El diputado nacional y presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados Eduardo Valdés participó de un conversatorio con más de 100 dirigentes políticos y sindicales de todo el país sobre la política exterior argentina. “Cuando estos líderes analizan la región, y ven cómo están los sistemas políticos, resaltan a la Argentina. En las últimas elecciones de nuestro país participó el 80% de la población frente a la baja participación en países vecinos. A pesar de las bravuconadas, la población va por un lado y los profetas del odio van por otro”, señaló.

Con la participación de dirigentes como José Luis Gioja,  Eduardo Sigal, el diputado Nicolás Rodríguez Saá, representantes de la UOCRA, de la Corriente Federal de la CGT, de la CTA de los trabajadores, y de agrupaciones de base del peronismo de distintas provincias argentinas, Valdés se refirió al despliegue político del gobierno del Frente de Todos a nivel internacional: “Alberto todavía como candidato decidió viajar a Brasil, contra la opinión del marketing y en plena campaña, a abrazarse con Lula en la cárcel y visibilizar la injusticia de la detención, lo que sorprendió al propio PT brasilero. Esas son las convicciones que en los momentos claves uno tiene que mostrar, con esos antecedentes asumimos el gobierno”, señaló, y agregó que “a pesar de los contratiempos Argentina pudo desarrollar una política que permitió que Bolivia vuelva a la democracia. A partir de eso los líderes europeos vieron al presidente como un estabilizador en la región”.

A su vez, Valdés se refirió al viaje inaugural de la gestión de Alberto Fernández, en enero de 2020: “El primer viaje al exterior del presidente fue a Israel, Argentina fue el único país latinoamericano invitado al foro en memoria del holocausto, donde estuvieron presentes los líderes de las naciones europeas. Allí nuestro presidente planteó al primer ministro y al presidente de Israel un pedido de información en base a declaraciones de dos ex embajadores de Israel en Argentina, Aviran y Gazit sobre el atentado en la embajada de Israel y la AMIA. Tanto el presidente como el primer ministro de Israel se sorprendieron gratamente por la franqueza del presidente argentino y el pedido de información”.

Después Valdés cargó contra el rol regional del secretario general de la OEA, Luis Almagro, afirmando que “jugó absolutamente contra Argentina, ahogó la posibilidad que nuestro país pueda presidir el BID. Fueron Almagro y sus operadores quienes se comunicaron con los países para que no voten a Argentina y en su lugar voten a (Mauricio Claver) Carone, un asesor de (Donald) Trump, rompiendo toda la tradición del Banco Interamericano de Desarrollo, que en el concierto internacional de la diplomacia multilateral está generalmente presidido por un latinoamericano”.

Respecto del contexto mundial, el diputado por la Ciudad de Buenos Aires planteó: “Hay un mundo distinto. Todavía muchos no se han dado cuenta. Gracias a Dios, ojalá los valores de (el papa) Francisco sean los que perduren. Hay una directora del FMI, Kristalina Georgieva, que abreva en los valores de Francisco. Claro que la burocracia del Fondo no, pero esta directora búlgara es muy activa en la idea del mundo que predica Francisco”, y definió al Vaticano como “un gran aliado de la política exterior argentina”.