Javier Milei sigue postergando esa decisión y los tiempos se van acortando. ¿Cuándo vence el plazo para vetar esta ley aprobada hace dos semanas?
Si bien nunca expresó concretamente que vetaría la Ley de Financiamiento Universitario, todos dan por descontado desde su aprobación que Javier Milei tomará esa decisión respecto de esa norma. Diversas figuras del Gobierno también dieron señales en ese sentido. Sin embargo, el presidente todavía no estampó la firma correspondiente. Pasan los días y crecen las expectativas sobre el tema.
Recordemos que el veto es una facultad habilitada por la Constitución Nacional en el artículo 83°. Es una prerrogativa que el presidente de la Nación puede ejercer para casi todo tipo de leyes. Pero tiene un plazo para vetar: 10 días. Si eso no ocurre en ese tiempo, la ley queda automáticamente promulgada.
Ahora bien, ¿cuándo vence ese plazo? Porque recordemos que el proyecto de Financiamiento Universitario fue convertido en ley en el Senado el pasado 13 de septiembre, por 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención. Si tomamos esa fecha como punto de partida para su veto o promulgación, el plazo vencería este jueves 26 de septiembre. Así que teniendo en cuenta que el presidente Milei está en Estados Unidos y recién emprende la vuelta el miércoles, se acotarían mucho los tiempos.
Pero tiene más, pues el plazo comienza a correr a partir de que la ley se comunica, y eso sucedió el jueves 19. Así las cosas, la fecha límite es el 3 de octubre próximo.
Hasta entonces el presidente Milei tiene tiempo de seguir analizando qué es lo que hará. Recordemos que para el 2 de octubre está prevista una nueva marcha universitaria, que se prevé masiva, como contundente fue la del pasado 23 de abril. El presidente podría aguardar a que la misma se concrete y recién después vetar la ley, pero sonaría muy desafiante que el decreto se conociera al día siguiente, como respuesta.
Así como para el caso de la Movilidad Jubilatoria se le recomendó al presidente no ir al veto total, sino hacer uno parcial, que podría atemperar los ánimos y evitar un contraataque en los recintos, para este caso le han sugerido lo mismo, y abrir negociaciones con algunos rectores. Pero algunas fuentes consultadas sostienen que el presidente ha dicho que no tiene otra opción que aplicar un veto total, pues lo contrario sería una muestra de debilidad que no está dispuesto a dar. Con la decisión tomada, en ese caso, habrá que aguardar una definición para cuando el presidente haya regresado de Nueva York.