Este proyecto, es sumamente importante tanto para la comunidad, como para el Estado, los profesionales, las industrias, las entidades y organizaciones sin fines de lucro, como las religiosas, las que brindan una ayuda invaluable en educación, salud, medio ambiente y la paz espiritual, entre muchos otros aspectos de la sociedad, que precisan de ellas y, en la actualidad, existen serias dificultades para disponer o constituir un derecho real de garantía sobre los bienes registrables recibidos por donación, porque toda vez que se presenta un título antecedente proveniente de una donación y si aún no han transcurrido los 10 años de prescripción, ese título es observable y al realizar el escribano un estudio de títulos esa observación no puede faltar. Consecuentemente, el negocio jurídico que se pretendía hacer se frustra, por el riesgo de la acción de reducción que establece nuestra legislación actual, lo cual implica acción real, esto es, perseguir a la cosa en manos de quien se encuentre, aún cuando el adquiriente sea de buena fe y a título oneroso, esto implica un severo fracaso, por una parte, para el crecimiento económico y el desarrollo social y, por otra, en especial, en cuanto al fomento del crédito, con la consabida pérdida del banco de trabajar, el propietario no logro obtener su crédito, el escribano no autorizó la escritura, el arquitecto no pudo llevar adelante su obra, ni los albañiles, ni la empresa de construcción pudo vender los materiales y, fundamentalmente, el Estado no pudo recaudar los impuestos al acto, tampoco se pagan cargas sociales, etc., etc., etc. Luego, tal como se pone de manifiesto, es una cadena donde no hay un solo sector perjudicado, por todo lo cual es menester generar y fomentar el crecimiento de la economía real, promover el trabajo genuino, permitir a los donantes y donatarios vivenciar su deseo, y alcanzar su satisfacción personal, incrementar el compromiso social, impulsar el espíritu solidario entre las personas y, cobrando especial importancia su aspecto social.

Por lo expuesto, el Colegio de Escribanos de la Provincia del Chacho, afirma que este proyecto es una solución para impulsar nuestra economía y permitirá salir del estancamiento económico, activando el crédito para construir viviendas o desarrollar cualquier clase de emprendimientos, lo que redundará en trabajo para muchos cuidados que padecen la crisis económica.

Necesitamos, en consecuencia, entre todos incentivar el crecimiento de nuestro país, y un país resplandece con el trabajo, y la legislación debe reglar las interrelaciones, adecuado a lo justo y equitativo, ser na herramienta efectiva a esos fines, y no debe perderse de vista que el tráfico inmobiliario es uno de los motores fundamentales para el crecimiento de toda sociedad; es por ello que apoyamos esta reforma, que propone, entre otras cosas no menos importantes, una acción personal y no real cuando se realiza un acto jurídico de transferencia o constitución de un derecho real a título oneroso, a favor de un tercero y de buena fe, la que resguarda perfectamente los derechos tutelados por nuestra Constitución.

Con el convencimiento que nuestros representantes están atentos a las necesidades de su pueblo, es que toda mi fe está puesta en un trabajo conjunto y eficaz para fortalecer la economía y el desarrollo social del país, y es que este proyecto sea tratado con prioridad.

Sentado ello, cabe resaltar que, por aplicación de la Ley 13.640, el proyecto perdería estado parlamentario el día primero del mes de marzo del año en curso, razón por la cual solicitamos su tratamiento con urgencia.