García Vilas: “Tenemos que priorizar las iniciativas que acompañen la recuperación económica”
El jefe del bloque Vamos Juntos dialogó con Parlamentario acerca de las prioridades legislativas para este 2022, los desafíos en el trabajo con la oposición y cómo será la convivencia entre los distintos espacios que conforman Juntos por el Cambio.

A semanas de que se le dé inicio a un nuevo año parlamentario, el presidente del bloque Vamos Juntos, Diego García Vilas, adelantó en diálogo con Parlamentario cuáles serán las prioridades legislativas del oficialismo y cómo planea llevar a cabo el trabajo conjunto con las distintas bancadas de la oposición.
“La prioridad siempre es llegar a consensos e incluir las diferentes visiones, siempre y cuando enriquezcan los proyectos”, aseguró el legislador y remarcó que la ampliación de Juntos por el Cambio (JxC) permitirá beneficiar el debate de cada una de las iniciativas.
En ese sentido, manifestó que en el oficialismo “todos tenemos una voz en los debates, sin diferencias, y preferimos trabajar cada proyecto hasta que haya conformidad”, y remarcó que “nos unen ideas y valores comunes, una visión de país y conceptos en los que creemos firmemente, pero no se pierde la identidad de cada espacio. Creo que esto es lo enriquecedor de ser un bloque muy plural, abierto a las discusiones y que sigue creciendo”.
– El 2021 fue un año de intensos debates en la Legislatura. ¿Qué evaluación puede realizar del trabajo legislativo de la Casa?
– En primer lugar, pudimos continuar con la tarea legislativa sin frenar por la segunda ola de la pandemia, lo que no es menor. Esto, en medio de un año electoral, donde la temperatura en el recinto suele subir. Tuvimos discusiones particularmente fuertes, como decís, que creo que estuvieron teñidas por ese clima, aunque no logró imponerse a la sanción de leyes. Los debates por Costa Salguero y Costa Urbana son un ejemplo.
En paralelo, desde el bloque Vamos Juntos continuamos colaborando en las acciones del GCBA contra la pandemia. Ya veníamos participando, desde 2020, en el programa de hoteles de aislamiento para pacientes de Covid, además de sumarnos a los centros de testeos, a la concientización en espacios públicos y centros comerciales.
También hicimos un trabajo muy fuerte en los vacunatorios. Desde el primer día que comenzó la aplicación de las dosis (que arrancó con la gente de más de 80 años) estuvimos con nuestros equipos para ayudar en todo el proceso, puntualmente en el centro de La Rural, uno de los más grandes. Fue muy emocionante, no solo por la felicidad de la gente que venía súper esperanzada a vacunarse, sino también por la respuesta que recibimos. Las muestras de afecto y agradecimiento hacia nuestros equipos nos llenaron de orgullo y alegría: el compromiso de los voluntarios fue total. Arrancaban tempranísimo y de ahí quizás partían a una reunión o algún debate de comisión, por ejemplo. Y siempre dieron un plus extra, una sonrisa, e incluso contención cuando era necesario, con la mejor onda. Trataron a cada persona como si fuese un ser querido. Creo que este espíritu de empatía se transmitió y contagió. Realmente es muy gratificante poder estar presente desde ese lugar, ayudar a la población poniendo el cuerpo en momentos tan duros como este.
– ¿Cuáles serán las prioridades de Vamos Juntos para este año? ¿Qué proyectos buscarán promover?
– Después de estos dos años durísimos, nuestra tarea tiene que priorizar las iniciativas que acompañen la recuperación económica y la vida cotidiana de la población. Un ejemplo es el proyecto para transformar el microcentro, que a simple vista podés pensar que es de carácter urbanístico, pero el objetivo de fondo es la reactivación, la generación de empleo, la reapertura de comercios y el acceso a la vivienda.
Por otra parte, queda pendiente la resolución de la Justicia en torno a la quita compulsiva de la coparticipación: de pronunciarse en favor de la Ciudad, podríamos retomar asuntos que quedaron frenados y dar aire al presupuesto, que hoy es de contingencia. También seguiremos insistiendo y trabajando en proyectos que hacen a nuestra agenda de transparencia, que es fundamental para que el país salga adelante. Un ejemplo es el conocido como “Ficha Limpia”, entre otros.
