Mayans cerró con críticas al Gobierno anterior y reconociendo que su bloque se dividía ante este tema

“Vamos a ver qué nivel de consenso tenemos”, dijo antes de la votación, en un discurso en el que admitió que hasta ahora no habían logrado volver mejores.

El presidente del bloque Frente de Todos, José Mayans, cerró el debate del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional con un discurso en el que resaltó el entendimiento alcanzado en la Cámara baja que permitió la media sanción. Destacó en ese sentido que durante el debate en esa Cámara hubo un fuerte respaldo cegetista, empresarial y hasta de gobernadores, del que destacó especialmente el papel de Gerardo Morales.

“Esta deuda la hicimos nosotros”, recordó que dijo Gerardo Morales en ese contexto, y resaltó que “eso se llama sensatez”.

Fiel a su estilo, Mayans se refirió a continuación al contexto internacional, en referencia a la guerra en Ucrania. Así las cosas, advirtió que “a veces pasa el efecto retardado”, y comparó con el caso del Covid. Para eso tenemos vacunas, destacó.

Mayans recordó una conversación que tuvo con Cristina Kirchner sobre el endeudamiento y dijo que ella le advirtió que lo veía como “un problema grave”. “Comparto lo que dijo la senadora por Córdoba, que dice que ‘cuando miramos el  pasado debe ser con una visión constructiva’”, señaló el formoseño, que pidió aprender del  pasado.

“Acá confrontan evidentemente dos modelos”, aseguró, para recordar luego que el gobierno de Cristina Kirchner terminó con un PBI de 600 mil millones de dólares, mientras que la deuda era de 222 mil millones de dólares, señaló, cosa que corroboró con Alfonso Prat-Gay, recordó.

Dio otras referencias positivas, como el valor del Fondo de Garantías Sustentables de los tiempos de CFK, en tanto que el cumplimiento de los pagos de la deuda era de 10 mil millones de dólares, con una inflación de 24% presupuestada, señaló en referencia a lo que definió como “nuestro gobierno populista”.

Contrastó con el Gobierno de Cambiemos, al que criticó, recordando la pronosticada “lluvia de dólares” (en realidad Cambiemos hablaba de “inversiones”). Ese otro modelo, al que llamó “Terminator mejorado”, dijo que trajo un “sinceramiento cambiario” al que definió en realidad como “brutal devaluación”. Señaló entonces que el tipo de cambio oficial era $9,78.

“Después estaba el otro tema de los servicios”, señaló y aseguró que “dolarizaron los servicios diciendo que ahora no va a haber más pérdida”. “Más vale que no”, enfatizó el presidente del bloque oficialista, asegurando que una empresa “amiga de Macri” ganó 3.000 millones de dólares en el primer trimestre. Su discurso devino en el tarifazo y recordó el impacto de los aumentos en las empresas y los trabajadores.

“¿Cómo pretende que un trabajador, o una PyME, pague en dólares cuando cobra en pesos?”, se preguntó, señalando por último la cuarta medida cuestionada: la libre importación.

Mayans cuestionó la “bicicleta financiera” y en ese marco tildó de “mentiroso” a Alfonso Prat-Gay, que fue echado por Macri por esa razón. Tras las elecciones, que ganó Cambiemos, dijo, “comenzó a zozobrar el barco”.

“Después vino el default en pesos”, afirmó Mayans, considerando que este fue el primer país del mundo en experimentar una situación así, ante lo cual esa administración habló de “reperfilar” la deuda.

La emprendió a continuación contra la debacle del sistema previsional: 500 millones de déficit, alertó. “Ni Mandrake, ni el Mago Fafá arreglan eso”, ironizó, para señalar luego que la pobreza terminó en el 40% y la inflación en el 54%.

“¿Ustedes no pueden hacer una reflexión sobre cómo nos dejaron el gobierno?”, preguntó el jefe del bloque FdT, despertando la reacción desde Juntos por el Cambio.

En otro pasaje se preguntó quién había hecho el crédito: ¿el FMI o el presidente de Estados Unidos? “Esto fue un crédito político”, sostuvo, preguntándose si había sido para mejorar la producción. “No, le dieron para la usura”, se contestó, asegurando que Mauricio Macri dejó el pagaré.

Mencionó luego al diputado José Luis Espert, al que definió como “un criminal”. “Que me diga Espert de dónde recorta… El come todos los días, se ve”, ironizó, alertando que el gasto social no puede ser restringido.

Se quejó entonces de que la oposición no hubiera votado el presupuesto. “¿Nosotros qué estamos haciendo? Ver cómo podemos hacer para atrasar esto”, señaló en referencia a los pagos de la deuda.

“Tenés deuda por 366 mil millones de dólares”, admitió, compartiendo con el senador Alfredo Cornejo que “a este país lo arreglamos entre todos”.

Sobre el final despertó sonrisas al reconocer que “nosotros dijimos que volvíamos para ser mejores… Hasta ahora no lo logramos”.

Pero advirtió a la  oposición que si vuelven no hagan como dijo Macri: hacer lo mismo, pero más rápido. “Ahí no hay quien los supera”, advirtió.

Mayans terminó destacando el entendimiento alcanzado. “Este país merece que le vaya bien. Hubo mala praxis y la mala praxis es 366 mil palos, más las Leliq. Ojalá podamos pagar eso”, dijo, y concluyó reconociendo que “hay gente nuestra que no quiere pagar eso. Mi bloque va dividido el bloque, por eso señora vamos a ver qué nivel de consenso que tenemos”.

Fiad instó al oficialismo a dejar de lado sus internas y gobernar

Al intervenir durante el debate por el acuerdo con el Fondo, el senador jujeño sugirió al Gobierno nacional seguir el ejemplo de su provincia y su gobernador.

El senador nacional por Jujuy Mario Fiad acompañó el proyecto de ley del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional en la sesión llevada a cabo este jueves en la Cámara alta. Al exponer ante el pleno, sostuvo que “el interbloque de Juntos por el Cambio demostró una postura racional y responsable para que nuestro país no caiga en default. La República nos pide esto. Felicito a mis colegas que aportaron seriedad y compromiso en estas horas decisivas”.

“Las internas en el Frente de Todos no hacen otra cosa que generar inestabilidad e incertidumbre. Estamos ante un gobierno nacional que no tiene un plan económico y maneja el país con un alto grado de irresponsabilidad y desaprensión para con la sociedad”, agregó el legislador jujeño en su alocución.

Además, el senador ponderó el trabajo que viene realizando el Gobierno de la provincia de Jujuy y llamó al ejecutivo nacional a imitarlo.

“Tomen a Jujuy como ejemplo, que con un plan integral de gobierno, ideas claras de hacia donde ir y el liderazgo de Gerardo Morales estamos transformando la provincia. Dejen de lado sus internas y pónganse a gobernar para todos los argentinos y argentinas”, concluyó Fiad.

Blanco: “JxC no iba a permitir el default”

Eso quería, dijo el radical fueguino al intervenir en la sesión, “un sector cegado por la ideología que integra el Frente de Todos”.

El senador nacional de Juntos por el Cambio Pablo Daniel Blanco reivindicó este jueves que “Juntos por el Cambio ha dado una clara muestra de responsabilidad institucional al apurar el tratamiento de la ley y votar en positivo por el acuerdo para refinanciar la deuda con el FMI”.

“No podíamos dejar que el país caiga en default como quería un sector cegado por la ideología que integra el Frente de Todos”, señaló Blanco al intervenir en la sesión en la que se debatió el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Agregó que “como representante de la provincia de Tierra del Fuego, cuyo gobernador es oficialista al igual que los intendentes de sus tres ciudades y los dos senadores que me acompañan representando a mi provincia, me extraña que yo sea el único que le brinde apoyo al país y al presidente al que ellos le dieron la espalda”.

“Esto hace que me pregunte: ¿Qué hubiera votado en la jornada de hoy el actual oficialismo si Juntos por el Cambio fuera quien estuviese gobernando? -continuó-. Estoy seguro de que nos soltarían la mano con tal de acelerar nuestro desgaste y ocupar pronto el poder actuando de manera irresponsable”.

Blanco sostuvo que “nosotros, por el contrario, desde Juntos por el Cambio vamos a rescatar las banderas de la lealtad que una facción del gobierno viene machacando a piedrazos, y la de la ética de la solidaridad que Alfonsín nos enseñó”.

Y cerró: “Hay que cortarla con la especulación electoral que nos impide ver más allá, deponer los fanatismos y actúa por el bien de la Nación en su conjunto. Tenemos que lograr que el diálogo y la búsqueda de consensos se impongan”.

Avanza el debate sobre el acuerdo con el Fondo, que se votaría a medianoche

Luego de haber conseguido los dos tercios para el quórum, la Cámara alta avanza con el tratamiento sobre tablas del programa de facilidades extendidas a efectos de refinanciar la deuda existente con el FMI correspondiente al acuerdo Stand By suscripto en 2018.

Con bastante puntualidad y la presencia de Cristina Fernández de Kirchner en el arranque de la sesión, la Cámara de Senadores comenzó a las 14.09, con la presencia de 49 senadores -uno más de los que necesitaba para los 2/3-, el debate sobre el proyecto de ley que permite al Ejecutivo refinanciar la deuda existente con el Fondo Monetario Internacional, que viene con media sanción de Diputados.

Con 40 senadores anotados para exponer, entre los cuales no figuraba ninguno de La Cámpora, se descuenta una aprobación por amplio margen. Será, según las estimaciones que permite hacer la lista de oradores, pasada la medianoche.

En el inicio de la sesión se recordó la voladura de la Embajada de Israel, a 30 años de ese hecho, y se aprobó sobre tablas, de manera unánime, una declaración de repudio contra ese atentado aún impune.

Pasadas las 14.30 el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Ricardo Guerra, fue el miembro informante del dictamen defendiendo el acuerdo que a su juicio permitirá “en lo más inmediato posible poder centrar el esfuerzo de gestión en el crecimiento de la economía y la reducción de la inflación, lo que redundará en el bienestar de la población”.

A continuación, por Juntos por el Cambio compartieron el tiempo el radical chaqueño Víctor Zimmermann y el porteño Martín Lousteau, quien explicó el destino de los fondos otorgados por el FMI entre 2018 y 2019 durante la gestión de Mauricio Macri. Maurice Closs le respondió cuestionando al Gobierno de Cambiemos por no haber frenado la salida de reservas.

Sin decir cuál sería el sentido de su voto, la puntana María Eugenia Catalfamo apuntó contra la oposición y calificó a esta deuda como “la mayor estafa que haya sufrido nuestro país”. Un discurso similar fue pronunciado la chaqueña oficialista María Inés Pilatti Vergara, quien en declaraciones a Senado TV adelantó antes del inicio de la sesión que votaría en contra.

También anunció su voto en contra la salteña Nora del Valle Giménez, quien habló cerca de las 19, con Cristina Kirchner presidiendo ese pasaje de la sesión. Ahí cargó contra el endeudamiento contraído durante la gestión macrista y cerró su discurso confirmando su voto negativo. Pero aclaró que “no voto en contra de mi gobierno; no voto en contra de mi presidente, ni de usted como vicepresidenta. No voto en contra del Frente de Todos, que estoy muy orgullosa de representar”.

“Voto en contra de la deuda ilegítima que dejó Mauricio Macri y del Fondo Monetario Internacional, que una vez más vuelve a imponer y trata de generar las condiciones para repetir los ciclos de endeudamiento, crisis social valorización financiera y fuga de capitales”.

En esas entrevistas previas a la sesión, la riojana Clara Vega dijo haber llegado al debate sin una decisión tomada sobre su voto. En los días previos había señalado que estaba manteniendo reuniones con especialistas para decidir el destino de su voto. Se ve que ninguno terminó de convencerla.

La presidenta del Senado se retiró en el inicio del debate del Programa de Facilidades Extendidas a efectos de refinanciar la deuda existente con el Fondo Monetario Internacional, aunque regresó más tarde. En su ausencia, la sesión quedó a cargo entonces de la presidenta provisional, Claudia Abdala de Zamora, pero también tuvo oportunidad de debutar comandando un debate la vicepresidenta del Cuerpo, la senadora Carolina Losada.

Closs cuestionó que Macri haya permitido la salida de divisas

Para el senador misionero, esa administración debería haber “sujetado las reservas” de alguna manera, para evitar lo que terminó sucediendo.

Al intervenir durante el debate, el misionero Maurice Closs aclaró que no es de los que constantemente culpan al expresidente Mauricio Macri, pero advirtió que en este caso no hay duda alguna que fue en ese tiempo que se volvió al FMI. Y si bien admitió algunos argumentos de JxC respecto de adónde fue el dinero del préstamo, pidió recordar que “el endeudamiento de punta a punta del Gobierno anterior no creció solamente estos 45 mil palos del Fondo Monetario, creció 100 mil”.

En ese marco, el exgobernador misionero afirmó que “nadie puede dudar que el peor error que se cometió fue garantizar la salida de las divisas -llámenle fuga, capital timbero, cobarde, como quieran-, se le garantizó la salida a un tipo de cambio de $20 allá por abril de 2018, y ese fue el problema: cedieron reservas cuando no teníamos y se garantizó una rentabilidad del 20% en dólares, con el famoso carry trade”.

En ese marco, sostuvo Closs que el Gobierno debería haber “sujetado las reservas, tendría que haber subido el tipo de cambio, algo tendría que haber hecho… Pero el campeón del liberalismo dijo ‘no, vamos a darle a 20’. Y lo seguimos haciendo, y terminamos estampillados” pidiendo créditos al FMI. “Eso debe quedar claro: que se llegó a este prestamista de última instancia porque se perdió la confianza”, enfatizó.

Con todo, aclaró que no le gusta judicializar la política y en ese sentido consideró que no cree que la toma de deuda en sí misma pueda constituir un delito. “Ahora, ese hecho de manejar información y garantizar que aquel que trajo dólares, ganó un 20% de tasa y se llevó un 20% más de dólares, por ahí está bueno que se investigue. No hay que ofenderse porque alguien quiera investigar esto”, puntualizó.

Por otra parte, le dio la derecha a la oposición en cuanto a la nueva redacción del proyecto a ser votado: “Me parece un acierto, me parece que la oposición en este caso tuvo razón, no tiene por qué votar un plan de gobierno. Los planes de gobierno no se votan; sí hay que votar presupuestos, aunque no te gusten”, y recordó cuando el Gobierno de Cambiemos modificó el Presupuesto 2018 al día siguiente de haber sido votado”.

Zimmermann adelantó el apoyo de JxC, pero planteó sus dudas

El senador chaqueño quiso saber, entre otras cosas, si el PEN enviará otro proyecto de presupuesto, como así también si habrá que reformular el acuerdo en un corto período.

Como uno de los miembros informantes de la oposición actuó el chaqueño Víctor Zimmermann, quien es además vicepresidente de la Comisión de Presupuesto del Senado, y compartió el tiempo con su par Martín Lousteau.

Arrancó el senador radical destacando “la enorme responsabilidad que ha demostrado la oposición en Diputados para evitar un colapso inmediato, como hicimos en otro momento de la historia los radicales, cuando tuvimos que negociar con el Fondo Monetario, inaugurando este período democrático, con una crisis económica del 433%, sin reservas y una enorme deuda externa, y nos pusimos a trabajar”.

“¿Por qué esta mención a Diputados? Porque el proyecto aprobado por la Cámara de origen difiere sustancialmente del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo”, dijo, aclarando que lo que estaban discutiendo no es una refinanciación, sino un proyecto de un solo artículo que versa sobre la posibilidad de aprobarle al Gobierno una operación de crédito público. Su aprobación, remarcó, “permitiría cumplir con los vencimientos y evitar el default. Es decir, la cuestión central que debemos decidir esta tarde es ‘default sí o default no’, con todo lo que eso implicaría entrar en mora y no pagar”.

“Entrar en default sería por ejemplo no tener créditos internacionales, no tener acceso a los organismos bilaterales de crédito; aumento de la emisión monetaria para poder financiar el déficit del gasto público”, enumeró.

Zimmermann agregó que “lo que vamos a hacer hoy en base a nuestras facultades institucionales es autorizar un nuevo préstamo para refinanciar 40 mil millones de deuda, y 4.500 quedarían de libre disponibilidad, para refuerzo presupuestario, como reconoció el ministro de Economía el lunes en este mismo Senado”.

Aclaró el senador chaqueño que refinanciar la deuda con el FMI “es una condición necesaria, pero insuficiente en sí mismo, porque la deuda con el Fondo es solo el 12% de la deuda total de la Argentina”.

A continuación, el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara alta planteó las dudas que persisten en el espacio opositor. Por ejemplo, cuando hablamos de reducir el déficit fiscal hasta llegar al equilibrio en el 2025. Puntualizó en ese sentido que eso se puede lograr mejorando la recaudación, pero también aumentando impuestos o las retenciones, ante lo cual advirtió que “no estamos en condiciones de seguir aumentando impuestos en la Argentina. La presión fiscal es muy alta”.

Por eso dijo que las alternativas son atacar los gastos del Estado, los gastos superfluos, fijar prioridades, o “simplemente dejar que esta alta inflación se encargue de licuar el gasto público que tenemos. De ser así, los jubilados se verán cada vez más complicados para llegar a fin de mes”.

Habló del objetivo de tener una tasa de interés real positiva como algo bueno para tener ahorro en pesos y que la gente no vaya al dólar. “Pero ante este espiral inflacionario, aumento de combustibles, readecuación de tarifas, tipo de cambio que sigue la inflación… ¿cómo piensan lograrlo?”, preguntó. Y recordó que la inflación prevista en el programa presentado ante el Fondo oscila entre 38 y 48%, pero advirtió que “ya hoy el interanual mayorista nos da 52%, y el interanual en alimentos 80%. ¿Cómo piensan cumplirlo? ¿Cómo piensan bajar la inflación para no tener más pobreza y marginalidad?”.

En otro pasaje de su exposición, Víctor Zimmermann sumó a sus dudas la pregunta de si el Gobierno va a mandar un nuevo presupuesto al Congreso “para que sepamos cuáles son los compromisos asumidos y cumplir con el memorando económico financiero que dice que debería estar reformulado el presupuesto 2022 al 15 de abril de este año”.

Preguntó también si el oficialismo cree que ante las inconsistencias observadas en el memorándum con el Fondo no debería reformularse en un período corto de tiempo.

Con todo, concluyó adelantando el apoyo de su bancada y señalando que “a pesar de esas y otras dudas, debo destacar la jornada de trabajo que tuvimos el lunes con funcionarios nacionales, con casi 5 horas de intercambio, con preguntas que tuvieron respuestas, algunas, otras no, pero fue caracterizada por la cordialidad, la firmeza y búsqueda de soluciones a tantos problemas graves que tenemos”.

El senador Guerra se mostró optimista con la pronta aprobación

Así se expresó el titular de la Comisión de Presupuesto del Senado, para quien “el número final será muy favorable a la aprobación”.

En el marco de la reunión de la Comisión de Presupuesto del Senado de la Nación desarrollada este martes, en el que se debatió el proyecto de ley que autoriza al Poder Ejecutivo a refinanciar la deuda con el FMI, y luego de confirmar que el dictamen fue firmado por la totalidad de los miembros de la Comisión (dos en disidencia), su presidente, Ricardo Guerra (FdT La Rioja), se mostró optimista en cuanto a la aprobación definitiva en la sesión especial que se llevaría a cabo el jueves.

En ese sentido, señaló en declaraciones a la prensa que “en mi apreciación, luego de seguir todo el proceso que se dio en la Cámara de Diputados, las discusiones y el acuerdo al que se arribó con la oposición y lo que finalmente se aprobó, creo que las proporciones en la votación se van a dar de forma análoga y será aprobado”. 

Respecto a cómo será la votación del Frente de Todos, el legislador riojano resaltó que “cada senador y senadora tiene derecho a expresarse de acuerdo a su conciencia, dado que es un tema muy complicado, muy delicado, y que da para evaluar de un extremo a otro. No obstante eso, considero que el número final será muy favorable a la aprobación”.

Además, Guerra recalcó: “Yo estudié mucho el tema, más allá de mí responsabilidad como Presidente de la Comisión de Presupuesto, lo que me permitió evaluar qué decisión tomar y en ese sentido me inclino por el voto afirmativo. No es bueno que tengamos al Fondo Monetario Internacional en nuestro país, en nuestra economía, después de más de 10 años de estar liberados de sus condicionamientos, pero la gestión anterior tomó un crédito excesivo por donde se lo mire, no respetando legalidades, una situación muy negativa. El problema lo tenemos y creo que la responsabilidad institucional hace que tengamos que aportar a la gobernabilidad y que la energía de la gestión del gobierno se centre en el crecimiento de la economía, el combate de la inflación, que es lo que verdaderamente nos va a permitir salir adelante y llevar tranquilidad y esperanza a nuestra población”.

Respecto a la expectativa que despierta en La Rioja el entendimiento con el FMI, el senador nacional aseguró que “mi gobernador (Ricardo Quintela) apoya éste acuerdo. El país tiene que seguir adelante, hay que dar vuelta la página y concentrar la energía en el crecimiento económico. Estar en desacuerdo y no votar a favor es caer en default. En síntesis, nos presentaría un futuro muy incierto, muy negativo, sería quedar fuera del mundo”. Y cerró subrayando que “estamos en una situación mundial muy delicada, que tiene sus implicancias, por lo cual tenemos que estar a la altura de las circunstancias”. 

El acuerdo con el Fondo contaría con el apoyo del 80% del Senado

Un conteo preliminar de parlamentario.com permite vislumbrar en la Cámara alta un amplísimo respaldo de más de los dos tercios.

La celeridad con la que obtuvo dictamen en el Senado certifica las posibilidades de aprobación con que cuenta el proyecto de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional este jueves en la Cámara alta.

En efecto, la segunda jornada de tratamiento del proyecto aprobado en la madrugada del viernes pasado por la Cámara baja fue un mero trámite en el seno de la Comisión de Presupuesto del Senado que conduce el riojano Ricardo Guerra. Presente en la reunión como integrante de la comisión, pero sobre todo como presidente del bloque oficialista, José Mayans anunció la firma de 16 de los 17 integrantes de Presupuesto y Hacienda, aunque poco después se verificaría que el visto bueno para el dictamen había sido unánime.

Solo dos senadoras del oficialismo firmaron en disidencia, aquellas a las que en un conteo preliminar parlamentario.com consideró que probablemente no apoyarían el proyecto en el recinto: la bonaerense Juliana Di Tullio y la santacruceña Ana María Ianni.

El proyecto será debatido este jueves en el recinto, donde se descuenta una aprobación por amplio margen.

Para tal fin no fue nunca un dato menor el resultado de la votación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional en Diputados. Todos sostenían que necesitaba un amplio apoyo para complementar ese gesto hacia el propio FMI, cuyo board deberá ponerle la firma una vez que esté la aprobación legislativa correspondiente. Pero más allá de ese amplio respaldo que adornaría el acuerdo a los ojos del Fondo, los propios consideraban indispensable un apoyo importante fundamentalmente para el paso que viene: el tratamiento en el Senado.

Esto es, una votación amplia en Diputados sería un mensaje a los senadores oficialistas, pero también a los de Juntos por el Cambio.

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En el Senado gobierna Cristina Fernández de Kirchner, a quien muchos le adjudican haber dicho que no se convertiría en su vice “malquerido”, Julio César Cleto Cobos. Ella no votaría de manera no positiva si le tocara decidir. En rigor, no hace falta que lo haya dicho, no hay duda de que es lo que piensa: ella nunca desempataría de un modo que habilitara tal comparación. Pero jamás permitiría llegar a esa instancia en un ámbito donde reina. ¿O por ventura alguien piensa que podría dejarse poner en la instancia de decidir ella acordar con el Fondo?

Por eso era indispensable un respaldo contundente en Diputados que liberara de dudas a los senadores y los pusiera en una situación distinta: la de estar obligados a completar la faena de la otra Cámara en el sentido del mandamiento y las necesidades del Gobierno del Frente de Todos.

Fue clave en la Cámara baja la tarea de quienes forjaron el acuerdo con la oposición, fundamentalmente su titular, Sergio Massa. Para graficar la situación complicada que llegó a plantearse, el presidente del interbloque Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez detalló que “48 horas antes de la votación el proyecto estaba para no aprobarse y hubiera sido complejo para el Gobierno”.

El diputado de Identidad Bonaerense había adelantado sus reparos hacia el proyecto, siempre más cercano al rechazo que a la aprobación. Y en ese sentido señaló que “al principio, el proyecto que llegó para refinanciar la deuda con el Fondo Monetario no tenía posibilidad de ser modificado, finalmente sucedió un proceso que me parece interesante, donde el presidente de la Cámara, Sergio Massa, tuvo un rol importante, destacado, de ir abriendo a la discusión, al debate y se aprobó ese instrumento que permite que Argentina no ingrese en una situación delicada”.

Ubicada en la otra vereda se encuentra la titular del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, quien a poco de registrarse la media sanción difundió un video reflejando lo que ella interpretó como un ataque dirigido hacia su persona, pero también expresando un rotundo juicio de valor para con el Fondo Monetario Internacional, al que ella -cuenta en el primer video- mantuvo fuera del país durante sus gestiones presidenciales.

Se diferenció así del paso dado por el presidente Alberto Fernández y a continuación dio vía libre para el tratamiento en la Cámara alta.

El poroteo en el Senado

Transcurrido ya el paso por la Comisión de Presupuesto, solo resta esperar en el Senado el debate en el recinto, donde la principal oposición deberá decidir antes si le proporciona al oficialismo la posibilidad de contar con los 2/3 para el tratamiento sobre tablas. Si bien todos los miembros de JxC en el Senado adelantaron su disposición en ese sentido, lo cierto es que el “ruido” que le ha puesto a la política en las últimas horas la posibilidad de subir las retenciones jugó en contra de la armonía en el Senado.

Si bien el ministro de Economía, Martín Guzmán, desmintió la posibilidad de aumentar las retenciones ante los mismos senadores, el pensamiento reinante en la oposición del Senado lo expresó este martes la senadora Guadalupe Tagliaferri, que sin vueltas dijo que “al ministro yo no le creo nada”.

Así y todo se descuenta que habrá sesión esta semana y la aprobación saldrá con un amplio margen.

Con los votos ajenos asegurados, ¿cuántos le puede aportar el Frente de Todos a la aprobación? Según el poroteo preliminar hecho por parlamentario.com, unos 21 votos a favor, contra unos 14 negativos como máximo.

Se descuenta el voto favorable al acuerdo de los senadores Guillermo Andrada (Catamarca), Daniel Bensusán (La Pampa), Maurice Closs (Misiones), Lucía Corpacci (Catamarca), Carlos “Camau” Espínola (Corrientes), María Teresa González (Formosa), Ricardo Guerra (La Rioja), Edgardo Kueider (Entre Ríos), Sergio “Oso” Leavy (Salta), Claudia Abdala de Zamora (Santiago del Estero), Marcelo Lewandowski (Santa Fe), Carlos Linares (Chubut), Cristina López Valverde (San Juan), José Mayans (Formosa), Sandra Mariela Mendoza (Tucumán), Gerardo Montenegro (Santiago del Estero), José Neder (Santiago del Estero), José Antonio Rodas (Chaco), José Rubén Uñac (San Juan) y Pablo Yedlin (Tucumán). Habría que sumar también al puntano Adolfo Rodríguez Saá, enemistado con su hermano gobernador, cuyos diputados no votaron el acuerdo.

