El acuerdo con el FMI que debe aprobar el Congreso es esperado este lunes
A tal efecto habilitaron una guardia en Mesa de Entrada de la Cámara baja. Los antecedentes signados por recurrentes dilaciones dan espacio a las dudas.

Exactamente un mes después de haber anunciado el Gobierno el entendimiento con el Fondo Monetario Internacional, el proyecto que contiene los detalles del mismo y que debe ser autorizado por el Congreso de la Nación, ingresaría este lunes por Mesa de Entrada de la Cámara baja.
Así se desprende de la decisión de la decisión del presidente del Cuerpo, Sergio Massa, de mantener una guardia en esa dependencia de Diputados durante este lunes feriado, a los efectos de dar ingreso al texto si es que finalmente el Poder Ejecutivo lo envía en vísperas de la Asamblea Legislativa del 1° de marzo.
En rigor, no hay confirmación de que el proyecto llegue este lunes, más allá de la fuerte presunción en ese sentido. Sucede que ya varias veces se anunció la llegada del proyecto al Parlamento, pero una y otra vez la realidad indicó que debiera seguirse esperando.
A propósito de que los tiempos apremian para llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario antes del 22 de marzo -fecha en la que Argentina debería hacer un pago para evitar en caer en default y no cuenta con reservas suficientes para cumplir con ello-, se había especulado con un rápido envío del texto luego de que el viernes 28 de enero el Gobierno anunciara ese principio de acuerdo con el FMI. Sin embargo tres días después se registró la renuncia del presidente del bloque oficialista de la Cámara de Diputados, Máximo Kirchner, que trastocó todos los parámetros dentro del Frente de Todos. A partir de ahí no solo ese trámite entró en un cono de sombras, sino el período extraordinario en sí. De hecho, la velada fractura expuesta en el oficialismo hizo que el temario para extraordinarias pasara a un segundo plano y que en definitiva y de manera inédita ni uno de los proyectos sugeridos por el PEN fuera tratado en ninguna de las dos cámaras.
La renuncia del presidente del bloque oficialista de la Cámara de Diputados trastocó todos los parámetros dentro del Frente de Todos.
Se habló de que el proyecto ingresaría por la Cámara alta, donde el oficialismo ya no tiene mayoría, pero sí cuenta con el número suficiente para aprobar todo lo que se envíe a ese Cuerpo. Sin embargo quedó claramente expuesto que las dificultades oficialistas no se limitaban a la Cámara baja donde el presidente del bloque había renunciado, sino que también invadían el Senado. Sucedió el lunes 14 de febrero, cuando el presidente del bloque Frente de Todos de esa Cámara, José Mayans, aclaró que los senadores oficialistas querían conocer “el detalle del acuerdo con el FMI para saber en qué compromiso vamos a meter al país”. Asimismo el formoseño señaló en esa entrevista que en una charla reciente mantenida con el negociador de la deuda Sergio Chodos, le había expresado su parecer respecto de que le parecía “conveniente” que el debate parlamentario del acuerdo por la deuda se iniciara en la Cámara de Diputados.
Si bien Mayans señaló en esa entrevista realizada en El Destape Radio que esa decisión dependía del Poder Ejecutivo, en lo más alto del poder formal tomaron nota del mensaje y ya no pensaron más en tomar el Senado como Cámara iniciadora.
Sonó fuerte finalmente el trascendido de que el proyecto entraría el viernes 25 de febrero, o bien el 2 de marzo, transcurrida la Asamblea Legislativa. Luego calificadas fuentes oficiales dieron casi por confirmado que el proyecto se conocería el viernes pasado, pero tampoco sucedió y ahora las versiones indican que el día D sería este lunes.
Lo cierto es que la decisión final depende de que la letra chica entre los negociadores argentinos y sus pares del FMI termine de ser acordada. Ya no es una cuestión de fechas, sino de flexibilidad de cada una de las partes, y según ha trascendido, las discrepancias están empantanadas desde hace varios días en la cuestión tarifaria: el Fondo reclama un aumento del 60% del precio de las facturas y la consecuente reducción drástica de los subsidios energéticos, pero ya se sabe que en el Instituto Patria -léase Cristina Fernández de Kirchner– se ha dejado claro que el incremento no debe superar el 20%.
Sobre llovido mojado, el estallido de la guerra en Ucrania disparó los precios del petróleo y eso tendrá incidencia inexorable en los precios de un insumo como el gas, que la Argentina debe importar pese a albergar en su seno la cantidad de fluido suficiente como para autoabastecernos y exportar. Sucede que la construcción del gasoducto que hubiera garantizado la autosuficiencia no concluyó y es así que deberán seguir llegando los barcos gasíferos, ahora con precios mucho más altos que los previstos originalmente.
El estallido de la guerra en Ucrania disparó los precios del petróleo y eso tendrá incidencia inexorable en los precios de un insumo como el gas.
En este contexto los tiempos se acortan de manera dramática y no hay espacio para más dilaciones. La llegada del proyecto deberá ser esta semana -por la Cámara baja, está claro-, en lo posible este mismo lunes… A menos que el texto no haya terminado de ser acordado este fin de semana con el FMI, o bien se considere conveniente que el proyecto se conozca después de que el presidente Alberto Fernández brinde tercer discurso inaugural de las sesiones ordinarias, este martes. De ser así, no debería ser más allá del martes.