Los diputados comenzarán dentro de dos semanas a debatir en torno a una gran cantidad de proyectos que contemplan un amplio temario relacionado a los jubilados y pensionados. Esa es la pulseada que se avecina entre la oposición y el oficialismo.
Es el debate que viene, para la primera parte de este período ordinario, en un Congreso que en cualquier momento entrará en “modo electoral” y ralentizará al máximo su actividad. Lo que viene tiene que ver con la cuestión jubilatoria, un tema que ya el año pasado trajo complicaciones para el Gobierno, que terminó saldando la situación con un veto.
Ahora el debate no irá por el mismo lado, sino que tendrá que ver con un hecho clave que acaba de registrarse: la caída de la moratoria previsional. Un tema impuesto durante los gobiernos kirchneristas, que permitió a millones de personas que no habían aportado los años suficientes jubilarse. Ya la oposición más dura realizó un intento para llevar el tema al recinto, cuando al final de la tarde del miércoles pasado, con posterioridad al debate del DNU de acuerdo con el Fondo Monetario, trató de realizar una sesión que terminó siendo en minoría. Pero el dato saliente es que esa tarde reunieron 124 diputados: estuvieron a 5 de conseguirlo, lo que anticipa que más temprano que tarde eso sucederá.
La postura del Gobierno es bien conocida y se verificó este fin de semana largo, cuando los funcionarios consultados aclararon que no se renovaría la moratoria previsional. Chocolate por la noticia: ya en la Ley de Bases el Gobierno había esbozado su previsible rechazo a la continuidad de este beneficio. En el texto original de la ley más importante aprobada por el Congreso en tiempos de Javier Milei proponía la eliminación de la moratoria previsional y su reemplazo por un nuevo sistema de prestación proporcional para quienes cumplan 65 años y no cuenten con el requisito mínimo de aportes de 30 años.
El título que contenía la reforma fue aprobado en su primer paso por la Cámara de Diputados, pero el Senado lo eliminó, y como Diputados no insistió, ese capítulo quedó fuera del texto definitivo.
De ahí que una vez que el tiempo se ocupó de hacer caer la norma, no hay intenciones del Gobierno por reflotar el tema.
La oposición intentará ordenar ahora el debate y canalizarlo originalmente por la Comisión de Previsión y Seguridad Social, que ya convocó a una reunión el próximo 9 de abril, a partir de las 10 de la mañana en la Sala 6 del Anexo A. Para ese día se ha previsto el debate de un listado de proyectos variopinto, como se advierte a partir de la convocatoria formalizada por la presidenta de la comisión, la radical cordobesa Gabriela Brouwer de Koning. Son una treintena de iniciativas de todos los sectores, incluido el oficialismo.
Los proyectos se dividen así, considerando la procedencia de sus autores:
UCR: Roxana Reyes, Gabriela Brouwer de Koning, Pedro Galimberti, Karina Banfi y Carla Carrizo.
UP: Leopoldo Moreau, Brenda Vargas Matyi, Gisela Marziotta y Andrea Freites.
Izquierda: Vanina Biasi, Nicolás del Caño y Myriam Bregman.
Encuentro Federal: Alejandra Torres.
Innovación Federal: Agustín Domingo y Pamela Calletti.
Coalición Cívica: Marcela Campagnoli.
Pro: Martín Maquieyra, María Eugenia Vidal, Silvia Lospennato, Damián Arabia y Silvana Giudici.
La Libertad Avanza: Alvaro Martínez, Carlos Zapata y César Treffinger.
Creo: Paula Omodeo.
Democracia para Siempre: Manuel Aguirre.
MID: Eduardo Falcone y Oscar Zago.
Hay de todo en ese temario de proyectos. Desde la prórroga de la moratoria a la eliminación de asignaciones universales; la eliminación de jubilaciones de privilegio a la pérdida del beneficio para condenados por mal desempeño de sus funciones.
La idea de la oposición es avanzar con un texto común, a sabiendas de que la otra comisión a la que tienen giro estos proyectos, Presupuesto y Hacienda, no abrirá sus puertas para este tema por deseo propio. Habrá que emplazarla y eso es lo que harán. Después, será el turno de los intentos para debatirlo en el recinto, pero para eso falta todavía un buen camino que recién está empezando.