El jefe de interbloque Juntos por el Cambio abogó por que en la Cámara de Diputados "se pueda encontrar un parate", al tiempo que advirtió que "cuando no hay sensatez desde la política, el último resguardo es la Corte Suprema".
Hacia el final del debate en la sesión del Senado, el jefe del interbloque Juntos por el Cambio, Luis Naidenoff, afirmó que en el proyecto de reforma judicial "se ve un intento liso y llano de colonizar la justicia".
El radical inició su discurso haciendo alusión al comunicado que la vicepresidenta emitió sobre la iniciativa, al sostener que "no es una verdadera reforma judicial", y expresó: "Nos deja a la clara por dónde pasa el eje central de mover el tablero político en Argentina".
"Desde lo conceptual tenemos tres grandes coincidencias: que no estamos hablando de una reforma judicial; que la Argentina se debe una verdadera discusión sobre la justicia; y que por encima de todo está la democracia, la Constitución Nacional y el rol del Congreso", dijo.
El formoseño resaltó que esta "no es una reforma integral, es una reforma del fuero federal penal". "¿Ustedes creen que con esta reforma van contra los narcos, o se para la venta de la droga en Argentina y los balazos cruzados?", se preguntó.
"Estamos reformando un fuero que involucra fundamentalmente a las causas de corrupción, donde están implicados funcionarios públicos, el Estado y donde la cancha siempre está embarrada", subrayó.
Además, el legislador enfatizó que "hay que discutir con profundidad qué reforma se debe Argentina" que, entre otros puntos, se debe "una discusión en el mecanismo de selección de jueces en el Consejo de la Magistratura".
Respecto a los argumentos del oficialismo sobre la concentración de Comodoro Py, el opositor recordó que "de los 12 jueces de Comodoro Py solamente dos jueces fueron designados en gestiones en que no gobernó el peronismo".
En referencia al debate de la iniciativa, Naidenoff criticó que no se haya "escuchado ni siquiera a los académicos del mismo palo", ni "a la política", ni "a Juntos por el Cambio, a la fuerza de (Roberto) Lavagna, y a un grupo de diputados de Córdoba que dijeron que en estas condiciones no se avanza".
En caso que el proyecto sea ley, el titular del interbloque JxC opinó que será "la Corte, en cumplimiento de su deber constitucional, la que deberá estar a la altura de la democracia y poner un freno". "Cuando no hay sensatez desde la política, el último resguardo, el último refugio, es la Corte Suprema", aseguró.
Y abogó por que "los diputados de la Nación puedan encontrar ese parate que necesita la Argentina para reflexionar y ver por dónde van las prioridades"; en ese sentido, enfatizó que la Cámara baja es "una esperanza" antes "de la Corte".