“Si tenemos la capacidad de transmitir de generación en generación que no es solo un pedazo de tierra negociable, sino que tiene que ver con nuestro derecho, pero también con la geopolítica de nuestro país en materia antártica y de futuro, sin duda algún día va a volver a flamear la bandera argentina en las islas Malvinas”, enfatizó Massa.
El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, fue uno de los oradores principales este sábado 2 de abril del acto que el Congreso de la Nación hizo en homenaje a los veteranos de la guerra del Atlántico Sur.
El diputado arrancó confesando la dificultad de poder “escapar a la emoción y el orgullo que representa cada uno de nuestros caídos y cada uno de nuestros veteranos para los argentinos”.
“Hoy es 2 de abril y hace 40 años, con solo 10 años en mi caso, los argentinos nos enterábamos de que muchos de ustedes y muchos que ya no están recuperaban un pedazo de suelo que alguna vez tuvo un gobernador argentino que se llamó Luis Vernet”, expresó el presidente de la Cámara baja.
Y agregó: “En realidad, lo primero que nos viene a todos aquellos que integramos el sistema político argentino, la sociedad en su conjunto, es la responsabilidad y obligación de pedir perdón”, aunque reiteró que él tenía 10 años entonces, “y que como muchos de nuestra generación mandamos cartas, juntamos comida, le pedíamos a nuestra abuela o madre que tejieran una bufanda para mandar a las islas, para construir un vínculo afectivo con quienes estaban defendiendo la patria desde el continente”.
“Nuestro reclamo de soberanía y el honor a nuestros soldados no puede dejar en el olvido cuestiones que nos marcaron como sociedad”, advirtió Massa, agregando la pregunta del “por qué” de esa guerra, que atribuyó a “una dictadura que caía, que había tenido dos días antes la marcha más importante en la época de dictadura, bajo la consigna ‘paz, pan y trabajo’ y que de alguna manera mostraba el final de la oscuridad y el inicio de la sociedad argentina de caminar hacia la luz de la democracia”.
“Pero hay un segundo momento, porque esa decisión para tapar lo que estaba pasando en la Argentina viene acompañado por un gesto posterior de vergüenza de quienes en dictadura gobernaban la Argentina, que fue no recibir como héroes a quienes aun perdiendo la batalla militar habían dejado su vida, o parte de su vida, o parte de su historia adolescente o de juventud en las islas”, comentó en otro pasaje.
Luego el presidente de la Cámara baja recordó que al ver a su hija, que hoy tiene la edad de quienes fueron a pelear a las islas se pregunta “cómo pudo haber tanta irresponsabilidad en la decisión, pero peor aún, cómo pudo haber tanta desidia a la hora de recibir a quienes en nombre de nuestra patria y soberanía fueron a defender casi sin herramientas nuestras islas, nuestro himno, nuestra patria”.
Por eso pidió perdón a los veteranos de guerra, y agradeció porque “de alguna manera llenan de orgullo el sentimiento patrio de idea de unidad nacional. Son de los símbolos vivientes que permiten que los argentinos abracen unidos y sin divisiones una vez en el año nuestra bandera y además una causa que es de todos”.
Massa continuó diciendo que “sin duda alguna, por el camino de la diplomacia, pero con firmeza, haciendo valer el derecho internacional, pero sin dejar de mirar el legítimo derecho propio de los argentinos, hoy a 40 años este Congreso y la Nación toda tienen la obligación de seguir planteando que las Malvinas fueron, son y serán argentinas, y que en paz, pero con firmeza, vamos a volver a pisar el suelo de Malvinas alguna vez”.
“Tal vez no sea hoy ni mañana, pero si tenemos la capacidad de transmitir de generación en generación que no es solo un pedazo de tierra negociable, sino que tiene que ver con nuestro derecho, pero también con la geopolítica de nuestro país en materia antártica y de futuro, si somos capaces de transmitir de generación en generación, sin duda algún día va a volver a flamear la bandera argentina en las islas Malvinas”, enfatizó Sergio Massa.
Sobre el final, el titular de Diputados reivindicó la necesidad de plantear a las Malvinas como una política de Estado y abogó por “el pase de la posta de generación en generación”, de modo tal que permita cumplir con “este mandato histórico y este sueño”.
Y concluyó echando mano a la siguiente frase: “Los pueblos que olvidan sus tradiciones, pierden la conciencia de sus destinos, y aquellos que se apoyan sobre sus tumbas gloriosas, son los que mejor preparan el porvenir”.
A partir de ello, Sergio Massa terminó diciendo: “Por la gloria de esas tumbas de Malvinas, por el honor de nuestros soldados veteranos de Malvinas, tengamos como Nación, en unidad, la capacidad de construir el legado a nuestros hijos para que algún día vuelva a flamear en Malvinas la bandera argentina”.