Para Segura, los cambios en la VTV son “beneficios fantasmas”
La legisladora del Frente de Todos aseveró que “Larreta te mete la mano en el bolsillo y después se vende como el campeón de la reducción de impuestos y tarifas”.

Después de que la Legislatura de la Ciudad aprobara una serie de modificaciones a la Ley de la Verificación Técnica Vehicular (VTV), la legisladora del Frente de Todos (FdT) Cecilia Segura analizó al detalle la propuesta y planteó que la misma establece “beneficios fantasmas”.
En ese sentido, la opositora recordó que “con bombos y platillos presentaron una reforma a la ley de VTV de la Ciudad por la que los autos nuevos no la pasarían hasta después de cumplidos cuatro años de uso y la oblea duraría dos años en lugar de uno” y recordó que “se mantiene vigente el tope de 60.000 kilómetros que establece la ley, por lo que no importa la antigüedad que tenga un coche, si alcanza ese kilometraje hay que hacer la VTV, incluso antes de que se cumplan los tres años”.
“Para los que cumplan con la VTV, la oblea sólo durará dos años si el coche tiene menos de 80.000 kilómetros, sino sigue siendo anual”, agregó y remarcó que “para que se den una idea, cualquiera que use el coche todos los días y haga un trayecto ida y vuelta equivalente a la distancia entre plaza de Mayo y Villa Devoto le hará alrededor de 15.000 kilómetros al año”.
Sobre esa misma línea, la legisladora aseveró que “en cuanto a los beneficios para jubilados, será gratuita para quienes cobren hasta dos jubilaciones mínimas (antes una). Seguramente no muchos jubilados por abajo de dos mínimas están en condiciones de mantener un coche y pagar patente, nafta y seguro” y detalló que “lo central es que cuando se aprobó la ley de VTV en la Ciudad, en 2006, el trámite era gratuito para quienes estuvieran al día con la patente, y fue por iniciativa del oficialismo que la ley no se implementó hasta que se modificó y se trasladó el costo a los dueños de los autos”.
“Es decir, como ocurrió con el impuesto a las tarjetas de crédito, Larreta te mete la mano en el bolsillo y después se vende como el campeón de la reducción de impuestos y tarifas, con la particularidad de que en este caso van a ser realmente muy poquitos los beneficiados”, completó.