Desde Republicanos Unidos, UCR-Evolución y el FIT cuestionaron la merma para el área educativa en el Presupuesto 2023 y advirtieron que “como la educación no es redituable electoralmente, siempre se deja de lado”.
En medio del debate respecto al Presupuesto 2023, los diputados porteños de Republicanos Unidos (RU), UCR-Evolución (UCR-Ev) y el Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) criticaron con dureza al Gobierno Nacional por los recortes en las partidas destinadas a educación y consideraron que “como la educación no es redituable electoralmente, siempre se deja de lado”.
En ese sentido, la radical Manuela Thourte (UCR-Ev) afirmó que “miles de chicos no volvieron a la escuela postpandemia, no aprenden contenidos mínimos. El 60% vive bajo la línea de pobreza” y lanzó: “¿qué hace el Gobierno Nacional? Manda al Congreso un presupuesto con una de las inversiones más bajas en educación de los últimos años. Al final, parece que no era con todos”.
Mientras que la oficialista Marina Kienast (RU) aseveró que “el gasto de un Gobierno habla de sus prioridades. Como la Educación no es redituable electoralmente, siempre se deja de lado: no solo bajan el presupuesto, sino que nadie propone cómo asignarlo de una manera más eficiente”.
En tanto el trotskista Gabriel Solano (FIT) concluyó precisando que es “una vergüenza que un gobierno que se dice nacional y popular recorte el 15% del Presupuesto educativo”.
Cabe recordar que la ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, también se metió en la polémica, al opinar que “la educación no puede ser la variable de ajuste del Gobierno Nacional. Después de postergarla por dos años, ahora bajan drásticamente el presupuesto”.
“Al mismo tiempo, en la Ciudad sube la inversión educativa, con un presupuesto equilibrado que hace foco en la obra pública y la seguridad, sin generar nuevos impuestos”, sentenció.
