Tan solo votar el plan de labor y luego una moción para suspender las sesión se llevaron largos minutos en los que los diputados se dijeron de todo. “¡No me dés indicaciones de lo que tengo que hacer con mi bloque!”, le gritó un exaltado Germán Martínez a Martín Menem.
El primer choque de una sesión caliente como la de este miércoles en Diputados se dio en el inicio de la sesión, cuando se tuvo que votar el plan de labor para la sesión. Fue leído por el secretario Parlamentario y el mismo establecía los tiempos de oratoria de cada bloque y un cambio de horario para la reunión de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Peticiones Poderes y Reglamento, para tratar la creación de una comisión investigadora, para las 17; y la de Asuntos Constitucionales, Finanzas y Justicia, para las 18, en ambos casos para dictaminar sobre temas de la causa $Libra. El horario previsto para la oposición era a las 16.
Intervino entonces la secretaria Parlamentaria de UP, Paula Penacca, para señalar que la propuesta era “imprecisa”, no quedando claro cuánto tiempo podían hacer uso de la palabra, y cuándo se podía hacer uso de las cuestiones de privilegio también. “Yo no voto cosas que no sé qué son”, dijo la diputada camporista, tras lo cual el secretario Parlamentario Adrián Pagán detalló los tiempos que tendría cada bloque.
A su turno, el jefe del bloque Germán Martínez aclaró que no habían acordado nada con ese plan de labor. “Creemos que el tema tiene una envergadura tal que no puede haber limitante en el uso de la palabra. Entiendo que algunos pueden estar culposos, pero estos temas merecen un debate a fondo, lo expresamos en Labor Parlamentario”, señaló el santafesino, recordando que en la sesión de la semana pasada había habido “un escándalo de diputados trompeando y levantando por la fuerza a otros diputados, y otros tirándose agua. Y el resto mirando como si nada sucediera”.
Martín Menem le advirtió que le estaba quitando tiempo a su bloque, generando la airada reacción de Martínez, quien dejó de lado las formas y lanzó: ¿¿Qué tiempo le estoy quitando a mi bloque?? ¡Vení a laburar!”. El presidente de la Cámara le advirtió que lo llamaría al orden. “¡Llamame al orden! ¡Llamalo a (Lisandro) Almirón, que cagó a trompadas a un diputado! Queremos plantear al inicio los temas que quedaron pendientes y no vamos a acompañar este plan de labor”.
A continuación, Nicolás del Caño estalló, para quejarse entre otras cosas de la presencia de miles de efectivos federales y reclamando un cuarto intermedio, porque “no se puede sesionar con la militarización y la represión que están preparando”.
Desde el Pro, Silvana Giudici intentó poner orden. “Quiero decirle a la izquierda que grita y a los de Unión por la Patria que insultan, que la verdadera violencia surge cuando no tienen el acompañamiento de los votos”, señaló, asegurando que el plan de labor anunciado “no cercena la palabra a nadie”, y negó irregularidades la semana anterior respecto del quórum. Cerró recordando que habría dos plenarios también durante la tarde y luego había una sesión pedida por UP para las 19. “Así que va a haber todo el día para hablar”.
Como dije en el inicio de la sesión, quieren aplicar la violencia afuera y adentro del recinto. “Por más que siembren vientos no cosecharán tempestades” pic.twitter.com/FoUE7rhbXW
— Silvana Giudici (@SilvanaGiudici) March 19, 2025
El plan de labor fue aprobado por 141 votos a favor y 95 en contra, tras lo cual no se dio por vencida Cecilia Moreau reclamando a los gritos que no se podía obviar votar la moción presentada por Del Caño. Y ante las explicaciones de Martín Menem, la extitular de la Cámara perdió las formas: “A mí no me pelotudeés”, le espetó al riojano, que al pedirle a Germán Martínez que pusiera orden en su bloque lo hizo estallar: “¡Venís de hacer un papelón la semana pasada, así que no me dés indicaciones con lo que tengo que hacer con mi bloque!”.
El presidente de la Cámara trató de mantener la calma pidiendo a todos dirigirse con respeto. “No me tutees”, le acotó personalmente a Martínez.
Y concedió la posibilidad de votar la moción de Del Caño, que precisó que su moción consistía en ir a un cuarto intermedio que se extendiera hasta que se fueran las fuerzas del orden de alrededor del Congreso. Ante el pedido puntual de dar un horario concreto para el cuarto intermedio, Vanesa Biasi se sumó reclamando que se extendiera al menos hasta las 16.
La moción fue rechazad por 143 votos contra 93 y 3 abstenciones.