En contra, mas no necesariamente votando así -tal vez absteniéndose-, habrá que considerar a la puntana María Eugenia Catalfamo, a Juliana Di Tullio ya los camporistas Martín Doñate (Río Negro), Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), Mariano Recalde (CABA) y Matías Rodríguez (Tierra del Fuego). 

También por supuesto a Oscar Parrilli (Neuquén), a su comprovinciana Silvia Sapag, muy cercana a la vicepresidenta; a la santacruceña Ana María Ianni, a la fueguina María Eugenia Duré y la chaqueña María Inés Pilatti Vergara. También la salteña Nora del Valle Giménez reveló días pasado un rechazo al acuerdo con el Fondo que veremos si se traduce en el mismo sentido al a hora de votar, y probablemente no apoye el acuerdo Silvina García Larraburu, muy cercana a la vicepresidenta, aunque algunas veces ha tomado distancia en temas como el aborto cuando se debatió en 2018.

La sorpresa la daría el jujeño Guillermo Snopek, que viene dando señales los últimos días de resistencia hacia el acuerdo con el Fondo.

Como dijimos, Di Tullio y Ana Ianni firmaron este martes el dictamen, pero lo hicieron en disidencia, lo que podría prever como la posibilidad de abstención.

A priori, el oficialismo no debería contar con los mencionados 14 senadores.

En ese caso, suponiendo una votación unificada del interbloque JxC, mas el respaldo de Alberto Weretilneck, la misionera Magdalena Solari Quintana, la riojana Clara Vega y la cordobesa Alejandra Vigo, el aval al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional podría salir con un total de 58 votos afirmativos sobre 72. A propósito de la riojana Vega, el domingo anunció que estaba reuniéndose con especialistas para definir su postura sobre el tema. Y difundió una foto que debe haber causado inquietud en el oficialismo: junto a Alejandro Olmos, un encendido crítico del tema de la deuda externa.

Clara Vega junto a Alejandro Olmos.

Guzmán: “Argentina necesita evitar un shock desestabilizante”

El ministro de Economía expuso ante el Senado las consecuencias que tendría no poder afrontar los vencimientos de la deuda, que afectarían crisis cambiarias, inflacionarias, de empleo y sociales “severas”.

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Para cumplir con dar inicio al debate del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, el ministro de Economía, Martín Guzmán, se presentó este lunes en el Senado, donde alertó sobre las consecuencias “desestabilizantes” que tendría caer en default, debido a la carga récord de vencimientos que la Argentina tiene para este año y el que viene, de alrededor de 40 mil millones de dólares.

En el marco del imponente Salón Azul del Senado, donde fueron dispuestas de manera rectangular las mesas donde se ubicaron los funcionarios e integrantes de la Comisión de Presupuesto del Senado, los funcionarios se presentaron puntuales para dar inicio a la discusión, apenas dos minutos después de la hora pautada. Y como una semana atrás en Diputados, fue el jefe de Gabinete, Juan Manzur, el primero en hacer uso de la palabra. Tras su extenso discurso, pasadas las 15.30, arrancó Guzmán remarcando la importancia de que se discuta en el Parlamento un acuerdo entre el Gobierno nacional y el Staff del Fondo Monetario Internacional “Es un proceso que nos enriquece como república”, resaltó.

Tras repudiar en el inicio de su exposición “el acto de violencia contra las oficinas de la vicepresidenta de la Nación” registrado el jueves pasado, el funcionario comenzó explicando qué se busca con este acuerdo, y señaló en primer lugar “poder abordar el problema que se presenta en la balanza de pagos de la Argentina para el año corriente y los próximos dos años”.

Foto: Oscar Barraza Ibáñez

“Argentina tiene una carga récord para el corriente año de 19.000 millones de dólares, y de 20 mil para 2023. Estos son montos de niveles tales que no hay ninguna posibilidad de hacerles frente sin financiamiento”, explicó el ministro de Economía, que alertó sobre un “potencial desestabilizante con consecuencias potenciales cambiarias, inflacionales, de producción, de empleo y sociales severas”.

Así las cosas, Guzmán sostuvo que “la Argentina necesita tener la capacidad de evitar un shock desestabilizante que constituiría no poder hacer frente a estos pagos programados”. Y agregó: “Buscamos evitar que la Argentina tenga una situación de profundo estrés con consecuencias negativas sobre el empleo, la pobreza y la distribución de los ingresos”.

Todo esto es producto del programa stand by acordado en 2018, por el cual se desembolsaron 44.500 millones de dólares, lo que consideró un “récord histórico para el FMI. Nunca se dio una situación en la cual una nación recibiera un financiamiento de esos montos”, remarcó.

Al ser acordado, sostuvo, se hizo sobre la base de un esquema de políticas que se argumentaba que iban a ser efectivas para “restablecer la confianza en la Argentina y atacar el problema inflacionario. Nada de eso ocurrió”, afirmó, enfatizando que el propio Fondo “indicó que el programa falló en alcanzar todos los objetivos que se habían planteado. El propio Fondo Monetario Internacional reconoció que los distintos pilares en los que se basó el programa fueron inconducentes en el sentido del programa que se había trazado”.

Guzmán señaló que el financiamiento otorgado “fue utilizado en buena medida en financiar la formación de activos exteriores y salida de capitales. Se utilizó otra parte del financiamiento para afrontar pagos de deuda privada que luego fueron clasificados de insostenibles”, por lo que la totalidad del préstamo de 44.500 millones de dólares “fue para hacer frente a pagos de deuda con acreedores privados que muchos considerábamos que eran insostenibles y a financiar la salida de capitales de la Argnetina”.

“Las consecuencias se ven en estos momentos cuando comienzan a vencer las cuotas de amortización de capital”, remarcó.

A continuación planteó el contexto internacional “sumamente delicado y complejo” que se vive hoy en el mundo. A la pandemia agregó ahora el contexto de la guerra de Rusia contra Ucrania “que ha implicado impactos significativos en los precios a nivel internacional”, con impacto en la canasta alimentaria argentina, agregó.

“Hoy se ve en los precios que se pagan en los commodities, con un aumento significativo de precios” y puso el caso de alimentos que insumen trigo, huevos, aceite. “Esto está afectando la situación económica de la Argentina”, advirtió, considerando que en este contexto “es responsabilidad de nuestro gobierno construir certezas en un contexto de incertezas”.

Por eso consideró necesario “resolver las tensiones en la balanza de pagos”, y por ello habló en primer lugar del objetivo de poder contar con el financiamiento para hacer frente a los financiamientos establecidos en el programa stand by de 2018.

Para ello, dijo, “se requiere acordar un programa que incluye una serie de compromisos y metas de policía económica. Lo que el Gobierno nacional ha hecho es negociar un conjunto de condiciones que san conducentes con los objetivos económicos y sociales que apuntamos”.

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Guzmán contó que con el Fondo se negocia en dos niveles. Con el staff, en construir condiciones que dén lugar a un programa con los objetivos dados; y con los accionistas, que son los países del mundo, para construir condiciones financieras que protejan las distintas economías del mundo, en especial la Argentina.

Desde el punto de vista estructural del programa, el ministro señaló que “ha ido dándose un proceso de construcción de entendimientos. “Se considera que la principal restricción al crecimiento es la externa, la restricción de divisas”, dijo, por lo cual “es fundamental contar con la capacidad de dar desarrollo a los sectores con capacidad de generar divisas”.

Habló de la necesidad de profundizar el desarrollo del mercado de capitales y de la deuda pública en nuestra propia moneda, para que haya mayores capacidades de financiamiento.

Resaltó que se ha logrado establecer un esquema diferente de lo que históricamente han sido los programas del FMI, que se han enfocado en reformas del tipo laboral, jubilatoria… No hay en este programa acordado “reformas que desde lo estructural quiten derechos”, aseguró nuevamente Guzmán.

En otro pasaje el ministro de Economía habló del objetivo de lograr un crecimiento de reservas que sería del orden de los 5.800 millones de acumulación para este año y 15.000 para el período 2022/2024.

Luego habló del sendero fiscal, persiguiéndose objetivos de corto y mediano plazo. En ese sentido destacó el rol que para el Gobierno nacional cumple el Estado en la economía, para “apuntalar la recuperación económica en curso y contribuir condiciones que den lugar a un mayor dinamismo de la economía”.

Tras señalar la necesidad de evitar ajustes del gasto real que “desestabilicen la recuperación en curso”, se refirió a la reducción radual del déficit fiscal para poder fortalecer el crédito publico y la moneda en un contexto en el que las restricciones crediticias son operativas en Argentina.

Martín Guzmán planteó la necesidad de reducir la emisión monetaria y dijo que se plantea un objetivo de resultado primario fiscal de 2,5% en 2022; 1,9 en 2023 y 0,9 en 2024; y financiamiento del Banco Central al Tesoro del 1% del producto en 2022; 0,6 del producto en 2023, convergiendo a 0 en el 2024.

El ministro de Economía cerró valorando la herramienta que dispone requerir la aprobación del Congreso “porque son decisiones que tienen impacto en la vida de los argentinos y las argentinas por generaciones. Entonces no es sano que un gobierno de turno pueda actuar en una forma que sin un amplio respaldo implique la posibilidad de seguir un camino muy nocivo para la Argentina”.

Clara Vega se reúne con expertos para definir su voto

De cara al debate del acuerdo con el Fondo, la senadora nacional riojana está escuchando opiniones en busca de asesoramiento sobre el tema.

La senadora nacional por La Rioja Clara Vega se reunió con el historiador argentino Alejandro Olmos, uno de los mayores referentes en el estudio de la deuda externa y quien contribuyó a reestructurar la deuda de Ecuador con una quita del 65%. “Me estoy asesorando con las personas más capacitadas para tomar la decisión adecuada”, afirmó Vega de cara al debate en el Senado.

Con respecto al debate sobre el proyecto de facilidades extendidas con el FMI que se está dando por estos días en el Congreso, Vega sostuvo “mientras el mundo está centrado en conocer los impactos de la guerra Rusia-Ucrania, Argentina está estancada en un problema generado en el pasado que hace rato debiera estar solucionado. Estamos enfrascados en un constante maniqueo entre dos extremos: por un lado, la teoría abonada por JxC y los medios monopólicos de que si Argentina no arregla con el Fondo sucederá lo peor y, por el otro, la posición ideológica, romántica e idealista de no pagar al Fondo”.

“Es hora de pensar en serio en una verdadera solución que no pasa solo por plantear cuestionamientos sobre cómo se realizó el préstamo o si hay determinadas normas para otorgarlos, sino también por pedir informes al Banco Central sobre quiénes compraron dólares y quiénes se llevaron los capitales”, prosiguió la legisladora.

Por su parte, Olmos -quien brindó asesoramiento al gobierno de Ecuador bajo la presidencia de Rafael Correa hasta 2008- explicó que en el caso de nuestro país “el préstamo con el FMI es legal. A pesar de que el FMI tiene un estatuto y un convenio constitutivo, su Directorio tiene discrecionalidad para modificar ese reglamento e incluso para tomar decisiones por fuera del mismo”.

No obstante, “el Fondo violó varios puntos de su Reglamento y de su Convenio Constitutivo: otorgó el préstamos sin pedir garantías, no exigió explicaciones de qué pasó con el dinero y tampoco accionó frente a la certeza de la fuga de capitales”, agregó.

Con respecto a la posibilidad de la Argentina de cumplir con las obligaciones, el experto afirmó que “la refinanciación sólo sirve para ganar tiempo, sin embargo la economía nacional no tiene la capacidad para pagar. No importa que extiendan los vencimientos de pago”.

El Gobierno hizo política y salió de una grave encerrona

En una semana, lo que parecía el camino por un angosto desfiladero con destino al precipicio se transformó para el gobierno en una ventana de oportunidad. De todos modos quedaron heridas que el destino y las circunstancias irán mostrando si sanan.

Por José Angel Di Mauro

Quienes la conocen de sus épocas de legisladora y en el llano, recuerdan a una Cristina Kirchner bien distinta a la actual, cuya transformación se inició a partir de convertirse en primera dama (primera ciudadana, como prefería denominarse) y luego en presidenta. No es un juicio de valor: todos evolucionan; mal o bien, la gente cambia. Ni hablar de si se llega al máximo sitial de la carrera política. El recordado Raúl Baglini hizo de eso un teorema aplicable aun para cargos inferiores.

En lo que habrá que reconocer que no cambió Cristina Kirchner es en su parecer respecto del Fondo Monetario Internacional. Siempre rechazó sus políticas y condenó a ese organismo. Pago de la deuda mediante por parte de su esposo, a ella no le tocó lidiar con las revisiones periódicas que ahora tendrá este gobierno, que fue lo que Néstor Kirchner quiso evitar cuando desembolsó de una casi 10 mil millones de dólares.

Botón de muestra de su rechazo al FMI -con un accionar muy claro en ese sentido- vale recordar cuando le complicó la vida al entonces presidente Eduardo Duhalde en 2002, oportunidad en la que casi logra evitar la derogación de la Ley de Subversión Económica que exigía el organismo. Llegó al punto de mandarle a Corrientes el avión sanitario de Santa Cruz al senador Lázaro Chiappe, para que pudiera estar en el recinto y votar en contra.

¿Cómo logró sortear la situación el oficialismo de entonces? El gobernador radical Horacio Massaccesi llamó por teléfono a la senadora rionegrina Amanda Isidori para que se retirara del recinto. El radicalismo se pronunció en contra, como tenía decidido, pero la votación terminó empatada y desniveló el presidente del Cuerpo, a favor de la derogación que reclamaba el Gobierno nacional.

Esta anécdota va más allá de recordar el rechazo de CFK hacia el Fondo; también sirve para graficar cómo se aplican los acuerdos políticos y lo que Juntos por el Cambio también estaba dispuesto a hacer en el debate del acuerdo con el FMI: si hacía falta, algunos legisladores se hubieran retirado para sacar la ley.

No fue necesario por una razón muy simple que habrá que ver si aplica en el futuro. El oficialismo hizo política en la Cámara de Diputados, y eso implica negociar y ceder. En rigor, se dijo que cedieron ambas partes, pero en la práctica solo lo hizo el Gobierno, que cambió dos veces el texto del proyecto que luego -eso sí- Juntos por el Cambio votó masivamente.

Sergio Massa en la conferencia de prensa que dio antes de iniciarse la sesión. (Foto: HCDN)

Fue clave en la discusión el titular de la Cámara baja, Sergio Massa, a quien el presidente dio libertad de acción para negociar con la oposición. De los propios se ocupó el nuevo jefe del bloque oficialista, Germán Martínez, y una muestra concreta del nivel de disposición que mostró el Frente de Todos para acordar fue que la negociación se cerró en el despacho de Mario Negri. Hasta allí fueron Massa y Martínez a media tarde del miércoles pasado, luego de que el presidente de la Cámara pasara varias horas en la Rosada. A las 19 ambos diputados salieron de la reunión y volvieron a los 15 minutos para cerrar el acuerdo que luego se trasladó al plenario de comisiones que debatía el tema pero alargando los discursos, a la espera de lo que se resolviera fuera de esa sala. A las 22.30 se confirmó definitivamente el texto que al día siguiente aprobarían con amplio margen.

Imposible imaginar semejante entendimiento con Máximo Kirchner al frente del bloque. Está claro que él no podía defender desde ese puesto un acuerdo con el FMI, pero de no haber estado el Gobierno en tal encerrona y haber seguido presidiendo la bancada oficialista el hijo de los Kirchner, sería muy difícil realmente hacer andar la Cámara. Quedó claro con lo que pasó el año pasado con el Presupuesto, que estalló ante la reacción de Máximo en el recinto y su rigidez para negociar. Algo indispensable en una cámara con los números tan acotados.

Debió quedarles claro en la última sesión del año pasado, cuando el Frente de Todos le ganó la pulseada a JxC por Bienes Personales. Fue apenas por 127 votos contra 126, habiéndole faltado a Juntos por el Cambio 3 diputados, dos de viaje y una por Covid. Esto es: 127 es el número máximo de votos que el oficialismo puede alcanzar incluyendo a la izquierda, que solo excepcionalmente le dará su apoyo. Tras la derrota en las legislativas, el Frente de Todos no está en condiciones, solo, de tener quórum ni ganar ninguna votación… a menos que negocie.

Aprobar con una mayoría generosa el acuerdo con el Fondo significó para el Frente de Todos cumplir también con una máxima legislativa que dice que la oposición se queda con el discurso y el oficialismo con la ley. Por eso Germán Martínez bajó a los suyos la orden de morigerar la dialéctica para evitar enojar al adversario durante la sesión. Difícilmente se hubieran parado e ido los de JxC como hizo el Pro en la Asamblea Legislativa, pero podrían haberse perdido votos en esas circunstancias.

Ahora es el turno del Senado y el abultado número obtenido en Diputados representa también una señal para esa Cámara. Para propios y ajenos. En el primer caso, para evitar que el cristinismo enarbole el rechazo como estandarte y le ponga suspenso a la división; y en el caso de la oposición, para que la unidad casi unánime mostrada en la otra Cámara se mantenga en Senadores.

Así las cosas, el Senado podría replicar un resultado contundente esta semana, con un número de votos positivos que ascendería a 59 sobre 72 senadores. Previamente Juntos por el Cambio deberá hacerle otro favor al Gobierno: habilitar los dos tercios para sesionar sobre tablas, pues en la Cámara alta se respeta la condición de dejar pasar siete días entre el dictamen y el tratamiento en el recinto de un proyecto. Este jueves saldría la ley, tras un trámite que no sería exprés sin los antecedentes citados. Sería en ese caso cinco días antes del dead line, la fecha del vencimiento de un pago que no podemos hacer. Previamente deberá pronunciarse el board del Fondo, pero esa ya es cuestión de ellos. Tener la ley esta misma semana será una tranquilidad para evitar jugar al límite -como ha hecho siempre este gobierno-, y no sea cosa además de terminar votando semejante norma en vísperas del 24 de Marzo.

¿Y si hay sorpresas? “La única sorpresa que puede haber es que Cristina se quede todo el debate”, resumió este sábado con su picardía habitual el senador Luis Juez. Seguramente la vicepresidenta abrirá la sesión, como siempre, y luego se retirará a su despacho, como siempre. Difícilmente vuelva para la votación, llamamiento que quedará a cargo en ese caso de la santiagueña Claudia Ledesma Abdala, presidenta provisional, evitándole a Cristina el trance de tener que anunciar la aprobación de semejante ley. Se verá.

Por lo pronto ella recién habló del FMI el viernes, pocas horas después de la media sanción, cuando no lo había hecho desde el 28 de enero al anunciarse el entendimiento. Y esta vez lo hizo a través de un video de impecable definición, que generó suspicacias por ver las piedras supuestamente en el momento preciso en que rompen el ventanal. En el spot, la voz en off de la vicepresidenta justifica las protestas contra el Fondo, al que termina responsabilizando del incidente, sobre el que de todos modos pone en duda que no haya sido premeditado.

Dicho sea de paso, la seguridad del Palacio había mandado a bajar las persianas de todos los despachos previendo las piedras habituales, según contó el senador Alfredo De Angeli.

Amén de ello, sonó curioso que no hubiera referencias de Cristina en el video a la violencia en general de la que fueron víctimas varios policías, a uno de los cuales prendió fuego una molotov. Pero más curioso resultó el comunicado de los diputados del Frente de Todos expresando “el más absoluto repudio y rechazo a los hechos de violencia que tuvieron como víctima a la querida compañera vicepresidenta @CFKArgentina”. Sin referencias a los efectivos heridos y los locales comerciales con destrozos. Más que a la expresidenta, pareció un mensaje destinado a galvanizar el frente interno después de la división exhibida en la votación reciente.

El gobernador Axel Kicillof repudió “categóricamente” el episodio que “puso en riesgo la integridad física de la vicepresidenta y legisladores que estaban con ella”, pero su ministro Andrés Larroque disparó directamente hacia la Casa Rosada: “Aturden el silencio y la parsimonia del Gobierno frente al ataque al despacho de la vicepresidenta”, tuiteó.

Fuentes cercanas al presidente afirman que Alberto Fernández le mandó un mensaje por Telegram preguntándole si estaba bien, que ella nunca respondió.

La fractura expuesta es tan evidente como la votación de la madrugada del viernes exhibió.

Juez: “No vamos a dejar que el país se prenda fuego”

Para el senador de JxC Alberto Fernández es “el presidente más débil desde el retorno de la democracia”.

El senador nacional Luis Juez adelantó el apoyo de Juntos por el Cambio en el Senado al acuerdo con el FMI. “Yo lo que puedo adelantar, sin haber hecho la reunión de bloque, es que nuestra conducta en el Senado será republicana, cuidadosa de las instituciones. No vas a encontrar una actitud cobarde como la de Máximo y La Cámpora. No nos vamos a esconder”.

En diálogo con CNN Radio, el senador cordobés reveló que no le genera “ninguna satisfacción que mi primera ley a acompañar sea un proyecto de Alberto Fernández, pero debemos evitar que se caiga en default”.

Respecto a la votación que se viene en el Senado, Juez aseveró que “la única sorpresa que puede haber es que Cristina se quede todo el debate, porque por lo general después de la apertura se va. Debería estar, para eso le pagamos el sueldo. Tengo algunas frasecitas para dedicarle. Me encantaría decirle que nosotros sostenemos a Alberto, el presidente más débil desde la vuelta de la democracia. Hoy se sostiene porque nosotros creemos más en la república que el partido que lo puso en el poder”.

En relación a la postura de la oposición, explicó que “nosotros pedimos que no nos abrochen en la discusión de un plan que ellos no tuvieron. No lo pidió el FMI, no corresponde que lo hagamos. No es un cogobierno, no nos vamos a hacer responsables de medidas de gobierno que tampoco vamos a implementar. Pero no vamos a dejar que el país se prenda fuego”.

“Yo no puse a Martín Guzmán o a Alberto Fernández. Los pusieron desde La Cámpora, y ahora quieren guardar las banderas, como el equipo que se va cuando no pelea el campeonato. Ahora resulta que nosotros nos tenemos que cargar a Alberto al hombro”, deslizó el senador.

https://twitter.com/larroqueandres/status/1502643185771761667?s=20&t=7IUKQAlJUWZ1OatkbblfJQ Juez también habló sobre el tuit de Andrés Larroque, quien apuntó hacia las internas del oficialismo. “Deberían decirle a Larroque que aturde el silencio en repudio al atentado al Parlamento, a la quema de Policías, a demás. Cristina no es la dueña del Senado, aturde el silencio de como estos tipos promueven quilombo, se hacen los tontos y después no dicen nada. Dejen de mirarse el pupo, no es Cristina la que tuvo un problema: es el país y las instituciones. Siempre están hablando de ellos”.

Para Vidal, “este va a ser el gobierno que más nos endeudó en la historia”

La diputada nacional aclaró que el programa del Gobierno “no resuelve problemas estructurales ni la inflación, que va a ser peor y aumentar aún más”.

Si bien lo votó a favor como casi todo Juntos por el Cambio, la diputada nacional María Eugenia Vidal criticó el acuerdo suscripto entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional, por considerarlo “una bomba del tiempo”.

Sostuvo que “es mentira que se empieza a pagar en 2026, porque hay una deuda en pesos que crece de manera acelerada”, y afirmó que “este va a ser el gobierno que más nos endeudó en la historia, mucho más que el de Mauricio Macri”.

Entrevistado en el programa País adolescente, de CNN Radio, advirtió que “tenemos un gobierno que procastina y no enfrenta los problemas, porque no tiene acuerdos internos”.

De cara a la votación en el Senado, Vidal explicó que “lo que va a ver la sociedad en el Senado, y lo que vio en Diputados, es la diferencia entre el oficialismo y dirigentes políticos que eligen la responsabilidad aunque tenga costo electoral; que no especulan y no quieren a Argentina de nuevo en el default”.

“Ellos (por el oficialismo) trajeron un proyecto para elegir entre Guatemala y Guatepeor. Evitamos Guatepeor, pero no avalamos el programa. Me parece una gran irresponsabilidad de ellos elegir el relato antes que las responsabilidades que uno tiene”, aseguró la diputada.

“Nosotros fuimos muy claros, y por eso logramos modificar el proyecto casi integralmente. El Ejecutivo quería que aprobáramos el crédito y también el programa económico. Y eso no lo aprobamos. Explícitamente decimos que ese programa no resuelve problemas estructurales ni la inflación, que va a ser peor y aumentar aún más”, añadió Vidal.

La diputada comentó que “el oficialismo no tiene un proyecto de país: tiene un proyecto de poder. Cuando vienen las elecciones no hay rupturas, están todos de acuerdo, hacen actos juntos, porque lo importante es mantenerse en el poder. Pero no hay proyecto de país, y la muestra es que postergan los problemas y no los enfrentan”.

“Más allá de lo doloroso que fue para los argentinos someternos a un proceso de ordenamiento de las cuentas públicas en poco tiempo, ojalá nosotros en el 2023, si ganamos la elección, recibiéramos un país como el que recibió Alberto Fernández. Con equilibrio fiscal, medio punto de déficit, tarifas ordenadas. El oficialismo decidió congelar durante dos años, y hacernos creer que las tarifas podían ser congeladas, cuando pagábamos con inflación. Dejamos 13 mil millones de reservas”, cerró la diputada.

El acuerdo con el Fondo contaría con 59 votos para su aprobación

Un conteo preliminar de parlamentario.com permite vislumbrar en la Cámara alta un amplísimo respaldo de más de los dos tercios.

recinto senado sesion preparatoria 24 febrero 2022

No era un dato menor el resultado de la votación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional en Diputados. Todos sostenían que necesitaba un amplio apoyo para complementar ese gesto hacia el propio FMI, cuyo board deberá ponerle la firma una vez que esté la aprobación legislativa correspondiente. Pero más allá de ese amplio respaldo que adornaría el acuerdo a los ojos del Fondo, los propios consideraban indispensable un apoyo importante fundamentalmente para el paso que viene: el tratamiento en el Senado.

Allí gobierna Cristina Fernández de Kirchner, a quien muchos le adjudican haber dicho que no se convertiría en su vice “malquerido”, Julio César Cleto Cobos. Ella no votaría de manera no positiva si le tocara decidir. En rigor, no hace falta que lo haya dicho, no hay duda que es lo que piensa: ella nunca desempataría de un modo que habilitara tal comparación. Pero jamás permitiría llegar a esa instancia en un ámbito donde reina. ¿O por ventura alguien piensa que podría dejarse poner en la instancia de decidir ella acordar con el Fondo?

Por eso era indispensable un respaldo contundente en Diputados que liberara de dudas a los senadores y los pusiera en una situación distinta: la de estar obligados a completar la faena de la otra Cámara en el sentido del mandamiento y las necesidades del Gobierno del Frente de Todos.

Con todo, la primera señal esbozada por Cristina Fernández de Kirchner no fue halagüeña para el gusto de la Rosada. La vicepresidenta no se pronunció nunca sobre el tema desde que el 28 de enero se anunció el entendimiento, pero lo hizo a través de su hijo Máximo, más allá de que el presidente le haya atribuido haberle pedido que reconsiderara su renuncia.

