intervención dispuesta por Alberto Fernández en ese organismo y cargó contra la gestión anterior: “Estos últimos cuatro años de la AFI con (Mauricio) Macri fueron lo peor de lo que hubo de la inteligencia en la Argentina, con un nivel de persecución y espionaje interno”.
En ese sentido, el senador dijo que “había bandas, grupos que operaban indistintamente y hasta se terminaron espiando entre ellos: espiaban a (Elisa) Carrió, a (María Eugenia) Vidal, a (Daniel) Angelici, no sólo a nosotros, se pinchaban los teléfonos entre ellos”.
En su condición de exsecretario de la Presidencia durante el gobierno de Cristina Kirchner, Parrilli visitó la Casa Rosada para evaluar el estado edilicio y hacer un estudio comparativo desde el momento en que la expresidenta -hoy vice- dejó el poder, en el 2015, hasta el fin de la gestión de Macri.
“Aquí han hecho un desastre con el edificio de la Casa Rosada”, enfatizó e ironizó: “Querían hacer un edificio (estilo Donald) Trump, moderno”.
