La diputada dedicó su intervención a cargar contra ambos magistrados por haber querido aplicar el 2x1 en casos de lesa humanidad. “Este pedido de juicio político no busca necesariamente que los supremos sean juzgados”, aclaró.
Si bien el diputado Eduardo Valdés había consumido todo el tiempo asignado para fundamentar el pedido de juicio político contra los integrantes de la Corte, su compañera Mara Brawer se extendió este jueves en su exposición, fundamentalmente para fundamentar el pedido de enjuiciamiento contra Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti por haber votado a favor del 2x1 para casos de lesa humanidad.
La diputada del Frente de Todos había arrancado justificando el enjuiciamiento de los cuatro miembros de la Corte en que “sus conductas, avasallamiento y usurpación de funciones propias de otros poderes, incumplimiento de las normas constitucionales y de los tratados que forman parte de nuestra Constitución, y por ignorar la jurisprudencia que la propia Corte ha construido, poniendo en peligro nuestro sistema republicano y en igual medida nuestra democracia”.
Al avanzar en su exposición, Mara Brawer remarcó que si hay un tema que “une al 90% de los argentinos es el de los derechos humanos. Es un tema de unidad nacional, una política de Estado que nos distingue en el mundo. Somos representantes de un país que hizo una bandera de la memoria, la verdad y la justicia”.
A continuación se refirió a cuando en 2017 Rosatti y Rosenkrantz votaron a favor del beneficio de los genocidas. En esa oportunidad, “se provocó en la sociedad argentina un quiebre pocas veces visto en nuestra historia. Los delitos de lesa humanidad no se juzgan como cualquier delito común, son imprescriptibles, porque lesionan a la humanidad, y eso Rosatti lo sabe perfectamente, porque lo dijo cuando defendió su pliego en el Senado”.
Por eso, Mara Brawer se preguntó. “¿Hay dos Rosatti? ¿Uno que miente para conseguir el cargo y cuando asume como cortesano hace todo lo contrario?”.
“Acá se pone en juego uno de los causales de juicio político: la idoneidad moral de los supremos”, señaló, para referirse luego al caso Muiña. “¿Quién era (Luis) Muiña? Un particular que entra a hacer servicios de seguridad en el Hospital Posadas y crea un grupo Swat, crean un centro de detención y tortura en el hospital”, comentó.
Para la diputada kirchnerista, “es tan claro el rompimiento del contrato social de estos cortesanos que la sociedad argentina salió a la calle, y ahí estábamos todos. Fue tan fuerte que este Congreso en paralelo a la marcha se juntó y sancionó una ley, la 27.362, para que quede claro que no se podía aplicar el 2x1 en los delitos de lesa humanidad”.
Tras reiterar que ambos jueces de la Corte fueron “en contra del contrato social de esta sociedad”, comentó que en el caso de Rosenkrantz, ese magistrado insistió, pues “casi declara inconstitucional esa ley, no tuvo mayoría y sigue fallando en minoría en muchísimas causas pidiendo que se aplique el 2x1 a los genocidas”, por ejemplo el caso Rufino Batalla. “Es de una gravedad importantísima, que afecta a nuestra democracia y a la idoneidad ética de estos cortesanos”, enfatizó.
Mara Brawer concluyó señalando que “este pedido de juicio político no busca necesariamente que estos supremos sean juzgados, porque la finalidad del juicio político, como dijo Joaquín V. González, no es el castigo del acusado, sino la protección del interés público, contra el peligro de su ofensa por abuso de poder, el descuido del o la conducta incompetente a la dignidad del cargo. Está claro que Rosenkrantz y Rosatti no estuvieron a la altura de la dignidad del cargo”.