Volvió a hacerlo cuando el viernes, pocas horas después de la media sanción, difundió el video sobre “el ataque” a su despacho; más que una victimización pareció tratar de mostrar un juicio de valor para con el Fondo Monetario. Que sigue siendo el mismo de siempre.

Se diferenció del paso dado por el presidente Alberto Fernández y a continuación dio vía libre para el tratamiento en la Cámara alta.

Allí se iniciará este lunes el debate. Con la presencia del ministro Martín Guzmán, a partir de las 15. Será el mismo esquema que en la otra Cámara, con la presencia de los funcionarios que lo acompañaron al plenario de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas.

Pero hasta ahí las similitudes. Ya de por sí en el Senado no habrá plenario, pues no hay comisión de Finanzas. Solo estarán los miembros de Presupuesto y Hacienda, comisión que conduce el riojano Ricardo Guerra, quien asumió el año pasado para completar el mandato del fallecido expresidente Carlos Saúl Menem.

El martes, según lo anunciado, continuará a partir de las 14 el debate en comisión, pero no se anticipa la presencia de invitados, como sucedió la última semana en la Cámara baja, adonde concurrieron sindicalistas, empresarios y gobernadores. En el caso del Senado, irán directamente al dictamen y luego, según ha confirmado el propio presidente del bloque oficialista, José Mayans, tratarán de sesionar en el transcurso de la semana. Todo indica que el jueves.

Para eso deberán sortear la regla estricta que se cumple en el Senado de dejar pasar 7 días entre la emisión del dictamen y el debate. Sucede que el 22 de marzo es la fecha en la que Argentina tiene un vencimiento con el Fondo que no puede cumplir. Si hay entonces cuestiones burocráticas pendientes, que no sean por culpa de Argentina.

¿Cuenta con la posibilidad de los 2/3 necesarios para sesionar de un día para otro? Si hay disposición de la oposición, sí. Y la hay, según adelantaron desde Juntos por el Cambio y quedó claro a partir de la votación casi unánime que tuvieron en la otra Cámara. Ese fue también un gesto que necesitaba el oficialismo que diera la principal oposición hacia sus propios senadores.

Con los votos ajenos asegurados, ¿cuántos le puede aportar el Frente de Todos a la aprobación? Según el poroteo preliminar hecho por parlamentario.com, unos 22 votos a favor, contra unos 13 negativos como máximo.

Hay que destacar que si bien los gobernadores esta vez no se harán presentes en el Senado, su paso por Diputados fue contundente según estiman en esa Cámara. Y debe haberles dejado claro ya lo que deben hacer en el Senado.

La última semana pasaron por la Casa Rosada y el Congreso

los gobernadores Ricardo Quintela (La Rioja), Raúl Jalil (Catamarca), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gustavo Sáenz (Salta), Sergio Ziliotto (La Pampa), Sergio Uñac (San Juan), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Oscar Herrera Ahuad (Misiones), Mariano Arcioni (Chubut), Omar Gutiérrez (Neuquén) y Omar Perotti (Santa Fe) y los vicegobernadores Carlos Silva Neder (Santiago del Estero) y Eugenio Quiroga (Santa Cruz). En Diputados también estuvo el jujeño Gerardo Morales, de Juntos por el Cambio, con un discurso contundente.

A partir de esa postura se descuenta el voto favorable al acuerdo de los senadores Guillermo Andrada (Catamarca), Daniel Bensusán (La Pampa), Maurice Closs (Misiones), Lucía Corpacci (Catamarca), Carlos “Camau” Espínola (Corrientes), María Teresa González (Formosa), Ricardo Guerra (La Rioja), Edgardo Kueider (Entre Ríos), Sergio “Oso” Leavy (Salta), Claudia Abdala de Zamora (Santiago del Estero), Marcelo Lewandowski (Santa Fe), Carlos Linares (Chubut), Cristina López Valverde (San Juan), José Mayans (Formosa), Sandra Mariela Mendoza (Tucumán), Gerardo Montenegro (Santiago del Estero), José Neder (Santiago del Estero), José Antonio Rodas (Chaco), Guillermo Snopek (Jujuy), José Rubén Uñac (San Juan) y Pablo Yedlin (Tucumán). Habría que sumar también al puntano Adolfo Rodríguez Saá, enemistado con su hermano gobernador, cuyos diputados no votaron el acuerdo.

En contra, mas no necesariamente votando así -tal vez absteniéndose-, habrá que considerar a la puntana María Eugenia Catalfamo, a Juliana Di Tullio ya los camporistas Martín Doñate (Río Negro), Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), Mariano Recalde (CABA) y Matías Rodríguez (Tierra del Fuego).  

También por supuesto a Oscar Parrilli (Neuquén), a su comprovinciana Silvia Sapag, muy cercana a la vicepresidenta; a la santacruceña Ana María Ianni, a la fueguina María Eugenia Duré y la chaqueña María Inés Pilatti Vergara. También la salteña Nora del Valle Giménez reveló días pasado un rechazo al acuerdo con el Fondo que veremos si se traduce en el mismo sentido al a hora de votar, y probablemente no apoye el acuerdo Silvina García Larraburu, muy cercana a la vicepresidenta, aunque algunas veces ha tomado distancia en temas como el aborto cuando se debatió en 2018.

A priori, el oficialismo no debería contar con los mencionados 13 senadores.

En ese caso, suponiendo una votación unificada del interbloque JxC, mas el respaldo de Alberto Weretilneck, la misionera Magdalena Solari Quintana, la riojana Clara Vega y la cordobesa Alejandra Vigo, el aval al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional podría salir con un total de 59 votos sobre 72.

Un dato a esta altura anecdótico. La Comisión de Presupuesto que deberá dictaminar cuenta con estos 17 senadores: Ricardo Guerra, Víctor Zimmermann, Juliana Di Tullio, Edgardo Kueider, María Teresa González, Antonio Rodas, Ana María Ianni, Maurice Closs, Marcelo Lewandowski, Carlos Alberto Linares, Julio Martínez, Flavio Fama, Martín Lousteau, Guadalupe Tagliaferri, Ignacio Torres, Juan Carlos Romero y Alberto Weretilneck. Teniendo en cuenta todo lo apuntado, el dictamen saldría al menos con 15 firmas.

Massa: “Mi responsabilidad fue buscar acuerdos”

Así lo expresó el presidente de la Cámara de Diputados luego de que el cuerpo le diera media sanción con amplio consenso al proyecto que avala el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Luego de que la Cámara de Diputados aprobara el proyecto que ratifica el acuerdo con el FMI, el titular de la Cámara baja, Sergio Massa, destacó el diálogo alcanzado entre los legisladores y que permitió la media sanción de la iniciativa.

En declaraciones a La Nación +, el titular de la Cámara baja expresó: “Con responsabilidad, aún con diferencias entre fuerzas políticas, se entendió la trascendencia que tenía el hecho de avanzar con una facultad que el Congreso retomaba desde la vuelta de la democracia”.

Respecto al arribo de los consensos que permitieron que la iniciativa fuera aprobada, Massa consideró: “Fue mi tarea y responsabilidad buscar acuerdos para que la Argentina resuelva el problema y para eso hay que tener la capacidad de tolerar y respetar al que piensa distinto”.

En ese sentido, agregó: “Eso me permite tener diálogo con todos los sectores de la oposición y del oficialismo y habilitar mecanismos de negociación para que la Argentina pueda tener un camino de salida ante una deuda que complica el presente y el futuro de los argentinos”.

Asimismo, Massa destacó que “luego de 21 acuerdos con el FMI, este es el primero que se discute en el Congreso” y condenó los incidentes ocurridos en las afueras del palacio legislativo mientras transcurría el debate: “La violencia jamás es el camino, mucho más cuando esa violencia genera ataques contra bienes públicos porque todo lo que rompen esos violentos lo pagan los contribuyentes”.

Este viernes en horas de la madrugada, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley referido al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) con 202 votos positivos, 37 negativos y 13 abstenciones. La iniciativa obtuvo media sanción con amplio apoyo del arco opositor y será tratada en el Senado.

Germán Martínez: “No es correcto decir que la deuda es hija del déficit”

Para el jefe del bloque oficialista, esta deuda con el FMI es “hija de una profunda crisis en la balanza de pago”.

En su primer discurso de cierre desde que preside el bloque oficialista, el santafesino Germán Martínez valoró el trabajo realizado y que derivó en un dictamen único con una cantidad de firmas muy importante, señalando que es “un texto en el cual trabajamos mucho entre muchos, que tuvo para llegar a ese articulado más de 20 intercambios de distintas miradas, posiciones, aportes”.

Martínez se refirió inicialmente a la Ley de Sostenibilidad de la Deuda aprobada el año pasado, que permitió llegar a esta sesión “con un pleno conocimiento de todo lo que pasó”, y luego resaltó el “gran trabajo en las comisiones”.

“No es la primera vez que en este recinto en los últimos 2 años y pico tratamos el tema de la deuda. De mínima es la cuarta vez”, señaló recordando a continuación las palabras del presidente Alberto Fernández que el al asumir el 10 de diciembre de 2019 dijo que “vams a encarar el problema de la deuda externa, no hay pagos de deuda que se puedan sostener si el país no crece. Buscaremos una relación constructiva con el Fondo Monetario Internacional y nuestros acreedores. El país tiene voluntad de pagar, pero carece de posibilidad de hacerlo”.

En otro pasaje, el presidente del bloque oficialista sostuvo que “no es correcto que la deuda es hija del déficit. Esta deuda con el Fondo Monetario Internacional es hija de una profunda crisis en la balanza de pago que se da cuando vos tenés muchos más que demandan dólares que los dólares que tenés para ofrecer”.

Por otra parte, el santafesino invitó a todos los diputados a leer los fundamentos de la Carta de Intención de los dos stand by suscriptos durante el Gobierno de Mauricio Macri en 2018, en los meses de mayo y octubre. “Ahora, entre mayo de 2018 y octubre de ese mismo año no es que no pasó nada en la Argentina, porque además de los dos stand by, el dólar se fue de 22 pesos a 37. O sea que esos stand by vinieron acompañados de una devaluación que orillaba el 70%”.

“En síntesis, entre mayo y octubre todos aquellos argentinos vinculados a ingresos fijos vieron perjudicada su situación de vida a partir de esta devaluación”, afirmó.

Germán Martínez pidió valorar el acuerdo de facilidades extendidas negociado por el Gobierno con el FMI. Y lamentó no poder dejar en claro en el texto votado que el acuerdo entre nuestro país y el FMI está cerrado a nivel staff. “Me parece que realmente podríamos hacer un esfuercito más, pero no quiero generar ninguna zozobra alrededor del texto”, aclaró.

Asimismo resaltó algo que consideró “fundamental”, como es “la ventana del tiempo” lograda, que aclaró que no es hasta 2024 como se dijo en varios pasajes de la sesión, sino hasta 2026.

Y destacó que “vamos a afrontar los pagos sin ajuste, vamos a afrontar los pagos sin reformas jubilatorias, sin reforma laboral, sin tarifazos… Y me parece que acá en algún momento se dijo que estamos generando un escenario donde las opciones son ajuste o default. No, estamos generando un escenario de crecimiento económico, desarrollo industrial, para que cuando tengamos que empezar a pagar estemos en una situación más positiva”.

El presidente del bloque oficialista aclaró que “nunca dijimos que con este acuerdo estamos solucionando los problemas de Argentina. Estamos encaminando una posible solución a un problema gigante”.

Asimismo señaló que “no queremos que la oposición sea rueda de auxilio del Gobierno”, aunque valoró “muchísimo” el consenso alcanzado. “Tampoco que cogobiernen, ni menos aún que sean los que definan la política económica del Gobierno”, remarcó.

Sobre el final, se refirió a las tensiones internas que generó esta ley. Afirmó que “a todos los espacios políticos este tema nos ha tensionado. Si hubiéramos conseguido quórum en esa sesión de 2018 para pedirle al Ejecutivo que mandara el stand by al Congreso, en aquel momento el oficialismo de entonces hubiera tenido sus tensiones. También nosotros tenemos que ir metabolizando que Argentina avanza en un esquema de coaliciones que no se generan entre los que pensamos exactamente igual; se genera entre los que pensamos parecido”.

“Eso puede pasar con cualquier compañero –continuó-. ¿Quiénes somos nosotros para acusar a alguien, o apuntar con el dedo? ¿Qué autoridad tengo yo para poder acusar con el dedo a un diputado de un bloque al que no pertenezco”.

Martínez cerró su discurso recordando un spot de campaña de 2007, en el que le preguntaban a pibes qué significaba la sigla FMI, y ninguno sabía responder. La sentencia final decía que “trabajamos para que tus hijos y los hijos de tus hijos no sepan qué es el Fondo Monetario Internacional”.

“Yo tengo dos hijos, uno de 5 y otro de 9. Seguramente con el de 9 ya no podré, pero no sé si para nuestros hijos pero trabajamos para que los hijos de tus hijos no sepan lo que es el FMI”, concluyó.

El diputado Leiva le pidió a JxC no preocuparse por Máximo

Con ironía, les recordó lo que había pasado con el ex jefe del bloque en la sesión del Presupuesto e ironizó con la actitud de la oposición.

Excombatiente en Malvinas, el chaqueño Aldo Leiva suele mostrarse muy beligerante en sus discursos, y en los primeros minutos de este viernes no hizo una excepción, a pesar de la recomendación que confesó que le habían dado.

Durísimo como de costumbre con la administración anterior, llegó incluso a sugerir que seguramente debía incomodarle mucho a JxC “que alguna vez se pueda investigar esto que ha generado el Gobierno de Mauricio Macri”.

Ahí recapacitó y deslizó que no quería extenderse mucho “porque aparte nos dijeron: ‘Hay que tener tranquilidad, paz…’”.

“¡Menos mal!”, acotó riendo el diputado del Pro Omar De Marchi, que conducía en ese momento.

Entusiasmado, el diputado oficialista siguió hablándole a la oposición, que a esa altura estaba más divertida que enojada con el chaqueño, que mezcló paladas de cal y de arena diciendo: “Yo tengo sangre en las venas, pero eso no quiere decir que tenga odio como tienen ustedes, no quiere decir que tenga resentimiento como tienen ustedes. Yo tengo amor, tengo militancia policía”. Pero antes de concluir se acordó de los libertarios y buscó coincidir con sus rivales de JxC al emprenderla contra los libertarios, “que descalifican la política”. “¡Por favor! ¿Qué hacen acá si no les gusta la política? Están gracias a la política…”.

“Por eso, más allá de las diferencias que puedo tener con ustedes, créanme que hay algo en común que tenemos: que todos venimos de la política. Por eso es importante también para que estos personajes no descalifiquen a la política, porque es la única herramienta que tenemos para mejorar la vida de la gente…”, apuntó.

Tras ello, y para terminar, aclaró que no había nada que festejar y tapándose la nariz dijo que así estaba el oficialismo por votar. Y concluyó con una reflexión: “Ustedes no se preocupen por Máximo (Kirchner). La vez pasada, cuando vino Máximo, se levantaron y votaron en contra del Presupuesto… Ahora están preocupados porque no viene, y quieren que hable encima…”.

Y ya entre risas y aplausos de aprobación, agregó: “Cuando nuestro vicepresidente tuvo el voto no positivo, un capo, un genio… Cuando Cristina no habla, conspira contra Alberto… Entonces, ¿a qué estamos jugando?”.

Durísimo, Pedrini llamó a Macri “presidente contrabandista”

En un durísimo discurso, el diputado kirchnerista dijo que su espacio detesta al FMI, pero no tendrían un voto vergonzante, y tras aprobarse la ley trabajarán para que cancelar “anticipadamente” este préstamo.

El oficialismo mantuvo durante buena parte de la sesión una consigna tácita respetada por la mayoría de sus miembros respecto de no calentar el clima de la sesión. No fue el caso del chaqueño Juan Manuel Pedrini, que la emprendió duramente contra el expresidente Mauricio Macri, al que calificó dos veces de “contrabandista” y hasta comparó con la dictadura.

Arrancó felicitando al presidente Alberto Fernández por haber sido autor de la ley que permitió llevar adelante el debate para autorizar el acuerdo llevado adelante con el Fondo Monetario Internacional. Algo que valoró como “una autolimitación presidencial en un país presidencialista como este”.

“El presidente Fernández no habla de las instituciones, sino que genera los marcos para que las instituciones y la democracia crezcan”, dijo, anticipando que “esta ley va a ser tan trascendental como fue el decreto 222 del expresidente (Néstor) Kirchner, que también se autolimitó en el ejercicio para elegir a los jueces de la Corte”.

El diputado del Frente de Todos marcó diferencias: “Donde había una limitación, la oposición impuso el secretismo; el presidente Macri, entre gallos y medianoches, decidió el más grande endeudamiento de la historia del FMI”.

“¿Y qué hicieron con el decreto 222, qué hizo la (actual) oposición, que habla permanentemente de la democracia? Tuvimos el hecho aberrante que Macri haya sido el único presidente en designar por decreto dos jueces de la Corte Suprema -disparó-. Imaginemos la catadura moral del presidente contrabandista, y ni hablar de esos señores cortesanos que están en la Corte Suprema aceptando ser designados por un decreto. ¡Por un decreto!”

“Después se nojaban cuando decíamos que Macri era parecido a la dictadura”, agregó, insistiendo en que “el método de selección fue igual al de los dictadores: la voluntad omnímoda de una persona por subre la República. Entonces, donde había secretismo, nosotros ponemos debate; donde hubo afrenta a la Constitución, nosotros nos autolimitamos”.

En otro pasaje de su encendido discurso, Pedrini continuó: “Se habló muchísimo de la herencia kirchnerista… Dejamos un país que crecía al 3% anual; ustedes cuando se fueron dejaron una tasa negativa de crecimiento los cuatro años del 5%. La pobreza era con Cristina del 25%, y nos dolía; la dejaron casi en el 40%. La inflación era del 28%… Tanto hablaron de la inflación, ustedes tienen el récord nacional de la inflación desde la convertibilidad: 2019 hasta ahora fue el año con más inflación, 54%”.

Tras afirmar que con los Kirchner la Argentina estaba primera en Latinoamérica en materia de poder adquisitivo, con Cambiemos los salarios perdieron un 16%. Y respecto del PBI, Pedrini afirmó que con Cristina Kirchner ascendía a 643 mil millones de dólares y Macri lo dejó en 440 mil millones.

“Datos que matan relato”, enfatizó, y agregó: “La verdad que con paciencia escuchamos tratar a la vicepresidenta de pusilánime… ¡Más respeto! Fue la esposa del que echó al FMI de la Argentina; fue la que enfrentó a los fondos buitre, a los que ustedes le dieron hasta más de lo que querían, y nos vienen a hablar a nosotros de tratamientos pusilánimes… ¡Lo único que falta! Con un presidente contrabandista poniendo a jueces de la Corte Suprema por decreto, y ni hablar de la persecución que hicieron de dirigentes”.

Pedrini concluyó afirmando que “nosotros detestamos al Fondo Monetario; seguramente nos vamos a tapar la nariz y vamos a votar, pero vamos a votar porque en la Argentina hay un presidente que pone en un sendero de crecimiento”.

“Votamos con convencimiento, no tenemos un voto vergonzante, pero al otro día vamos a empezar a trabajar para que se cancele anticipadamente este préstamo y vamos a ser los garantes de que no haya ajuste, reducción de salarios y que el precio de los servicios no supere al del salario”, cerró el diputado chaqueño.

Tetaz pidió votar una ley para limitar el déficit

Sostuvo que esa es la causa principal de la deuda. Negó además que Cristina Kirchner hubiera desendeudado al país y dio datos que expresan lo contrario.

Tras condenar los incidentes registrados en las puertas del Congreso y luego reclamar la misma celeridad que el Congreso había tenido para abordar este tema con otros que preocupan a la gente, como la Ley de Alquileres y el proyecto de monotributo, el diputado nacional Martín Tetaz homenajeó al fallecido exlegislador Raúl Baglini, autor de lo que con el tiempo se conoció como “el teorema de Baglini”, que en su momento dijo que “la irresponsabilidad de algunos testimonios, as posturas, algunos votos, en materia de deuda externa, era inversamente proporcional a su responsabilidad política, a su cercanía al poder”.

“Lo cual explica buena parte de los comportamientos que estamos viendo en esta cámara”, destacó.

“Es cierto, se dijo acá que Néstor Kirchner lehabía pagado al Fondo 9.500 millones de dólares… Pero no se dijo que en el mismo año le congelaba las jubilaciones a nuestros viejos; tampoco se dijo que con Cristina le dejaron la deuda más grande a nuestros jubilados, que tuvo que pagar el Gobierno anterior”, comentó, para dirigirse luego al bloque oficialista para señalarles que la actual vicepresidenta durante su gestión de gobierno “no desendeudó; asumió con 179 mil millones de dólares -datos oficiales de deuda-, y se fue con 240 mil millones y sin reservas. Y la verdad es que eso se debe esencialmente a déficit fiscal acumulado, porque es de las pocas presidentas que recibió con superávit fiscal, lo perdió el primer año y lo incrementó en cada uno de los siguientes, dejando un déficit calamitoso que es la causa principal de la deuda”.

Tetaz expresó su deseo porque alguna vez el Congreso se reúna para replicar una ley como la que impulsó para limitar la capacidad de endeudamiento del Gobierno, que ponderó, pero dijo esperar que alguna vez se vote una ley “para limitar el déficit, que es la causa principal de la deuda”.

En un pasaje de su discurso, dijo no entender por qué se pedían 45.500 millones de dólares “si solamente le debemos al Fondo 40.000… Piden un poco más porque el Fondo les presta más barato, porque quieren financiar más déficit,y porque evidentemente van con gusto al Fondo, les gusta y piden más de lo que necesitan”. Martín Tetaz definió a este acuerdo como “malo”, porque “no resuelve ninguno de los problemas estructurales de la República Argentina”, y enumeró: “No elimina el sesgo antiexportador, no recupera la moneda, no le saca los impuestos a la producción; tampoco cambia las reglas laborales para las PyMEs y no elimina la burocracia en el Estado”.

Hubo graves incidentes en los alrededores del Congreso

Manifestantes que protestaban contra un arreglo con el Fondo Monetario Internacional atacaron el Palacio con piedras y hasta bombas molotov. Hubo varios policías heridos en la refriega.

El debate del proyecto para avalar el acuerdo entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional devino en gravísimos incidentes que hicieron rememorar las protestas que en la misma zona se dieron a fines de 2017, cuando el entonces Gobierno de Cambiemos buscaba aprobar la reforma previsional.

Las protestas fueron protagonizadas por personas que aprovecharon la manifestación convocada por sectores de izquierda para repudiar el debate que se daba dentro del Palacio del Congreso.

Alrededor de las 15, algunos manifestantes comenzaron a arrojar piedras  y bombas molotov contra el edificio, y luego se enfrentaron contra efectivos de la Policía de la Ciudad, varios de los cuales debieron ser hospitalizados con serias quemaduras.

Con ellos se solidarizaron varios legisladores al comienzo de sus discursos. El primero fue Ricardo López Murphy, que se solidarizó con las fuerzas policiales, lo mismo que más tarde hizo José Luis Espert, que expresó su “condena absoluta a los violentos”. Luego también Martín Tetaz se pronunció en ese sentido y anunció la intención de presentar un proyecto de ley para que se le retire cualquier subsidio a aquella persona que atente contra el patrimonio público.

Lo mismo hizo más tarde el diputado del Pro Federico Angelini, que calificó de “salvajismo” los episodios registrados y expresó su esperanza porque a los autores de esos actos de vandalismo “les caiga todo el peso de la ley”.

De existir esa ley podría ser puesta en marcha, pues autoridades aseguraron que muchos de los vándalos habían sido individualizados. Al respecto el dirigente del Polo Obrero Eduardo Belliboni atribuyó los incidentes a “un grupo pequeño” y hasta se permitió sugerir que podrían haber sido mandados por el Gobierno.

“Nosotros vinimos a manifestarnos, miles y miles de personas contra un acuerdo humillante, colonial, y que significa una enorme violencia contra el pueblo argentino”, aseguró el dirigente que la emprendió en cambio contra “la violencia que el Fondo Monetario Internacional, el Gobierno y la oposición van a llevar adelante contra la población”.

Como siempre pasa, la violencia tiñó de colores oscuros el cariz de la protesta, que en sus inicios fue acompañada por los diputados de la izquierda, que obviamente no habían dado quórum y que tampoco estuvieron al inicio de la sesión. Allí estuvieron Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Romina del Plá y Alejandro Vilca, que pusieron en sus bancas carteles con la consigna “No al Pacto con el FMI”.

Lo cierto es que la violencia se extendió casi hasta las 17. Autoridades porteñas reprocharon que por decisión de Nación no habían podido vallar el Congreso. Muchos cristales de las ventanas estallaron por los impactos. La fachada del Palacio, recientemente refaccionada, quedó manchada por bombas de pintura arrojadas desde la calle.

En ese marco hasta rompieron el vidrio de una de las ventanas del despacho de la presidenta del Senado, Cristina Kirchner.

“Es un programa que no soluciona los problemas del país”, advirtió Nieri

El legislador mendocino cuestionó detalles del programa que acompaña el plan presentado, que constituye el primer plan de gobierno de este que lleva 27 meses, señaló.

Como miembro informante por parte de Juntos por el Cambio ofició este jueves el radical mendocino Lisandro Nieri, quien destacó que en el acuerdo alcanzado “primó la racionalidad y el entendimiento de que hay una obligación por el bien del país de evitar una cesación de pagos, la inestabilidad, el desorden, incertidumbre… Todo costo para el país, que caería sobre nuestras PyMEs, el tejido productivo, los sectores más desprotegidos”.

“Argentina debe honrar sus deudas; en las jornadas de estos días hubo una coincidencia fuerte al respecto”, destacó el legislador radical, para quien “tenemos que empezar a ser más serios, y en lugar de hablar de deudas, hablar de los déficits, que son el origen de nuestras deudas”.

Nieri destacó que con la autorización de este proyecto el Gobierno contaría “tarde, 27 meses después, para poder avanzar en un programa económico, del que empezamos a conocer algunos detalles”.

El legislador mendocino habló de las “muchísimas dudas” que le genera escuchar “un diagnóstico de la situación económica que no sabemos quién ve esa realidad, con la que no coincidimos en lo más mínimo. Si esa es la realidad, ¿por qué solicitar asistencia al Fondo Monetario Internacional para el déficit de este ejercicio? Si fuera tan excelente el acuerdo, ¿por qué tan poco poder de convencimiento en su propio frente?”

Nieri cuestionó también que se ponga como “un mérito ante una situación de dificultades que tiene el país, que se va a aumentar el gasto real. Trato de aterrizar en las finanzas nacionales con la misma dinámica que tenemos cada uno en nuestras casas, y no podemos de manera permanente estar gastando por arriba de nuestras posibilidades”. Por eso, se preguntó si no es posible buscar hacer en el Estado un uso más eficiente del gasto, advirtiendo que “hay una obligación de quien administra fondos públicos de estar todos los días buscando ese gasto ineficiente”.

En cuanto al sendero fiscal que marca el acuerdo, señaló que se anuncia como un logro poder tener mayor gasto. “Si va a ser así, surge que va a ser con mayor presión fiscal, esto es distorsivo”, observó.

