En el marco de un “seminario web”, un grupo de dirigentes del partido centenario analizaron la coyuntura en estos tiempos de pandemia.
Se llevó a cabo el seminario web “Cómo salir de forma ordenada de la cuarentena”, del que p articiparon el exministro de Salud de la Nación Adolfo Rubinstein; el presidente del interbloque Juntos por el Cambio en Diputados, Mario Negri; sus pares Facundo Suárez Lastra, Karina Banfi, Alvaro de Lamadrid y Josefina Mendoza; Lilita Puig, presidenta de la Fundación Alem, y Ricardo Gil Lavedra, juez del Tribunal que enjuició a las Juntas Militares y exdiputado nacional. También estuvo el actor y exdiputado nacional Luis Brandoni. La coordinadora de la actividad fue Silvia Collin, Presidenta de la Comuna 3.
Entre bromas y temas domésticos como el corte de pelo de Facundo Suárez Lastra y el uso del lavarropas de Gil Lavedra, comenzó una muy puntual reunión que duró poco menos de dos horas. Durante la misma se hizo mención a un documento salido de la Fundación Alem hace dos semanas, con la temática que los reunió en esta oportunidad: “Salir pronto y de manera ordenada”, una propuesta para la transición desde el aislamiento nacional obligatorio.
El diputado nacional Facundo Suárez Lastra comenzó su intervención pidiendo “aprovechar las experiencias de este contexto para pensar a futuro una coordinación para la Región Metropolitana de Buenos Aires”. “La concentración de poder siempre es mala. Pero en momentos de emergencia, alejarse de las opiniones divergentes es letal, eso está haciendo el gobierno nacional”, afirmó.
Por su parte, Lilia Puig expresó que “es urgente pasar de la sociedad del miedo a la sociedad del riesgo y se aprenda a convivir con el virus porque una cuarentena extendida generará consecuencias igualmente gravosas en lo social, la salud y la economía”.
“No vamos a Venezuela, vamos a Santa Cruz, el kirchnerismo es más sofisticado, le quiere dar un marco de legalidad, eso es más cínico y más perverso”, explicó a su turno el diputado nacional Álvaro de Lamadrid.
Por otra parte, Adolfo Rubinstein explicó que “la cuarentena sirvió para detener la propagación, pero no se ve un plan de salida claro como sí tienen los países que la están flexibilizando. El gran problema es que no hay un rumbo claro de cómo salir. El Gobierno se enamoró de la cuarentena como proyecto político. Tenemos una ventaja de que es la bajísima ocupación de UCI’s, para pensar alternativas. La gente no aguanta más”.
Acto seguido, tomó la palabra Ricardo Gil Lavedra para asegurar que “frente a un problema tan complejo, no es razonable que nos quedemos con unas pocas opiniones. No hay una verdad única. Y la Constitución no puede quedar suspendida por la emergencia”.
Luego la diputada nacional Karina Banfi recalcó la importancia de observar de cerca las aplicaciones gubernamentales, porque “la privacidad de los datos personales empieza a estar en riesgo, están aprovechando la pandemia para tener más control y restringir libertades”.
“Tenemos que hablar del vergonzoso silencio de los sindicalistas en la Argentina, en este momento tan difícil. Mientras tanto el kirchnerismo avanza con picardías que son graves, por ejemplo el material que hicieron para adoctrinar en las escuelas como en los años 40”, explicó el ex diputado nacional Luis Brandoni durante su exposición.
Casi finalizando el evento, Mario Negri afirmó que “como oposición ya dejamos claro qué país no queremos. No queremos un país mutilado en términos institucionales. El gobierno decidió aislarse en medio de la pandemia. El diseño de país y de sociedad sigue siendo el del kirchnerismo. No hay ningún diseño planteado por Alberto Fernández”.
Al cierre de la charla Rubinstein hizo referencia a la necesidad de establecer criterios generales para orientar decisiones operativas, que permitan trabajar en una salida ordenada de la cuarentena que atraviesa el país.