Este sistema, con una capacidad de avales equivalente al 0,5% del PBI, respalda a más de 30.000 empresas que emplean a medio millón de personas y generan exportaciones por USD 1.390 millones.
El acceso al crédito sigue siendo uno de los principales desafíos para las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) en Argentina. Sin embargo, las Sociedades de Garantía Recíproca (SGR) se han consolidado como un actor clave en el acompañamiento financiero de este sector: actualmente, 1 de cada 3 créditos bancarios otorgados a MiPyMEs cuenta con el aval de una SGR.
Según cifras difundidas por la Cámara Argentina de Sociedades y Fondos de Garantía (CASFOG) en el marco del Día de las Pymes, el sistema SGR alcanza hoy una capacidad de emisión de avales por más de USD 3.400 millones, lo que equivale al 0,5% del PBI. Esta herramienta financiera permite a las empresas acceder a mejores condiciones crediticias, facilitando tasas más competitivas y mayores plazos de financiación.
“Las SGR representan una parte significativa del crédito al sector privado y se han convertido en una palanca esencial para dinamizar el financiamiento productivo en la economía real”, señaló Martín Apaz, presidente de CASFOG. El impacto es notorio: el 70% de las compañías asistidas son micro y pequeñas empresas, abarcando más de 30.000 unidades productivas en todo el país.
Además de mejorar el acceso al crédito, las firmas avaladas emplean en conjunto a más de 500.000 personas y generan exportaciones por más de USD 1.390 millones, con un fuerte predominio de los sectores industrial (73%) y comercial (19%).
El sistema de SGR trabaja con 38 bancos (72% privados y 28% públicos) y con el mercado de capitales, lo que multiplica sus canales de financiamiento. Solo en mayo, había más de 121.000 garantías vigentes: el 52% asociadas a crédito bancario y el 48% restante vinculadas al mercado de valores.