“También se plantea como un gran logro que no se van a hacer reformas estructurales. ¿De qué forma vamos a crecer sostenidamente sin reformas estructurales? ¿No nos parece injusto el sistema previsional, que requiere de modificaciones, ya se que no son sencillas, por derechos adquiridos… Pero hay jubilados que cobran 32.600  pesos y jubilaciones de privilegio que cobran 100 veces eso”.

Observó además que “recién se establece hacia fines de diciembre de este año, cuando llevemos tres cuartas partes de este mandato, publicar un estudio para afianzar la equidad… ¿Qué equidad? Primero hay que lograr tenerla para después afianzarla”.

Para Nieri, “este programa nace obsoleto y es poco transparente”, y cuestionó también el cuadro tarifario anunciado, del que dijo que “a nosotros no nos dan los números” y el ministro no dio respuestas ante las consultas.

“Este programa es tibio, tal vez por resistencias internas, pero no se anima a hacer las reformas estructurales para senda del crecimiento”, destacó en otro pasaje, para cuestionar también la falta de un plan contra la inflación. Por el contrario, dijo que este Gobierno “es adicto a la inflación, la necesita para cerrar sus deudas”.

“Creo que es un programa que no soluciona los problemas del país”, señaló sobre el final, advirtiendo que “se terminan las excusas, se terminan los ‘ah, pero’, empiecen a gobernar”.

Máximo Kirchner apareció en la sesión a la hora de votar

El expresidente del bloque no estuvo presente en la sesión para analizar el acuerdo con el FMI.

Entre tantas expectativas que había despertado la sesión especial de este jueves, una de las principales tenía nombre y apellido: Máximo Kirchner. En primer lugar, si estaría en el arranque de la sesión, a la hora del quórum.

No estuvo en el inicio de la sesión, a pesar de estar en el Congreso y de haber tomado parte de la reunión de bloque realizada por la mañana. En el transcurso de la sesión se revelarían las otras dudas: dónde se sentaría, si ingresaba al recinto; si haría uso de la palabra, y cómo votaría.

Pero ya bien entrada la noche el hijo de los Kirchner no había dado señales de estar dispuesto a ingresar al recinto y muchos lo interpretaron incluso como un gesto favorable para el oficialismo, ya que su presencia generaría una tensión innecesaria en estas circunstancias.

Finalmente el expresidente del bloque oficialista apareció en el recinto al concluir el discurso de Germán Martínez, esto es, a la hora de votar. Se sentó al lado del diputado Sergio Palazzo.

Sí estuvieron algunos diputados de La Campora y los que están alineados con Juan Grabois y que adelantaron que no votarán el acuerdo: Itai Hagman, Natalia Zaracho y Federico Fagioli. En el caso de los camporistas, un gesto más: no hicieron uso de la palabra.

Massa: “Es clave esta solución para evitar una catástrofe”

Relativizó las diferencias en el seno del oficialismo asegurando que “la unidad en la diversidad nos enriquece”, destacó el papel del presidente de la Nación y calificó de “histórica” la sesión de este jueves.

Poco antes de iniciarse el debate del proyecto que avala el acuerdo con el FMI, el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa, encabezó este jueves una conferencia de prensa en la que resaltó que “por primera vez en la historia democrática vamos a discutir un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional en este Parlamento, y lo primero que quiero hacer es saludar la valentía y la responsabilidad institucional del presidente de devolver una facultad que está en nuestra Constitución, y que de alguna manera devuelve el control de los empréstitos al Congreso”.

“La historia va a valorar devolverle al Congreso el rol de control en lo que es la toma de deuda”, enfatizó el legislador del Frente de Todos.

Más allá de eso, destacó Massa también que “estamos resolviendo un problema que la Argentina tiene”, y advirtió que si no se sortea esta situación, este año el país deberá enfrentar vencimientos por casi 19 mil millones de dólares, y el año que viene otro tanto, cuando las posibilidades de nuestro país “no están para hacer frente a semejante deuda”, así que valoró “la decisión del Gobierno de avanzar en darle a los argentinos la posibilidad de llevar adelante el presupuesto sin tener que usar la plata de los impuestos de los argentinos para pagar deuda”.

Sergio Massa resaltó además las condiciones que establece el presente acuerdo, teniendo en cuenta que a diferencia de los firmados durante los últimos 20 años “es la primera vez que no exige reformas estructurales: ni jubilatoria, ni de impuestos, ni laboral”.

Hizo hincapié también en que en los últimos 50 años, salvo dos momentos en que Juan Domingo Perón y Néstor Kirchner han cancelado deuda, la Argentina cayó “recurrentemente” en tener que reconfigurar los acuerdos por la deuda. Ahora, enfatizó, el desafío que tiene nuestro país es “trabajar en todas las leyes que de alguna manera ponen en valor el trabajo argentino, para que vendiendo trabajo al mundo podamos ingresar los fondos necesarios para pagar nuestras deudas”.

En otro pasaje agradeció también “al presidente del bloque del Pro, al de la UCR, Provincias Unidas, el interbloque Federal, el Frente de Todos”, y remarcó que “es clave esta solución para evitar una catástrofe”. Aclaró en ese sentido que en un acuerdo “todos plantean algo y todos ceden algo. Porque así como el Gobierno tenía una iniciativa que abrió al resto, de alguna manera también esos bloques cedieron e hicieron concesiones para que el Gobierno pudiera tener esta ley”.

Resaltó entonces que eso habla de “la madurez y responsabilidad con que se ha tratado este tema”. Un tema que, destacó, no es de un Gobierno o un sector partidario, sino de “la Argentina y de los argentinos y afecta por los próximos años”. Por eso destacó que fuera abordado “con estatura de hombres de Estado, que es lo que nos reclama la sociedad”.

Habló a continuación de darles soluciones a los argentinos y ahí destacó leyes que se encuentran en el Parlamento para ser abordadas, citando la de agroindustria, hidrocarburos, de construcción, de baja impuestos a los sectores que promueven la inversión en la Argentina.

Consultado sobre las diferencias que afloraron en el seno del oficialismo frente a este acuerdo, Massa destacó que “lo central es comprender que en todas las fuerzas políticas existe o primera el criterio de unidad en la diversidad”. Y contó como ejemplo que en una reunión del bloque oficialismo recordó que en diciembre pasado, cuando se trató la reelección indefinida de los intendentes, el Frente Renovador que él encabeza votó en contra, y a favor lo hizo el resto del oficialismo, pese a lo cual “nadie en mi fuerza política me señaló con el dedo, porque aprendimos a respetar y tolerar al que piensa distinto”.

¿Tuvo temor a que el acuerdo pudiera caerse?, le preguntaron, a lo que sonriente y aliviado contestó: “Todo el tiempo hasta ayer a las 11 de la noche…”.

Recordó que el Poder Ejecutivo mandó un proyecto, pero también enviaron otros el interbloque Federal, el Pro, la UCR y también la Coalición Cívica, lo que obligó a una “búsqueda de conjunción” que exigía chequeos con las autoridades económicas e incluso las del Fondo. “El presidente había planteado que quedara plasmado que estábamos cancelando el stand by de 2018 y que además quedara el Poder Ejecutivo con las facultades de generar los acuerdos que la responsabilidad emergente requería. Eso que suena tan simple, fue un trabajo que tiene entre 21 y 27 redacciones distintas, hasta llegar a lo que hoy se va a tratar en el recinto”.

Consultado sobre la posición en que queda el ministro de Economía, Martín Guzmán, teniendo en cuenta que lo aprobado no es lo que presentó y defendió, Massa aclaró que “siempre cuando hay una negociación, se parte de la hipótesis de máxima”, y destacó que “la discusión sana nos enriquece”. Y para aventar fantasmas aseguró que el ministro (que se encuentra en Estados Unidos) siguió en detalle la negociación y que el negociador por la deuda, Sergio Chodos, estaba presente en el plenario de comisiones cuando se plasmó el acuerdo. “Trabajamos en forma coordinada todos, no hay islas”, enfatizó.

Ante la pregunta sobre el rol de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el presidente de la Cámara baja señaló que “en general la articulación (entre ambas cámaras) se da posteriormente al tratamiento en el recinto. Mañana o el lunes hablaré con la vicepresidenta para hacerle el giro correspondiente”.

Y ante la consulta de si la vicepresidenta no debería haberse pronunciado, Massa replicó: “Yo la verdad que los veo muy preocupados por la interna del Frente de Todos y poco preocupados por el tema de la deuda”. Destacó en ese sentido lo expresado en el plenario de comisiones por gobernadores que estuvieron allí y que contaron en detalle cómo les hubiera impactado en sus provincias un eventual default.

“Me parece que nuestra responsabilidad es resolver la incertidumbre del ciudadano de a pie. Entiendo que para la novela periodística sea más entretenida la interna, pero a los empresarios del G6 y a las pymes les preocupa que con seriedad, estatura de hombres de Estado, este Congreso resuelva un problema de dimensiones históricas para la argentina”.

Sobre el final, ante una pregunta sobre cómo seguirá la causa judicial contra Mauricio Macri por haber contraído esta deuda en 2018, Massa respondió que “los tiempos del Poder Judicial los define el fiscal, los jueces; no soy yo quién para condicionar una investigación judicial que corre en otro poder del Estado”.

Y cerró señalando respecto de cómo queda internamente el bloque oficialista: “La unidad en la diversidad nos enriquece, compartir, tolerar con aquel que piensa distinto nos hace más grandes, no solo como fuerza, sino como país, porque tenemos que saltar la grieta para garantizar que las próximas generaciones vivan mejor que lo que nos toca vivir a nosotros”.

Cerruti destacó el “consenso alcanzado” para aprobar el acuerdo con el FMI

“Estamos todos comprometidos en encontrar la solución a este problema”, señaló la portavoz presidencial en la tradicional conferencia de prensa de los jueves.

La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, destacó este jueves el “consenso bastante mayoritario” logrado en el Congreso de la Nación para que se pueda aprobar el acuerdo de refinanciación de deuda que alcanzó el Gobierno con el FMI, y apeló a “debatir con un nivel de responsabilidad en la cual todas las fuerzas políticas sean parte de la solución de un problema que compromete a varias generaciones y a nuestras relaciones con el mundo”.

En la habitual conferencia de prensa que brinda a los periodistas acreditados en la Casa Rosada, la funcionaria subrayó que “por primera vez en la historia de Argentina” este debate se dará en el parlamento gracias al proyecto de ley enviado por el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, “para que nunca más se pueda tomar deuda con el FMI sin que sea aprobada por el Congreso de la Nación, porque son deudas que comprometen a varias generaciones”.

“Ahora mismo estamos llegando a este acuerdo de refinanciación de una deuda histórica que se tomó en el año 2018, la mayor de la Argentina y del FMI, que realmente nos deja en una situación muy compleja para seguir adelante con el crecimiento económico y el dinamismo que hemos visto en la economía argentina en el último tiempo”, afirmó.

Resaltó, en ese sentido, que el empleo formal (asalariado público y privado, trabajo autónomo y monotributista) registró un crecimiento de 2,6 por ciento en el último trimestre, cifra que representa a 309 mil nuevas personas con aportes a la seguridad social.

Sobre el dictamen mayoritario aprobado en el plenario de las comisiones de Presupuesto y de Finanzas para ser tratado este jueves en la Cámara de Diputados, Cerruti indicó que, “como ha quedado redactado, establece que el Congreso da la facultad para refinanciar la deuda y le da al Poder Ejecutivo la facultad de firmar los documentos técnicos necesarios”.

“Esto nos da las herramientas que necesitamos”, afirmó.

“Esperamos que haya un buen debate y que lleguemos a la mejor aprobación posible con el mayor consenso posible”, dijo Cerruti y reiteró que “es un problema que no generamos, pero queremos solucionarlo y compartir esa solución con todas las fuerzas”.

Señaló que “tener una ley con el mayor consenso posible y la mayor cantidad de votos a favor es lo más importante que tenemos que conseguir en este momento en el parlamento”, y a la vez celebró las gestiones que llevaron adelante “el presidente, el ministro Guzmán, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, los jefes de bancadas y representantes de todos los bloques que dialogaron e intentaron llegar a algo que conforme a todos”.

“El proyecto que se va a discutir hoy es el mejor proyecto para alcanzar el consenso necesario para demostrarle al mundo y también entre nosotros que estamos todos comprometidos en encontrar la solución a este problema y que hay un amplio consenso y apoyo a lo que vamos a llevar adelante”, concluyó.

Quiénes firmaron y quiénes no el dictamen

El proyecto que avala el acuerdo con el FMI tuvo mayoría de firmas del plenario, con algunas deserciones de JxC.

75 firmas reunió el dictamen de comisión que se debatirá este jueves en el recinto de la Cámara de Diputados. Una mayoría que augura un resultado amplio y favorable a la hora de votación en el recinto.

También se observa la reticencia de algunos legisladores, principalmente de Juntos por el Cambio, que seguramente no votarán entonces a favor.

Firmaron el dictamen los diputados Walberto Allende, Alicia Aparicio*, Tanya Bertoldi, Rosana Bertone*, Daniel Brue, Pamela Calletti, Marcelo Casaretto, Guillermo Carnaghi, Sergio Casas, Eduardo Fernandez*, Silvana Ginocchio, José Luis Gioja, Carlos Gutiérrez, Carlos Heller*, Bernardo Herrera, Susana Landriscini, Mario Leito, Aldo Leiva, Mónica Litza, Varinia Marín, Germán Martínez*, Roberto Mirabella, Carolina Moisés, Blanca Osuna, María Parola, Gabriela Pedrali, Juan Manuel Pedrini, Julio Pereyra, Hernán Pérez Araujo, Jorge Romero, Carlos Selva, Victoria Tolosa Paz, Diego Sartori, Lidia Ascarate, Miguel Bazze, Ricardo Buryaile, Pedro Galimberti, Miguel Nanni, Leandro Nieri*, Jorge Rizzotti*, Víctor Romero*, Pamela Verasay, Germana Figueroa Casas*, Rogelio Frigerio*, Alvaro González, Gustavo Hein, Ingrid Jetter, Luciano Laspina*, Laura Rodríguez Machado, Diego Santilli*, Matías Tacetta*, Pablo Torello, Alejandro Cacace, Martín Tetaz*, Victoria Borrego, Jimena López, Paula Oliveto; Ignacio García Aresca, Alejandro Rodríguez.

En disidencia: Carlos Ponce.

*Integra las dos comisiones

No firmaron:

Gerardo Milman (firma doble), Omar De Marchi, Federico Angelini y Graciela Ocaña.

Tras intensas negociaciones hubo acuerdo para garantizar la aprobación del acuerdo

En el marco de las reuniones entre oficialistas y opositores para acordar un texto que permita la media sanción se alcanzó un entendimiento que permitiría ir a la sesión con las garantías necesarias para que salga el proyecto.

Otra intensa jornada se vivió este miércoles en torno al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, pero finalmente se alcanzó un entendimiento entre las partes para garantizar la aprobación durante la sesión.

Mientras en el plenario de comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas de la Cámara baja el debate avanzaba con la intención final de suscribir el o los dictámenes, se sucedían las febriles reuniones con el objeto de arribar a un consenso que permitiera llegar a la sesión con la certeza de que el Gobierno tendrá los votos suficientes para aprobar el acuerdo. Y para ese objetivo está claro desde hace tiempo que el Frente de Todos necesita contar con apoyo de una (buena) parte de la oposición.

Así las cosas, la discusión giraba en torno al texto que envió el Poder Ejecutivo y los dos artículos que incomodaban a la oposición. No solo a Juntos por el Cambio, sino también al interbloque Federal, que pasadas las 14 organizó una conferencia de prensa en la que sus miembros dejaron clara su negativa a votar el programa económico dentro del proyecto de acuerdo con el FMI, en una postura similar a la que plantea Juntos por el Cambio, aunque con una propuesta propia.

Protagonista central de todas las negociaciones, pasado el mediodía el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, concurrió a la Casa Rosada para dialogar con el presidente Alberto Fernández. Según trascendió, el diputado le llevó al mandatario tres propuestas de la oposición y una “unificada” del Frente de Todos, que ya se mostraba dispuesto a modificar el texto del proyecto.

La Mesa Nacional de Juntos por el Cambio tenía previsto una reunión para las 17, por Zoom, para avanzar en la postura que llevarían sus diputados al recinto. Pero ante las novedades, el encuentro se postergó hasta las 21.

Las novedades las llevó el presidente de la Cámara baja, que al regresar de la Casa Rosada concurrió nada menos que al despacho del presidente del bloque radical, Mario Negri, acompañado por el jefe del bloque oficialista, Germán Martínez. Por Juntos por el Cambio participaron el jefe del bloque Pro, Cristian Ritondo, el titular del bloque CC-ARI, Juan Manuel López, y sus pares Ricardo Buryaile, Silvia Lospennato, Ricardo López Murphy, Lisandro Nieri, Julio Cobos, Alejandro Cacace, Claudio Poggi, Luciano Laspina y Gerardo Milman. Esa reunión a puertas cerradas pareció tener momentos álgidos, al punto tal de escucharse gritos entre los interlocutores desde fuera de las oficinas del cordobés. Sin embargo el diputado Buryaile le bajó el tono más tarde, cuando al ser consultado por el canal Diputados TV, aclaró que “éramos muchos y teníamos que alzar la voz para hacernos escuchar”.

La reunión se extendió hasta las 19, hora en la que salieron Massa y Martínez, quienes regresaron 15 minutos más tarde, ya con caras distendidas. El acuerdo estaba al caer.

Al reanudarse la reunión se había terminado de llegar a un acuerdo, en el que los dos artículos de la discordia se transformarán en uno solo, consensuado. Así se acordó que cada sector de Juntos por el Cambio recibiera el nuevo texto y diera su conformidad, mientras se establecía un cuarto intermedio de dos horas en el plenario de comisiones, que a su regreso debería firmar el dictamen correspondiente, ya con las correcciones acordadas.  

A su vez, Sergio Massa partió rumbo a la Casa de Gobierno para llevarle el nuevo texto al presidente de la Nación y darle detalles del entendimiento.

Pasadas las 21, el presidente del bloque radical, Mario Negri, transparentó el acuerdo al señalar en un tuit que “tras muchísimo esfuerzo, JxC logró convencer de que el default jamás podía ser una solución, que por ello es importante aprobar el financiamiento del FMI, pero también sacar de la ley enviada por el Gobierno cualquier aval a un programa económico. Somos oposición responsable”.

El cuarto intermedio se extendió más de lo previsto, al punto tal que pasadas las 22 un halo de incertidumbre alcanzó a los legisladores de Juntos por el Cambio, algunos de los cuales estaban dispuestos a retirarse ante la ausencia del presidente del plenario, Carlos Heller. Finalmente éste apareció y aclaró que la demora tenía que ver con la necesidad de corregir puntillosamente la redacción del articulado. Minutos después se reanudó la reunión y ahí el presidente del bloque oficialista, Germán Martínez leyó el proyecto, que tenía una modificación con respecto al texto original, pero no cambió los ánimos de quienes entendían que se había alcanzado “un buen acuerdo”.

Confirmada esta “fumata blanca”, está garantizada la aprobación del proyecto por un gran número de votos, más allá de la postura contraria de un puñado de diputados oficialistas. Una buena señal para llevar al Senado, donde el proyecto buscará la sanción definitiva.

FMI: Intensas negociaciones para garantizar la aprobación del acuerdo

Sucesión de reuniones entre oficialistas y opositores para acordar un texto que permita la media sanción, mientras avanza el debate en el plenario de comisiones.

Otra intensa jornada se vivió este miércoles en torno al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Mientras en el plenario de comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas de la Cámara baja el debate avanzaba con la intención final de suscribir el o los dictámenes, se sucedían las febriles reuniones con el objeto de arribar a un consenso que permita llegar a la sesión con la certeza de que el Gobierno tendrá los votos suficientes para aprobar el acuerdo. Y para ese objetivo está claro desde hace tiempo que el Frente de Todos necesita contar con apoyo de una (buena) parte de la oposición.

Así las cosas, la discusión sigue girando en torno al texto que envió el Poder Ejecutivo y los dos artículos que incomodan a la oposición. No solo a Juntos por el Cambio, sino también al interbloque Federal, que pasadas las 14 organizó una conferencia de prensa en la que sus miembros dejaron clara su negativa a votar el programa económico dentro del proyecto de acuerdo con el FMI, en una postura similar a la que plantea Juntos por el Cambio, aunque con una propuesta propia.

De muchas de esas reuniones participó el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien pasado el mediodía concurrió a la Casa Rosada para dialogar con el presidente Alberto Fernández. Según trascendió, el diputado le llevó al mandatario tres propuestas de la oposición y una “unificada” del Frente de Todos, que está dispuesto a modificar el texto del proyecto.

Mientras la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio postergaba su reunión por Zoom prevista para las 17 para las 21, ya de vuelta en el Congreso, el presidente de la Cámara concurrió al despacho del presidente del bloque radical, Mario Negri, acompañado por el jefe del bloque oficialista, Germán Martínez. Por Juntos por el Cambio también estaban el jefe del bloque Pro, Cristian Ritondo, el titular del bloque CC-ARI, Juan Manuel López, y sus pares Ricardo Buryaile, Silvia Lospennato, Ricardo López Murphy, Lisandro Nieri, Julio Cobos, Alejandro Cacace, Luciano Laspina y Gerardo Milman. Esa reunión a puertas cerradas los ánimos se habrían caldeado, al punto tal de escucharse gritos entre los interlocutores desde fuera de las oficinas del cordobés. La reunión se extendió hasta las 19, hora en la que salieron Massa y Martíez, que regresaron 15 minutos más tarde.

Con todo, fuentes oficiales aseguraron a parlamentario.com que “el dictamen sale, con modificaciones”. No dieron precisiones sobre cuáles serían esos cambios.

Una fuente opositora deslizó a media tarde que la oposición votaría de manera unificada y -más importante- el proyecto de acuerdo sería aprobado por un gran número de votos. Se verá.

Juntos por el Cambio define su postura para llevar al recinto

La Mesa Nacional mantendrá una reunión virtual para resolver qué harán respecto del acuerdo con FMI.

Mientras continúan las negociaciones con las autoridades del oficialismo para lograr correcciones en el texto del proyecto que se votará esta semana sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio se reunirá este miércoles a partir de las 17 para terminar de definir su postura en torno a la votación en el parlamento del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

La postura hasta ahora expuesta desde ese espacio sigue siendo la misma anunciada el último domingo, al cabo de un encuentro por Zoom de la Mesa Nacional, en la que reafirmaron su postura contraria al default, pero rechazaron votar algo que implique acompañar el programa elaborado por el Gobierno.

El espacio tratará de garantizar que una mayoría de sus miembros voten de la misma manera, aunque no se descarta que terminen expresando distintas posturas en el recinto.

Los diputados que responden a Grabois no votarán el acuerdo

Así lo confirmaron en el marco de una conferencia de prensa en la que aclararon que sí se mantendrán dentro del Frente de Todos.

“No cuente con nosotros para votar un acuerdo que prolonga la dependencia sin resolver los problemas sociales más básicos”, concluye un extenso comunicado difundido por el Frente Patria Grande que tiene letra de Juan Grabois y que se conoció este miércoles bien temprano, en el marco de una conferencia de prensa de la que tomó parte el citado dirigente, junto a los diputados nacionales Itai Hagman, Natalia Zaracho y Federico Fagioli, de la que también participaron la diputada porteña Ofelia Fernández, y dirigentes de ese espacio.

En el encuentro celebrado en el JJ Circuito Cultural, ubicado en Jean Jaures 347 se celebró una conferencia de prensa con el fin de difundir la postura que adoptarían los tres diputados miembros de ese espacio en la sesión prevista para esta semana. No había muchas dudas al respecto, si se tiene en cuenta que el hashtag difundido con la convocatoria era este: #LaDeudaEsConElPueblo

El mensaje citado al principio, que refiere a la actitud que mostrarán esos tres diputados del Frente de Todos en la sesión en la que se tratará el acuerdo con el FMI, está dirigido al presidente Alberto Fernández, al que le aclaran que “cuenta con nosotros para conservar la unidad en la diversidad; hacer frente a las amenazas de una oposición destructiva e irresponsable; colaborar con honestidad y esfuerzo en las políticas populares del gobierno; luchar por la recuperación del dinero malversado y fugado… pero no cuente con nosotros para apoyar medidas que rechazamos explícitamente desde el día 1 y contradicen las convicciones de este espacio”.

En el comunicado difundido detallan que se sumaron al Frente de Todos en su momento ante la convicción de que “derrotar a Macri” requería “una coalición amplísima y la piedra angular de esa hazaña era necesariamente Cristina por encarnar a la principal fuerza de oposición a las políticas neoliberales. Defenderla era la llave para dejar atrás aquel nefasto gobierno. Finalmente, en 2019, con el esfuerzo de todos, construimos la coalición más amplia de la historia política argentina: desde Pino Solanas hasta Sergio Massa”.

Pero sostienen que “cuando asumió el gobierno por el que tanto luchamos, el equipo económico definió otro camino. Vimos con preocupación el error estratégico que se estaba cometiendo. Lo planteamos puertas adentro y puertas afuera. Otra vez la trampa de ‘los buenos modales’ y la amnesia histórica. No se impugnó el incumplimiento manifiesto del propio estatuto del Fondo ni se denunció formalmente la estafa. Empezamos perdiendo porque aceptamos negociar dentro de las ‘reglas’ que el propio FMI impone pero viola.

“El acuerdo al que llegó el Poder Ejecutivo es consecuencia del mencionado error estratégico y el error estratégico deriva de una concepción tecnocrática, despolitizada y ahistórica sobre el Fondo. El Fondo no es un organismo multilateral neutral, sino una herramienta para la hegemonía geopolítica y financiera”, sostienen en el comunicado en el que refieren que “si hacemos una lectura ligera del proyecto de ley, podríamos ver un resultado razonable, mejor al obtenido por otros países”, pero aclaran que “nosotros lo vemos de un modo completamente distinto. Vamos a pagar una estafa sin obtener concesiones significativas de los estafadores. No obtuvimos ni quita de capital ni de intereses como habíamos planteado muchos integrantes de la coalición sin que estas demandas se pusieran sobre la mesa de negociación. Tampoco se obtuvo lo que sí planteó el equipo negociador: la extensión de plazos, y la eliminación de sobretasas”. Advierten además que “con este acuerdo, la Argentina tampoco sale de la zona de vulnerabilidad financiera. Seguimos teniendo la famosa espada de Damocles sobre la cabeza. De eso se tratan las revisiones trimestrales que nos impusieron. En una economía global altamente convulsionada, con metas tan estrictas, al FMI no le van a faltar excusas para enviarnos al default. Es una pistola sobre las sienes de la Argentina. No van a dudar en apretar el gatillo cuando les convenga. Valga recordar que Damocles tenía esa espada por sus tratos con un tirano. El FMI es un tirano que se impone a la fuerza”.

Conferencia de prensa del interbloque Federal

La bancada que cuenta con 8 diputados expondrá este miércoles su postura de cara a al debate sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Con vistas al debate previsto para esta semana en el recinto de la Cámara de Diputados, el interbloque Federal de diputados dará este miércoles una conferencia de prensa para anunciar su posición respecto a la propuesta de acuerdo con el FMI.

