Luego de que diputados de la Coalición Cívica y la macrista Graciela Ocaña presentaran impugnaciones contra las candidaturas de Carlos Cruz y Mariana Quevedo para dirigir la Unidad de Información Financiera, el bloque radical se sumó al rechazo a las postulaciones de ambos.

La bancada que conduce Mario Negri en la Cámara baja señaló la “falta de idoneidad manifiesta del señor Cruz, quien carece de los antecedentes técnicos y profesionales específicos en materia de prevención del lavado de activos y financiamiento del terrorismo e inteligencia financiera que exige la ley para el correcto desempeño del cargo”.

“La ausencia de antecedentes específicos ha quedado evidenciada en sus declaraciones públicas donde desconoce el rol y la importancia de organismos internacionales como el GAFI, en materia de prevención y sanción al lavado de activos, y en la relativización que realizó sobre la importancia de la corrupción en el campo de los delitos económicos”, indicaron los legisladores.

Además, mediante un comunicado, resaltaron que “a ello se suma su cercanía y amistad con el presidente de la Nación (Alberto Fernández) y con el presidente del Partido Justicialista de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Víctor Santa María, lo cual podría ser óbice para garantizar una operación autónoma, autárquica e independiente del poder político y del Gobierno”.

“No queremos que la UIF vuelva a ser el pisapapeles de reportes de operaciones sospechosas de funcionarios y empresarios amigos del poder como lo fue hasta 2015 cuando, en lugar de llevar esos reportes a la Justicia para que investigue, quedaban cajoneados en el organismo creado para prevenir e impedir el lavado de activos en el país”, enfatizaron.

Y continuaron: “Sin embargo, todo parece indicar que vamos por ese camino, ya que Mariana Quevedo, quien fuese directora de Asuntos Jurídicos de la UIF bajo la gestión de José Sbatella, es propuesta ahora como vicepresidenta del organismo; por su accionar durante la administración kirchnerista también merece nuestro rechazo”.

“No debemos cometer los errores del pasado que nos condujeron hasta acá. El nuevo gobierno tiene que dar muestras y señales claras en términos de transparencia y lucha contra la corrupción. Por la salud de la República, reclamamos instituciones fuertes, que controlen al poder, no que lo encubran y para ello es imprescindible que las personas que las dirijan cumplan con los requisitos mínimos de idoneidad técnica e independencia funcional”, finalizaron los radicales.