Eso expresó el jefe del bloque radical en Diputados luego de que el legislador oficialista anticipara la “impugnación de la resolución” que firmó Sergio Massa al designar a Roxana Reyes ante el Consejo de la Magistratura.
Tras conocerse la resolución por la cual el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, comunicó al Consejo de la Magistratura la designación de la radical Roxana Reyes como representante de la segunda minoría en la Cámara baja, el jefe del bloque UCR, Mario Negri, destacó: “El presidente de la Cámara baja no ha hecho más que reconocer y acatar lo que mandó la Corte”.
“La emergencia institucional en Argentina no ha desaparecido. En el Senado lo que sigue en juego tiene la misma gravedad institucional que venimos advirtiendo desde un comienzo”, señaló el titular del bloque UCR en Diputados.
Negri se refirió luego al anuncio formulado por el titular de la bancada del Frente de Todos, Germán Martínez, sobre una posible impugnación a esa resolución: “Germán Martínez corre el riesgo de hacer el mismo papelón que hizo el diputado Marcelo Casaretto, quien acudió al juez de Paraná Daniel Alonso en búsqueda de un ridículo fallo contrario a una sentencia de la Corte Suprema”.
“Nos preocupa mucho lo del Senado, no hay que bajar la guardia. El oficialismo parece no tomar dimensión de lo que están haciendo. La inflación vuela, la tensión social es tremenda, y ellos jugando con cuestiones de extrema gravedad. Cristina y el kirchnerismo llevan a situaciones de elevado nivel de tensión social y política al país”, sostuvo Negri.
Y agregó: “En el Senado es tanto el barbarismo, que de 4 integrantes se quieren quedar con 3. Con tantos problemas de inflación, de desocupación, de inseguridad, creen que la gente no se da cuenta de estas cosas. Impugnaremos en el Consejo de la Magistratura la designación de Doñate. Incluso evaluaremos una posible sanción penal”.
“Además, el presidente se metió hoy al barro a través del jefe de Gabinete para convalidar la violación de la Constitución y el atropello al Poder Judicial y sus decisiones. Es una franca obsesión por controlar la Justicia para que no se avance en la investigación de hechos del pasado. Perdí ya toda capacidad de asombro al escuchar al jefe Gabinete decir que se dividen solo porque no les gusta la ley, y que eso está bien. Han hecho barbarismo constitucional”, finalizó el diputado cordobés.
Por su parte, Reyes agregó que esto es algo “que está en el ADN del kirchnerismo y de Cristina Fernández de Kirchner. Ella quiere todo, no acepta límites, se lleva puesta la República, la división de poderes. Su única agenda es la impunidad y el dominio de la Justicia. Hay un toque de brutalidad, es gravísimo”.
“En Santa Cruz, durante mucho tiempo, manipuló los sistemas electorales, los sistemas de control, la Justicia; pusieron la reelección indefinida, la ley de lemas; está el caso del fiscal Sosa que nunca fue restablecido pese a un fallo de la Corte”, sumó.
Y señaló que Cristina Kirchner “está perdiendo el estilo, ahora ya hace cosas que causan gracia, como fue echar mano a un juez inferior para intentar suspender una orden firme de la Corte Suprema”.
“Sergio Massa demoró la resolución, no debería haber dudado. Pero finalmente priorizó la continuidad y el funcionamiento de las instituciones. Hizo lo que tenía que hacer. Hubiera sido muy difícil continuar trabajando en la Cámara de Diputados si no tomaba esta decisión”, finalizó Reyes.