Será este miércoles a las 14, en el Piso 8 del Anexo C de la Cámara de Diputados de la Nación, y participarán los ocho integrantes de ese espacio. Son Graciela Camaño, Florencio Randazzo y Alejandro “Topo” Rodríguez, de Identidad Bonaerense; Carlos Gutiérrez, Natalia de la Sota y Ignacio García Aresca, de Córdoba Federal, y los socialistas Enrique Estévez y Mónica Fein.

Cabe recordar que el mismo 28 de enero en el que el Gobierno anunció su entendimiento con el FMI, los cordobeses adelantaron ya entonces su postura: darán quórum y se abstendrán a la hora de votar. “El bloque Córdoba Federal manifiesta que el acuerdo anunciado con el FMI, y las consecuencias que pueda traer aparejadas para los argentinos, es responsabilidad del Gobierno nacional. Nuestro bloque no obstaculizará el tratamiento de dicho acuerdo en el Congreso”, explicaron entonces desde ese espacio.

El resto de los legisladores no se ha manifestado aún, pero han hecho trascender que, como está, el texto del proyecto no contribuye a un acuerdo amplio.

Siguen los tironeos en torno al proyecto del acuerdo con el FMI

El presidente de la Cámara de Diputados mantuvo reuniones con jefes de los bloques opositores, que reclaman modificaciones para apoyar. También habló con el staff del Fondo. Seguirán buscando un consenso.

Concluida la ronda de expositores ante la Cámara de Diputados que debe resolver la suerte del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, es el momento en el que los diputados tienen la palabra y eso harán a partir de las 13.30, en el marco del plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas. Sin embargo no es allí donde se terminará resolviendo el o los textos que llegarán al recinto. Mientras tanto, continúan las negociaciones en el más alto nivel del oficialismo y la oposición.

De hecho, este martes hubo reuniones del presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, con los jefes de bloques de la oposición, que insistieron en la necesidad de implementar modificaciones en el texto del proyecto. Paralelamente también la principal oposición realizó una reunión con todos los componentes del muy diverso interbloque, para tratar de avanzar hacia una postura lo más uniforme posible, que se acerque al deseo expresado el domingo pasado durante la reunión de la Mesa Nacional realizada de manera virtual: “de la forma más cohesionada posible”.

El presidente de la Cámara no solo habló con la oposición y con los propios. Según pudo certificar parlamentario.com, también mantuvo este martes un contacto vía zoom con el staff del Fondo Monetario, desde donde le dijeron esperar un apoyo sustantivo al acuerdo. Cerró su jornada reuniéndose con el presidente Alberto Fernández.

Las negociaciones contrarreloj arrancaron este martes temprano, mientras comenzaba un nuevo plenario de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas. A esa hora Massa, recibía a referentes del interbloque Juntos por el Cambio. Del café participaron Mario Negri, jefe de la UCR; Juan Manuel López, titular de la CC; y Luciano Laspina, vicepresidente de la Comisión de Presupuesto y referente económico del bloque Pro. Según supo este medio, el presidente de la bancada macrista, Cristian Ritondo, no asistió por encontrarse en Expoagro.

Tras el encuentro, fuentes parlamentarias revelaron que los opositores le transmitieron a Massa que el oficialismo hoy no cuenta con los votos para imponer en el recinto el proyecto tal cual lo envió el ministro de Economía, Martín Guzmán. “El artículo primero es imposible de votar porque contiene una referencia directa al programa económico y Juntos por el Cambio sólo está dispuesto a aprobar el financiamiento”, expresó uno de los asistentes a la reunión.

En esa línea, que desde JxC vienen reiterando con fuerza, insistieron con que “el segundo artículo es invotable” y “no hay ningún motivo jurídico, económico y político para que el Congreso tenga que aprobar la política económica del Gobierno”.

“Vamos a ver si nos podemos poner de acuerdo en una nueva redacción de los artículos. Por ello, quedamos en volver a juntarnos antes de que el plenario de comisiones dictamine“, anticipó uno de los legisladores presentes.

En caso de que no haya acuerdo con el Frente de Todos, JxC ya anticipó que elaborará un dictamen propio, de un solo artículo que autorice el nuevo crédito con el Fondo.

Pero además de JxC, otros bloques de la oposición tampoco estarían dispuestos a avalar el programa económico de Guzmán, con lo cual el riesgo para el oficialismo es perder en la votación en particular y que la oposición termine imponiendo cambios o volteando un artículo. Además, desafían: “Nadie quiere votar el programa económico de Guzmán en el que no cree ni siquiera buena parte del oficialismo”.

También, los referentes de JxC plantearon la posibilidad de abstenerse en la votación en general si no hay cambios al dictamen en el artículo 2 -el referido al programa económico-; y aprobar el primer artículo, pero abstenerse o rechazar el segundo, según el criterio de cada bloque.

Para continuar acercando posiciones, Massa mantuvo por la tarde reuniones con el resto de la oposición: Rodrigo De Loredo (Evolución Radical), Alejandro “Topo” Rodríguez (Interbloque Federal) y Luis Di Giacomo (Interbloque Provincias Unidas).

Según pudo saber parlamentario.com, los legisladores le expresaron al titular de la Cámara que el proyecto enviado por Guzmán “no contribuye a un acuerdo amplio” y le sugirieron buscar acuerdos.

Con todo, un legislador opositor aclaró que “hay tiempo” todavía para lograr esos acuerdos, y remarcó que nadie puede pensar que esto se resuelve en unas horas. “Llevamos un día y medio nada más”, apuntó un legislador opositor, que apuntó que “no es un plazo (suficiente) para madurar acuerdos”.

Cauto optimismo

Los principales popes del oficialismo mantienen su confianza en que arribarán a una solución satisfactoria. Que encontrarán una síntesis entre lo que quiere el presidente, la oposición y lo que conformará al Fondo Monetario.

En el oficialismo cayeron muy bien las expresiones del gobernador jujeño Gerardo Morales, jefe del radicalismo, que en su exposición en el Congreso “fue más convincente incluso que Martín Guzmán”, como expresó -medio en broma, medio en serio- un hombre del Frente de Todos. “De acá tenemos que salir con ley”, señaló por la tarde el integrante de la Mesa de Conducción de Juntos por el Cambio ante los legisladores este martes durante el plenario de comisiones.

Mientras tanto continúan negociando y habría algún margen para que haya alguna modificación. La aspiración oficialista es que todos trabajen en un dictamen de mayoría y que aquellos que se opongan firmen en disidencia y luego sugieran modificaciones.

El tono de algunos voceros oficialistas se torna grave cuando refieren que “no hay margen para extorsiones, ni de parte de la oposición, ni del oficialismo a la  oposición”.

“Si acá no sale algo bueno, esta ley afecta muchísimo la imagen institucional del país”, alertó una fuente, que enfatizó en que esta ley no va a afectar solo a este Gobierno y al próximo, sino también a varias generaciones. Por eso “hay que buscar la mejor salida.

“Los votos están”, arriesgó un vocero oficialista, confiado en abstenciones o ausencias de quienes rechacen. Confían también en que el dictamen salga este miércoles o a lo sumo al día siguiente, para que se pueda sesionar a continuación, aunque no se descarta que esto se extienda hasta la semana que viene. No sería lo  más conveniente, pues después debe tratarlo el Senado.

¿Y si la votación no es tan contundente y termina saliendo algo débil? Desde el oficialismo relativizan esa posibilidad y hasta se ilusionan con una doble victoria como podría suponer la aprobación y la foto de una oposición dividida.

El Grupo de los 6 se pronunció ante los diputados en contra de un default

Representantes de cámaras empresariales se presentaron ante el plenario de Presupuesto y de Finanzas para pronunciarse a favor de la aprobación del proyecto.

Las cámaras integrantes del G-6 se presentaron este martes en el Congreso de la Nación para opinar sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. En nombre de la Cámara Argentina de la Construcción habló su presidente, Gustavo Weiss, quien expresó su firme apoyo al acuerdo, señalando enfáticamente que “estamos absolutamente de acuerdo en el no default; entendemos que las consecuencias macroeconómicas y sociales que significarían entrar en default serían dramáticas y con enormes distorsiones económicos, aun más profundas que las que podemos estar viviendo en este momento”.

“Abogamos por el acuerdo, entendemos que es muy superador de cualquier otra alternativa posible hoy sobre la mesa”, destacó, valorando en particular que “uno de los fundamentos que se mencionan claramente en el desarrollo de los anexos al acuerdo es que la inversión en infraestructura económica y social va a aumentar respecto de años anteriores, algo inusual, porque cada vez que ha habido acuerdo lo primero que se restringe es el gasto y el gasto lo más fácil es la inversión en infraestructura económico social, el gasto de capital”.

Destacó que en este caso la inversión en infraestructura se incrementa en dos puntos del producto, contra 1,8 del año anterior y destacó que “esto ayuda a cerrar la enorme brecha de infraestructura que arrastra el país a lo largo de muchas décadas”.

A su turno, el presidente de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, sostuvo: “Se ha hablado de lo no tan bueno y de las bondades del acuerdo, pero estamos convencidos que mucho peor sería el escenario de un default. Venimos de un sector que con un simple apretón de manos firmamos un acuerdo y respetamos la palabra y nos parece conveniente hacerlo”.

“La argentina debe aprovechar la postergación de los desembolsos hasta el 2026 que permita instrumentar un mecanismo de mayor desarrollo económico en base a la inversión y al empleo. Para lograr los objetivos hay que dar impulso a las políticas orientadas a fortalecer las expectativas y decisiones que se necesitan desde el sector agroindustrial, hay que hacer esfuerzos para bajar la inflación, y potenciar el sector agroindustrial que tiene mucho para dar”, remarcó Pino.

En tanto les habló a los legisladores que tienen la “tarea de buscar las bases para buscar una Argentina más justa donde vivir”.

Luego, expuso el presidente de la Cámara de Comercio, Natalio Gridman, quien expresó que la postura es la misma de siempre “respetamos los acuerdos”, y recordó que en el 2020 “tuvimos una posición positiva de la necesidad de acordar con los acreedores privados”.

“No porque consideramos que el acuerdo con el Fondo soluciona nuestros problemas, porque sabemos que no es así, pero no acordar iba a ser mucho más gravoso para todos los argentinos y especialmente para los que mendos tienen”, señaló y remarcó: “Se necesita patear para adelante un poco y hacer lo que tenemos que hacer, porque dentro de 4 años nos vamos a encontrar en una situación similar donde el Gobierno no va a tener los recursos para pagar las deudas”.

A su vez, Gridman precisó que “lo único que creció en Argentina fue la pobreza y es inexplicable en un país con los recursos naturales y humanos que tiene. Todos tenemos responsabilidades, por lo tanto, acordar con el Fondo es imprescindible y lo ideal es que salga por unanimidad en el Congreso”.

“Si seguimos haciendo lo mismo, no podemos esperar resultados diferentes. Tenemos que hacer los cambios e impulsarlos para transitar los caminos hacia un país normal, no puede ser 45 % de pobres”, reflexionó y cerró: “La Cámara de Comercio no es ni opositora ni oficialista, siempre fuimos democráticos, pero sabemos lo que se necesita para que un país avance, apoyamos el acuerdo, pero que sea una bisagra para realizar los cambios que se necesitan para salir adelante”.

A su turno, el presidente de ADEBA, Javier Bolsico, señaló que el tema plantea lo que definió como “una situación binaria: acuerdo o default. No hay otras opciones”. El empresario se refirió a la refinanciación de la deuda acordada entre el Gobierno y el FMI señalando que “la refinanciación per se no resuelve ninguno de los problemas económicos y sociales que tenemos actualmente, pero sí generan la condición necesaria para que los mismos puedan ser abordados”. Y en ese sentido se preguntó cuál es la condición necesaria para eso, y se respondió: “No estar en cesación de pagos”.

“Una nueva cesación de pagos casi inmediatamente se transformaría en mayor pobreza y exclusión. Aislaría a la Argentina del mundo de los mercados económico, financiero”, afirmó, y se permitió aventurar que eso sería para nuestro país algo parecido a que nos sacaran del SWIFT, un efecto parecido a lo que sucede en la actualidad con Rusia por su invasión a Ucrania.

Así las cosas, Bolsico sostuvo que no identifica “una sola ventaja de no refinanciar. Si se refinancian los vencimientos, tendremos la oportunidad de resolver los problemas”.

Admitió que el plan amerita algunos interrogantes, como por ejemplo que hay años que presentan una alta concentración de deuda. “Ese es otro de los problemas que hay que afrontar, pero antes tenemos que afrontar este que está primero”, dijo, y cerró: “Como presidente de ADEBA, confío que el Parlamento encontrará el camino para poder refinanciar la deuda con el fondo”.  

El presidente de la Bolsa de Comercio Adelmo Gabbi ratificó lo dicho por el resto de los dirigentes empresariales, y señaló que “junto al acuerdo es imprescindible que el Gobierno de una vez por todas presente un plan económico que no solo contemple la disminución del déficit fiscal, si no que incentive a la inversión privada para que sea el motor de la generación del empleo de calidad, sea el motor de la nueva Argentina”.

En este sentido, destacó la importancia de contar con un sector privado pujante: “Sin este no hay contribuyentes, y sin contribuyentes es improbable un Estado presente. Financiar la actividad privada argentina es imposible si no cumplimos los compromisos, si nuestra palabra no sirve absolutamente para nada”.

Así, reiteró su apoyo al acuerdo, y consideró que “leyendo la letra chica, es muy positivo para el país”, aunque advirtió que “nada podría hacerse sin un plan económico real, un plan económico verdadero, que hoy no tenemos”.

“Es necesario un verdadero plan económico que el PEN lleve adelante para evitar volver a caer en los problemas que hemos caído”, reiteró Adelmo Gabbi.

Por último, expuso Daniel Funes de Rioja, presidente de la UIA (Unión Industrial Argentina) quien reflexionó: “El mundo aún atraviesa una pandemia sanitaria, se sumó una pandemia bélica cuyas consecuencias se suman de manera vertiginosa en impactos que no solo son autónomos sino relacionados y que van a afectar nuestra realidad y expectativas. Por eso hace complejo el proceso de recuperación económica con inclusión social a la que legitimante aspiramos”.

“Tenemos la necesidad de una argentina productiva, federal, integrada, productiva y competitiva. Hemos trabajado con todas las áreas del Gobierno nacional para superar todas las consecuencias de la pandemia. Frente a todas las incertidumbres, debemos tratar de esforzarnos para despejar los problemas que el país arrastra: pobreza 40. 6 %, desocupación 9.3%. Es un esfuerzo que debemos hacer todos”, consideró y cerró: “Tenemos que cerrar el problema de la deuda, no podemos caer en el default, para eso hay que pensar en empleo, en producción, en exportación, hay espacios para eso, es una convicción no un deseo, pero necesitamos políticas de Estado”.

La CGT expuso a favor del acuerdo con el Fondo Monetario

Héctor Daer valoró que el acuerdo suscripto con el Fondo no afecta beneficios sociales ni laborales.

Acompañado con el cosecretario Carlos Acuña, el secretario general cegetista Héctor Daer resaltó este martes ante los dipuatdos naconales que analizan el entendimiento con el FMI que este acuerdo haya sido enviado al Parlamento para ser tratado. Y destacó también el hecho de que haya cambiado la decisión de sucesivos gobiernos “que iban al Fondo Monetario a plantear créditos stand by a costa de derechos sociales y derechos laborales”.

“Los que ofrecieron sistemáticamente cambios en las estructuras sociales de nuestro país fueron los sucesivos gobiernos llevándolos al FMI como garantía de los sucesivos préstamos”, sostuvo.

El dirigente sindical recordó que no hace mucho tiempo invitaron al ministro de Economía a la CGT, y allí le plantearon las dudas que les generaba la negociación con el Fondo respecto de cuestiones sociales y de derecho laboral, pero destacó el compromiso de Martín Guzmán, que a su juicio quedó plasmado en el acuerdo de facilidades extendidas firmado. “Es la primera vez en la historia de las discusiones con el Fondo Monetario Internacional que no se hace con el lomo de los trabajadores”, resaltó Daer.

Admitió que “no hay acuerdo con el Fondo que se pueda festejar, ni mucho menos”, pero remarcó que “esto es salir de la tragedia”.

“Nuestra posición es acompañar este acuerdo y nos alegra que este Congreso nos haya dejado esta posibilidad de opinar”, cerró.

Gobernadores pidieron a los diputados aprobar el acuerdo con el FMI

Numerosos gobernadores -en su mayoría del oficialismo- se presentaron ante el plenario de comisiones de la Cámara baja para exponer en torno al entendimiento con el Fondo.

Una docena de gobernadores y dos vices se presentaron este martes en la Cámara de Diputados para exponer en torno al acuerdo con el Fondo. Y lo hicieron con críticas en algunos casos a la gestión anterior que tomó el endeudamiento “de una manera irresponsable”, pero pidiendo la aprobación del mismo pues “es un crédito que no pedimos, que no usamos, pero que hay que pagar”, tales las palabras del santafesino Omar Perotti.

El jefe de Gabinete, Juan Manzur, intervino al principio para presentar a los mandatarios provinciales, convocados para cumplir con la iniciativa de dar parte al Congreso. “Como un hombre del norte argentino celebro la posibilidad de que quienes tienen la responsabilidad de conducir las provincias se hagan presentes aquí para dar sus comentarios, aportes y sugerencias” respecto del acuerdo con el Fondo, señaló el gobernador tucumano en uso de licencia.

El primero en intervenir fue el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, quien agradeció la posibilidad de “expresar con una visión federal” frente al acuerdo. Aclaró que no fue la gestión del Frente de Todos la que decidió tomar el endeudamiento y criticó a la gestión anterior por haberlo hecho. “Pero bueno, somos gobierno y tenemos que encontrar una solución que amerite tener la posibilidad de previsibilidad para que nuestro país pueda tener un futuro de desarrollo y un horizonte que permita honrar los compromisos que otras gestiones asumieron”.

“Es el mejor entendimiento al que se pudo arribar”, aseguró, y lo diferenció con otros acuerdos señalando que este “plantea diferencias notorias”, citando puntualmente otros que pedían generar reformas laborales, ni una reforma previsional, y en cuanto a la reducción del déficit sostuvo que “son metas cumplibles”. No aprobar este proyecto “sería sacar a la Argentina del mundo”, alertó Bordet, que agregó las consecuencias que traería para las provincias esa situación, como así también a las empresas que ya no tendrían financiamiento ni insumos para producir.

En tanto, el gobernador santafesino Omar Perotti manifestó: “Tenemos que resolver un crédito que no pedimos, que no usamos y que hay que pagar. Esta situación amerita el mayor nivel de análisis como responsabilidad de país para el cumplimiento de los compromisos y lo que significaría el default”.

“Queremos cuidar la recuperación en la argentina, queremos que el acuerdo planteado resguarde, en las consideraciones a diferencias de otros programas con el organismo, la posibilidad de crecer y de poder pagar con ese crecimiento. Estamos convencidos de que existe esa posibilidad, lo viene demostrando en este período con la posibilidad de recuperación de cada sector productivo aún con las dificultades de la pandemia”, expresó.

En ese marco, Perotti recordó que “la historia argentina marca períodos de endeudadores y de pagadores, en mi provincia me toca ser pagador de una deuda tomada en períodos anteriores”, y remarcó: “Queremos que el financiamiento de los organismos internacionales se pueda mantener en pie, allí tenemos posibilidades de inversiones que no se pueden cumplir con nuestros plazos ni productos. Generar este acuerdo en condiciones donde no nos gustaría estar, pero generar las condiciones de evitar lo que no nos gustaría, darles a nuestros sectores previsibilidad de cumplimientos internacionales y leyes de fomento para garantizar un crecimiento sostenido”.

Por su parte, el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, agradeció la “posibilidad de poder opinar y participar”. “Aquellos que gobernamos y tenemos la difícil responsabilidad de hacerlo, más en esta época, nos preocupa muchísimo el futuro, pero por sobre todas las cosas el presente”, sostuvo y remarcó que “los gobernadores no le pedimos ni a los diputados ni a los senadores que hagan que no hayamos hecho nosotros”.

En esa línea, explicó que el problema de la deuda “se llama continuidad: aquí no es quién contrajo la deuda, quién la paga; esto se llama Estado y es una continuidad y hay que cumplir y honrar con esa deuda. La historia después dirá si se tomó bien, si tomó mal, si se pagó bien, si se pagó mal”.

“Lo que tenemos que buscar es darle a aquellos que nos prestan plata la tranquilidad y la confianza de que nuestro país es previsible y que brinda seguridad jurídica”, afirmó el salteño. Además, en su alocución destacó la “actitud noble” de su par jujeño Gerardo Morales, el único mandatario de Juntos por el Cambio presente, que “antepone intereses mezquinos, partidarios a intereses superiores que son los intereses de la Nación y de la República”.

A su turno, Omar Gutiérrez, gobernador neuquino, se manifestó “coherente” con su historia y recordó que “cada uno de nosotros esta reestructuración la hemos llevado adelante”. Cosa que acordaron oportunamente con el Gobierno nacional, apuntó. “Hoy es tiempo de debatir este proyecto de ley y venimos a decirles no al default. La falta de acuerdo implica el sí al default, que implica más pobreza, más inflación, más postergaciones”, señaló, advirtiendo que “en la letra fina de esos artículos que ustedes están debatiendo se juega gran parte del futuro del país. La continuidad institucional”.

“Nuestra postura es no al default”, insistió el neuquino, que pidió a “los actores de los dos principales proyectos tener la madurez, la seriedad y la responsabilidad en construir consensos y acuerdos para que aquí no haya ganadores y perdedores”. Agregó que “esta es una herramienta de gobernabilidad que pide el Gobierno nacional, pero que afecta y fortalece o debilita si no sale a los gobiernos provinciales. Acá está el juego”.

El jujeño Gerardo Morales es el único gobernador de Juntos por el Cambio que se presentó en el plenario y lo hizo en su doble condición de presidente de la UCR y formando parte de Juntos por el Cambio, y de Gobernador. Felicitó a la Cámara de Diputados por “el debate profundo que se está dando, aun en el marco de las diferencias que tenemos”.

Morales llamó a “repensar algunas cuestiones para salir de la grieta definitivamente. Todos hemos formado parte de la grieta, y algunos sectores radicalizados de ambos sectores siguen formando parte de esta grieta que no le sirve a nadie”.

“Como tampoco ese campeonato difamatorio del Frente de Todos y algunos de nuestra fuerza, no sirven para nada. La gente está harta porque no ve una reacción desde la política que tenga que ver con resolver los problemas de la gente”.

Morales agregó que “lo que está pasando acá en Diputados es la fina expresión de que tenemos que tener la capacidad de dialogar y lograr acuerdos, aun en el marco de las disidencias que tenemos”. En ese sentido agregó que “los escuchaba a los peronistas hablar de esta deuda contraída con el FMI… Es cierto, la tomamos nosotros y me hago cargo, más allá de las participaciones, tuvo que ver con una decisión de nuestro gobernó. Algunos halcones me pegan por esto ‘como caballo en subida’, pero es la realidad…”. Pero a continuación recordó que el Gobierno actual viene generando 65 mil millones de dólares de deuda, y concluyó: “Sobre el tema de la deuda tenemos responsabilidad el peronismo, el radicalismo, el Frente de Todos, Juntos por el Cambio, el Pro… Todas las fuerzas políticas”, y enfatizó: “No al default”.

“De acá tenemos que salir con la ley impidiendo el default, porque el default va a complicar la economía”, alertó.

Reunión con Massa

Previamente a su presentación ante los diputados, el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, recibió en el Salón de Honor al jefe de Gabinete de Ministros, Juan Manzur, acompañado de todos los gobernadores y vices que concurrieron al Congreso este martes, convocados para exponer sobre el acuerdo con el Fondo.

Estuvieron el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela; el de Catamarca, Raúl Jalil; el de Tucumán, Osvaldo Jaldo; el de Salta, Gustavo Sáenz; el de La Pampa, Sergio Ziliotto; el de Santa Fe, Omar Perotti; el de San Juan, Sergio Uñac; el de Entre Ríos, Gustavo Bordet; el de Misiones, Oscar Herrera Ahuad; el de Chubut, Mariano Arcioni; el de Jujuy, Gerardo Morales, y el gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez.

También asistieron el vicegobernador de Santiago del Estero, Carlos Silva Neder; y el vicegobernador de Santa Cruz, Eugenio Quiroga.

Negri: “Guzmán hizo una extorsión velada a la oposición”

Reiteró su crítica respecto del proyecto que les quieren hacer apoyar: “Nos piden la autorización del financiamiento, pero nos meten el aval al programa de Gobierno”.

El presidente del bloque radical de la Cámara baja, Mario Negri, criticó el paso del ministro de Economía por la Cámara de Diputados al advertir su sensación de que amenazó a los diputados con la posibilidad de caer al abismo.

“A mí me quedó una sensación que no me gusta ya que Guzmán hizo una velada extorsión al Congreso, porque nos amenazó con que si no le votamos la ley como él la mandó nos caemos al abismo”, señaló el diputado cordobés.

Entrevistado en el programa Desde el Llano, de TN, tras la comparecencia del ministro Guzmán en la Cámara de Diputados para defender el acuerdo con el FMI, Negri acusó a Martín Guzmán de hacer “gatopardismo”. “Porque nos piden la autorización del financiamiento, pero nos meten de paso el aval al programa de gobierno. Está bien que el Congreso autorice la toma de deuda, pero no podemos acompañar el programa de gobierno entero”, dijio.

Para el legislador radical, “hay mucha grosería de un gobierno débil, que necesita a la oposición pero solo generan provocaciones”, y aclaró que Juntos por el Cambio “no quiere el default y haremos grandes esfuerzos para votar unidos. Pero no coincidimos en nada en este programa de gobierno que manda Guzmán. Sólo votaremos el refinanciamiento”.

“¿Cuál es la razón para que nosotros votemos que la inflación será del 40% y que la emisión bajara al 1%? No tenemos ninguna certeza. Es el mismo ministro que decía que la inflación era del 33% cuando fue del 50%”, puntualizó Negri.

Respecto a la manera como van a votar, Negri ratificó que están dispuestos a votar el primer artículo del proyecto en cuestión, ese que habla del financiamiento. “Financiamiento sí, porque ayudamos al país. Sin acuerdo con el Fondo los problemas serían peores. Pero acá están queriendo arrastrar al Congreso a un co-gobierno”, precisó el diputado en referencia al artículo 2°.

Asimismo criticó las diferencias existentes en el seno del Frente de Todos: “Hay una fractura expuesta en el oficialismo y les quedan dos años de gestión. Está tan roto el FdT que debieron sacar a los diputados de La Cámpora de las comisiones que tratan el Acuerdo con el FMI”, dijo.

Por otra parte aclaró que “no vamos a aceptar una extorsión para hacer lo que ellos quieren. Para nosotros no hay ningún argumento jurídico, político y económico para votar el programa económico”, y agregó que “está claro que con default vamos a estar peor de lo que estamos. Pero el acuerdo es necesario aunque no es suficiente”.

Sobre el final, mandó un mensaje al Gobierno: “Nuestra responsabilidad no es ingenuidad. Si no aceptan cambios a la ley, nosotros definiremos una estrategia”.

“Le digo al Frente de Todos: este país no está para la joda”, concluyó.

