¿Nos preguntamos qué otra salida hay?

Una propuesta para construir una matriz productiva e industrial donde se incorpore el Mar Argentino como actor co-protagónico, algo olvidado desde siempre por todos los gobiernos nacionales y por el conjunto de la clase política argentina.

Por Carlos Lionel Traboulsi

Una nueva propuesta para el definitivo despegue y desarrollo económico y productivo para la República Argentina es, sin duda alguna, elaborar una nueva visión estratégica del país, superador de los tradicionales modelos agrarios, ganaderos, petrolíferos y mineros. Argentina es un país marítimo con agricultura y ganadería y debemos empezar a tomar conciencia de ello.

Esta nueva visión estratégica se orienta a construir una matriz productiva e industrial donde se incorpore el Mar Argentino como actor co-protagónico, algo olvidado desde siempre por todos los gobiernos nacionales y por el conjunto de la clase política argentina.

Los ejes son: conocimiento y educación; impulso y desarrollo de la industria genuina del campo; desarrollo y explotación del mar, de su plataforma y costa; y el cuidado del medio ambiente.

Esta es una propuesta que incluye tanto a los capitales estatales como privados argentinos e internacionales para su desarrollo. Se propone la creación del Ministerio del Mar o intereses marítimos, asignándole como presupuesto el 50% de lo destinado en el último presupuesto nacional aprobado a las Políticas de Género, lo que permitirá tener un capital de inicio apropiado para invertir como socio y actor protagónico en el desarrollo del modelo y en la puesta en marcha de las propuestas (aproximadamente unos cinco mil millones de dólares), generando confianza en los particulares y habilitando la posibilidad de la inversión privada en el sector, con garantía en algún instrumento financiero a crearse con respaldo en los bienes inmuebles y/o registrables.

Es posible superar el 57% de pobreza que actualmente tenemos con crecimiento y no sufrimiento, porque no probamos?

Sobre la base de una Política Urbana, Productiva, Industrial y Poblacional, generar las primeras 100 Comunidades Solidarias de Auto-Abastecimiento y Producción de 20.000 personas cada una, sobre la costa en la extensión de los 6.816 Km. lineales que van desde la desembocadura del Río de la Plata hasta la Bahía Lapataia en la Provincia de Tierra del Fuego.

Estas comunidades se sostendrán con el beneficio exclusivo de los trabajos relacionados con el mar, desde los menos calificados a los más sofisticados (recolección de residuos, reciclado, alimentos, turismo, inteligencia artificial, etc.). Esto generará soberanía, descentralización poblacional y urbana, trabajo, riqueza, el quite definitivo de los subsidios económicos y asistenciales por parte del Gobierno Nacional para las clases más humildes, y la definitiva erradicación de la pobreza estructural que nuestro país sufre desde siempre.

En los primeros cuatro años de implementación de este modelo de desarrollo del mar argentino unas dos millones de personas de los grandes cordones poblacionales vulnerables de nuestro país se incluirían en este programa.

La promoción planificada de la pesca y la acuicultura permitirán en los primeros cuatro años, en forma escalonada, ascender de los 1.800 Y 940 millones de dólares respectivamente, que aproximadamente el país exporta anualmente, a obtener en igual período unos 3.500 millones de dólares por la pesca, y unos 2.500 millones de dólares por la acuicultura con un incremento en unos 40 mil puestos de trabajo, con estimaciones extremadamente conservadoras.

Se activará la exploración y explotación de los recursos petroleros, gasiferos y mineros de nuestra plataforma continental, cuidando el Medio Ambiente, en la inteligencia que contamos con reservas similares o superiores a, por ejemplo, “Vaca Muerta”, teniendo en cuenta, únicamente, las reservas ubicadas frente a las costas de Mar del Plata y las que ya estamos explotando que pueden superarse de la Cuenca Austral.

Se propone la producción y crecimiento de nuestra industria naval, a fin de poder cumplir con un objetivo a 20 años de construir unos 200 buques para recuperar nuestra Marina Mercante de Bandera y otros 200 buques para el control y patrullaje de toda nuestra extensión marítima, con un costo aproximado total de 40 mil millones de dólares.

Hoy se gasta en fletes por las exportaciones de nuestro país que salen por el canal troncal de los ríos Paraná-Paraguay, entre 5.000 y 7.500 millones de dólares al año, lo que representa en ese lapso de tiempo entre 100 y 150 mil millones de dólares que no quedan, actualmente, en la mesa de los argentinos, por lo que, la recuperación plena de nuestra Marina Mercante de Bandera, para que sean nuestros propios buques los que trasladen nuestras mercaderías hacia otros países, permitirá que el dinero quede en casa.

Se propone sustituir producción alimentaria agrícola y llevarla al mar para permitir la reforestación de nuestro territorio dando una respuesta positiva al cambio climático (con el 2% de la extensión de nuestro mar podemos sextuplicar la producción alimentaria) , y también se propone desarrollar plenamente la industria del turismo, en todo lo concerniente al Mar Argentino, generando una gran cantidad de divisas que hoy en día ingresan a todos los países marítimos del mundo que saben explotar convenientemente todo lo relacionado a este tan importante mercado internacional.

Estos puntos y otros más del modelo permitirían bajar el gasto público y el déficit fiscal con crecimiento y pleno desarrollo económico, y no con el sufrimiento y el ahogo de nuestra gente; y a su vez garantizaría la confianza en el peso argentino actuando como un freno decisivo para la inflación.  No gastar mas de lo que tenemos, ahorro, trabajo genuino, inversión, crecimiento está a la vista que si dejamos de dar la espalda al mar al alcance de nuestras manos lo tenemos.

