El senador correntino Pedro Braillard Poccard destacó el acompañamiento de Juntos por el Cambio a varias leyes, sobre todo lo referido a la economía, "una de las grandes preocupaciones argentinas". Se mostró a favor de la suspensión de las PASO y apuesta por reelección del gobernador Valdés en su provincia.
Tras un año marcado por la pandemia y un trabajo virtual intenso en el Senado, el correntino Pedro Braillard Poccard destacó el acompañamiento de Juntos por el Cambio a varias leyes que el Gobierno impulsó, sobre todo en materia económica, y aseguró que "la oposición nunca trabajó para el desgaste de la figura presidencial".
Para el legislador, la alianza que integran el Pro, la UCR y la CC-ARI "ya ha pasado la prueba dura, que es haberse mantenido como alianza y como espacio político", además de ser "perfectamente coherente", algo que "es muy bueno" de cara a las elecciones legislativas de este año.
Precisamente, sobre el calendario electoral, el senador se manifestó a favor de la suspensión de las PASO. "Ya de por sí la campaña va a ser complicada, van a ser complicados los días de elecciones, entonces cuanto más trámites podamos evitar, mejor; cuántos menos recursos afectemos, también", expresó.
En diálogo con parlamentario.com, Braillard Poccard opinó que el oficialismo correntino "no debería tener problemas para lograr la continuidad en el Gobierno" ya que "tenemos un gobernador (Gustavo Valdés) que hace dos años está considerado dentro de los cuatro gobernadores con mayor prestigio de la Argentina".
-Corrientes tiene este año un intenso calendario electoral, ¿cuál es su opinión sobre la realización de las PASO nacionales?
-En este caso en particular yo estoy a favor de la suspensión de las PASO, porque entiendo que ya de por sí la campaña va a ser complicada, van a ser complicados los días de elecciones, entonces cuanto más trámites podamos evitar, mejor; cuántos menos recursos afectemos, también. Las PASO son una interna y se desnaturalizaron completamente, porque terminan siendo alianzas contra alianzas que presentan un candidato único. Sería bueno que vayan a votar aquellas alianzas que tengan más de un candidato, sino qué sentido tiene, se gasta dinero y tiempo. Y en este momento de pandemia yo sería partidario, por esta vez, de suspender y mientras tanto aprovechar la posibilidad de revisar la legislación.
-¿Qué expectativas tiene para las elecciones provinciales en las que se elegirá gobernador?
-La alianza que yo integro, que gobierna en la provincia, no debería tener problemas para lograr la continuidad en el gobierno. Tenemos un gobernador (Gustavo Valdés) que hace dos años está considerado dentro de los cuatro gobernadores con mayor prestigio de la Argentina. Al permitir la Constitución provincial una reelección, sería natural que se presente (a elecciones), sobre todo teniendo un altísimo nivel de aceptación, que supera holgadamente el 70%. Pero las elecciones se ganan en las urnas. Si hacemos las cosas bien, tenemos que ganar, pero todavía tenemos que seguir haciendo las cosas bien.
-La provincia también elige senadores nacionales este año, ¿irá por un nuevo mandato?
-Es un tema que estamos discutiendo con la interna de la alianza, yo por lo menos tengo la tranquilidad de saber que la mayoría de la opinión pública opina que he hecho bien mi tarea estos años. Si las cosas se dan dentro de la alianza, seguramente me postularé para la reelección.
-¿A nivel nacional, cómo ve a Juntos por el Cambio?
-Yo creo que Juntos por el Cambio ya ha pasado la prueba dura, que es haberse mantenido como alianza y como espacio político. Ya estando a más de un año de ser oposición seguimos funcionando como un interbloque. Creo que lo mejor que le puede pasar a Argentina es tener dos espacios con posibilidad de alternancia, como decía el gran Giovanni Sartori, que la sociedad tenga la tranquilidad que si un espacio político no cumple sus expectativas, tiene la posibilidad de elegir al otro en la próxima elección. Esto es lo que se da en todas las democracias consolidadas. Seguimos siendo un interbloque consolidado tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, la Mesa Nacional se reúne semanalmente y, salvo pequeñas opiniones diferentes que podemos tener, y relacionado a veces con cuestiones muy locales, creo que la posición nuestra es perfectamente coherente y eso es muy bueno.
-¿Cuál su opinión del primer año de gestión de Alberto Fernández, marcado por la pandemia?
-Con respecto a la pandemia, eso solo se va a poder evaluar en el tiempo, por los números de contagios y muertes. Sin duda la pandemia nos tomó de sorpresa a todos, al mundo entero, entonces no deja de ser comprensible que se hayan cometido errores. El único error que no comparto es que por ahí se haya cantado victoria antes de tiempo, pero después de eso coincido con muchas medidas que se han adoptado y se siguen tomando. Ahora tenemos el gran desafío de la vacuna, eso es un tema que lo lleva adelante exclusivamente el Gobierno nacional.
Reitero, en lo que mayores incertidumbres hay es en el tema económico, algunos problemas relacionados con la pandemia y otros que no. Dependiendo lo que haga el Gobierno repercutirá, sin dudas, en el resultado electoral.
Si hay que hablar de desgaste, creo que es un problema de discusión interno del oficialismo, lo que sí creo es que la oposición nunca trabajó para el desgaste de la figura presidencial.
-Luego de un 2020 en el que el trabajo virtual debutó en el Congreso, y en un 2021 marcado por elecciones, ¿cómo cree que será el trabajo parlamentario este año?