Guzmán alertó sobre las graves consecuencias que conllevaría un rechazo al acuerdo

En su exposición inicial, el ministro de Economía alertó que el acuerdo apunta a una solución al problema, pero su no aprobación generaría “una situación de profundo stress cambiario, con consecuencias inflacionarias, consecuencias negativas sobre la actividad económica, sobre el empleo y la pobreza”.

Sin referencias a ningún tipo de herencias y limitándose a detallar la manera como se llegó al stand by del FMI de 2018 que ahora se busca refinanciar, el ministro de Economía, Martín Guzmán, dio detalles del acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional repitiendo muchos de los conceptos vertidos el pasado 28 de enero en el que se anunció el preacuerdo.

Arrancó planteando que es la primera vez en la historia en que un acuerdo entre el Gobierno el staff del FMI será puesto a consideración del Congreso, tras lo cual describió primero qué se busca alcanzar con el acuerdo. Y en ese sentido señaló que la Argentina “enfrenta una situación de un gran potencial desestabilizador la deuda, la combinación de la carga y la secuencia de vencimientos”.

Advirtió entonces que “la Argentina no cuenta con recursos para hacer frente a los vencimientos acordados en 2018, lo cual pone en un clarísimo riesgo la estabilidad de la balanza de pagos en tiempos muy próximos”.

El ministro habló del objetivo de “seguir en el curso de la recuperación de actividad y poder atacar la inflación, si no lo podemos resolver, lo que se enfrentaría es una situación significativamente más difícil y dañina en el frente cambiario, inflación, empleo, actividad y todo el frente social”.

Al referirse a cómo llegamos hasta aquí, refirió a los dichos del jefe de Gabinete, que lo había antecedido, y habló del acuerdo stand by por el cual se terminaron desembolsando 44.500 millones de dólares. Ante ello el país enfrenta un horizonte de 19 mil millones en vencimientos para el año 2022; 20 mil millones para el 2023, y la única forma de pagar es mediante un programa con el FMI.

El ministro Guzmán detalló a continuación el perímetro de financiamiento de un nuevo programa. “Lo que se ha concretado es un perímetro de financiamiento equivalente a la deuda del programa stand by de 2018, de 44.500 millones de dólares: no se está agregando un solo dólar de deuda a lo tomado”, explicó.

Tras ello Guzmán explicó que el FMI no es un acreedor estándar. “Son los países del mundo, con un conjunto de reglas definidas por sus miembros; no solo prestan, para llegar a  un acuerdo hace falta tener un programa de préstamos -expresó-. De modo que lo que se ha negociado es un acuerdo que tiene como base un programa que incluye un conjunto de políticas y condiciones que son consistentes con los objetivos económicos y sociales a los que estamos apuntando”.

Guzmán señaló que “ninguno de los objetivos del programa pudo ser alcanzado y que las condiciones y premisas no ayudaron al logro de los objetivos trazados, sino que empeoraron la situación económica y social”.

En ese marco señaló que se ha definido un esquema macroeconómico y estructural en cuanto a los principios que conforman el programa que daría lugar a un acuerdo. En ese marco, Martín Guzmán señaló que, primero, “el principal limitante al crecimiento económico sostenido es la restricción de divisas, externa, y por lo tanto resulta fundamental potenciar el desarrollo de los sectores capaces de generar divisas”.

Es necesario profundizar el mercado de capitales, a efectos de poder contar con mayores posibilidades de ahorro y financiamiento en moneda local, más confianza para lidiar con el problema histórico de la dolarización. “A diferencia de lo que es convencional en el FMI, aquí no hay una filosofía en la cual el Estado cumple un rol que daña en lugar de ayudar”, señaló, reiterando a continuación que en el acuerdo alcanzado “no hay ninguna reforma que implique quita de derechos, no hay ninguna reforma previsional, no hay reforma laboral”.

El ministro de Economía señaló respecto del programa macroeconómico que “se trazan tres criterios de desempeño: reservas internacionales, resultado fiscal y financiamiento monetario del Banco Central al Tesoro”.

En cuanto a la acumulación de reservas internacionales previstas, para 2022 se prevé que sea de 5.800 millones de dólares; para 2023, 4.000; y para 2024 5.200 millones de dólares.

El objetivo es “ayudar a poder atacar el mal inflacionario con más fuerza,  para que haya estabilidad macroeconómica y eso permita seguir en la senda de la recuperación económica y atacar los problemas sociales más acuciantes como es la pobreza”.

A continuación habló del sendero fiscal que el plan propone seguir. “Se ha buscado conjugar objetivos en función de las restricciones de financiamiento. Primero, poder ayudar a apuntalar la recuperación económica en curso, con el Estado jugando un rol para eso, a partir de una política fiscal moderadamente expansiva; segundo objetivo: contribuir a un desarrollo más virtuoso en el mediano plazo”.

En cuanto a reasignación de los recursos del Estado, señaló que se buscará “seguir potenciando el crecimiento de la inversión en los segmentos que más ayudan a tener una economía dinámica”.

“Se continua expandiendo la inversión en infraestructura pública y cumplir con la ley de financiamiento de la ciencia y tecnología, para aplicar el conocimiento a la producción”, agregó.

Desde lo fiscal, continuó Guzmán ante los diputados, “también apuntamos a seguir estableciendo un camino de fortalecimiento del crédito y profundizar un camino de fortalecimiento de nuestra moneda, por eso es tan importante seguir bajando el déficit fiscal para depender menos del endeudamiento y de la emisión monetaria”.

Según especificó el ministro, el sendero de resultado primario en relación al producto bruto para los próximos tres años es de 2,5% para 2022; 1,9 para 2023 y 0,9% para 2024. “Junto a eso se plantea una reducción de la emisión monetaria”, remarcó, destacando que los números que están definidos en el acuerdo al que se ha alcanzado es que el financiamiento monetario al Tesoro en 2022 sea del 1% del producto, en 2023 sea 0,6 % del producto, convergiendo a 0 en el 2024.

En otro pasaje de su exposición, el ministro de Economía se refirió al ejercicio 2020, donde como consecuencia de la pandemia y las medidas implementadas por el Gobierno “se recurrió a una emisión monetaria del 7,7% en 2022 y 3,7% en 2021”, cosa que atribuyó a la falta de crédito. “Es lo que considerábamos que había que hacer y ahora es el momento de establecer un camino que de una forma decidida fortalezca a nuestra moneda, y hay un conjunto de cuestiones por abordar, ir reduciendo la emisión”, reconoció Guzmán.

Sobre esta base, dijo, se busca atender la generación de empleo y reducir la inflación. En ese sentido, el esquema parte de que la inflación tiene múltiples causas, remarcó. “En primer lugar es necesario que Argentina no choque contra situaciones de crisis de la balanza de pagos, porque implican una depreciación del tipo de cambio y eso hace saltar la inflación”, señaló y habló de “no tener cargas de deudas insostenibles que desestabilicen la situación cambiaria; y por otro lado poder establecer una evolución de las exportaciones netas que le permita al país contar con las divisas que permitan sostener el crecimiento económico que requiere de divisas”.

“A la hora de atacar la inflación, lo primero que debemos enfrentar es un tema productivo, y después mejorar el perfil de las políticas públicas”, señaló, para luego hablar de “poder anclar expectativas, de ahí el objetivo de acumular reservas internacionales”.

También se apunta a que haya un crecimiento del poder adquisitivo de los ingresos. “Es necesario desde el punto de vista macro para apuntalar la recuperación”, sostuvo.

Martín Guzmán destacó las condiciones de financiamiento que se incluyen en este acuerdo y las características de funcionamiento de estas condiciones de financiamiento. “En una negociación con el Fondo Monetario hay dos niveles: uno es el que se da con el staff del FMI, con el que se negocia un esquema de compromisos de políticas; está el nivel de los accionistas que están representados en el directorio del FMI. Las condiciones financieras de los programas de facilidades se basan en reglamentos generales. La Argentina en el seno del multilateralismo ha estado por una parte trabajando en construir consensos internacionales para una mejora de los reglamentos, por otra parte lo que he descripto es lo que se ha estado negociando”, señaló.

“El acuerdo al que llegó el Gobierno es de facilidades extendidas; cada desembolso se comienza a pagar 4 años y medio después de producido el desembolso, y se termina pagando 10 años después de producido el desembolso, en 12 cuotas equivalentes -detalló. Tiene una duración de 2 años y medio, que los compromisos desde el punto de vista del esquema de políticas rige por un período de dos años y medio, se programan 11 desembolsos a lo largo de programa. El primero ocurre apenas el directorio apruebe el programa y cada desembolso ocurre cuando se completa cada revisión, que son cada 3 meses”.

Así las cosas, en caso de aprobarse este acuerdo, la primera revisión sería en el mes de junio y la última en septiembre de 2024.

 “Este programa tiene un perímetro de financiamiento igual al de 2018, lo que se logra es tener el financiamiento para hacer frente a los pagos programados en el programa stand by de 2018”, comentó. Y agregó: “Como ya hubo pagos de amortización de capital, va a haber una acumulación neta de reservas respecto de la posición actual sobre la base de lo aquí programado”.

Aclaró también la cuestión de la secuencia de las aprobaciones. Tras el debate de este programa por parte del Congreso y si sucede la aprobación, el directorio del Fondo Monetario tratará la aprobación correspondiente.

Para concluir, Guzmán habló de las consecuencias de lo que se está tratando y los caminos que enfrenta el país. “Es nuestra responsabilidad marcar lo tan desestabilizante que potencialmente es la situación que Argentina enfrenta en caso de no poder contar con las condiciones para poder refinanciar la deuda del programa stand by de 2018”, advirtió.

“Aquí enfrentamos caminos que se bifurcan”, dijo, precisando que “lo que el Gobierno ha estado haciendo es construir una solución al problema. Este es un paso muy importante; el acuerdo que hoy trae al debate en el Congreso establece un camino transitable, un principio de solución a un problema realmente muy grave para el desarrollo que se contrapone a una alternativa que es un crecimiento de la incertidumbre que no puede redundar en nada mejor. Que por el contrario va a generar una situación de profundo stress cambiario, con consecuencias inflacionarias, consecuencias negativas sobre la actividad económica, sobre el empleo y la pobreza”.

Guzmán concluyó señalando que “se han estado defiendo los intereses de la patria, defendiendo condiciones que queremos cumplir, porque consideramos que este es un programa para la recuperación, lo queremos cumplir y nuestro compromiso es efectivamente cumplirlo. El acompañamiento del Congreso va a ser decisivo para actuar de una forma que fortalezca a la República y nos fortalezca como Estado o Nación”.

Massa recibió a los funcionarios que visitaron el Congreso

Fue antes de que Juan Manzur, Martín Guzmán y el resto se presentaran en el plenario de las comisiones de Presupuesto y de Finanzas.

En la previa de la presentación de funcionarios ante el plenario de diputados que analiza el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa los recibió.

El encuentro se celebró en el Salón de Honor, y allí estuvieron con Massa el jefe de Gabinete de Ministros, Juan Manzur; el ministro de Economía, Martín Guzmán; el secretario de Hacienda, Raúl Rigo; el representante ante el FMI, Sergio Chodos; el presidente del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y la portavoz presidencial Gabriela Cerruti.

Durante el encuentro el jefe de la Cámara baja dio detalles de cómo será el debate en Diputados y sus perspectivas de aprobación.

Acuerdo con el FMI: Funcionarios exponen ante diputados

Con la presencia del jefe de Gabinete, el ministro de Economía, el titular del BCRA y otros funcionarios, se debate en un plenario de comisiones de la Cámara baja el entendimiento enviado por el Poder Ejecutivo.

Un plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas de la Cámara de Diputados escucha a los funcionarios que informarán a los diputados nacionales sobre el acuerdo alcanzado entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional.

La reunión se desarrolla en la Sala ubicada en el segundo piso del Anexo C, y el plato fuerte del encuentro es la presencia del ministro de Economía, Martín Guzmán, quien concurrió para defender el acuerdo por él suscripto con las autoridades del FMI.

Asisten también el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el presidente del BCRA, Miguel Pesce; el representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos; y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.

Quedó constituida la Comisión de Finanzas

Fue a los efectos de que se sume a Presupuesto y Hacienda para el tratamiento del proyecto de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Poco después de las 13 se dio curso al trámite de constituir la Comisión de Finanzas de la Cámara baja, para que la misma pudiera acoplarse a la de Presupuesto y Hacienda, constituyendo un plenario para el tratamiento del proyecto de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

En ese sentido y tal cual había trascendido el día anterior, fue designada al frente de la comisión la diputada nacional Alicia Aparicio. Licenciada en Economía y ex secretaria de Salud del municipio de San Fernando, la legisladora oficialista fue propuesta por el diputado Carlos Selva.

Como vicepresidente primero, el radical jujeño Jorge “Colo” Rizzotti propuso a su correligionario mendocino Lisandro Nieri.

El cargo de secretario quedó pendiente para elegir en el futuro, según solicitó el titular del bloque oficialista, Germán Martínez, miembro también de esa comisión.

Por otra parte se procedió a cambiar un miembro de la comisión: el chaqueño Aldo Leiva reemplazará a su par porteño Leandro Santoro.

Así quedó compuesta entonces la Comisión de Finanzas:

Por el Frente de Todos están Walberto Allende, Alicia Aparicio, Tanya Bertoldi, Rosana Bertone, Eduardo Fernández, Silvana Ginocchio, Carlos Heller, Bernardo Herrera, Aldo Leiva, Varinia Marín, Germán Martínez, Gabriela Pedrali, Julio Pereyra, Carlos Selva y Victoria Tolosa Paz.

Por Juntos por el Cambio estarán Victoria Borrego, Omar De Marchi, Germana Figuera Casas, Rogelio Frigerio, Alvaro González, Luciano Laspina, Gerardo Milman, Miguel Nanni, Lisandro Nieri, Jorge Rizzotti, Víctor Hugo Romero, Diego Santilli, Matías Taccetta, Martín Tetaz y Pamela Verasay.

Completa la lista de diputados el diputado de Identidad Bonaerense y el interbloque Federal Alejandro “Topo” Rodríguez.

El oficialismo hará relevos en las comisiones para evitar sorpresas

Se trata de legisladores que rechazan el acuerdo con el Fondo y que originalmente formaban parte de la Comisión de Presupuesto y Hacienda.

La discusión en torno al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional entre oficialismo y oposición es tal que no amerita descuidar ningún detalle. Todo vale a la hora de evitar que al oficialismo le pase como el año pasado con el Presupuesto, malogrado por el tono de un discurso inoportuno en el momento más inadecuado; o en el caso de la oposición, que ausencias inesperadas le hagan perder votaciones.

Atento a todos los detalles, la mira hoy no está puesta solo en la votación trascendental que se dará el viernes en horas de la madrugada, o bien antes del mediodía, sino en lo más inmediato por venir: el dictamen de mayoría que saldrá del plenario de comisiones que discutirá el proyecto. Es que sobre ese tema la oposición se propone impulsar un dictamen propio y al cabo de la reunión de este domingo mostraron sus cartas al advertir sobre la paridad que existe en el plenario de Presupuesto y Finanzas. Así las cosas, señalaron voceros del espacio opositor, que el oficialismo no deberá tener fugas si quiere imponer el texto que envió el ministro Martín Guzmán.

En efecto, el plenario que analizará el proyecto de la deuda cuenta con 39 firmas del Frente de Todos; 38 de Juntos por el Cambio (20 PRO, 12 UCR, 3 Evolución y 3 CC); 2 firmas del interbloque Federal y una firma de Provincias Unidas (el diputado Diego Sartori, de Misiones).

A propósito de las fugas que no deberá tener el oficialismo, un repaso de los nombres de los miembros del Frente de Todos permite observar que hay al menos dos diputados que tendrían fuertes reparos hacia el acuerdo y que -de hecho- difícilmente lo voten en el recinto. Uno es el camporista Marcos Cleri y otro el economista Itai Hagman, cercano a Juan Grabois, al que decididamente se lo sabe contrario al acuerdo. Ambos serán relevados, como así también un par más que tendrían problemas para estar en tiempo y forma en el plenario esta semana.

Todos ellos serán reemplazados por otros diputados convencidos de votar el acuerdo, tal cual dio a entender el domingo por la noche el presidente del bloque oficialista, Germán Martínez. Interrogado sobre ese tema puntual, el legislador santafesino admitió esa posibilidad y la relativizó: “Yo integré por un día la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamentos para poder aprobar el Protocolo de Sesiones Remotas, allá en el arranque de la pandemia; yo participé un día como integrante de la Comisión de Salud para poder aprobar el dictamen de la ley de VIH, la ley de cannabis y cáñamo industrial -recordó-. Es normal que haya ese tipo de cambios”.

“Tienen que ver muchas veces con la logística propia de participación de los diputados y diputadas”, detalló, agregando que “además hay un montón de diputados y diputadas que quieren colaborar para que este proyecto salga, que tenga las firmas suficientes, así que iremos haciendo los ajustes en función de eso… Pero no tiene que ver con ningún criterio de orientación política”.

Como sea, los cambios se conocerán este mismo lunes y consistirán en relevos de los dos legisladores citados y tal vez también quienes no han podido llegar el domingo, para evitar sorpresas inoportunas a la hora del dictamen, cuestión en la que se sabe que estará atento JxC.

Martín Guzmán va al Congreso a defender el acuerdo con el Fondo

A partir de las 14 se reúne el plenario de comisiones, que recibirá también al jefe de Gabinete, el titular del BCRA y otros funcionarios del equipo económico.

martin guzman luciano laspina bicameral deuda

Una jornada intensa se espera este lunes en la Cámara de Diputados, que se iniciará a partir de las 13 con la reunión constitutiva de la Comisión de Finanzas. En el transcurso de esa breve reunión que tendrá lugar en la Sala ubicada en el segundo piso del Anexo C, elegirán a las autoridades de dicha comisión que encabezará la diputada oficialista Alicia Aparicio.

A partir de las 14 se constituirá el plenario de esa comisión y Presupuesto y Hacienda, para escuchar a lo largo de este lunes y martes a una serie de invitados que expondrán en torno al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. El plato fuerte será la presencia del ministro de Economía, Martín Guzmán, quien concurrirá para defender el acuerdo por él suscripto con las autoridades del FMI. Lo hará por segundo día consecutivo, pues este domingo ya estuvo en el Congreso exponiendo ante los diputados del oficialismo que integran las comisiones de Presupuesto y de Finanzas.

En rigor, a ese encuentro también asistieron diputados que no forman parte de esas comisiones, interesados en escuchar al ministro y formular también sus preguntas.

Mientras eso sucedía este domingo, casi a la misma hora se reunía de manera virtual la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio, con el fin de acercar posiciones en torno a la postura que llevarán al recinto respecto del acuerdo con el FMI.

Así fue que allí se ratificó la postura de evitar que el país avance hacia un default, pero también se plantearon críticas en torno al proyecto que deberán tratar en la Cámara de Diputados esta semana, pues el mismo tiene dos artículos que merecen sus observaciones. No hay problemas con el que avala el refinanciamiento de la deuda con el Fondo, pero sí con el artículo siguiente referido al programa económico del Gobierno. Obviamente están dispuestos a avalar el primero de esos artículos mas no el segundo.

Así se lo harán saber al ministro de Economía durante la reunión de este lunes. Del encuentro participarán también el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el presidente del BCRA, Miguel Pesce; el representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos; y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.

La idea del plenario es que luego de la visita de invitados, el miércoles que viene se puedan poner a discutir en torno al proyecto entre los diputados que integran ambas comisiones, con la intención de emitir dictamen. Más que probable que la oposición presente su propio dictamen. La sesión propiamente dicha arrancará el jueves en horario todavía a determinar.

Guzmán respondió un centenar de preguntas de los diputados oficialistas

En vísperas del arranque de la discusión del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, se reunieron con los miembros del Frente de Todos que integran las comisiones de Presupuesto y de Finanzas.

“Quiero que cada diputado y diputada tenga toda la información para que no haya dudas”, expresó este domingo el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, sentado a la derecha del ministro de Economía, Martín Guzmán, durante una reunión mantenida con diputados del oficialismo.

Participaron de ese encuentro presencial los integrantes de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas, que fueron convocados temprano por Carlos Heller para organizar las preguntas que se harán este lunes y la estrategia a desarrollar durante la presentación de los funcionarios para exponer sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Junto a Massa y Guzmán estuvieron Carlos Heller, quien como titular de Presupuesto presidirá el plenario a lo largo de esta semana, el presidente del bloque oficialista, Germán Martínez, y la diputada bonaerense Alicia Aparicio, quien encabezaría la Comisión de Finanzas, que deberá constituirse este lunes a partir de las 13, para integrarse luego al plenario que se propone emitir dictamen entre miércoles y jueves de esta semana.

De hecho, así lo confirmó Germán Martínez durante un diálogo que mantuvo con los periodistas en el que señaló que Aparicio será quien el oficialismo proponga para presidir Finanzas.

El titular del bloque oficialista calificó como “una muy buena reunión de trabajo” la mantenida con el ministro de Economía y su equipo económico. “Estuvo intercambiando información con los integrantes de nuestro bloque, de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas, que son las que van a arrancar con el debate en el plenario”, contó Martínez, que agregó: “Nosotros aprovechamos y abrimos a compañeros y compañeras del interior del país que ya estaban en Buenos Aires y pudieron acercarse para también hacer sus preguntas al ministro”.

En efecto, numerosos legisladores respondieron a la convocatoria de la conducción del bloque formulada a fines de la semana anterior para que los diputados del oficialismo estuvieran este domingo en Buenos Aires.

Más de un centenar de preguntas fueron respondidas por el ministro de Economía, informó el presidente del bloque, que calificó al encuentro como “muy valioso” para ratificar que “estamos ante un acuerdo donde no hay ajuste, no hay tarifazo, no hay reforma previsional, no hay cambios en la edad jubilatoria”, tal cual lo anunciado originalmente por el presidente el 28 de enero, y también en su discurso del 1° de marzo.

Martínez admitió que puede llegar a haber cambios en la conformación de las comisiones de Presupuesto y de Finanzas, que consideró “normales” en función de la logística  propia de las mismas. “Iremos haciendo los ajustes en función de eso, atendiendo a la participación de un montón de diputados que quieren colaborar para que este proyecto salga, pero  no tiene que ver con una orientación política”.

De cara al tratamiento del proyecto, Germán Martínez se manifestó “moderadamente optimista”, y puntualizó que “vamos a trabajar para que este proyecto salga. El compromiso del Frente de Todos que presido es acompañar al presidente de la Nación. Sabemos que hay miradas distintas, pero priorizamos la unidad, convencidos de que el proceso de reflexión política que se dio al interior del bloque va a ser una experiencia muy valiosa para poder fortalecer la unidad no solamente en el Congreso, sino en todo el espacio político”.

Por último, consideró que este es “un acuerdo que nos permite tener la ventana de tiempo necesaria para consolidar la recuperación económica que ya se está evidenciando en la Argentina”.

“Topo” Rodríguez le exige a Guzmán el compromiso de “no volver a darle un bono en dólares a los especuladores”

Destacó la visita del ministro Guzmán este lunes y espera que le aclare las “muchas dudas” que mantiene respecto del acuerdo, con relación al cual cuestionó su tratamiento contrarreloj.

alejandro topo rodriguez sesion 1 julio 2021

El presidente del interbloque Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez, celebró la visita confirmada del ministro de Economía prevista para este lunes al plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas convocada para las 14. Para el legislador bonaerense “es muy importante que el ministro (Martín) Guzmán se comprometa ante el Congreso a no volver a darle un bono en dólares a los especuladores extranjeros que vinieron a hacer la bicicleta financiera, con muy alta tasa de interés en pesos hace ya unos años”.

“Es importantísimo que el Gobierno a través del ministro Guzmán asuma frente al Congreso ese compromiso”, enfatizó el legislador del interbloque Federal este domingo.

Con todo, ello no garantiza un voto positivo del “Topo” Rodríguez, ni mucho menos del interbloque que él conduce. En diálogo con parlamentario.com, contó que ya leyó “tres veces” el texto del acuerdo con el Fondo enviado al Congreso y mantiene “muchas dudas”, que buscará saldar en el transcurso de los próximos días.

En ese marco, cuestionó el tratamiento acelerado que se le pretende dar a tan trascendental tema, recordando que “el Gobierno nacional estuvo dos años y dos meses para elaborar y acordar este documento”.

Además -añadió- “nos impone, yo creo que de manera totalmente contraria a lo que son las leyes de la Constitución, votar por sí o por no sin poder cambiar ni una coma, ni un punto”.

Ante ello, señaló que “lo mínimo que espero es que nos dén los tiempos para entender todo en detalle. Y lo que no se entienda, o allí donde haya dudas, los funcionarios nacionales tienen que aclararlas”.

“Por eso reitero, con todo respeto: que no se le vaya a ocurrir al Gobierno trasladarle al Congreso nacional la responsabilidad por el cumplimiento de los plazos o el estiramiento de los tiempos. Eso es una responsabilidad del Poder Ejecutivo Nacional”.

Y ante la consulta de si darán quórum y cómo votarán en el recinto, “Topo” Rodríguez puntualizó que su decisión y seguramente la del interbloque que conduce “va a llegar cuando tengamos bien claro cada uno de los aspectos generales y de detalles de la documentación que se nos ha hecho llegar”.

Recordemos que los únicos integrantes del interbloque Federal que adelantaron su postura son los integrantes de Córdoba Federal, que de entrada precisaron que darán quórum y se abstendrán a la hora de votar, por entender que “el acuerdo anunciado con el FMI, y las consecuencias que pueda traer aparejadas para los argentinos, es responsabilidad del Gobierno nacional”.

Cómo será el debate de esta semana del acuerdo con el Fondo

El cronograma previsto que arranque este lunes en Diputados, y se extenderá hasta el viernes.

La que viene será una semana intensa en la Cámara de Diputados, que contrastará con lo que fue el verano, cuando se anunciaba permanentemente un período de extraordinarias que solo funcionó de manera formal, pero nunca se puso en marcha.

Y lo que se esperaba se debatiría en el mes de febrero, el acuerdo con el Fondo Monetario que se anunció el 28 de febrero, tendrá lugar a partir de este lunes. Aguardándose un tratamiento exprés, pero no por eso menos intenso.

Todo arrancará este lunes a partir de las 13, hora en la que se reunirá en la sala del segundo piso del Anexo C la Comisión de Finanzas, simplemente para formalizar su constitución. Los nombres de sus integrantes ya están elegidos y solo falta oficializar a sus autoridades.

Una hora más tarde comenzará entonces en el mismo sitio un plenario de las comisiones de Presupuesto -ya constituida en diciembre del año pasado y presidida por Carlos Heller– y Finanzas, para abocarse al tratamiento del acuerdo con el FMI, con una serie de invitados.

Estarán, según lo acordado el jueves pasado entre las autoridades de la Cámara baja y los presidentes de bloques, el ministro de Economía, Martín Guzmán; el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el presidente del BCRA, Miguel Pesce (a pedido de Juntos por el Cambio); el representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos; y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.

El debate continuará el martes, en horario a determinar, con la visita de miembros de la CGT, la CTA y los movimientos sociales, y posteriormente estarán representantes de cámaras empresarias como ADEBA, CGERA, APYME, y el Grupo de los 6. También los gobernadores han sido invitados a exponer. Habrá que ver quiénes viajan a Buenos Aires para hacerlo.

