La provincia se posiciona como el principal destino para inversiones en litio, con propuestas que suman US$ 3.630 millones. Entre los proyectos destacados se encuentran Rincón, Sal de Oro y Mariana.
La minería del litio, crucial para la transición energética y el crecimiento de la electromovilidad, ha concentrado la mayor parte de las solicitudes de acceso al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), presentado al Ministerio de Economía. Desde que el régimen fue reglamentado en octubre de 2024, una decena de empresas, tanto nacionales como extranjeras, ha solicitado ingresar al esquema de estímulos fiscales, arancelarios y cambiarios, con inversiones comprometidas que superan los 12.000 millones de dólares.
La minería, las energías renovables y el desarrollo de Vaca Muerta (en la Cuenca Neuquina) son los sectores que más iniciativas están atrayendo. En particular, se destacan seis proyectos mineros con inversiones por 5.074 millones de dólares en las provincias de Salta, Catamarca y San Juan. Cuatro de estos proyectos están centrados en la expansión de la producción de litio en la región de la Puna, en el noroeste argentino, y tres de ellos se desarrollan en el departamento Los Andes, en Salta, con un total de 3.630 millones de dólares en inversiones previstas.
Uno de los proyectos más relevantes es el del grupo anglo-australiano Río Tinto, que a través de su filial Rincón Mining planea comenzar a exportar litio de grado batería en 2028, con una producción estimada de 60.000 toneladas anuales. Con una inversión de 2.724 millones de dólares, este proyecto incluirá la construcción de varias plantas en el Salar de Rincón, ubicado en el extremo oeste de la Puna salteña, en un área de 30.000 hectáreas con importantes reservas de litio. La vida útil estimada de la operación es de 43 años.
Otro proyecto destacado es el de Sal de Oro, impulsado por el conglomerado surcoreano Posco en el Salar del Hombre Muerto, en la zona de cooperación entre Salta y Catamarca. Posco ha solicitado un incentivo de 1.000 millones de dólares para establecer plantas de fosfato, hidróxido y carbonato de litio, con el objetivo de abastecer la creciente demanda de baterías eléctricas. En octubre de 2024, la empresa inauguró la primera planta comercial de hidróxido de litio en el Parque Industrial de General Güemes, con una capacidad de producción de 25.000 toneladas anuales.
También en Salta, el proyecto Mariana, desarrollado por el gigante chino Ganfeng y operado por Litio Minera Argentina en el Salar de Llullaillaco, ha generado interés. En febrero de este año, Ganfeng anunció el inicio de la producción de cloruro de litio, con una planta en el Parque Industrial de General Güemes que tendrá una capacidad de 20.000 toneladas anuales. La inversión comprometida en el marco del RIGI asciende a 273 millones de dólares.
El RIGI, que tiene como objetivo atraer inversiones de largo plazo con alto impacto exportador, ofrece una serie de incentivos, incluyendo reducciones fiscales y aduaneras, acceso gradual a la libre disponibilidad de divisas, y exenciones en derechos de importación y exportación. Para acceder a estos beneficios, los proyectos deben superar los 200 millones de dólares en inversiones y cumplir con ciertos plazos de desembolso. La eliminación del cepo cambiario recientemente ha facilitado aún más el acceso a divisas, lo que ha impulsado el interés de los inversores internacionales.
En resumen, Salta se perfila como el epicentro de las grandes inversiones en litio en Argentina, con proyectos que no solo promueven la minería, sino que también están alineados con las demandas globales de energías limpias y tecnologías sostenibles.