-Creo que el ritmo va a ser intenso, por lo menos en la primera parte del año, porque la modalidad virtual facilita mucho, sobre todo el trabajo de comisiones. También la presencialidad se ha retomado en partes, la verdad que hay un número de senadores que podemos asistir a todas las sesiones, eso lo decide cada bloque.
Posiblemente haya dos agendas, una la que es de interés del Gobierno, que en el Senado tiene prioridad absoluta. Algunos temas son adecuados y nosotros hemos acompañado, como por ejemplo las herramientas para negociar la deuda; le hemos ratificado todos los DNU's que tienen que ver con la pandemia, sobre todo los de aislamiento social, preventivo y obligatorio; y facilitamos los debates presupuestarios para que el Poder Ejecutivo pueda disponer de recursos. Pero hay otros temas que el oficialismo ha impuesto en el Senado, donde tiene mayoría propia, que nosotros no hemos acompañado como la famosa reforma judicial o la reforma del Ministerio Público. Este tipo de proyectos seguramente no los vamos a acompañar, si se sigue insistiendo sobre lo mismo y en esa línea. Sí acompañaremos los temas que tienen que ver con las dos grandes preocupaciones argentinas, una es la pandemia, que sigue siendo un problema muy complicado y todavía no estamos mejor que en 2020, en muchos casos estamos igual o peor. Y el otro es el tema económico, donde realmente creo que hay una gran incertidumbre. No se sabe si se va a poder lograr un acuerdo con el FMI, ahora aparentemente podría haber una solución en el tema de refinanciación de deuda en intereses, un tema que puede complicar todo el tema de renegociación de deuda en Argentina porque hay varias provincias, la mía no es una de ellas, que empiezan a tener importantes vencimientos en dólares este año. Más allá de que son negociaciones que llevan adelante los gobiernos provinciales, el contexto nacional incide muchísimo en el tipo de acuerdo que logren los gobernadores.
-¿Qué proyectos tiene pensado impulsar?
-Yo tengo un proyecto que propone eximir del impuesto a las Ganancias a los profesionales de la salud, quienes amerita que reciban no solamente los aplausos y el reconocimiento de la sociedad, sino ese beneficio material. Por otra parte, estamos trabajando de forma conjunta en la Comisión de Seguridad Interior y Narcotráfico en un proyecto para actualizar la Ley Nacional de Estupefacientes, hemos trabajado mucho el año pasado con reuniones informativas y espero que podamos darle media sanción este año.
Además presentaré un proyecto de reforma de la Ley de Partidos Políticos, una ley que ha sufrido una serie de cambios, pero entiendo que todavía tiene que adecuarse a una serie de acordadas que saca la Cámara Nacional Electoral, en lo que tiene que ver con el funcionamiento permanente de los partidos. No es bueno que tengamos un número tan grande de partidos políticos, lo que ha llevado a la situación en Argentina de que hoy prácticamente ningún partido compite por sí solo. No sé si es bueno o malo, pero en Argentina no podemos hablar más de partidos sino de espacios. Considero que deben haber requisitos más estrictos todavía para la constitución del partido. Hoy por ejemplo no existe ningún tipo de formalidad para convocar a la asamblea constitutiva de un partido, la ley no dice absolutamente nada, es decir se puede hacer un acta de una asamblea que no existió.
-Usted habló con reparos sobre iniciativas del tenor de la reforma judicial, ¿qué piensa respecto de designaciones clave en la Justicia que el oficialismo logró aprobar con la mayoría?
-El mecanismo de designación de magistrados yo creo que funciona bastante bien, lo que creo es que tiene que existir un margen de razonabilidad al momento en que el Poder Ejecutivo elige al candidato de la terna. Porque eso tiene que ver con el buen funcionamiento del Poder Judicial. Yo no cuestiono la idoneidad o los conocimientos de algún postulante, pero mis reparos están en alguien que tiene una militancia…porque la Justicia es la última garantía de equidad y de independencia.
-Juntos por el Cambio alzó la voz a favor de la vuelta a las clases presenciales en todo el país, ¿cómo se encuentra ese proceso en Corrientes?
-Se está trabajando para garantizar todas las medidas de bioseguridad. La modalidad presencial tiene que volver porque los chicos lo necesitan. No digo que lo virtual no esté bueno, y es un avance, pero es un componente, la base sigue siendo lo presencial, la relación profesor-alumno, que es insustituible.
-¿Cómo se transita actualmente la pandemia en su provincia?
-Corrientes es una de las provincias que, si bien ha aumentado el número de contagios en el último tiempo, sigue estando entre las cuatro o cinco provincias con el menor porcentaje de contagios y letalidad. Estamos casi en la mitad de la media nacional. La provincia tomó sus precauciones, hizo un hospital de campaña que tiene 800 camas, 200 de ellas de terapia intensiva con respiradores, después otras 200 para terapia intermedia y el resto para internación general. Allí se internan a aquellos pacientes que habiendo contraído el virus su situación clínica recomienda que no se queden en su casa, pero la internación es voluntaria, no es obligatoria. Se está haciendo un trabajo muy estricto con los municipios, si hay un municipio en el que aumentan mucho los casos se pasa a fase 3 o a fase 2 hasta que se controla el brote y después se vuelve a fase 5. Es importante el autocuidado, cuidarnos a nosotros y cuidar a los que más queremos.