Por la cantidad de convocados, puede ser que estas exposiciones se extiendan al miércoles, fecha en la que debe arrancar el debate propiamente dicho entre los diputados integrantes del plenario, con la intención de emitir dictamen ese mismo día. La idea original es que esa reunión arranque a las 10 de la mañana, pero si debe extenderse hasta el día siguiente, así será, aclararon las autoridades consultadas.

Como sea, el jueves será el día de la sesión, que por la cantidad de expositores casi seguramente se extienda hasta el viernes.

El cronograma

📍 Lunes 7 de marzo. 13:00 hs.

Reunión constitutiva de la Comisión de Finanzas, en Anexo “C” – 2° piso

📍 Lunes 7 de marzo. 14:00 hs.

Plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas, en Anexo “C” – 2° piso

Reunión Informativa. Fueron invitados el jefe de Gabinete de Ministros, Juan Luis Manzur; el ministro de Economía, Martín Guzmán y equipo; el secretario de Hacienda, Raúl Rigo; el representante ante el FMI, Sergio Chodos; el presidente del Banco Central de la República Argentina, Miguel Ángel Pesce, y miembros del Directorio. Mensaje N° 08/2022 y Proyecto de Ley que propicia la aprobación del Programa de Facilidades Extendidas arribado con el FONDO MONETARIO INTERNACIONAL que está conformado por el “Memorando de Políticas Económicas y Financieras” y el “Memorando Técnico de Entendimiento”, que como Anexos forman parte integrante de la norma propuesta.

📍 Martes 8 de marzo

Plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas, en Anexo “C” – 2° piso

Reunión Informativa. Fueron invitados miembros de la CGT, la CTA y los movimientos sociales, y representantes de cámaras empresarias como ADEBA, CGERA, APYME, y el Grupo de los 6. También los gobernadores.

📍 Miércoles 9 de marzo. 10:00 hs.

Plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas, en Anexo “C” – 2° piso

📍 Jueves 10 de marzo.

Sesión especial de la Cámara de Diputados

Germán Martínez tildó de “histórico” el debate que viene

El jefe del bloque oficialista de la Cámara baja valoró que por primera vez un acuerdo con el Fondo Monetario será analizado por el Congreso.

Germán Martínez, presidente del bloque Frente de Todos de la Cámara baja, remarcó que hoy todos los diputados cuentan con toda la información del acuerdo con el FMI para dar el debate la próxima semana.

En declaraciones al periodismo, el diputado santafesino sostuvo que “el Congreso se dispone a dar un debate absolutamente histórico e inédito. Esto tiene que ver con la decisión política del presidente de la Nación”.

“Hoy todo diputado y diputada tiene el 100% de la información a la hora de encarar este debate, ya todos tienen el material impreso o digital para poder analizar, debatir. Eso no pasó en el 2018, cuando Macri nos endeudó irresponsablemente con el FMI”, afirmó el legislador oficialista.

De cara al debate que viene, Martínez señaló que “la semana que viene en las comisiones vamos a tener una oportunidad única de dar un debate muy a fondo. No solo discutiremos la propuesta de refinanciación de la deuda con el FMI. También analizaremos el origen de la deuda que contrajo Macri en 2018“.

“El lunes a las 13 vamos a estar constituyendo la Comisión de Finanzas. Y a las 14 horas habrá un plenario de las comisiones de Presupuesto y de Finanzas”, agregó el legislador, que precisó que “vamos a trabajar todo el día lunes, martes y miércoles en comisiones. Y mi idea es que el jueves podamos sesionar”.

Con relación a la postura asumida por el anterior presidente de la Nación, Germán Martínez remarcó que “cuando más veo el rechazo que Macri está haciendo del acuerdo con el FMI, más convencido estoy de que hay que aprobar esta refinanciación”.

“Cuanto más duro es Macri y su entorno, más me reafirma la vocación de que vamos por el camino correcto”, resaltó.

Por otra parte el presidente del bloque oficialista destacó que “estamos ante un acuerdo que le ofrece a la Argentina una ventana de tiempo de 4 años y medio para poder consolidar la recuperación económica, generar puestos de trabajo, y empezar a reducir desigualdades, de tal manera que cuando empecemos a pagar estemos en mejores condiciones de hacerlo”.

Un mensaje con fuertes críticas a la gestión anterior y la afirmación de que no prevén “ajustes ni reformas”

En el texto remitido al Congreso se detalla de manera severa de qué manera accedió el Gobierno de Macri al crédito del FMI y sobre el acuerdo se reiteran los datos que se habían venido adelantando.

El mensaje enviado por el Poder Ejecutivo al Congreso pone a consideración del mismo lo que presenta como un proyecto de ley que “propicia la aprobación del Programa de Facilidades Extendidas arribado con el Fondo Monetario Internacional que está conformado por el ‘Memorando de Políticas Económicas y Financieras’ y el ‘Memorando Técnico de Entendimiento’, que como Anexos forman parte integrante de la norma propuesta y que, por imperio de la Ley N° 27.612, se somete a su tratamiento”.

Tal cual lo remarcado desde el Gobierno a partir del 28 de enero en el que se anunció el entendimiento, el acuerdo tiene por objeto “establecer un sendero hacia la sostenibilidad de los servicios de la deuda con el Fondo Monetario Internacional y sentar, al mismo tiempo, condiciones para que nuestro país continúe afianzando los principios de crecimiento económico, desarrollo productivo e inclusión social”.

En el texto se asegura que el programa suscripto “parte de una concepción y de una lógica totalmente distinta al Acuerdo Stand-By suscripto en 2018, cuya deuda refinancia”.

Detalla de manera crítica en qué condiciones se dio en 2018 el préstamo de 57.000 millones de dólares, que presenta como un aumento del 1.277% de la cuota de nuestro país en el organismo. De esa manera se llegaron a desembolsar en Derechos Especiales de Giro (DEG) 44.500 millones de dólares, “con un programa de políticas, plazos y montos de repago de características insostenibles e insustentables para nuestro país (un plazo de 36 meses a la tasa de interés básica cobrada por el FMI, es decir, adicionando aproximadamente un 1 % actualmente, en función del promedio de las tasas de corto plazo de los Estados Unidos de América, del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, de la Eurozona y del Japón, a los que además se suman los montos por las tasas de sobrecargos)”.

A continuación se desliza una crítica a los “sobrecargos” que impone el FMI, que a juicio del Gobierno argentino “constituye una falencia de la arquitectura financiera internacional, generando efectos negativos para la estabilidad financiera global, y continúa llevando adelante diálogos tendientes a su revisión”.

“El proceso de endeudamiento público combinado con la fuerte devaluación del peso de los años 2018 y 2019 disparó la ratio de deuda pública a PIB, la cual pasó del 52, 6 % en el año 2015 al 88,8 % a finales de 2019, alcanzando una carga de vencimientos en moneda extranjera insostenible en función de la capacidad de repago de la República Argentina”, puntualiza el texto enviado al Congreso, en el que se afirma que “los desembolsos se utilizaron principalmente para financiar la formación de activos externos y para cancelar deuda de los acreedores privados en moneda extranjera que estaba en situación de insostenibilidad; deuda externa que había sido irresponsablemente aumentada durante el período diciembre de 2015 y marzo de 2018, en más de 80.000.000.000, de los cuales, aproximadamente unos USD 55.000.000.000 correspondieron a deuda con acreedores privados y que termina revelándose profundamente dañina para las posibilidades de desarrollo económico y social de la República Argentina”.

Tras detallar los errores en los que habría incurrido en su concepción el programa acordado en 2018, se cuestiona también la decisión de firmar un acuerdo stand-by sin que se discutiera en el Congreso de la Nación. “La participación del Honorable Congreso de la Nación en esa decisión debió ser insoslayable, por imperativo constitucional, institucional y político. Ello así, dado que sin la existencia de un efectivo consenso para llegar a un acuerdo, no puede surgir el compromiso político y social que se requiere para asumir y afrontar acuerdos de este tipo, por sus dimensiones, y por las gravosas consecuencias que acarreaba, destacándose, paradójicamente, que el apoyo político e institucional es uno de los criterios para el acceso excepcional que considera el mismo FMI”, expresa el documento enviado al Congreso.

A la hora de reflejar el papel del Gobierno actual en esta discusión, se afirma que esta administración “buscó una salida al ahogo generado por los plazos exiguos y por los términos que se acordaron para pagar tamaña deuda sin que ello socavara las posibilidades de desarrollo de la República Argentina”, destacando que realizaron un trabajo de negociaciones internacionales de elevada complejidad tendientes a alcanzar un entendimiento para un nuevo programa con el FMI; un Programa de Facilidades Extendidas, que contiene dos bloques principales: por una parte, el esquema de políticas macroeconómicas y, por la otra, las medidas de crecimiento de mediano plazo y de estabilidad duradera”.

Con relación al Programa de Facilidades Extendidas, el mismo se conforma por los 2 documentos anexos al proyecto de ley, enfatizando que el acuerdo evita “políticas de ajuste y reformas que quitan derechos laborales y previsionales, como los que tanto daño han producido a la Nación con anterioridad”.

Se indica que “desde el punto de vista fiscal, el acuerdo prevé un sendero de convergencia que no inhibe la continuidad de la recuperación, con una expansión moderada del gasto real, y donde el Estado tendrá un rol clave, definiendo las prioridades centrales, que serán los pilares de inclusión social, desarrollo de la ciencia y la tecnología y la inversión en infraestructura. Bajo el entendimiento de que dicha dinámica es un elemento central para alcanzar el bienestar social, la República Argentina continuará promoviendo una mejora en las cuentas públicas consistente con la expansión de la actividad y la inclusión social”.

Tal cual se había anticipado, la reducción gradual del déficit fiscal proyectada es del 2,5 % del Producto Interno Bruto (PIB) para el presente año; para el año 2023, de 1,9 % y para el 2024, de 0,9 %.

Desde la óptica monetaria y financiera, se programa una reducción gradual y persistente de la asistencia monetaria que realiza el BCRA al Tesoro Nacional, para converger en una situación en la que no haya más apoyo sistemático del primero, sino que la oferta monetaria se pueda mover en forma consistente con la evolución de la demanda de nuestra moneda, sin que ello conlleve presiones adicionales en el tipo de cambio y, por lo tanto, en la inflación, expresa el texto enviado al Congreso.

En sentido similar se acordó un marco que tiene como objetivo una estructura de tasas de interés reales para los instrumentos de referencia de la política económica que redunde en valores positivos, de modo de fortalecer la demanda de activos en nuestra moneda y contribuir a la estabilidad cambiaria y financiera.

El texto establece que se concilió, además, en un enfoque integral de la inflación, el cual parte de la premisa de que la inflación es un fenómeno multicausal, y que es necesario enfrentar dichos factores en forma concurrente: lograr un crecimiento sostenido de las exportaciones que fortalezca las reservas internacionales; mejorar el perfil de financiamiento de las políticas públicas y de reducción progresiva del financiamiento monetario, al mismo tiempo que el Estado juegue un rol contracíclico y, finalmente, la coordinación voluntaria de precios e ingresos con el sector privado con el fin de lograr un aumento del poder del salario real de los trabajadores y las trabajadoras que redunde en un fortalecimiento de la demanda agregada.

“No se prevé ningún salto en el tipo de cambio, sino que la política cambiaria seguirá en la línea del objetivo de acumulación de reservas internacionales para favorecer la resiliencia en el frente externo y para estabilizar las expectativas”, afirma el documento, donde se plantea una meta de crecimiento de las reservas para el año 2022 de, al menos, USD 5.800.000.000.

Se afirma que el acuerdo garantiza la continuidad de los programas sociales focalizados y el mantenimiento de los derechos de movilidad previsional de los jubilados, así como los derechos de los trabajadores. “El elemento esencial para ello es el compromiso de mantener todos los años del programa un aumento del gasto en términos reales. Esto forma parte medular de la protección a los sectores más vulnerables impulsando, a la vez, la recuperación económica”, expresa el documento, que afirma que “el gasto social permitirá fortalecer políticas y programas de capacitación y empleo, asegurando que el gasto abordará las inequidades de género y el fortalecimiento de las políticas de crecimiento y resiliencia, fomentando la inclusión financiera y la innovación, con el fin de contribuir a la reducción de las brechas sociales, ampliar la territorialidad y federalización, garantizando la incorporación de la perspectiva de género, en la senda y con el compromiso que estamos trabajando”.

Se establece el compromiso de garantizar un piso en los recursos destinados a los programas emblema: Asignación Universal por Hijo (AUH), Tarjeta Alimentar y Programa de Respaldo a Estudiantes Argentinos (PROGRESAR). Dicho umbral será revisado e incrementado si las condiciones sociales hacen necesaria una mayor participación del sector público para cubrir las necesidades de la población.

MENSJ-2022-8-APN-PTE-Aprueba-el-Programa-de-Facilidades-Extendidas-entre-la-ARGENTINA-y-el-FMI

Cumbre de diputados del FdT antes del inicio del debate del acuerdo con el Fondo

En vísperas del arranque del cronograma establecido este jueves para el tratamiento del entendimiento con el Fondo, fueron convocados para el domingo. Podría estar Guzmán.

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De cara al inicio del debate sobre el proyecto del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, el bloque del Frente de Todos fue convocado para este domingo a una reunión destinada a tratar de amalgamar la postura que llevarán al recinto en el transcurso de la semana.

Será la primera reunión del bloque oficialista tras la salida de Máximo Kirchner y obviamente entonces la primera en la que participará Germán Martínez como titular de esa bancada.

No se descarta que en el encuentro participe el ministro de Economía, Martín Guzmán, a los efectos de responder inquietudes que puedan plantearle los diputados.

La reunión cobra especial importancia ante el clima deliberativo que impera en el seno del bloque -lo mismo sucede en el Senado- con relación al acuerdo con el Fondo. Con todos y cada uno de los legisladores ya dialogó de manera personal o telefónicamente Germán Martínez, pero ahora llegó el momento de garantizar el resultado de la votación y esta reunión permitirá dar garantías al “poroteo” propio que elaboran de cara al debate en el recinto cuyo inicio está previsto para el próximo jueves.

A partir de ese conteo es que se sabrá con certeza cuál es la magnitud del apoyo opositor que necesita el Gobierno para sacar el acuerdo con el mayor respaldo posible.

FMI: harían cambios en los artículos del proyecto

Según altas fuentes de Juntos por el Cambio, habría un principio de acuerdo con el Gobierno para hacer modificaciones no en el acuerdo, sino en el texto que debe aprobar el Congreso.

Alcanzado finalmente el acuerdo entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional, la demora en la presentación del proyecto gira ahora en torno al texto del proyecto que deberá votar el Congreso la próxima semana.

El problema es que los espíritus en el seno de la principal oposición se crisparon a la hora de leer el texto del proyecto, ya no el del entendimiento pues el mismo continúa en veremos. De ahí que una alta fuente de JxC habría hablado con un interlocutor del oficialismo llegando supuestamente a un principio de acuerdo para cambiar los artículos del proyecto, que son tres.

Todos los sectores de Juntos por el Cambio -o casi todos-, desde la Coalición Cívica a Luciano Laspina, pasando por Ricardo López Murphy, hasta el sector que responde al presidente de la UCR Gerardo Morales, reclaman que la ley tenga diferenciados el artículo con la autorización del Congreso al Poder Ejecutivo para negociar la deuda, del o los artículos que remiten a los anexos que explican el Programa de Gobierno que se ejecutará para lograr las metas del Acuerdo y que son potestades del PEN.

Esta es la razón por la que se sigue esperando el ingreso de la iniciativa en Mesa de Entradas.

En caso de modificarse esto, crecerían las chances de que Juntos por el Cambio apoye en general, aunque hay sectores duros del Pro que igual quieren votar en contra. Pero en caso de que se alcance un entendimiento que permita diferenciar los artículos, la principal oposición –o al menos una parte de ella, que sería suficiente- podría no votar únicamente los anexos, sin hacer caer la ley.

Mientras tanto, siguen negociando.

Eso sí: cuando hablamos de una coincidencia dentro de JxC de “casi todos”, aludimos por ejemplo al sector encabezado por Rodrigo de Loredo, titular del bloque Evolución Radical, que no quiere que se diferencien los artículos. Que debe ser uno solo.

FMI: oficialismo y oposición en Diputados se reúnen para fijar el cronograma de debate

El proyecto del acuerdo con el FMI todavía no ingresó. La reunión, encabezada por Sergio Massa, se realiza en el Salón de Honor. Arrancó pasadas las 12.30.

Jefes de bloques y autoridades de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados se reúnen este jueves, desde pasadas las 12.30, en el Salón de Honor para coordinar el cronograma de debate que tendrá el proyecto de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

El encuentro, encabezado por el presidente del cuerpo, Sergio Massa, fue convocado el miércoles por la noche a la espera del texto, que se estimaba ingresara este jueves por la mañana, pero desde Casa Rosada se confirmó que está retrasado porque “Argentina y el FMI discrepan sobre una cláusula política”.

Además de Massa, en la reunión participan el titular del bloque oficialista, Germán Martínez, y sus pares Cristian Ritondo (Pro), Mario Negri (UCR), Rodrigo de Loredo (Evolución Radical), Juan Manuel López (CC-ARI), Alejandro “Topo” Rodríguez (Interbloque Federal), Luis Di Giacomo (Interbloque Provincias Unidas).

Están también el presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Heller (FdT), su vice Luciano Laspina (Pro), y el director de la comisión, Ariel Seguí.

Asimismo, están el secretario general de la Presidencia, Juan Manuel Cheppi; el secretario Parlamentario, Eduardo Cergnul; el secretario Administrativo, Rodrigo Rodríguez; la prosecretaria Parlamentaria Ana Lozano; y las diputadas Cecilia Moreau y Paula Penacca.

Al llegar al Congreso, el jefe del bloque radical de la Cámara baja, Mario Negri, señaló a la prensa que “vamos a tener una reunión convocada anoche por el presidente de la Cámara, a las autoridades de la Comisión de Presupuesto, a los presidentes de bloque que integran esa Comisión, para diagramar, conversar, discutir, cuántos días llevará esto de discusión, cuál es el plan de trabajo. Pregunté hace unos momentos, no ha ingresado nada entonces seguimos opinando sobre un papel en blanco”.

“Hemos dicho diez veces que si el senador Mayans dice que hasta que no vean con una lupa el proyecto no opinan, ¿qué nos pueden pedir a nosotros que nunca nos informaron?”, agregó. Por otra parte señaló respecto del comportamiento que adoptará Juntos por el Cambio que “cada uno tendrá su opinión personal, pero yo respeto el compromiso que hemos hecho entre nosotros y somos serios. Hemos afirmado que no queremos default”.

“Cuando tengamos el proyecto nos vamos a juntar en JxC para que las miradas que pueda haber distintas encuentren un punto de unidad”, concluyó.

En su conferencia de prensa de los jueves, la portavoz Gabriela Cerruti dio detalles sobre lo acordado en torno a uno de los temas más ríspidos con el Fondo Monetario, las tarifas. Pero en sus palabras quedó claro que las negociaciones no habían concluido.

“En las próximas horas estará cerrado, escrito y traducido, y enviado al Congreso nacional. Queremos tomarnos todo el tiempo necesario para dar todas las discusiones”, remarcó la funcionaria respecto al texto que de tal manera no ingresó al Congreso por la mañana, como se había anticipado.

Algunas versiones hablan de diferencias que no han sido aún saldadas con las autoridades del FMI y que son las que están demorando el cierre del entendimiento. Así y todo, desde la presidencia de la Cámara aclararon que se mantenía el cronograma anunciado este miércoles, a los efectos de “ordenar tratamiento, cronograma de comisión, invitados y expositores, así como determinar la asistencia de funcionarios”.

El Gobierno usará una ley vetada por Macri para resolver el tema tarifas

Lo confirmó Gabriela Cerruti, quien dio detalles de cómo terminaron acordando con el FMI en uno de los temas que había trabado las negociaciones, que admitió todavía no han concluido.

Recuperándose del Covid que contrajo hace pocos días, la portavoz presidencial Gabriela Cerruti brindó su conferencia de prensa habitual de los jueves desde su casa, y dedicó la primera parte a referirse al acuerdo “inminente” que terminará siendo cerrado entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional, cuyo texto enviarán “en las próximas horas” al Congreso para iniciar su tratamiento.

En ese sentido y vía zoom, explicó que “estamos en los últimos momentos, los últimos instantes, del entendimiento técnico con el Fondo Monetario Internacional. Ustedes saben que venimos llevando adelante una cantidad de negociaciones que implican discutir palabra por palabra, porque cada una de las decisiones que tomemos tienen impacto en la vida de los argentinos y las argentinas”.

“Por eso, tal como dijo el presidente en su discurso del 1° de marzo, ya hemos llegado a acuerdos en todos los puntos sustanciales”, agregó Cerruti, precisando que “se trabajó toda la noche, se continúa trabajando para llegar a plasmar en un texto todos los acuerdos correspondientes. Traducirlos y de esa manera poder tener toda la documentación necesaria pertinente para poder enviarla al Congreso de la Nación, esperamos que en las próximas horas, para que sea allí el que empiece su tratamiento”.

La funcionaria admitió que ha habido demoras en el entendimiento, pero aclaró que “hay que tener mucha templanza”, por cuanto “estamos discutiendo con poderosos, con los poderes más grandes de esta tierra”, y lo que está en debate es “una deuda histórica: la que tomó el presidente Mauricio Macri, que compromete a muchas generaciones de argentinos, y esto no se resuelve en 5 minutos. Y no hay que aflojar hasta el último minuto en la defensa de los intereses de los argentinos y las argentinas”.

Luego detalló uno de los puntos principales a los que se llegó en el entendimiento, tratándose de una de las cuestiones que generaban más diferencias: la cuestión tarifaria.

Al respecto la portavoz señaló que “teníamos una diferencia en cuanto a cómo se iba a trabajar”, y que el Gobierno pretendía que hubiera “tarifas razonables y susceptibles de ser aplicadas con criterio de justicia y equidad distributiva para los servicios públicos de gas y electricidad, conforme a los parámetros objetivos que corresponden a cada caso”.

Se establecieron entonces pautas tanto para los usuarios residenciales, como para los no residenciales. Para los primeros “se considerará como criterio objetivo el Coeficiente de Variación Salarial (CVS), como lo establecía la Ley 27.443 que votamos cuando yo estaba en el Congreso de la Nación, que era contra los tarifazos que se estaban llevando a cabo en ese momento. Era una ley que impulsó la oposición y no se pudo aplicar porque el presidente Mauricio Macri en ese momento la vetó”.

“Esa ley establecía que las tarifas no pueden subir más allá del Coeficiente de Variación Salarial”, precisó, detallando a continuación los parámetros establecidos, según los cuales el Poder Ejecutivo Nacional impulsará, previa audiencia pública convocada a fines de abril de 2022, las medidas que traten un sendero para el bienio 2022/2023, con “un esquema de segmentación de subsidios que enfoque el esfuerzo estatal en aquellos usuarios vulnerables y con menor capacidad de pago, e incentivando la adopción de medidas que induzcan al uso racional de servicios”.

Los usuarios que dejarán de ser beneficiarios de subsidios en función de su mayor capacidad de pago constituyen el primer segmento, precisó, indicando que los usuarios beneficiarios de tarifa social componen el segundo segmento y para ellos el incremento total en su factura para cada año calendario será equivalente al 40% de variación salarial al año anterior.

Para el resto, el total será equivalente al 80% del CVS correspondiente al año anterior. Y completó: “Durante 2022 y 2023, no podrán contemplarse otros incrementos por encima de los topes previstos para la segmentación de los usuarios b y c”.

Para el presente año se incluirán para el cálculo los incrementos aplicados durante todo el año calendario.

Cerró el tema reiterando que ese era uno de los puntos que habían detenido el cierre total del acuerdo, que “en las próximas horas estará cerrado, escrito y traducido, y enviado al Congreso nacional. Queremos tomarnos todo el tiempo necesario para dar todas las discusiones”.

Este jueves ingresa a Diputados el acuerdo con el FMI

Al mediodía habrá una reunión de las autoridades de la Cámara con los presidentes de bloques integrantes de la Comisión de Presupuesto.

La espera concluye este jueves por la mañana: ingresa formalmente a esta Cámara la ley que habilita el tratamiento del Memorandun de entendimiento con el FMI para su aprobación o rechazo.

A los efectos de ordenar tratamiento, cronograma de comisión, invitados y expositores, así como determinar la asistencia de funcionarios, este jueves a las 12 se ha programado  en el salón de Honor de la Presidencia se realizará una reunión de presidentes de bloques  integrantes de la comisión de Presupuesto con los las autoridades de la comisión y las autoridades de Cámara.

Posteriormente, se avanzará  con el resto de los bloques, según se informó.

Asimismo se informa que ingresada la ley sus fundamentos y motivos, será girado a todos los presidentes de bloque.

Concluyen así las dilaciones que se iniciaron cuando el Gobierno anunció el principio de acuerdo el pasado 28 de enero, y a partir de entonces se inició una cuenta regresiva para llegar al momento de presentar el proyecto en el Congreso, que nunca terminaba. Primero se habló de que la Cámara elegida sería el Senado; luego se decidió que sería la Cámara baja, y los últimos días se daba por confirmado que se presentaría el viernes pasado o el lunes 28 de febrero, antes de la Asamblea Legislativa.

No fue así, pero al día siguiente el primer mandatario confirmó que el acuerdo estaba casi resuelto y que sería presentado esta semana sin falta.

“Es el mejor acuerdo que el Gobierno de la Argentina podía conseguir. Me hubiera gustado que el Gobierno anterior no hubiera recurrido en 2018 al FMI y muchos menos en las condiciones que ya describí”, señaló el presidente el martes ante la Asamblea Legislativa, afirmando que “con el entendimiento que logramos, podemos ordenar el presente y construir un futuro”.

Agregó el presidente que “el nuevo acuerdo no acumulará nueva deuda a la ya tomada por el gobierno anterior. Es una refinanciación de aquél préstamo que nos permite no usar en estos años recursos nacionales para pagar los compromisos. Se usará dinero del propio FMI que empezará a pagarse dentro de 4 años y medio. Podremos utilizar ese tiempo para que semejante carga de deuda no detenga el crecimiento”. Y luego aclaró que “el acuerdo no resuelve el problema de la deuda externa, pero da un paso importante en esa dirección”.

Ahora los tiempos se aceleran, pues el acuerdo debería haber pasado por ambas cámaras el 22 de marzo, fecha en la que Argentina debería pagarle al Fondo un dinero que no tiene.

La verdad sea dicha, no hay muchas expectativas de que el proyecto pueda ser ley antes del 22, sobre todo teniendo en cuenta que los tiempos del Senado imponen esperar 7 días desde la fecha del dictamen para su tratamiento en el recinto. Pero alcanzará tal vez como señal para el Fondo que para esa fecha se haya alcanzado al menos una media sanción en Diputados.

Un presidente más enfocado en dar señales a los propios que en seducir a los ajenos

Alberto Fernández volvió a anunciar el acuerdo con el Fondo… aunque aclaró que todavía no estaba cerrado. Pareció disfrutar la retirada del Pro, como un éxito para ofrendar para la interna del FdT.

