Sagasti se preguntó cómo era posible que el aporte solidario no se votara por unanimidad
La senadora kirchnerista atribuyó a la oposición repetir “mitos” para “justificar” que no acompañan una medida que “tiene gran apoyo popular”.

Esta vez no fue José Mayans el que cerró el debate del aporte solidario y extraordinario. La encargada fue en esta oportunidad la vicepresidenta del bloque, Anabel Fernández Sagasti, quien antes de referirse al proyecto habló de la situación que debió sobrellevar su Gobierno, con una pandemia inédita, pero además “tuvo que afrontar esta crisis con una economía devastada, hiperendeudada, con un 55% de inflación, pérdida de empleo, cierre de PyMEs… Estas son las cosas que tenemos que poner sobre la mesa en el contexto que tratamos este aporte solidario y de emergencia”.
Luego habló de los compromisos asumidos por el Gobierno de Alberto Fernández. En primer lugar, “darle sustentabilidad a la deuda pública que nos dejaron, este desastre de endeudamiento, un verdadero carnaval de endeudamiento que nos dejaron a los argentinos y las argentinas”.
Luego se refirió a la situación sanitaria y los gastos que insumió hacer frente a la crisis generada por el coronavirus, más las ayudas a las empresas. “Tildar al peronismo de antiproductivista… la verdad que es no estudiar la historia”, se quejó. Y por último, “también nos pusimos a trabajar en la vacuna, porque si hay una virtud que tuvo nuestro gobierno fue involucrarnos con todos los países para que tuviéramos prioridad cuando estuviese la vacuna. Y parece que lo hemos logrado y seremos uno de los primeros países del mundo que vamos a vacunar a nuestra población”, señaló.
Respecto del aporte solidario, dijo que “es extraordinario, porque claramente estamos viviendo circunstancias extraordinarias”. Y advirtió que ese aporte alcanza “a 9.300 personas con grandes fortunas, no a las empresas grandes y pequeñas”. De esos 9.300, 2.300 van a pagar 6 millones de pesos cada uno, afirmó.
“La mayoría de esas fortunas se encuentran en depósitos y acciones que están en el exterior -agregó-. Y para los que hablaban del campo, quiero decirles que ninguno va a tener que vender absolutamente nada, porque de esos 9.300 contribuyentes, solamente los campos representan el 2,7% de sus patrimonios”. Señaló en ese sentido que “la verdad que esas fábulas de vender máquinas, campos, propiedades, es una zoncera y una mentira que repiten por el solo hecho de no poder decir por qué no acompañan” la sanción.
Por el contrario, aseguró que ese dinero “va a ir a la producción”, por cuanto se trata de aportes “inmovilizados en el exterior, que van a ir al plan Progresar, al gas… Este aporte plantea que estamos en una situación extraordinaria y los que tienen la mayor capacidad de contribuir, que ayuden a los argentinos y las argentinas”.
“Pedimos que no tengan dobles discursos y planteen por qué no van a acompañar”, reclamó a la oposición.
En otro pasaje se valió de filminas para desmitificar que la reducción de impuestos promueva inversiones. Dijo que durante el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner -“el carnaval populista”, ironizó-, la totalidad de la inversión fue de 6,61%, mientras que durante el gobierno de Mauricio Macri, entre 2016 y 2019 el porcentaje fue negativo: -3,66.
“Se dice también que somos campeones de la presión fiscal. ¿En qué número está Argentina en el ranking? Uruguay, Brasil, España, Holanda, Suiza, Francia, Dinamarca, tienen mayor presión fiscal”, afirmó, para concluir que el impuesto a Bienes Personales era durante la gestión de CFK 1,3%, y Macri la bajó a 0,7%. “Este es uno de los impuestos más progresistas que hay a nivel mundial”, dijo, aclarando que la baja de impuestos de Cambiemos “no tuvo los efectos que iban a tener”.
“Escuchar todo el tiempo repetir y repetir que la baja de impuestos produce inversiones… la evidencia empírica demuestra que no es solamente repetir para defender intereses que no son los propios”, señaló la senadora mendocina, que agregó: “Si quieren seguir repitiendo estos mitos para justificar que no acompañan este aporte que tiene gran apoyo popular…”, y se preguntó: ¿Cómo es posible que este Congreso no vote por unanimidad que quienes pueden contribuir lo hagan?”.
El tercer mito que quiso desmitificar Fernández Sagasti es que ese fue “un capricho” del presidente del bloque de diputados del Frente de Todos. “La verdad que eso también es mentira: seis países en Europa y cinco en América latina están analizando” ese tipo de impuestos. “La diferencia en algunos casos es simple -advirtió-. Que en la Argentina el proyecto es del oficialismo. Porque está en nuestra doctrina, nuestra esencia, buscar beneficiar a la inversión y el trabajo de los argentinos y las argentinas”.
Al concluir, la senadora de La Cámpora señaló que “claramente este aporte tiende a que este atesoramiento que tienen 9.300 personas que atesoran afuera, puedan trasladarlo, producir, generar trabajo y ayudar a todos los argentinos. Debemos contribuir a encontrar puntos de conexión entre el aparato productivo y los que más tienen para aportar, y los argentinos que necesitan que les den oportunidades”.