La moneda se fortalece y se valora con el respaldo de la producción, de la industria y del trabajo que nos ofrece nuestro Mar Argentino.

Ha comenzado la era del planeta agua.

Debemos ser amigos del mar.

La vida de la humanidad comenzó en los mares y en los océanos, y serán ellos los que nos darán la respuesta a los grandes y desafiantes problemas que los seres humanos tenemos y en particular los argentinos.

Reflotemos la argentina sumergida. el cambio está en el mar.

*Traboulsi es abogado, diplomado en Relaciones Internacionales; vicepresidente alterno Cono Sur Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), Fundador y presidente de la Fundación Argentina Azul (www.fundacionargentinaazul.org)

Democracia no te abandono

Por Carlos Lionel Traboulsi. El abogado señala que “la idea de fraude termina desacreditando el sistema de votación” y agrega que “el próximo domingo hay que votar con confianza en el sistema más allá del resultado”.

El próximo domingo los argentinos vamos a las urnas para definir el próximo presidente para los cuatro años de gestión que comienzan el 10 de diciembre de 2023. 

Es muy importante elegir presidente, pero más importante es defender el sistema democrático que hemos sabido conseguir en 1983.  La democracia se debe cuidar día a día y se aprende viviendo en democracia, no sirven los libros para ello, no es una cuestión meramente doctrinaria.  Hay que sentirla, defenderla, vivirla e incluso sufrirla. 

Lo primero en democracia es respetar y cuidar el proceso electoral ya que de allí surgen nuestros representantes.  La argentina tiene un proceso electoral que tiene uno de los estándares de seguridad más alto del mundo, siendo muy dificil el fraude ya que en la cadena de controles intervienen muchas personas, y para que el fraude sea posible se requiere una asociación ilícita de imposible constitución en la práctica, ya que tendrían que estar involucrados, los partidos políticos, autoridades de mesa, fiscales de mesa, fiscales generales, personal de correo, personal informático, personal de seguridad, personal judicial, jueces, etc.   

Por esta razón los ciudadanos y los partidos políticos en especial, tenemos la obligación de fortalecer el sistema impidiendo la instalación de las sospechas de fraude en el proceso electoral.  Si hay alguna sospecha o algún acto de corrupción concreto hay que denunciarlo y la Justicia deberá aplicar todo el peso de la ley, pero si ello no es así no se puede usar la difamación y la circulación de versiones sobre maniobras electorales ilegales, más con los medios tecnológicos con los que contamos en el siglo XXI que retrata la realidad y viraliza en forma inmediata.  La idea de fraude termina desacreditando el sistema de votación.  Si el sistema es corrupto se desprecia a la “polìtica”; se desmerece a la “justicia” y se minimiza la obligatoriedad del “voto”.  Ese es un combo perfecto para no participar y desmovilizar al ciudadano, consiguiendo como resultado el debilitamiento de la democracia.

No se puede desacreditar las instituciones de la democracia con fines electoralistas.  Ante el delito hay que actuar porque esa la actitud de un auténtico demócrata que piensa y actúa por el bien común. 

El sistema electoral es la base de la legitimidad de un gobierno democrático y si afectamos ese origen estamos hiriendo gravemente a la democracia y a nosotros mismos.  Como ciudadanos somos todos responsables.  El próximo domingo a votar con confianza en el sistema más allá del resultado.

Denuncian intereses ocultos en el no tratamiento del proyecto de trazabilidad de la pesca

Luego de que por falta de quórum quedara sin abordar un proyecto consensuado entre oficialismo y oposición, un dirigente se preguntó si el viaje del presidente a China tuvo que ver con la actitud del oficialismo.

Tiene mala suerte en el Congreso el proyecto de trazabilidad de la pesca. Había obtenido dictamen el 16 de noviembre del año pasado, pero no llegó al recinto y perdió estado parlamentario a fines de 2022. Razón por la cual, y ante el consenso que tiene el tema, fue reflotado el 13 de junio precisamente para que se le volviera a dar dictamen en el seno de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios a una iniciativa que unifica proyectos impulsados por Carlos Selva (FdT) y Ximena García (UCR).

Pero si bien se especuló con la incorporación del tema en las sesiones posteriores, eso no sucedió, por lo que en la reunión del martes pasado se pidió un apartamiento del reglamento para sumarlo al temario de esa jornada. Lo planteó uno de los autores del proyecto, el oficialista Carlos Selva, quien hizo hincapié en el consenso que había tenido el tema en su tratamiento en comisión, donde fue aprobado por unanimidad, y se preocupó por afirmar dos veces que “este proyecto no va en contra de nadie”.

Si bien el presidente del bloque oficialista, Germán Martínez, se mostró un tanto remiso a incluirlo, terminó accediendo y se aprobó la incorporación del proyecto a la sesión con las ¾ partes de los diputados presentes. Sin embargo, al final de la reunión fue el único tema que quedó sin tratar, porque se cayó el quórum justo cuando tocaba abordarlo. Y de una manera curiosa, según advirtió la diputada Graciela Camaño, que calificó como “una vergüenza” lo que sucedía con el bloque del oficialismo que se estaba retirando sin tratar un proyecto “consensuado” y cuyo uno de sus autores era de esa misma bancada.

Le salió a contestar Leopoldo Moreau, que rechazó las dudas que había expresado su par -se había preguntado qué intereses tocaba el proyecto y si había intereses en que el proyecto no saliera-, aclarando que los diputados oficialistas se habían vuelto a sentar.

En realidad, no había sido así pues inmediatamente después la presidenta de la Cámara dio por concluida la sesión por falta de quórum.