Por José Angel Di Mauro

Pocas veces hubo tanta expectativa respecto de un discurso de inauguración del período de sesiones ordinarias del Congreso. No es para menos, si se tiene en cuenta que lo que se estaba esperando eran datos que permitan resolver las dudas planteadas en torno al entendimiento con el Fondo Monetario Internacional, que el Gobierno anunció hace justamente un mes y un día, pero que desde entonces no termina de cerrar. Tampoco lo ha hecho ahora.

Como para acrecentar el misterio, desde hace semanas se viene anunciando el ingreso al Congreso del texto que deberán aprobar ambas cámaras, pero siempre se va corriendo la fecha. La última vez fue este lunes 28 de febrero, cuando como para darle más certeza a la expectativa se dispuso mantener una guardia en Mesa de Entrada de la Cámara baja por si el Ejecutivo enviaba el proyecto de una vez por todas. No sucedió, y se esperaba entonces que el presidente diera elementos concretos para conocer en qué estado está la negociación.

Lo hizo, y no hubo que esperar hasta el final de su discurso de poco más de una hora y media para escucharlo. Reiteró parte de lo que había señalado el 28 de enero, cuando en un breve mensaje grabado en los jardines de Olivos dijo que ese era el mejor acuerdo posible. Este martes repitió la frase y agregó algunas precisiones: no habrá reformas previsional ni laboral; no habrá ajuste; no habrá tarifazos… aunque las tarifas van a aumentar. Habrá que ver hasta qué porcentaje se interpreta la palabra tarifazo.

Se empezará a pagar en el año 2026 y deberíamos terminar de pagar 8 años más tarde. “Es el mejor acuerdo que se podía lograr”, remarcó dos veces el mandatario, curiosamente más enfocado en convencer a los propios que a los ajenos.

El presidente y su vice se mostraron en armonía.

El Gobierno se tomó su tiempo para alcanzar este entendimiento que todavía -admitió el presidente- no alcanzó a cerrarse. De hecho, el año pasado en la apertura de sesiones ordinarias anticipó el envío del acuerdo con el Fondo. Esa vez dijo que lo haría en el transcurso del año, pero como el acuerdo se demoró…

“Defender los derechos de nuestro pueblo demanda mucho más que cinco minutos”, explicó este martes el mandatario, en referencia a los dichos del expresidente Mauricio Macri respecto de cuánto hubiese demorado en refinanciar lo acordado en 2018, de haber sido reelecto.

La oposición de Juntos por el Cambio había anticipado su intención de retirarse si el presidente se excedía en sus críticas a la administración anterior. No lo hizo cuando Alberto Fernández le enrostró a Macriun endeudamiento adquirido “con una frivolidad alarmante”, tal su definición. Pero la gota que colmó la paciencia de parte de la oposición fue la insistencia en avanzar con “una querella criminal tendiente a establecer la verdad y las responsabilidades sobre este endeudamiento”. Ahí las dos bancadas del Pro se pararon para irse.

El momento en el que parte de la oposición decidió irse.

El presidente y la vicepresidenta contemplaron la salida de sus adversarios sonrientes. Algunos se preguntaban la razón que pudiera justificar cierto gozo de parte del mandatario, cuando bien se sabe que necesitará al menos una parte de Juntos por el Cambio para aprobar el acuerdo con el Fondo, pues con los propios no llega. Tal vez haya celebrado internamente que el enojo se haya limitado a una parte de JxC y toda división opositora le sirve.

“Eso a nosotros no nos va a dividir”, aclararía más tarde el diputado Mario Negri, que se quejó porque el presidente insistiera con una acción judicial que ya había anunciado hace un año.

Pero así como Juntos por el Cambio le sirve al Gobierno para focalizar la rivalidad con el fin de fortalecerse internamente, lo mismo pasa con la Justicia. Con los integrantes de Corte presentes y a pocos metros de su estrado, el presidente zamarreó a la misma. Pareció que más que hablarle a sus cuatro integrantes, lo hacía al kirchnerismo en general y a su vicepresidenta en particular. “La conformación y funcionamiento de la Corte Suprema de Justicia también debe ser objeto de análisis y decisión en este ejercicio legislativo”, señaló el presidente luego de haberle apuntado a Comodoro Py y hablar de “complicidad judicial con el poder económico”.

Debería tener claro el presidente que por más empeño que ponga, nada ha cambiado desde que la reforma judicial cuya media sanción ya perdió estado parlamentario fue frenada en Diputados. En rigor, sí cambió: ahora es aun más difícil que un proyecto de esas características pueda avanzar con este Congreso. Y mucho menos una reforma del Máximo Tribunal en este ejercicio legislativo, como el presidente dijo, cuando ni siquiera está en condiciones de reunir las mayorías necesarias para completar su composición. De hecho, desde el retiro de Elena Highton de Nolasco -ya pasaron cuatro meses- el presidente no ha enviado siquiera el pliego de un reemplazante.

Los integrantes de la Corte estuvieron de manera presencial y escucharon las críticas del presidente.

Con el tema del acuerdo con el Fondo como eje dominante de la presentación de Alberto Fernández en el Congreso, las expectativas estaban puestas no solo en las palabras que fuera a decir, sino también en los gestos y presencias. O más bien las ausencias.

Particularmente los gestos de la titular del Senado, que como el jueves pasado en la sesión preparatoria se mostró de buen talante: repartió sonrisas, dialogó con su compañero de fórmula y contrariamente a lo que algunos sugerían que iba a suceder, no le puso a Alberto la cara que Bergoglio tenía cuando Macri lo visitó en Roma en 2016.

En cuanto a las ausencias, no por esperada dejó de ser notoria la de quien hasta hace 29 días presidía el bloque oficialista de la Cámara baja. Máximo Kirchner se quedó en Santa Cruz y para moderar el impacto de ese dato algunos recordaron que ya el año pasado no había estado presente en la Asamblea Legislativa. Por más pandemia que haya habido entonces, un presidente de bloque tiene una serie de obligaciones y estar presente en esas instancias es una de esas. Podrá decirse que también tiene la obligación de defender las políticas de su gobierno, y ese es un buen justificativo de su decisión de renunciar. Como sea, el hijo de los Kirchner será recordado como un presidente de bloque atípico.

El resto de los integrantes de La Cámpora estuvo presente en el recinto este martes, al menos sus figuras más conocidas. Nada garantiza igual que vayan a votar el acuerdo con el Fondo, que debe ser el desvelo principal del presidente Fernández.

Que anunció además una batería de proyectos para tratar a lo largo del presente año. Más de una decena, algunos de los cuales ya figuraban en el temario para extraordinarias… que pasó sin que ni uno solo de esos proyectos fuera tratado siquiera en comisión.

Con semejante antecedente, números muy ajustados y una tirantez extrema con la principal oposición, difícilmente pueda hacerse demasiadas ilusiones. Bastará con que, a diferencia de lo que sucedió con los 15 proyectos que anunció en la Asamblea Legislativa de 2021, al menos uno de estos proyectos sea aprobado.

El presidente expondrá ante un Congreso más complicado que en su última visita

La presencia de Alberto Fernández es esperada para el mediodía de este martes y se aguardan con atención sus anuncios y los gestos de quien estará sentada a su izquierda. Los ejes del mensaje.

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, inaugurará este martes el 140° período de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, con un mensaje que estará signado por el debate central que se apresta a encarar el Parlamento en los próximos días: el acuerdo con el Fondo Monetario.

Obligado por la Ley 27.612, de Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública que esta misma administración decidió hacer votar el año pasado, el oficialismo deberá aprobar en ambas cámaras el acuerdo con el FMI, lo cual ha generado un clima deliberativo en el seno del Frente de Todos, cuyo punto central de tensión estuvo marcado por la decisión de Máximo Kirchner de renunciar a la presidencia del bloque.

Pero más allá de esa decisión que marcó un punto de inflexión en el frente constituido en 2019, todos los ojos estarán puestos este martes en la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner. Sentada a la izquierda del primer mandatario, la titular del Senado volverá a mostrarse después de mucho tiempo junto a su compañero de fórmula, pero sobre todo habrá una gran expectativa en ver sus gestos durante el discurso de Alberto Fernández. Sobre todo cuando haga referencia a las negociaciones con el FMI, que se espera anuncie como concluidas, de cara al envío al Congreso del proyecto para aprobar el acuerdo.

Cristina Fernández de Kirchner se ha mantenido en silencio respecto del acuerdo con el Fondo, y solo alteró su silencio en las redes sociales el último domingo, cuando recordó su actuación cuando el conflicto entre Rusia y Ucrania por la península de Crimea. Respecto del entendimiento por la deuda, Alberto Fernández admitió en declaraciones al periodismo que ella tiene diferencias con el entendimiento, pero aseguró que ella no compartía la decisión de su hijo de dejar la presidencia del bloque oficialista, al punto tal de haberle pedido reconsiderarla. Hay muchos que ponen en duda que realmente la decisión de su hijo no haya sido consensuada con la vicepresidenta.

Por lo pronto, CFK ya reapareció en público el jueves pasado, para presidir la sesión preparatoria del Senado, y esa vez se mostró distendida.

A la derecha del presidente de la Nación se sentará este martes el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien ha contribuido en buena medida al avance del entendimiento con el FMI, según ha podido saberse. El será -junto a Germán Martínez, sucesor de Máximo Kirchner- el encargado de llevar adelante buena parte de la tarea de reunir los votos necesarios para aprobar el acuerdo en la Cámara baja con la mayor cantidad posible.

El tema del acuerdo con el FMI será entonces el que más expectativa atraerá este martes, aunque no se sabe cuánto tiempo le dedicará el presidente al mismo, ni tampoco qué lugar ocupará en el orden del discurso en cuya elaboración colaboran los asesores presidenciales Alejandro Grimson y Ricardo Forster.

Es de esperar que una vez más el presidente deje claro que la deuda en cuestión ha sido contraída por la administración que lo antecedió, pero el tono que use en esas circunstancias merecerá también especial atención, pues bien sabe Fernández que los legisladores de Juntos por el Cambio serán indispensables a la hora de votar el acuerdo. No sea cosa que suceda como con el Presupuesto, cuando la ira de Máximo Kirchner desbarató todo tipo de acuerdos por los que se había trabado durante la extensa sesión en Diputados.

La inflación será otra cuestión a la que el primer mandatario se referirá sin dudas, haciendo hincapié en el control de precios para combatirla. Hablará del tema, según ha trascendido, como una de las prioridades de esta administración.

La cuestión económica será comentada por el presidente en el marco de datos auspiciosos que le han aportado sus funcionarios para su difusión. Fernández hará hincapié en el crecimiento de la actividad económica de un 9,3% en el mes de noviembre, enfatizando que es la novena suba consecutiva. También resaltará el crecimiento del 15,8% de la actividad industrial en 2021 y de un 7,1% respecto del año anterior.

Hablará de la construcción, que creció 30,8% respecto de 2020 y 5,4% comparado con 2019. Lo encadenará con el tema del empleo, que  llevará un buen espacio en el discurso presidencial, que enfatizará que en el último trimestre de 2021 la tasa de empleo fue del 42,9% (con 422 mil nuevos puestos de trabajo), la más elevada desde 2016 para un tercer trimestre.

La tasa de desempleo bajó al 8,2%, la menor para un tercer trimestre desde 2016 y en noviembre el empleo total registrado aumentó 3,7% con relación a noviembre 2020.

Para un país ávido de divisas, resaltará el saldo comercial positivo de 2021 del orden de los 14.750 millones de dólares: el segundo mayor registro desde 2009.

Fernández vinculará todos estos datos con la salida de la pandemia, a la que no obviará en su discurso, y respecto a ello pondrá especial énfasis en destacar la campaña de vacunación, con más de 35 millones de argentinos con esquema completo.

Seguramente destacará que ese “logro” fue alcanzado a partir del acuerdo alcanzado en primer lugar con Rusia para la llegada de las vacunas Sputnik V, aunque para equilibrar destacará también la llegada de vacunas de otros orígenes, como las norteamericanas Moderna y Pfizer.

A propósito del acuerdo con Rusia por las vacunas, se espera que haga referencia al conflicto con Ucrania. Por primera vez su canciller, Santiago Cafiero, pronunció en nombre del Gobierno este lunes en la ONU la palabra “invasión”. Previamente lo había hecho el titular de la Cámara baja, Sergio Massa, inmediatamente después de desatada la guerra.

Es de esperar que en materia de relaciones exteriores el presidente resalte su reciente viaje a China y los acuerdos alcanzados en ese país, remarcando sobre todo los que tienen que ver con la Ruta de la Seda.

Según adelantaron voceros consultados, también hablará del tema salud mental de la población tras la pandemia, como así también sobre el cambio climático, haciendo especial hincapié en los incendios registrados en la provincia de Corrientes.

En materia de proyectos que vaya a enviar al Congreso, o sobre los que pedirá su aprobación, basta con echar un vistazo en el temario de extraordinarias, ninguna de cuyas iniciativas tuvo tratamiento en el mes de febrero.

Uno de esos proyectos tiene que ver con el Consejo de la Magistratura. Para cumplir con el requerimiento de la Corte Suprema de redactar una nueva ley, sobre el tema el PEN mandó un proyecto al Senado cuyo tratamiento nunca comenzó.

El acuerdo con el FMI sigue sin llegar al Congreso

Si bien había trascendido que podría presentarse este lunes en Diputados, el día transcurrió sin novedades.

Exactamente un mes después de haber anunciado el Gobierno el entendimiento con el Fondo Monetario Internacional, el proyecto que contiene los detalles del mismo y que debe ser autorizado por el Congreso de la Nación, sigue sin ingresar al mismo.

El dato saliente es que había trascendido que llegaría este lunes, en vísperas del discurso de Alberto Fernández ante la Asamblea Legislativa, y por eso es que el titular de la Cámara baja dispuso mantener una guardia en Mesa de Entrada de Diputados a la espera de que el entendimiento fuera enviado por el Poder Ejecutivo.

Lo cierto es que ya varias veces se anunció la inminente llegada del texto al Parlamento, pero una y otra vez la realidad indicó que hay que seguir esperando.

A propósito de que los tiempos apremian para llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario antes del 22 de marzo -fecha en la que Argentina debería hacer un pago para evitar en caer en default y no cuenta con reservas suficientes para cumplir con ello-, se había especulado con un rápido envío del texto luego de que el viernes 28 de enero el Gobierno anunciara ese principio de acuerdo con el FMI. Sin embargo tres días después se registró la renuncia del presidente del bloque oficialista de la Cámara de Diputados, Máximo Kirchner, que trastocó todos los parámetros dentro del Frente de Todos. A partir de ahí no solo ese trámite entró en un cono de sombras, sino el período extraordinario en sí. De hecho, la velada fractura expuesta en el oficialismo hizo que el temario para extraordinarias pasara a un segundo plano y que en definitiva y de manera inédita ni uno de los proyectos sugeridos por el PEN fuera tratado en ninguna de las dos cámaras.

Se habló de que el proyecto ingresaría por la Cámara alta, donde el oficialismo ya no tiene mayoría, pero sí cuenta con el número suficiente para aprobar todo lo que se envíe a ese Cuerpo. Sin embargo quedó claramente expuesto que las dificultades oficialistas no se limitaban a la Cámara baja donde el presidente del bloque había renunciado, sino que también invadían el Senado. Sucedió el lunes 14 de febrero, cuando el presidente del bloque Frente de Todos de esa Cámara, José Mayans, aclaró que los senadores oficialistas querían conocer “el detalle del acuerdo con el FMI para saber en qué compromiso vamos a meter al país”. Asimismo el formoseño señaló en esa entrevista que en una charla reciente mantenida con el negociador de la deuda Sergio Chodos, le había expresado su parecer respecto de que le parecía “conveniente” que el debate parlamentario del acuerdo por la deuda se iniciara en la Cámara de Diputados.

Si bien Mayans señaló en esa entrevista realizada en El Destape Radio que esa decisión dependía del Poder Ejecutivo, en lo más alto del poder formal tomaron nota del mensaje y ya no pensaron más en tomar el Senado como Cámara iniciadora.

Sonó fuerte finalmente el trascendido de que el proyecto entraría el viernes 25 de febrero, o bien el 2 de marzo, transcurrida la Asamblea Legislativa. Luego calificadas fuentes oficiales dieron casi por confirmado que el proyecto se conocería el viernes pasado, pero tampoco sucedió y ni tampoco este lunes, la fecha alternativa.

En rigor, había quienes dudaban mucho de que este lunes fuera el día elegido, justo en vísperas de la inauguración de las sesiones ordinarias, por la repercusión que el texto podría tener entre los legisladores. La tropa propia y la oposición.

Lo cierto es que la decisión final depende de que la letra chica entre los negociadores argentinos y sus pares del FMI termine de ser acordada. Ya no es una cuestión de fechas, sino de flexibilidad de cada una de las partes, y según ha trascendido, las discrepancias están empantanadas desde hace varios días en la cuestión tarifaria: el Fondo reclama un aumento del 60% del precio de las facturas y la consecuente reducción drástica de los subsidios energéticos, pero ya se sabe que en el Instituto Patria -léase Cristina Fernández de Kirchner– se ha dejado claro que el incremento no debe superar el 20%.

Sobre llovido mojado, el estallido de la guerra en Ucrania disparó los precios del petróleo y eso tendrá incidencia inexorable en los precios de un insumo como el gas, que la Argentina debe importar pese a albergar en su seno la cantidad de fluido suficiente como para autoabastecernos y exportar. Sucede que la construcción del gasoducto que hubiera garantizado la autosuficiencia no concluyó y es así que deberán seguir llegando los barcos gasíferos, ahora con precios mucho más altos que los previstos originalmente.

En este contexto los tiempos se acortan de manera dramática y no hay espacio para más dilaciones. La llegada del proyecto deberá ser esta semana -por la Cámara baja, está claro-, pero habrá que considerar también que el texto no ha sido consensuado todavía con las autoridades del Fondo. Los tiempos urgen, así que en las próximas horas deberán acabarse las dilaciones.

Di Tullio espera que el acuerdo con el FMI se apruebe en ambas cámaras

Aclaró que debe ser así si el entendimiento “contiene lo que venimos charlando y negociando desde hace dos años. Justificó la renuncia de Máximo Kirchner a la conducción del bloque en Diputados.

Conocedora del cargo por haberlo ostentado entre 2013 y 2015, la hoy senadora nacional Juliana Di Tullio consideró que Máximo Kirchner “hizo lo correcto” al renunciar a la presidencia del bloque oficialista. “Si vos no estás de acuerdo, no podés conducir el bloque”, puntualizó.

“A mí me gusta que no se caretee en la política, me gusta la gente normal haciendo política. Máximo no solo planteó su salida en función de ‘no estoy de acuerdo, hace dos años que lo vengo diciendo’, y no solo lo dijo él, lo hemos dicho muchos: diez años para pagar 40 mil millones de dólares. No hay manera de poder lograrlo”, puntualizó la senadora, que dijo no estar de acuerdo con que el presidente Alberto Fernández haya planteado el entendimiento con el Fondo como “una buena noticia”. Para ella, “no es una buena noticia arreglar con el Fondo, porque es el FMI. Buena noticia habría sido que (Mauricio) Macri no hubiera pedido 50 mil millones de dólares, eso habría sido una excelente noticia”.

Con todo, aclaró que espera “que sea un buen acuerdo, o el mejor acuerdo posible”, aunque insistió en que “aun el mejor acuerdo no es nada para festejar”.

En diálogo con Perfil, aclaró que “ni yo ni ningún otro legislador conoce el texto del acuerdo. Soy parte del Gobierno, confío en él y en la negociación, necesito saber qué estoy votando, qué voy a votar, qué voy a acompañar”, puntualizó Di Tullio, que advirtió sobre trascendidos periodísticos de los últimos días que consideró “una serie de malos entendidos que sería bueno se tranquilizaran porque esto no le hace bien a la previsibilidad de la Argentina y a lo que queremos desde el Frente de Todos, que es una coalición de gobierno con lo que eso implica”.

En ese marco puntualizó que “llegar a acuerdos desde fuerzas y pensamientos diferentes, incluso desde composiciones diversas, porque ni todo el peronismo, ni todo el Frente Renovador, ni todo el espacio del Presidente piensan lo mismo. No somos espacios que nos caracterizamos por la uniformidad, mucho menos aún el peronismo. Esas son cosas que hacen ruido en vez de generar calma”.

Consultada respecto de si piensa que el acuerdo será finalmente aprobado en el Senado, Juliana Di Tullio dijo tener expectativas de “que se apruebe en ambas cámaras, si es un acuerdo que contiene lo que venimos charlando y negociando desde hace dos años”.

Así y todo admitió tener algunas dudas: “Lo que sucedió esta semana no fue el mejor escenario para ponerles tranquilidad a quienes tenemos que estudiar, leer y saber qué estamos proponiéndoles a los argentinos y argentinas”.

Del Caño llama a movilizarse contra el acuerdo con el FMI

Luego de que trascendieran detalles del entendimiento, el diputado de izquierda alertó sobre el posible “ajuste” que implica.

Luego de que un periodista alertara sobre el entendimiento con el Fondo Monetario y los posibles ajustes que el mismo conllevaría, el diputado nacional Nicolás Del Caño se puso en guardia.

“Se van conociendo detalles del acuerdo con el FMI y son vergonzosos los intentos de esconder el ajuste. Hablan de ‘racionalización del gasto’ para no llamarlo por su nombre”, expresó el legislador en las redes sociales.

Allí Del Caño sostuvo que “todo lo que está trascendiendo del ‘preacuerdo’ con el FMI confirma lo que venimos diciendo desde la izquierda: quieren seguir ajustando a las mayorías trabajadoras para pagar la estafa de Macri”.

“No hay medias tintas ante la entrega y la sumisión. El día que se trate en el Congreso nos vamos a movilizar por miles para rechazar este nuevo pacto de coloniaje”, concluyó el legislador de izquierda.

“Voy hacer lo imposible para que Máximo vote con nosotros”, afirmó Germán Martínez

El nuevo jefe de la bancada oficialista de la Cámara baja garantizó que trabajará para tener la mayor cantidad de votos para aprobar el acuerdo con el FMI.

El presidente del bloque del Frente de Todos en la Cámara baja, Germán Martínez, detalló que todavía se está trabajando en un ámbito técnico para terminar de pulir el programa con el FMI. Y puntualmente respecto de su antecesor en el cargo, expresó: “Con Máximo (Kirchner) hablo siempre pero no soy pesado”.

“Compartimos miradas y tratamos de ir avanzando en distintos temas que tienen que ver con la conducción del bloque. No sé si lo voy a lograr convencer, pero voy a hacer lo imposible para que vote con nosotros”, expresó por CNN Radio.

Consultado respecto del “poroteo” de cara a la sesión en la que se tratará el acuerdo con el Fondo Monetario, Martínez expresó que todavía no manejan datos porque no está el texto definitivo. “Todavía se está trabajando en un ámbito técnico para terminar de pulir el programa con el FMI. Pero voy a trabajar para tener la mayor cantidad de votos para que tengamos acuerdo y con la mayor convergencia política posible”, puntualizó.

Con relación a su función al frente de la bancada oficialista, Martínez dijo que “el presidente del bloque tiene la misión de convencer a los propios. No está costando mucho”.

 “La coalición política del Frente de Todos no está conformada por gente que piensa toda igual. Es absolutamente razonable que pueda haber distintas miradas”, agregó.

Respecto al entendimiento con el Fondo, explicó que no hay cláusulas secretas ya que todos los diputados y senadores van a tener la totalidad de la información, diferenciando del acuerdo suscriptó en 2018 por el Gobierno anterior, del cual, dijo, “todavía no conocemos los detalles finales”.

En cuanto a las relaciones internacionales, expresó que el presidente “Alberto (Fernández) ya dejó en claro el apoyo de Estados Unidos y no desconocemos su apoyo para este acuerdo, pero eso se ve complementado con una mirada multipolar y de multilateralidad”.

Algunos bancos de inversión especulan con un próximo acuerdo con el FMI

Hay entusiasmo en el gabinete económico por la mejora en la cotización de los bonos.

A pesar de que hace ya un año se reestructuró la deuda privada de Argentina y se sigue observando una elevada tasa de riesgo por encima de 1.500 puntos básicos, en el gabinete económico hay un gran entusiasmo por lo que viene ocurriendo en los mercados en los últimos días, donde se percibe un cambio de tendencia, con activos argentinos que se están revalorizando y que se interpreta como un espaldarazo a las políticas del Ejecutivo.

En ese sentido, fuentes de la cartera económica aseguraron a parlamentario.com que “entre los inversores se empieza a ver que los precios de los activos de nuestro país están muy bajos y hacia delante ven la oportunidad de invertir y tener más rentabilidad”.

“Además, hay algunos bancos muy importantes de Estados Unidos que están recomendando invertir en activos argentinos”, resaltó la misma fuente del Palacio de Hacienda.

En este caso, la referencia es a un informe que se conoció en Wall Street en estas últimas horas donde resalta el punto atractivo de los bajos precios de los bonos argentinos y su posible revalorización a la luz de un eventual acuerdo con el FMI que se concretaría a más tardar en el primer trimestre de 2022.

Pero también hay otro argumento que sostienen en el mercado acerca de esa mejora en los activos argentinos y tiene que ver con “el resultado desfavorable que en principio dan cuenta diversas encuestas acerca de las perspectivas electorales para el oficialismo”.

“Muchos en el mercado interpretan que al oficialismo no le va a ir bien en las elecciones. Que habrá un voto castigo y consideran que ese sería un hecho alentador para los bonos y la economía argentina, porque interpretan que un resultado adverso llevaría al Gobierno a realizar algunas correcciones del rumbo”, afirmó un importante broker bursátil local.

Sin embargo, esa postura es relativizada por otros operadores, quienes a la vez advirtieron que un acuerdo con el FMI “aún no está tan cerca de cerrarse”.

Por lo pronto, fuentes de Gobierno aseguraron que “aún persisten diferencias en cuanto al tratamiento fiscal y monetario” entre el gabinete económico y los técnicos del FMI.

Fuentes de Gobierno consultadas admitieron que “la proyección de la evolución del balance de las cuentas públicas es uno de los aspectos que sigue siendo motivo de evaluación entre los técnicos del equipo económico y del Fondo Monetario”.

La mayor dificultad está en el equilibrio fiscal que debería asegurar el país en un nuevo acuerdo, en este caso denominados Facilidades Extendidas, ya que el mismo será por 10 años y precisamente las diferencias se concentrarían en el período en el cual Argentina se comprometería a reducir sus desequilibrios.

El objetivo del Gobierno es estirar el plazo de conversión a la sustentabilidad fiscal y allí hay diferencias con los técnicos del FMI, ya que existen insistentes rumores que el organismo presiona para que Argentina alcance el equilibrio presupuestario en dos años.

Pero también hay un tema que en estas conversaciones con el FMI se ha planteado y aún no está resuelto, que el tema de la evaluación de la sustentabilidad y si se incluirá o no en la misma el balance del Banco Central.

Hasta ahora el FMI no incluía en sus evaluaciones el déficit cuasifiscal dentro de lo que se llama las evaluaciones sobre los programas de sustentabilidad, pero habría un cambio que concretaría el organismo a partir del próximo año.

Precisamente, se buscaría un mayor control sobre la política monetaria a través de las revisiones técnicas que realiza el organismo, lo cual también presenta un verdadero desafío para el Gobierno mirando un panorama de mediano y largo plazo.