El secretario de Educación puso énfasis ante la Comisión de Presupuesto en la necesidad de evaluar, como así también capacitar a los docentes. Sobre las universidades, dijo que el presupuesto le destina 2/3 de las partidas de su secretaría.
En la cuarta reunión informativa de la Comisión de Presupuesto que analiza la ley de leyes para el próximo año, fue el turno este jueves del tema educativo. Se presentó entonces el secretario de Educación de la Nación, Carlos Torrendell, quien en su exposición inicial habló de “un cambio de paradigma que tiene que ver con la política del Gobierno nacional y del Ministerio de Capital Humano, centrado en pasar de una concepción del derecho y deber a la educación de una forma abstracta y declamatoria, a la concepción de un derecho a la educación que se centre en aprendizajes reales para todo; enhebrar simultáneamente una mayor libertad educativa, lograr mayor aprendizaje y trabajar como un sistema y una red atomizada de individuos e instituciones y funcionarios”.
Torrendell habló de “una política educativa focalizada en los aprendizajes. Eso a su vez implica pasar del concepto del Estado educador a la sociedad educadora”, dijo, y remarcó la necesidad de contar con una “presencia del Estado, pero de manera más integrada, respetuosa y participativa, para lograr, como se ha hecho en muchos países, un entramado que permita los aprendizajes”.
“En Argentina también eso conlleva una política educativa federal y participativa”, dijo, resaltando que desde diciembre esta administración ha logrado, “en un diálogo muy consistente con las provincias, consenso y unanimidad, en particular en políticas de alfabetización, obras prioritarias y convenios específicos”.
Torrendell sostuvo que “la clave está en no distraernos con otras cuestiones, sino concentrarnos en generar las condiciones para que nuestros chicos logren efectivamente el aprendizaje”.
El secretario citó por educación básica la inicial, primaria y secundaria. Tres niveles sobre los que hay tres ejes fundamentales de trabajo que expresan las ideas del Gobierno en esa área. Remarcó la necesidad de “centrarnos en primer lugar en la alfabetización”, reconociendo que según los resultados nacionales y regionales, nuestro país tiene “un desafío grande”. Por eso, “el Ministerio de Capital Humano definió esta política como central. Y los organismos internacionales han reconocido que este es un trabajo potente, con créditos cercanos a 900 millones de dólares para respaldar lo asignado por el ministerio”.
Torrendell citó una línea nueva de alfabetización “que contiene un financiamiento este año cercano a los 700 mil millones. Destinadas a la gestión educativa, 600 mil millones, y otras líneas del Presupuesto que se suman a esta preocupación por la educación básica”.
El segundo elemento clave que citó el funcionario es la “evaluación y conectividad”. Para hacerlo, dijo, se necesita “un sistema que en línea pueda proveer información a los distintos funcionarios, provincias y Nación, pero fundamentalmente a los directores y docentes. Implica tener un sistema en línea que provea esa información a todos”.
“No va a haber aprendizaje y alfabetización si no la respaldamos con el uso de información adecuada para la mejora de cada escuela y esquemas provinciales”, agregó, para citar por último “el uso inteligente de la inversión, con un cambio de paradigma, de manera de pasar de distribuir recursos de forma atrasada a hacerlo al finalizar cada mes, o los primeros 2 o 3 días hábiles del mes que sigue”. Así, señaló, se garantiza “un manejo eficiente”. Y remarcó que “eso que puede parecer no relevante, se ha convertido en una marca de la gestión. La transferencia como corresponde de todos los recursos a las provincias y universidades”. Para Torrendell, “es clave para que este sistema funcione, la transparencia, rendición de cuentas y superación de un paradigma de que esos recursos se distribuían sin mayor vinculación con la evaluación. No podemos saber si muchos de los recursos han tenido algún impacto en el aprendizaje, porque no se ha evaluado. Ahí tenemos otro demérito que tenemos que cambiar”.
Carlos Torrendell dijo que en la inversión en educación tradicional, “tiene estas características: una inversión que no es productiva en materia de aprendizajes”. Al respecto, observó que si se analiza la curva de inversión con el aprendizaje, la Argentina está teniendo resultados inferiores al promedio. “Eso ha implicado que esos recursos no están orientados a buenos resultados de aprendizaje, sino que se han invertido en otras acciones, y no han tenido tanto impacto educativo específico”.
“También ha habido una inversión dispersa”, reconoció, por lo que se han agrupado líneas de presupuesto, dijo, de manera de ordenar mejor la forma de invertir los recursos.
Habló después de un problema de “inequidad”, y se basó en “estudios que evidencian que debajo del concepto de educación pública nos encontramos con una fuerte inversión inequitativa en los recursos de educación. Le estamos dando más recursos a los alumnos que más tienen”, reconoció, por lo que aseguró que “estamos orientados a corregir” esa situación. Al respecto, hizo hincapié en el problema del malgasto: “Veníamos pagando 300 dólares por conexión a las escuelas, cuando podrían reducirse fuertemente, y estamos generando un sistema de financiamiento por escuela, de tal manera de poder gastar en conectividad por lo menos 4 veces menos que lo que venía gastándose”.