Quedó toda la sensación de que no había intención de tratar la cuestión de la pesca. Primero, porque el último proyecto de ley tratado, cerca de las 6 de la mañana del jueves pasado, fue el Protocolo de Protección y Detección de Abuso Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes, sobre tablas y sin oradores. E inmediatamente después se procedió a autorizar las inserciones solicitadas por los diputados, como si estuviera decidido ya que ese sería el final. Tras ello se votaron a mano alzada un proyecto declaración y otro de resolución, ambos para expresar beneplácitos, y a continuación sucedió lo que ya contamos.

La pesca ilegal

La situación generó una denuncia del secretario general de la Democracia Cristiana porteña y presidente de la Fundación Argentina Azul, Carlos Lionel Traboulsi, quien este viernes se preguntó si el Gobierno nacional le está permitiendo a China pescar ilegalmente en el Mar Argentino a cambio de recibir yuanes.

“¿A eso fue ahora Alberto Fernández a China, para seguir negociando esto?”, insistió el dirigente, que a continuación planteó sus dudas respecto de lo sucedido en la madrugada del miércoles en el recinto de Diputados: “A pesar de haber sido consensuado en comisión de tratamiento sobre tablas del proyecto de ley de creación del sistema argentino de trazabilidad de la pesca y acuicultura, aproximadamente a las 6AM del miércoles 10 de octubre se levantaron unos 30 diputados K y de La Campora dejando sin quórum, procediendo en forma inmediata la presidente de la Cámara a levantar la sesión en vez de invitar a los que se levantaban a permanecer en sus lugares manteniendo el quórum”, expresó Traboulsi.

El dirigente admitió que “si bien se podrá volver a tratar en otra sesión de Diputados, lo cierto es que se mostró que hay intereses chinos e ingleses que son defendidos por cipayos legislativos”.

Y concluyó: “El convertir en ley la creación del sistema argentino de trazabilidad de la pesca y acuicultura permitirá controlar en toda su cadena desde la pesca hasta la mesa de los consumidores su origen y protección del trabajo argentino y la biodiversidad de nuestro mar y cuidado de los recursos naturales frente a la depredación extranjera. Es un paso importante para empezar a dar batalla y defender lo nuestro”.

Diego Bossio avalado por la Corte para ser candidato

Punto final para el diferendo planteado en el seno de Hacemos por Nuestro País, la lista que lleva como precandidato presidencial a Juan Schiaretti, y la Democracia Cristiana.

Una gran controversia se planteó desde el mismísimo día del cierre de listas entre la Democracia Cristiana y el cordobesismo, que impulsa la candidatura de la fórmula integrada por Juan Schiaretti y Florencio Randazzo para estas elecciones. Ese día terminó la convivencia pacífica -o matrimonio por conveniencia- entre el gobernador cordobés y la DC. Al menos los democristianos porteños.

Es que en CABA, el titular de ese partido en la Ciudad, Carlos Lionel Traboulsi, pretendía encabezar la lista. Sin embargo -tal cual denunciaron desde ese espacio- a último momento fue encumbrado al tope de la lista el exdiputado nacional Diego Bossio. Según se quejaron los democristianos, originalmente el extitular de la ANSeS iba a ser candidato bonaerense -él es oriundo de Tandil-, pero finalmente la lista en ese distrito fue encabezada por Hilda “Chiche” González de Duhalde, razón por la cual Bossio pasó a la Ciudad.

Los democristianos resistieron el traslado, o al menos resignar el primer lugar, cosa que impuso finalmente la conducción de Hacemos por Nuestro País, y terminó convalidando en primera instancia la jueza federal electoral María Servini.

El tema siguió judicializado y en segunda instancia la Cámara Nacional Electoral convalidó la precandidatura de Bossio. Sin resignarse, la DC apeló a la Corte Suprema, que falló este viernes a favor de la precandidatura del exdiputado nacional, según pudo saber parlamentario.com.

Muy molestos por considerar que Bossio no reúne los requisitos por haber nacido en provincia de Buenos Aires y no residir en la Ciudad, los democristianos porteños se resignaron y competirán de todos modos en estas PASO con boleta corta para diputados, encabezada por Traboulsi.

Democristianos rompieron con Schiaretti

Es como consecuencia de la discusión planteada en el cierre de listas, donde el cordobés se inclinó por Diego Bossio para encabezar la lista en CABA.

No terminó de la mejor manera la relación entre la Democracia Cristiana y el precandidato presidencial de Hacemos por Nuestro País, Juan Schiaretti. Al menos, con la Democracia Cristiana de la Ciudad de Buenos Aires, que preside Carlos Traboulsi.

Como ya se informó oportunamente en este medio, la ruptura surgió a partir de la decisión del gobernador cordobés de imponer al frente de la lista de ese espacio en la Ciudad de Buenos Aires a Diego Bossio, quien es además coordinador de la campaña de Schiaretti. En rigor, originalmente el exdiputado nacional iba a encabezar la lista bonaerense, donde finalmente fue puesta Hilda “Chiche” González de Duhalde. Así las cosas, se decidió que Bossio encabezara la lista porteña, donde originalmente estaba acordado que estuviera el propio Traboulsi.

Este último resistió tal decisión y el tema terminó judicializándose, resolviendo finalmente la jueza electoral María Servini a favor de Bossio.

La resistencia de los democristianos se tradujo en una ruptura de ese sector con el schiarettismo, y la decisión de presentar su propia lista. El tema sigue en los medios, donde en declaraciones radiales a la señal Ad Gentes, el precandidato a diputado nacional por la Democracia Cristiana por la Lista 5 A, “Hacemos por CABA”, Carlos Lionel Traboulsi, manifestó que su partido “rechaza llevar como precandidato a presidente de la Nación al gobernador de Córdoba, contador Juan Schiaretti”, al que acusó de “falso”, fustigó por “no cumplir los acuerdos” y hasta lo acusó de “detestar a los porteños”. Queda claro que esta discusión ya no tiene vuelta atrás.

