Un diputado radical presentó un pedido de informes; otro opositor habló del “virus ideológico”.
Sigue dando paso a la polémica el gesto cubano de enviar 200 médicos a la provincia de Buenos Aires y la aceptación del Estado argentino por esa “ayuda humanitaria”.
El que tomó distancia es el diputado nacional Gonzalo del Cerro (UCR-Santa Fe), que pidió al ministro de Salud, Ginés González García, que informe si la llegada de médicos cubanos para colaborar con el control y tratamiento de la pandemia del coronavirus, obedece a una solicitud de su cartera.
En un proyecto de resolución, dirigido al Poder Ejecutivo Nacional, el legislador preguntó si esta decisión cuenta con el aval del grupo de infectólogos y epidemiólogos que asesora al presidente Alberto Fernández.
Del Cerro, también quiere saber si la Confederación Médica de la República Argentina, dio su aprobación para el ejercicio de la profesión de los cubanos en nuestro país.
“La presencia de los cubanos no respeta los términos de la Ley 17132 sobre el Ejercicio de la Medicina que en su Artículo 13, dice claramente que los títulos de médicos extranjeros, deben ser revalidados por una universidad nacional y que los profesionales extranjeros reconocidos, en tránsito en el país, podrán ser consultados pero no ejercer profesionalmente”, concluyó Del Cerro.
Más crudo se mostró el diputado Alberto Asseff, que tomó el tema por el lado ideológico. A través de Twitter, señaló que “los 200 médicos cubanos que autorizó Cancillería por pedido de AxelKicillof pueden portar el ‘virus’ ideológico castrista experimentado en más de 60 años de injerencia en toda nuestra América”.
Y advirtió al Gobierno que la medida “desafía el sentido común”.