– El año pasado se aprobó el convenio con IRSA para modificar un predio en la Costanera Sur. ¿Cómo seguirá el trabajo en ese sentido?
– Ya tuvo aprobación en segunda lectura, así que el próximo paso ya no depende de la Legislatura; ojalá pronto podamos visitar las obras. Es un gran proyecto que va a crear un área pública de esparcimiento y fuentes de trabajo, donde hasta ahora había un lote privado y en desuso.
– Desde la oposición se ha instalado que debido a las últimas modificaciones a la Ley de Catastro, el predio de la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors podría convertirse en el primer barrio cerrado de la Ciudad. ¿Esto es así?
– No hay ninguna posibilidad de que sea así, por dos razones: la primera, porque el mismo CUR prohíbe los barrios cerrados. La segunda, porque justamente se trata de un predio que hoy es privado y nosotros lo hacemos público: con este convenio logramos que casi 50 hectáreas, que eran de propiedad de una empresa, pasen a ser de dominio de la Ciudad para el uso de los vecinos. Por lo cual la idea de “barrio cerrado” no tiene asidero, es una chicana.
– A fines del año pasado la Legislatura comenzó a dar algunos pasos para la reconversión del micro y macro centro. ¿Tienen previsto avanzar con más iniciativas en ese sentido?
– Desde hace varios años venimos sancionando proyectos en esta línea: la peatonalización del microcentro, la recuperación de avenidas emblemáticas, la incorporación de actividades recreativas en distintos barrios. El proyecto que presenté para microcentro es importantísimo: cualquiera que transite la zona sabe cómo quedó golpeado por la pandemia. Y los vecinos y comerciantes ya están entusiasmados.
Pero quiero resaltar que estas propuestas no son aisladas sino que tiene un hilo conductor, que es la visión de la Buenos Aires como una ciudad moderna, inteligente, sustentable y a “escala humana”, donde puedas ir a trabajar, a estudiar o pasear sin tener que cruzarte la Ciudad entera, por ejemplo, o tardar una eternidad. Por eso vas a escuchar seguido hablar de conceptos como “supermanzanas” o “mixtura de usos”: detrás de estar transformaciones hay estudios exhaustivos en base a una mirada integral, inclusiva y con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los vecinos en cada barrio.

– Usted tuvo la difícil tarea de alcanzar acuerdos con las distintas fuerzas políticas en un año signado por las elecciones de medio término. ¿Qué expectativas tiene para este? ¿Cree que será más sencillo llegar a acuerdos con la oposición?
– ¡Qué pregunta! No sé si será más o menos sencillo, pero puedo afirmar que los antecedentes marcan que es posible llegar a puntos de acuerdo en muchísimos temas. La prioridad siempre es llegar a consensos e incluir las diferentes visiones, siempre y cuando enriquezcan los proyectos. Después, cada espacio es libre de votar o no las propuestas, pero siempre son escuchados y en la gran mayoría de los casos (te sorprenderías cuántos) se incorporan modificaciones que sugieren.
Un ejemplo reciente es el proyecto que presenté de currículum ciego (que impide que las búsquedas laborales incluyan elementos discriminatorios o datos que no correspondan con las tareas requeridas): todos los espacios hicieron aportes muy valiosos que mejoraron el texto final y se sancionó con amplia mayoría. Esto se logra en conjunto y es el compromiso de los presidentes de cada bloque. Y en los casos en que no lleguemos a ese consenso, se somete a votación y define la mayoría, como marcan las reglas.
– Por último, dentro de JxC crecieron los aliados, ¿considera esto una ventaja a la hora de poner en consideración distintos proyectos? ¿Por qué?
– En Juntos por el Cambio apostamos al crecimiento y a los acuerdos, y eso se expresa también en la Legislatura. Particularmente en el bloque Vamos Juntos, que está integrado por distintos partidos políticos (cada uno con su historia, sus ideas y su mirada propia) logramos construir un esquema de trabajo que funcionó muy bien y lo tenemos aceitado. Todos tenemos una voz en los debates, sin diferencias, y preferimos trabajar cada proyecto hasta que haya conformidad. En este sentido, nos unen ideas y valores comunes, una visión de país y conceptos en los que creemos firmemente, pero no se pierde la identidad de cada espacio. Creo que esto es lo enriquecedor de ser un bloque muy plural, abierto a las discusiones y que sigue creciendo.