Arde la Democracia Cristiana por una precandidatura en CABA

Se calienta la interna en el frente de Schiaretti por una disputa por la principal precandidatura en el distrito porteño, que se judicializó. En la DC denuncian “traición” de parte de un dirigente propio.

Desde el cierre de listas del 24 de julio pasado, el frente que postula a la fórmula Juan Schiaretti-Florencio Randazzo está enfrascado en una fuerte discusión en torno al primer lugar de la lista de precandidatos a diputados nacionales por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Como hemos venido informando desde el fin de semana pasado, se generó una discusión que ha llegado al plano judicial entre la Democracia Cristina de ese distrito y el exdiputado nacional Diego Bossio, que reclama ese lugar. Ese partido, en tanto, propone a su titular, Carlos Traboulsi, y reivindica tal potestad exigiendo se respete que es el único partido del frente Hacemos por Nuestro País que cuenta con personería jurídica en dicho distrito. Sostienen además que el extitular de la ANSeS no tiene domicilio en CABA y es oriundo además de Tandil, provincia de Buenos Aires.

La DC porteña llevó el tema a la justicia, pero este viernes sufrió un revés. Sucede que dos apoderados nacionales de la alianza electoral que promueve al gobernador cordobés para la presidencia, uno perteneciente al Partido Socialista y el otro al propio Partido Demócrata Cristiano, de la provincia de Córdoba, presentaron un escrito judicial donde desvinculan al PDC de CABA de la alianza schiarettista, invocando en cambio al Partido Acritud Renovadora para llevar a Diego Bossio al primer lugar de la lista.

El representante de la DC cordobesa es Juan Brügge, quien tiene una vieja relación con el schiarettismo, a través de cuyas listas llegó a ser diputado nacional entre 2015 y 2019, y es actualmente director del Banco de la provincia de Córdoba.

“La actitud de Brügge es un terrible acto de traición hacia su propio partido político, que es la Democracia Cristiana, y provocará una fuerte disputa interna en el partido”, bramó Carlos Traboulsi, quien disputa con Bossio encabezar la nómina de ese espacio en CABA. Y agregó que Brügge “está sosteniendo sus propios intereses políticos en Córdoba, pese a traicionar a sus propios afiliados y a la DC de la Capital federal en su justa disputa legal con Bossio”.

Todo dependerá ahora de lo que decida la jueza nacional federal con competencia electoral María Servini, quien tendrá la última palabra en los próximos días.

Fuerte disputa en el frente que encabeza Schiaretti en CABA

El primer lugar en la lista de candidatos a diputados nacionales en ese distrito es eje de una fuerte controversia.

En las febriles negociaciones que se desarrollan en todos los frentes políticos, en el marco del cierre de listas de este fin de semana, sobran las polémicas y se acrecienta minuto a minuto el tendal de heridos. Son tiempos de discusiones y enojos, en algunos casos definitivos.

Habrá que ver en qué categoría de estas se sitúa la pelea que se ha generado en el frente que encabeza el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, denominado Hacemos por Nuestro País, donde hay una fuerte disputa por el cierre de listas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El schiarettismo se apoya en el Partido Democracia Cristiana, que en ese distrito lidera Carlos Traboulsi, quien ya estaba nominado para encabezar allí la lista de precandidatos a diputados nacionales. La armonía desapareció cuando el exdiputado nacional Diego Bossio, principal operador político de Schiaretti, vio frustradas sus aspiraciones de encabezar la lista bonaerense de ese frente, que será para la ex senadora Hilda “Chiche” Duhalde. Así las cosas, Bossio optó por la Ciudad de Buenos Aires con la intención de encabezar la lista porteña, lo que hizo estallar de ira a los dirigentes de la DC, que rechazan esa movida argumentando que el extitular de la ANSeS “no tiene partido, ni dirección en CABA”.

La controversia deberá resolverse antes del cierre de listas, este sábado a las 24, teniendo en cuenta que los democristianos no quieren dar el brazo a torcer y hasta están dispuestos a ir a la justicia argumentando que “Bossio quiere ocupar en forma ilegítima” un lugar en la lista de CABA.

Cabe recordar que la Democracia Cristiana mantiene una vieja relación con el schiarettismo a través de Juan Brügge, dirigente cordobés de la DC que fue diputado nacional entre 2015 y 2019 y hoy ocupa un cargo de director en el Banco de la Provincia de Córdoba. En ese marco, recuerdan desde el PDC que ese es el único partido político que cumple con todos los requisitos que necesita ese frente en la Ciudad, ya que el socialismo va en ese distrito con Juntos por el Cambio y el Partido Autonomista (ambos alineados para esta elección con Hacemos por Nuestro País) no tiene personería.

Carlos Traboulsi será precandidato a diputado nacional en la lista de Schiaretti

El precandidato es el creador del proyecto “Argentina Azul”, en relación la explotación económica del Mar Argentino.

Carlos Traboulsi, secretario general del Partido Demócrata Cristiano, será precandidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires con vistas a bajo el lema: “Ayudemos a Reflotar la Argentina Sumergida. El Cambio está en el Mar” y alineado con la precandidatura presidencial de Juan Schiaretti -actual gobernador de Córdoba-.

Traboulsi es el creador e impulsor del proyecto “Argentina Azul”, un proyecto dirigido a concientizar a la clase política y a la sociedad en su conjunto sobre “las incalculables posibilidades de desarrollo de la economía argentina, a través de la correcta explotación de los inmensos recursos marítimos que posee nuestro país”.

