El periodista hace un balance de la interna del peronismo, donde por un lado está Cristina Kirchner y La Cámpora, y del otro el gobernador Axel kicillof y los intendentes de la provincia de Buenos Aires.
Vacilando, pero con un susurro ensordecedor, empezaron a cuestionar tanto a CFK al frente del Partido como a su hijo al frente del PJ Provincial. Distintos sectores piden internas y cambio de reglas de juego, volver a las bases, dejar esta cofradía teñida de corrupción que funciona solo a los intereses propios y no de la libertad democrática dentro del Movimiento Nacional Justicialista. ¡¡Basta del Patria!! Mezquinos, perversos, incumplidores…
Hartos de los caprichos, los peores momentos políticos de esta etapa democrática, donde se rompieron todas las reglas, no dejaron una por violar, se armaron las peores listas de la historia, no disimularon una. El kirchnerismo nunca fue síntesis de todas las corrientes peronistas, por el contrario.
Kicillof le dio el puntapié final a este espacio, La Cámpora y los sectores sociales, piqueteros y el rezago setentista, a los que nunca se les pidió opinión; la historia dará cuenta del accionar y el “modus operandi” de estos personajes. Ella entiende que el resultado del desdoblamiento acelero la decisión de los jueces y que no llegue a los fueros...
Acusaciones personales entre Axel, Máximo y Cristina, que el domingo trágico bailaba con una sonrisa como aquel boxeador que acusa el golpe con una sonrisa y negando con la cabeza que no dolió. Ya les perdieron el miedo, no asustan, solo buscan fueros y estar siempre los mismos en todos los cargos y en todas las listas.
Los “pibitos” que antes marchaban por Néstor y Cristina buscan nuevos rumbos o un pasaje de ida a nuevos horizontes.
El tiempo por venir mostrará si Axel Kicillof romperá definitivamente con el resto y hará los cambios de gabinete que marquen límites, echando a los ministros que responden a Máximo, al Frente Renovador y al PJ más tradicional. Tendrá, como se dice, “los huevos” para patear el tablero definitivamente o seguirá invadido por la cobardía.
El PJ que avanza por el camino de la UCR, la fragmentación lo está haciendo desaparecer; la ruptura es inevitable; el hijo putativo y el de sangre compiten por el amor de mamá Cristina. La fractura de este modelo de alianza en que se convirtió el PJ es funcional al León, que aprovecha y avanza la oportunidad de poner en primer plano a la “estupidez e incapacidad”.
Los intendentes, pragmáticos y especialistas en sobrevivir, ya ensayan discursos de renovación con el mismo fervor con que piden fondos, algunos para poner la guita en plazos fijos. Además, buscan terminales con los libertarios por las dudas. Señales de que ya todo puede ser violeta. Los gobernadores hacen equilibrio entre la lealtad y la conveniencia.
Deben venir nuevos tiempos, nuevas oportunidades con nuevos nombres y apellidos, otros protagonistas. Algunos jóvenes dirigentes fueron surgiendo con éxito, tal el caso de Leo Nardini, Federico Achaval. Sin olvidar al último barón del conurbano, como Mario Ishii, que sigue ganando elecciones en su distrito, ya van 44 . Otras voces hablan de que podría volver Sergio Massa, que también mira la gobernación con entusiasmo; más de lo mismo.
También hay dirigentes como Luis Vivona, que hizo una brillante gestión al frente de la Vicepresidencia del Senado en la provincia.
¿A dónde fue a parar la lealtad que en la play perdió a manos de la traición…?
La historia juzgará los grandes errores políticos del kirchnerismo; la juaga magistral de elegir al “golpeador” de Alberto Fernández, CFK como conducción del peronismo y Axel, como el peor gobernador de la historia, que con tristeza lo miran como la única alternativa para presidente.