Desde Unión por la Patria (UP) impulsaron una iniciativa en la que buscarán manifestar su “más profunda preocupación y su enérgico repudio” por las agresiones que sufrió una pareja de lesbianas.
Los legisladores de Unión por la Patria (UP) presentaron en la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires un proyecto de declaración mediante el cuál prevén expresar su “más profunda preocupación y su enérgico repudio” por un nuevo ataque de lesboodio producido el pasado 5 de febrero contra una pareja de lesbianas de 24 y 26 años que caminaban de la mano en el barrio de Recoleta.
En los fundamentos de la iniciativa, los peronistas precisaron que el ataque fue producido por un hombre, quien interceptó a la pareja y realizó comentarios despectivos sobre su vestimenta, su orientación sexual y las golpeó. Una de las mujeres quedó inconsciente y le provocó fractura nasal y de un diente, contusiones en la cabeza y lesiones en la nuca. Mientras que su pareja fue golpeada cuando el agresor intentaba huir dejándole heridas en su mano. La Fiscalía a cargo del caso lo caratuló como lesiones graves.
“Es importante destacar que registrar los crímenes de odio contra la comunidad LGBTIQ+ presenta desafíos significativos. En muchos casos, las personas trans asesinadas no son registradas con su identidad de género autopercibida, y los crímenes contra lesbianas, gays, bisexuales y personas con identidades no hegemónicas a menudo no son visibilizadas como tales. Por el contrario, en numerosas ocasiones, se oculta la orientación sexual y la pertenencia a esta comunidad, lo que dificulta la documentación y el abordaje integral de estas violencias”, advirtieron los diputados.
Al mismo tiempo que indicaron que “esta situación se da en un contexto en el que el presidente de la Nación, Javier Milei, utilizó su participación en el Foro Económico Mundial de Davos, el 23 de enero de 2025, para esgrimir un discurso atacando al feminismo, la diversidad, la inclusión, la equidad, la inmigración, el aborto, el ecologismo, entre otros temas” y recordaron que “en su intervención, el presidente afirmó que el feminismo radical es una ‘distorsión del concepto de igualdad’ y que la agenda LGBTIQ+ busca ‘imponer que las mujeres son hombres y los hombres son mujeres’. Además, realizó una analogía entre la comunidad LGBTIQ+ y la pedofilia, afirmando que ‘en sus versiones más extremas, la ideología de género constituye lisa y llanamente abuso infantil’”.
“La instalación progresiva de discursos de odio de parte de diferentes sectores, pero principalmente de parte de representantes del Gobierno Nacional y del Ejecutivo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, no solo refuerza prejuicios preexistentes, sino que también fomenta la discriminación, el acoso y la violencia que diariamente sufren las personas del colectivo LGBTIQ+. Esta realidad se agrava cuando estos discursos son replicados en espacios públicos y redes sociales, normalizando expresiones homotransodiantes y la violencia simbólica y física en la vida cotidiana”, aseveraron.
Por lo que concluyeron señalando que “es innegable que las agresiones contra las personas LGBTIQ+ han crecido exponencialmente y esto no es producto del azar, sino la consecuencia directa de la eliminación de políticas públicas destinadas a prevenir la discriminación y proteger los derechos del colectivo. Cuando el discurso de odio se convierte en una postura legitimada desde el Estado, sus efectos son devastadores: mayor exclusión, mayor vulnerabilidad y más violencia”.