“Energía, minerales, petróleo, gas, pesca y turismo son algunas de las posibilidades que nos ofrece el desarrollo del Mar Argentino, las cuales, bien utilizadas en un proyecto a corto, mediano y largo plazo, permitirán que la pobreza y la indigencia sean completamente erradicadas de nuestra Nación”, explicó el proyecto.

Así también, la iniciativa busca “crear pleno empleo para y cumplir con nuestras obligaciones de deuda con los Organismos Internacionales de Crédito, volviendo a instalar a la República Argentina entre las principales naciones del mundo”.

Tensión de aliados de Juntos por el Cambio

Partidos de centro y centroderecha analizaron la estrategia electoral para este año y se escucharon algunos reproches de partidos disconformes con el tratamiento que reciben de JxC. Algunos exploran otras alternativas.

Un encuentro de la mesa política de Demócratas en Acción, convocado para analizar el inicio de este año electoral que consideran “bastante complejo”, derivó en una fuerte discusión donde se advirtieron posturas bien distintas y algunas críticas hacia Juntos por el Cambio, espacio donde hoy por hoy están alojados.

En la interna de ese espacio, los referentes del Partido de las Ciudades y el Partido Demócrata se manifestaron alineados con JxC, mientras que los referentes de la UCeDé y la Democracia Cristiana mostraron su disconformidad y la necesidad de buscar una alternativa política que refleje su pensamiento.

La discusión se puso acalorada cuando Martín Pascual, presidente de la Convención de la Capital de UCeDé manifestó que “el verticalismo en Juntos por el Cambio es preocupante”, que no son “tenidos en cuenta” para la toma de decisiones y que no se los respeta. Asimismo manifestó que “pareciera que cualquier otro sector de la política estaría más abierto a la discusión y a proyectar ideas en conjunto”.

Muy por el contrario el presidente del Partido de las Ciudades en Acción, Jorge Giorno, defendió el armado de Juntos por el Cambio y manifestó al actual jefe de Gobierno porteño como el candidato que mejor puede representar los intereses de los integrantes de esta mesa política. Manifestó a su vez que “lo que la sociedad necesita es un gran administrador, como lo es (Horacio) Rodríguez Larreta.

Cuando tomó la palabra el secretario general de la Democracia Cristiana porteña, Carlos Traboulsi, adelantó que se encuentra en conversaciones avanzadas con el gobernador de la provincia de Córdoba, Juan Schiaretti, de quien dijo que “está decido a dar participación en la toma de decisiones y que sin lugar a dudas es una alternativa anti grieta”.

Según asistentes al encuentro, la situación fue muy tensa, pero en ese marco el presidente de la UCeDé, Andrés Passamonti, expresó que si bien las elecciones 2023 se encuentran a la vuelta de la esquina, este espacio debe mantener la unidad priorizando el trabajo futuro y no las necesidades electorales inmediatas.

La presidenta del Partido Demócrata de la Capital, Mónica Alonso, propuso continuar dialogando en esa mesa dentro de dos semanas y solicitó a los que se encuentran conversando con los distintos espacios que vengan con “propuestas sólidas”.

40 años y ¿Malvinas?

Por Carlos Lionel Traboulsi. A 40 años de la guerra, el secretario general del Partido Demócrata Cristiano reitera la necesidad de asumir un rol firme dentro del camino de la paz de defender la soberanía de nuestro mar.

El próximo 2 de abril se conmemoran los 40 años de la guerra de Malvinas, una guerra absurda, pero que dejó sangre de héroes derramada en nuestras islas que fertilizó la tierra y permitirá florecer sin ninguna duda la plena soberanía que nos corresponde y que tanto anhelamos los argentinos 

Recientes declaraciones del secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, sumadas a otras voces de ese país, reavivan tensiones y nos llaman a la reflexión de que es lo que estamos haciendo en honor de nuestros antecedentes dominiales, posesorios y en memoria de nuestros héroes, como así en cumplimiento de la disposición Transitoria Primera de la Constitución Nacional. 

El funcionario inglés refirió que Gran Bretaña defenderá las islas de “los matones” alrededor del mundo, sin importar la distancia a la que se encuentren, en un acto por el llamado “Día de Margaret Thatcher”. En ese contexto, aseguró: “Nuestros enemigos no deben dudar de la determinación de Gran Bretaña de enfrentarse a los matones, defender a los que no pueden defenderse a sí mismos y a nuestros valores”. En su discurso, planteó que el conflicto bélico que se desarrolló en 1982 debe ser un recordatorio para el Reino Unido de que su población puede ser “amenazada desde cualquier dirección y en cualquier momento”, una situación que vuelve imprescindible la inversión y el equipamiento de sus tropas para una eventual nueva guerra. 

Estas afirmaciones gravísimas dan un claro ejemplo de lo que es “un matón”, dan fundamento al equipamiento militar que viene haciendo el Reino Unido en el Atlántico Sur, situación que se viene denunciando en forma permanente en diversos foros internacionales y que no es receptado por el mundo civilizado adecuadamente. 

La Argentina debe asumir un rol firme dentro del camino de la paz de defender la soberanía de nuestro mar, de nuestras islas, de nuestros recursos y la desmilitarización del Atlántico Sur en especial de la fuerza nuclear.  Esto no puede quedar en meras declaraciones, sino que hay que llevar adelante acciones concretas dentro de las facultades jurisdiccionales y soberanas que tiene el país y que nos permiten las normas internacionales y nacionales, como asimismo llevar adelante con decisión política un proyecto de nueva visión estratégica donde el mar asuma un rol protagónico. 

