El líder de La Cámpora recordó que hay ministros de su agrupación dentro del gabinete provincial. No obstante, le cuestionó al mandatario bonaerense no haber apoyado a su madre en la interna del PJ.
Tras el frío reencuentro entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof, el diputado Máximo Kirchner se refirió a la caliente interna por la conducción del Partido Justicialista, y lamentó que desde la provincia de Buenos Aires haya habido avales para Ricardo Quintela, quien el próximo 17 de noviembre competirá contra su madre.
Aunque aclaró que no lo tomaba como una "traición", consideró: "No se hacen esas cosas, no está bien, tenés que tener motivos políticos y tienen que ser ciertos. No les va a salir bien así. Ya pasó con Alberto (Fernández), que empezó a pensar en él mismo".
"Cristina por Axel tenía una debilidad enorme", agregó el líder de La Cámpora, al tiempo que negó estar detrás de una estrategia para "limar" al gobernador bonaerense. "Todo este tema no lo entiendo. Hay un método político del off, de operar sobre sectores del periodismo que por ahí son más permeables. Limar significa además un método constante, diario. Yo no estoy todo el día arriba de eso. Me parece que es al revés", expresó.
Además, el legislador recordó que en el gabinete provincial hay ministros de su espacio, sobre los que "el gobernador manifestó su alegría y conformidad".
Respecto del PJ Nacional, el hijo del exmatrimonio presidencial afirmó: “Si hay elecciones, se votará y punto. El que esté convencido de que Quintela es una salida por cómo gobierna La Rioja, irá por ese lado, con un hombre de 66-67 años. Y estamos los que entendemos que Cristina es la mejor para el momento”. Al ser consultado en Radio 10 por Jorge Rial sobre por qué cree que CFK se postula, respondió que "ella va viendo una ausencia de consistencia en cómo discutir el gobierno de (Javier) Milei".
Haciendo memoria sobre su rechazo al acuerdo con el FMI durante la gestión del Frente de Todos, lanzó: "Muchos de los que me decían que quería el default hoy acompañan al gobernador que está en estado de default en La Rioja. Cuestión que yo no critico ni nada, pero a mí casi me matan por eso".
Y recordó que el día de la sesión en la Cámara baja, cuando se dio la protesta en contra del FMI en las afueras del Congreso, las piedras llegaron hasta el despacho de su madre, en ese momento presidenta del Senado. "¿A nadie le llama la atención esas cosas? ¿A ella se le puede hacer cualquier cosa? ¿E incluso se puede llegar a dudar entre ella y Quintela? Vamos. Yo creo hay que ser más maduros, hay que mirarse menos a uno mismo, y a estar más tranquilo que buenos compañeros y compañeras para dar la pelea. No hay que tener tanta desconfianza y paranoia".
En otro tramo de la extensa entrevista, el diputado observó que "el federalismo es una cosa y el provincialismo es otra. Yo creo que estamos en una etapa de provincialismos, no de federalismo. El federalismo implica no sólo resguardar los intereses de tu provincia sino del conjunto. Hoy hay provincias que resuelven en función de sus intereses y chau pinela".