No es reglamentario, es verdad. Pero lo cierto es que es uso y costumbre en ambas cámaras leer los discursos. Lo cierto es que en la sesión del Senado de este jueves, la alocución del senador nacional Mario Fiad para plantear una cuestión de privilegio respecto del proyecto de Guillermo Snopek para intervenir la Justicia de Jujuy, fue interrumpida por la presidenta de la Cámara alta, Cristina Fernández de Kirchner, que le reprochó que estuviera leyendo.

Finalizada la intervención del jujeño, CFK se tomó unos minutos para aclarar que “cuando el debate es sobre cuestiones de privilegio el reglamento prohíbe la lectura, salvo el uso que durante cinco minutos pueden hacerlo cuando se está debatiendo un proyecto de ley”.