Es necesario entre varias medidas, desplegar nuestra flota pesquera subsidiándola para que compita en alta mar en una línea imaginaria tipo cortina en el límite de las 200 millas marinas conviviendo con las flotas piratas, defendiendo de esa manera nuestros recursos ictícolas al generar competencia directa, tornando inviable económicamente la permanencia en ese lugar a quienes vienen a robarse nuestros cardúmenes.  Fortalecer la logística de control, apoyo a nuestra flota y sanción a los pescadores ilegales con la colaboración de los nuevos buques OPS que están operando en la Armada, como así dotar de otros buques de inmediata construcción nacional para cubrir esas necesidades junto con la Prefectura Naval.  Impulso de la Industria naval es parte del camino. 

En el ámbito diplomático es imprescindible profundizar el espacio de diálogo con los países ribereños del Atlántico sur tanto del continente americano como del africano y desarrollar una doctrina con alcance de cumplimiento internacional que establezca: “El Atlántico Sur para los pueblos del sur”, similar a lo que fuera la doctrina Monroe “América para los americanos”. Esto permitirá que la zona de colaboración y paz ya declarada por Naciones Unidas en su oportunidad, sea usufructuada en colaboración científica y de paz entre los países ribereños del sur obligando a la emigración de los países que no pertenecen a él, como es el caso del Reino Unido. En 1986 por Resolución de Naciones Unidad 46/11 se declaró zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur (Zpcas). Otras resoluciones posteriores apuntalaron esta posición y recientemente una nueva Resolución de la ONU destaca la función de la Zpcas como foro para que aumenten la interacción, la coordinación y la cooperación entre sus Estados miembros. 

Hay organismos creados en nuestro país que debieran estar discutiendo estas cosas en profundidad y en el marco de la defensa nacional, pero no vemos que ello suceda. Se ven solo comunicados oficiales de ocasión y lo que es más delicado existen nombramientos de integrantes de esos organismos que tienen posturas públicas contrarias a la manda Constitucional (según investigación minuciosa realizada por el Dr. Cesar Augusto Lerena). Recordamos que la Carta Magna reza: “La Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del territorio nacional. La recuperación de dichos territorios y el ejercicio pleno de la soberanía, respetando el modo de vida de sus habitantes, y conforme a los principios del derecho internacional, constituyen un objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino”. 

Por la memoria de nuestros héroes que dieron su vida en las Islas, por quienes han trabajado denodadamente por recuperar la soberanía plena, por quienes mantenemos vivo el fuego de nuestra argentinidad, por el futuro del pueblo, que estos 40 años nos encuentre a los argentinos unidos en este reclamo de llevar adelante acciones concretas para defender nuestros recursos naturales y recuperar la plenitud de nuestra soberanía en el Atlántico sud occidental, ya que no solo las Islas han sido usurpadas sino que los británicos se han extendido a casi un millón setecientos mil kilómetros cuadrados de mar que les permite extender su brazo colonial sobre el estrecho de Magallanes y las tierras del continente antártico. La batalla debemos darla en todos los frentes menos en el bélico ya que tenemos la responsabilidad de contribuir a la paz y concordia mundial. 

Construyamos la Argentina desde una visión distinta

Por Carlos Traboulsi. El autor sostiene que frente a la salida de la cuarentena tenemos dos opciones: “seguir en la línea histórica profundizando la pobreza y exclusión de nuestro pueblo o con decisión política avanzar hacia nuestra soberanía territorial y alimentaria de nuestros recursos marítimos”.

Las urgencias electorales obligan a nuestros políticos a mirar solo delante de sus narices para lograr efectos populistas que permitan superar el momento y obtener la adhesión en las urnas de la voluntad popular que los habilite para seguir en el poder disfrutando de sus beneficios olvidando las responsabilidades que esas funciones implican.  

Efectivamente, cuando se busca el poder por el poder mismo, olvidando el verdadero sentido y alcance de la Política con mayúsculas que es el ejercicio de la vocación de servicio al prójimo en la construcción del bien común, los pobres, las necesidades y el sufrimiento de las grandes mayorías se consolidan como única respuesta, sustentada en un asistencialismo que genera un círculo enfermizo sobre la fabricación de dinero falso condenando irremediablemente a la pérdida de futuro de todo un país. Siempre la urgencia deja de lado a lo importante.  

Vemos que se usa la expresión Soberanía Alimentaria para intentar fundamentar acciones violatorias de nuestros derechos consagrados en la Constitución Nacional, como es el caso del derecho de propiedad, pero sin embargo seguimos dando la espalda a nuestro territorio azul, donde dejamos en manos de depredadores extranjeros la explotación de nuestros recursos marítimos embolsando estos piratas, aproximadamente 14 mil millones de dólares al año en productos del mar que debieran ser parte de nuestras divisas genuinas.  

Debemos ser conscientes de nuestros recursos e intereses estratégicos marítimos ya que debemos conocer y querer lo que tenemos para saber qué es lo que podemos y debemos hacer. Así se empieza a concientizar para lograr la Soberanía Alimentaria y resguardar nuestra soberanía nacional ya que son varias potencias que disputan nuestro territorio azul, entre ellos Gran Bretaña, que al usurpar las Islas Malvinas ejerce un derecho sobre más de dos millones de kilómetros cuadrados de mar que son argentinos. No solo usurpan los 15 kilómetros cuadrados aproximados de tierra isleña, sino que ejercen autoridad sobre millones de kilómetros de mar.  

El mar es petróleo y gas, energía oceánica y marina, pesca y acuicultura, minerales marinos, algas y micro algas, sumado a todo lo que concierne a la naturaleza y al clima para generar un hábitat más amigable al ser humano.  

