Manes salió en defensa de “Wado” De Pedro tras el ataque por su tartamudez: “Hay que terminar con los estigmas”
El diputado radical sostuvo que “el impedimento para ser servidor público es ser corrupto, pero no un problema neurológico”. Por otro lado, aseguró que el radicalismo “está listo para ganar con la coalición Cambiemos las elecciones presidenciales”.

El precandidato a presidente y diputado nacional, Facundo Manes (UCR), salió en defensa del ministro del Interior, “Wado” de Pedro, quien fue objeto de críticas debido a su tartamudez, y abogó por la comprensión y el respeto hacia las personas que presentan este tipo de dificultades neurológicas, y fue terminante: “Hay que terminar con estos estigmas”.
En diálogo por Radio La Red, el titular de la Comisión de Ciencia y tecnología explicó: “La tartamudez es un trastorno de la fluidez del habla que se caracteriza por las interrupciones involuntarias en el ritmo del lenguaje. Las personas que tartamudean pueden experimentar bloqueos, repeticiones o prolongaciones de sonidos o palabras. la gravedad varía. Joe Biden tiene una situación parecida”.
“La tartamudez puede generar estrés, ansiedad y dificultades para comunicarse, pero de nuestro lado debemos ser comprensivos, respetuosos, la paciencia, la escucha activa, evitar interrumpir. Hay que apoyar a los que luchan con su tartamudez para evitar el estigma”, sostuvo.
Y explayó: “El estigma es una marca con la que son señaladas algunas personas que poseen algo no valorado e implica un trato diferencial por parte de la comunidad y, a partir de esa característica, son discriminadas o inferidas de poder realizar diversas actividades. Estoy en contra de la discriminación a una persona por un tema neurológico”.
“Wado de Pedro hizo tratamientos y mejoró mucho. Más allá de las diferencias políticas que tengo, eso habla de su resiliencia, de su capacidad de enfrentar una dificultad, no hay cura”, afirmó.
Manes manifestó su firme posición en contra de la discriminación hacia una persona por motivos neurológicos, dejando en claro que un problema de este tipo no es un impedimento para ejercer su función. “El impedimento para ser servidor público es ser corrupto, servirse de lo público, pero no un problema neurológico”, enfatizó.
“Parte del problema argentino y de la decadencia crónica que estamos sufriendo en todas las variables económica, social, educativa, es porque el chiquitaje de los temas, hablamos de personas y no de ideas, hablamos de telenovelas y no para que este país que es potencialmente rico deje atrás la decadencia y encare el progreso. Parte del problema argentino es no discutir los problemas reales del país para resolver los problemas”, analizó.
La interna de Juntos por el Cambio
Por otro lado, Manes analizó el escenario electoral dentro de Juntos por el Cambio de cara a las próximas elecciones generales. Explicó la reunión y posterior foto que tuvo con el presidente de la UCR, Gerardo Morales.
“La foto significa que el radicalismo en Córdoba discutió ideas. Hubo unos días de discusión dentro de la Fundación Alem sobre diferentes temas que aborda el radicalismo para encarar el próximo gobierno. Se reunió y les ofreció a los dirigentes el resumen de trabajo de varios años sobre los principales temas del país como economía, salud, energía, relaciones internacionales, seguridad, educación, agro. Hoy el radicalismo está listo para gobernar”, contó.
En ese sentido, precisó que “el radicalismo tiene tres gobernadores. 400 intendentes, senadores, diputados, concejales, gente nueva. El radicalismo se ha renovado en estos dos años, y esta listo para ganar con la coalición Cambiemos las elecciones presidenciales”.
“Yo estoy en política porque después de la pandemia me di cuenta de que debía contribuir al futuro que viene. Para estar mejor, necesitamos ideas, partidos políticos renovados y unidos que puedan generar coaliciones fuertes. En el 2015, Cambiemos fue una coalición para ganarle al kirchnerismo, no de ideas. Ocho años más tarde, no podemos ir con lo mismo. Cambiemos se achica y el Frente de Todos está siendo un desastre. El Pro no hizo un buen gobierno entre el 2015-2019 y el radicalismo, que no fue parte de ese gobierno, tiene que unirse y liderar la coalición opositora y tiene con qué hacerlo”, expresó.
Además, planteó que “hay que dejar de administrar pobreza, el subdesarrollo sustentable. Hay que dar un golpe de timón a la situación y encarar el desarrollo y el radicalismo está en una buena posición”.
“Yo veo un radical encarando la fórmula presidencial. Después, al vice lo deciden las autoridades partidarias. El radicalismo tiene que liderar una boleta para competir con el Pro y con la Coalición Cívica como pasó en el 2015”, opinó el precandidato y sumó: “Hay que estabilizar la economía y encarar el desarrollo al mismo tiempo. Los extremos no pueden gobernar el país. El radicalismo está en una posición histórica”.
Por último, opinó: “El desdoblamiento son tácticas electorales que no van a resolver el desastre del Frente de Todos, un gobierno de irresponsables. El Gobierno nació mal desde el inicio porque la persona con más poder está fuera de la Casa Rosada. El Gobierno fracasó”, y cerró: “Yo quiero ganarles a Patricia Bullrich y a Horacio Rodríguez Larreta”.