La reunión de la Comisión de Legislación del Trabajo comenzó con un reclamo de la diputada Marcela Pagano. Dos integrantes de UP se fueron en medio de la reunión. Cuándo serán las próximas informativas.
Foto: HCDN
Con una sala 4 notoriamente vacía, se llevó a cabo una nueva reunión informativa de la Comisión de Legislación del Trabajo para continuar con el debate de los proyectos de ley relacionados a las cotizaciones ordinarias y extraordinarias, y contribuciones de solidaridad contempladas en las leyes 14.250 y 23.551.
El encuentro estuvo encabezado por el presidente de la comisión, Martín Tetaz, quien en el comienzo alertó sobre un retraso por parte de los expositores. En ese momento, la diputada oficialista Marcela Pagano denunció que el personal de seguridad retrasó el ingreso de los invitados en la planta baja del anexo del Palacio Legislativo.
Una vez que la reunión comenzó, Sergio Palazzo, en representación de Unión por la Patria, propuso que “si este tratamiento tiene alta relevancia, deberíamos tomarnos el tiempo necesario y no hacer las cosas a las apuradas”. Estuvo acompañado por Mario Manrique y Vanesa Siley, quienes en medio del debate se retiraron de la sala.
El primer expositor de la jornada fue Juan Manuel Ottaviano, abogado laboralista e investigador del CETyD y de FUNDAR. Al referirse a los proyectos de ley en cuestión consideró que proponen “limitar la negociación colectiva e incluso prohibirla”. En una síntesis general de su parecer, señaló que “no puedo omitir que (Federico) Sturzenegger planteó que el objetivo de las reformas es empobrecer a los sindicatos”.
Además, sostuvo que estos cambios tienen buscan el “debilitamiento de los recursos para ir por el debilitamiento de la negociación colectiva que significaría menos cobertura (para los trabajadores)”. Comparó con datos actuales y detalló que “por este modelo de negociación -el vigente-, Argentina sigue siendo un país con alta tasa de sindicalización”.
Definidamente en contra de los que estos textos proponen, Ottaviano expresó que “vamos a estar rompiendo uno de los pocos sistemas que funciona bien”, y reiteró que se trata de un “debilitamiento de los recursos donde el único resultado es una mayor desigualdad entre los representados”.

Ottaviano fue uno de los invitados de Unión por la Patria.
Entre los titulares de las cátedras de Derecho del Trabajo de la UBA, estuvo Pablo Topet. Además de mostrarse crítico de las propuestas de la reunión, también remarcó que la “la libertad sindical negativa es lo que vi en los proyectos”. Luego, defenestró a los autores cuando llamó al contenido de los proyectos de “pobreza de fundamentos” y que “no hubo esfuerzo en la redacción”.
En representación de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM), estuvo Armando Farina quien fue el principal expositor a favor del espíritu de los proyectos. “Escucho hablar de derechos y libertad sindical, pero no escucho a hablar de los derechos de los dueños del fondo”, arrancó.
Luego, esgrimió que “no todos los trabajadores simples tienen contacto con un abogado” haciendo referencia a reclamos judiciales por los descuentos en recibos de sueldo bajo el concepto de aporte solidario sindical. En ese punto, sumó: “Pedimos que el verdadero derecho lo tenga la persona que genera esos fondos”.
Destacado por ser el principal defensor de la reforma, Farina definió que “no hay nada más limpio que acreditarle al trabajador todo el monto de sus haberes en su cuenta sueldo”. Reiteró, además, que “el trabajador sea el que disponga qué se hace con sus fondos”.
Cuestionado desde Unión por la Patria, Pablo Mosca, especialista en Derecho Laboral Docente, manifestó: “Proponemos que, si no se avanza con los proyectos, que la cuota esté negociada por convenios colectivos y con tiempo de vigencia, debe tener causa y debe estar limitada a un sistema de ultraactividad”.
Previo a esto, señaló que “el sistema sindical merece modernización” y cuestionó: “sostenemos que los aportes solidarios son aportes compulsivos, son cargas y afectan a trabajadores en el 4%”. “Nos parece que la afiliación compulsiva trae aparejado un avasallamiento de la libertad sindical”, enfatizó.
Invitado por Pagano, Nicolás Vaccaneo detalló que los aportes solidarios sindicales llegan hasta los “$5.500 por trabajador”, y sostuvo que “se suma a los precios de venta y le da menor poder de compra al consumidor final”.
El último en exponer fue Juan Poccard de la Cámara de Supermercados Mayoristas, quien brevemente avaló los propuesto en los proyectos de ley para beneficiar la “transparencia en los recibos de sueldo”. “Que cada trabajador decida que quiere hacer con su dinero”, concluyó.
Tras la intervención de los invitados, Palazzo le recordó a Tetaz que habían quedado expositores que no pudieron asistir a esta reunión. El presidente de la Comisión de Legislación del Trabajo confirmó que van a estar convocados en la próxima reunión con fecha para el martes 15 por la mañana.