Pero hace falta además llevar adelante con decisión política las tareas de elaboración, gestión y ejecución de una política pública tendiente a la exploración y explotación de los recursos marítimos en forma efectiva y sustentable ambientalmente, como así desarrollar los intereses estratégico vinculados como ser: la industria naval de recuperación de la marina mercante, la de seguridad y defensa; la industria aeronáutica (aviones, helicópteros para diversas actividades); la logística portuaria, industrial en general y en particular la tecnológica, inteligencia artificial, metalmecánica, metalúrgica, empresarial, comercial y urbana. Hay que planificar, palabra ésta que como explicábamos al principio es desechada por los políticos por las urgencias electorales.  

Hay estimaciones técnicas serias, entre otras las del Centro Interdisciplinario de Estudios en Ciencia, Tecnología e Innovación (CIECTI), que determinan un potencial económico de estos sectores para un plazo de 20 años de 250 mil millones de dólares de valor agregado con una capacidad laboral mínima directa de unos 200 mil puestos de trabajo en un escenario absolutamente conservador (donde no se valorizan minerales, fabricación de barcos, inteligencia artificial, servicios anexos, etc). Esto implica ingresos de más del 41% del PBI pudiendo incrementarse en un escenario activo y optimista a más de 4 billones de dólares (millón de millones) acumulados en los mismos 20 años tomados como referencia, con una capacidad de empleo directo de un poco más del millón de personas. Sin tomar en cuenta toda la mano de obra indirecta que la podemos multiplicar como mínimo por 5.  

Pensemos que hoy el mar aporta aproximadamente el 1,5% del PBI y se está trabajando técnicamente a través del PROMAR (organismo creado por ley 27167 de investigación e innovación tecnológica dependiente del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación), para trasferir conocimiento que permita incrementar a un 15% del PBI la generación de riqueza.  

Es por ello que, aprovechando este desastre que nos está provocando la pandemia pero, aún más, la pandemia económica, deviene imprescindible dar una vuelta de tuerca y asumir la decisión política de generar una política pública que se convierta en una política de Estado, creando la Agenda Nacional de Intereses y Recursos Estratégicos Marítimos (ANIREM) cuyos objetivos serían entre otros: planificar, elaborar, desarrollar, ejecutar una política nacional de intereses marítimos y establecer los procedimientos de articulación y coordinación de misiones – funciones – jurisdicciones de los distintos estamentos de carácter público, privados y/o mixtos, así como también de los intereses en juego: exploración, explotación del mar fortaleciendo la presencia, desarrollo y modernización de los puertos, mantenimiento y mejoramiento de las vías navegables, desarrollo del transporte marítimo y fluvial, impulso activo de la flota mercante de bandera, las conferencias de fletes internacionales, la industria naval en construcción y reparación de unidades, la pesca en mar argentino y coordinar la de aguas dulces con las provincias, su producción e incorporación de valor agregado, crecimiento y mantenimiento de la flota pesquera, fortalecer y llevar adelante la voluntad y decisión política de preservar la zona de exclusión y plataforma continental sostenida por la Argentina de 350 millas, la renovación de su material y la industrialización a bordo y en tierra, la formación y capacitación del personal y su matriculación, el diseño y desarrollo de la logística de tierra y mar, desarrollo industria aeronaval, terrestres, científico, inteligencia artificial y tecnológica aplicada. Deberá garantizar a través de regulaciones y normativas la sustentabilidad ambiental en el tiempo del océano, el mar y los ríos, a fin de que las actividades a desarrollar puedan efectivizarse sin afectar el valor social y ambiental de las aguas y sin disminuir ni alterar el potencial económico de los otros sectores industriales y productivos de la vida nacional.  

Es necesario que la agencia a crearse tenga estamentos de escucha y consulta con la industria, comercio, gremios, sectores profesionales y técnicos para posibilitar una gestión exitosa, ya que las superposiciones de responsabilidades y ejecuciones generan burocracias perniciosas que atentan contra la idea propuesta.  

El Estado deberá generar las condiciones necesarias emitiendo dinero en forma escalonada para impulsar este proyecto que tiene la característica de obtener en forma inmediata resultados. La emisión monetaria respaldada por la construcción y desarrollo de este territorio azul (6.500.000 kilómetros cuadrados de plataforma continental, más 5 mil kilómetros de costa) con todo lo que ello implica, no es inflacionaria; muy por el contrario, es respaldo monetario y generación de confianza en la moneda, dando fortaleza al peso, o permitiendo la creación del Peso Argentino (proyecto de nueva moneda respaldada en la producción del economista David Expósito), que permitirá dejar de lado la apetencia popular del resguardo adictivo en el dólar americano.

Saliendo del aislamiento social y obligatorio impuesto por necesidad, tenemos nuevas oportunidades desde lo económico, industrial y laboral, entre ellas una de las más importantes es sin dudas mirar al mar y a nuestros ríos. El Almirante Segundo Storni lo reclamaba desde principios del siglo XX hasta su muerte en 1954. Es el momento de asumir el rol de la historia y tomar la decisión política de llevarlo adelante, sin temores y con coraje. Los argentinos y las generaciones venideras tenemos el imperativo de mirar al mar con una visión integradora de nuestra economía. Una Argentina distinta y para todos es posible si aceptamos mirarla de una forma novedosa, modificando nuestras creencias culturales que nos dicen que solo el campo nos salvará.

Carlos Traboulsi es abogado, diplomado en Relaciones Internacionales, y secretario general del Partido Demócrata Cristiano CABA.

Angustiante si te dejo

Por Carlos Lionel Traboulsi. El secretario general del Partido Demócrata Cristiano de CABA advierte la necesidad de que la cuarentena se imponga de manera “racional”, y orientada a los altos grupos de riesgo.