Al llegar al tema de las universidades, Torrendell dijo que el presupuesto destinado a las mismas equivale a 2/3 de la secretaría que él conduce. “Casi unos 4 billones de pesos invertidos en materia de universidades. Y tres ejes fundamentales que nos preocupan, que tienen que ver de nuevo con centrarnos en el logro de los aprendizajes, la verdadera inclusión de los estudiantes, y finalmente que se gradúen, que es el desafío de las universidades en la Argentina”.
“Hay un trabajo fuerte que se ha iniciado en materia de información sobre las universidades, por el que el Gobierno va a acompañar, en diálogo con ellas, para mejorar la gestión, de tal manera de lograr la consolidación de los alumnos matriculados, saber qué está sucediendo con ellos, conocer sus trayectorias y lograr que se gradúen”, planteó. Y tercero, continuó, “tenemos que lograr una mayor objetivación de los recursos en educación; inversión inteligente, y hacer notar que en el gasto primario de presupuesto nacional, el gasto universitario pasó del quinto al tercer lugar. Cerca de 4 puntos del presupuesto, y hay un desafío para poder administrarlo correctamente y lograr que los resultados de aprendizaje se puedan concretar”.
El funcionario enfatizó en el “compromiso del Gobierno” para un afianciamiento de la educación superior. Y llegó a la política salarial, que “deberá continuar debatiéndose y continuar el diálogo como se ha tenido con las universidades, manteniendo la premisa del déficit cero”.
Sobre el final de su exposición, Torrendell insistió en poner a la alfabetización como “prioridad”, lo que redundaría en una “mayor equidad educativa”. “Tenemos que lograr eso”, enfatizó, alertando sobre los “malos resultados”, en los que llamó a consolidar el foco de la política educativa. “Aproximadamente la mitad del abandono en los niveles secundarios se explica por los malos aprendizajes en el nivel primario”, garantizó.
Por eso aseguró que “vamos a concentrarnos en dirigir recursos en la capacitación de los docentes”, y habló de abonarles a los docentes “en función de la capacitación”. Ese pago por capacitación “va a estar vinculado con este punto”.
“Hemos apostado fuerte a la política de más horas y jornada extendida, y focalizar en la alfabetización”, dijo, pero aclaró que hablaba de más tiempo en las escuelas, pero dirigido a los aprendizajes. “Más tiempo solo no es suficiente, si no está focalizado en los aprendizajes”, dijo, insistiendo en que todo debe ser acompañado por la evaluación.
Torrendell cerró insistiendo en que “la política de alfabetización es transversal”, y remarcó el desafío para todos los niveles “implica un foco importante en primer grado y desde allí se va expandiendo”.
“La educación es un elemento clave dentro de la política del Gobierno; no se trata de sumar recursos, sino de invertirlos para que efectivamente sean equitativos y logren que los chicos aprendan”, concluyó el secretario de Educación.
Al ser consultado por la diputada Danya Tavela sobre las políticas que se van a llevar adelante y los cambios en los números presupuestarios, el secretario de Educación sostuvo: "Hay un desafío planteado con el presupuesto actual que es que con relación al presupuesto vigente que da unos 3 billones para universidades con los últimos aumentos otorgados más la garantía, efectivamente vamos a concluir el año gastando unos 3,3 billones según lo proyectado hasta el momento”.
“El presupuesto actual va a requerir una reasignación específica, lo cual muestra, con las limitaciones que impone, el cuidado del déficit cero, dentro de ese contexto ya para el año que viene se está planteando cerca de 4 billones para universidades", explicó y consideró que el Congreso "tiene la oportunidad de, respetando el marco de déficit cero que va a permitir un crecimiento verdadero para todos, estudiar qué partidas se pueden reasignar. Efectivamente puede ampliarse el presupuesto universitario sobre la base de los análisis que, con seriedad, encararán ustedes”.
"Hay un presupuesto enviado en épocas de inflación y lo que hay que hacer es hacer esa reasignación para poder llegar a salarios que vayan subiendo constantemente para poder mejorar esa situación laboral con el tiempo. En ese sentido la propuesta planteada tiene esa lógica", respondió sobre la problemática salarial.
Torrendell afirmó: "Es un desafío arduo y positivo ver cómo invertimos en educación para lograr los resultados. Tenemos que lograr simultáneamente dos cosas, por un lado, distribuir los recursos de tal manera de evitar intermediarios y dirigir los recursos a los agentes que pueden tomar mejores decisiones para supervisar esa asignación, y una distribución con criterios de evaluación y de implementación".
"No es lo mismo desarrollar un presupuesto en un contexto de emisión y deuda que en uno de déficit cero, por lo que hay que gobernar mejor los recursos por lo que no es un maquillaje, lo que puede ser un maquillaje es presentar en el presupuesto más recursos para educación y luego no invertirlos en que los chicos aprendan, maquillajes hubo de forma abundante sub ejecutando el gasto. Ahora estamos desarrollando una política a cara lavada lo que queremos es resolver los problemas de nuestros alumnos", comparó.