La angustia en la sociedad es generalizada y nos cruza a todos por igual con origen en distintas razones. Una revolución moral y una política pública de desarrollo y crecimiento post cuarentena es el camino para la nueva etapa de la vida democrática de los argentinos.

Recientemente se prorrogó el aislamiento social obligatorio hasta el 7 de junio con la misma incertidumbre del primer día, donde nadie puede dar una idea concreta de cuando termina y cómo salir de esta situación de emergencia excepcional para que la rueda de la economía empiece a girar permitiendo una cadena virtuosa con trabajo y prosperidad para todos.

La población, en especial en los centros urbanos importantes donde la gran concentración de personas es mayor, la llamada cuarentena actúa como una reja que impide que libremente las personas con su esfuerzo ganen el pan de cada día, y por el contrario ven disminuir drásticamente sus ingresos y sus ahorros tornando su futuro incierto, y esto no hay duda, que, aunque al presidente le moleste, angustia.

El perder la previsibilidad de un futuro cercano a cualquier ser humano angustia. Las personas con enfermedades de base simple o grave ven que su atención periódica médica se ve limitada y en muchos casos alterados hasta después de la cuarentena, como suele leerse en carteles o comunicaciones de centros hospitalarios públicos, privados, obras sociales y mixtos, donde están suspendidos los consultorios externos, odontológicos, oftalmológicos, etc. Esto también angustia ya que los problemas chicos se magnifican con el aislamiento y la maquinación propia de ver paredes todo el día y, los problemas delicados, terminan agravándose en muchos casos llevándose la vida de las personas. ¿Podemos decir que no tienen derecho a angustiarse?

¿Es cierto entonces lo que dice el presidente que uno no se debe angustiar porque se le está pidiendo que cuide su vida? Las personas no estamos limitados a un virus, nuestra vida está conformada por muchas cosas materiales, espirituales, intelectuales, éticas, morales y la falta de cualquiera o de todas afectan directamente la vida. El virus mata, pero una depresión también mata, al igual que una enfermedad no curada o mal curada. La persona humana es lo suficientemente compleja, es un combo de aspectos que el buen funcionamiento de ellos nos garantiza la vida y una vida digna. La angustia en la sociedad es generalizada y nos cruza a todos por igual con origen en distintas razones.

En esta dignidad entra también ocupando un lugar muy importante la confianza en sus relaciones humanas, en su vida laboral y en particular en su relación gobiernos ciudadanos. Cuando vemos que nuestros gobernantes, más allá de los signos partidarios, no dicen lo que dicen, la confianza empieza a flaquear y eso atenta contra la gobernabilidad, por lo tanto, los gobiernos echan mano a la limitación de la libertad, el aumento elefantiásico del estado y al control social por medio de la educación y la publicidad, en el que los medios de comunicación asumen un rol importante, para contrarrestar esa falta de confianza y poder desde una postura autoritaria democrática, llevar adelante un relato que vaya lavando cerebros y generando tropa masificada enceguecida en la defensa del gobernante.

El pueblo se somete voluntaria e inocentemente a estas técnicas hasta que surgen los reclamos inesperados de sectores que poco a poco van abriendo los ojos del rebaño dormido que terminan convirtiéndose en jauría que reclaman libertad, derechos y cumplimiento de la Constitución Nacional, instrumento éste que es lo que nos permite cohesionarnos y vivir en comunidad organizada bajo una misma bandera con un sentido de patria.  

Esta descripción de la realidad argentina se llama “corrupción”. Los políticos buscan sus propios beneficios y no ejercer sus funciones con vocación de servicio basada en el amor al prójimo. Se llama corrupción, que reitero, no es de este gobierno solamente, sino de décadas de destrato a los ciudadanos viendo hoy las consecuencias, por ejemplo, de tener grandes barrios carenciados en el lugar más rico de nuestro país que es la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, o los 1800 asentamientos de la provincia de Buenos Aires, el territorio más rico productivo e industrial del país, en donde a pesar de las ayudas clientelares el Covid 19 avanza y seguirá avanzando porque siempre se llega tarde, ya que solo se los trata de usar como números para el cuarto oscuro.

Recordemos cuando empezó esta pandemia las voces que se alzaban de distintos sectores cercanos al poder diciendo que ésta era una enfermedad de los chetos, de los ricos, etc., etc., etc. Populismo barato para seguir vendiendo relato y confrontar entre hermanos, jugando con la salud y la vida de las personas, las que poco importaban.

¿Estamos en contra de la cuarentena? No, pero ésta debe ser racional y en esta instancia orientada a los grupos de alto riesgo y que tienen la posibilidad y obligación de ser asistidos por el Estado, y no la porción de la sociedad productiva y con menos chances de contagiarse guardando el cumplimiento de los protocolos adecuados.

“Dicen lo que no dicen”, sigue siendo la regla de oro de la mal entendida política que llevan adelante gran parte de nuestra dirigencia. Es imperiosa la convicción de llevar adelante una auténtica “Revolución Moral” para sentar las bases de un futuro distinto que genere confianza en nuestro pueblo y definir una estrategia de inversiones, producción e industrialización integradora incorporando la visión estratégica de los intereses y recursos marítimos. Una revolución Moral y una política pública de desarrollo y crecimiento post cuarentena es el camino para la nueva etapa de la vida democrática de los argentinos.

Más de la extensión territorial de nuestro país nos está esperando en el continente azul, para que podamos generar trabajo y crecimiento para nosotros y las generaciones venideras. Es cuestión de voluntad política, convocatoria sin limitaciones y juntos construir un proyecto de país que nos contenga a todos, dejando de lado el relato interesado de ciertos sectores que solo buscan generar las condiciones necesarias para perpetuarse en el poder.

Habla pueblo habla, que no nos callen más.