Diputada repudia la actitud de la OEA sobre detenciones en Bolivia

La jujeña Carolina Moisés cuestionó el rol de Luis Almagro en el organismo y cuestionó la “intromisión” del organismo en asuntos internos del país vecino.

La diputada nacional Carolina Moisés (Frente de Todos-Jujuy) presentó este martes un proyecto de declaración en repudio a “la posición inaceptable” adoptada por la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre “las detenciones libradas por la Justicia boliviana para la ex presidenta de facto Jeanine Áñez, ex ministros y militares de su gestión”.

“La directa intromisión de (el titular de la OEA, Luis) Almagro en asuntos internos de los países de la región debe ser condenada”, señaló Moisés, quien integra la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara baja, y consideró además que “urge una posición enfática de los presidentes de la región para corregir el rumbo inaceptable que tomó el organismo bajo su conducción”.

Así se pronunció la legisladora en reacción al comunicado oficial del organismo en el que “expresa su preocupación ante el abuso de mecanismos judiciales que se han transformado en instrumentos represivos del partido de gobierno”, en una referencia directa a las órdenes de detención libradas por el Poder Judicial de Bolivia en contra Jeanine Áñez, cinco de sus ex ministros, y seis jefes militares, por el caso golpe de Estado producido en noviembre de 2019.

En los fundamentos de la iniciativa presentada, Moisés reclamó que la OEA está desconociendo además “la responsabilidad que le cabe a la ex mandataria de facto Añez, por la ruptura constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia, que trajo consigo muertes, daños, dejó desaparecidos y causó múltiples daños.

“Hace tiempo ya que el rol de Luis Almagro al frente de la OEA representa una verdadera afrenta para toda la región. Directamente atenta contra la unidad continental que el organismo debería estimular y sostener”, completó la diputada jujeña.

“Retienen y amenazan a legisladores en Bolivia”

Así lo denunció el bloque de diputados del Frente de Todos pasada la medianoche tras los graves incidentes vividos por tres de sus miembros.

A través de un duro comunicado, el bloque de diputados nacionales del Frente de Todos que conduce Máximo Kirchner exigió “la inmediata liberación del diputado (Federico) Fagioli” al Gobierno boliviano, al que sin miramientos esa bancada calificó de “dictadura”.  

Exigimos a la dictadura de Jeanine Añez la inmediata liberación del diputado Fagioli, que garantice la seguridad de los integrantes de la delegación y que permita que realicen la tarea de verificación electoral para la que fueron invitados”, señalaron a través de un comunicado.

En el mismo informan que “una delegación de legisladoras y legisladores argentinos fue invitada por la presidenta del Senado de Bolivia, Eva Copa, para participar como veedores en las elecciones del domingo”.

Los legisladores tramitaron su certificado como veedores de acompañamiento electoral internacional y contaban con toda la documentación migratoria en regla, pero fueron retenidos al llegar a La Paz. El comunicado señala a continuación que “el diputado nacional Federico Fagioli fue detenido ilegalmente y no hay garantías sobre la seguridad de la delegación argentina”.

Moreau condenó las expresiones de la presidenta boliviana

Para el diputado K, Añez “agravió no solamente al Gobierno argentino, sino a la tradición del pueblo argentino”. También le apuntó a Esteban Bullrich.

El diputado kirchnerista Leopoldo Moreau presentó este jueves una cuestión de privilegio. En realidad, en aras de ahorrar tiempo -tal cual dijo al arrancar-, presentó dos al mismo tiempo. La primera fue contra la presidenta de Bolivia, Jeanine Añez, quien el día anterior, en el marco de la Asamblea de Naciones Unidas criticó duramente a Alberto Fernández, denunciando “el acoso sistemático y abusivo del Gobierno argentino”.

En rigor, Moreau no mencionó a la presidenta del país vecino en ningún momento por su nombre, sino que se refirió a ella como “esta señora”. “Una señora que se encaramó al poder en la República de Bolivia a través de un hecho de fuerza” que calificó como “golpe de Estado”. El diputado sostuvo que ella “agravió no solamente al Gobierno argentino, sino a la tradición del pueblo argentino en materia vinculada al instituto del asilo”.

“La verdad que sonaba como una desfachatez, porque esa expresión provenía de alguien que provocó en Bolivia una situación de persecución inédita en los últimos tiempos en el continente latinoamericano: muertos, asilados, persecuciones, desaparecidos…”.

El legislador oficialista sostuvo que Añez “no habla en nombre del pueblo boliviano, pero sí agravió al pueblo argentino. Y sobre todo a  las fuerzas democráticas de la Argentina, que cada vez que gobernaron el país, dieron asilo a los que eran perseguidos por dictaduras militares”.

Recordó entonces la tradición de nuestros gobiernos de dar refugio a políticos de países vecinos y puso el ejemplo de Raúl Alfonsín cuando dio asilo al uruguayo Wilson Ferreyra Aldunate, a quien vio partir desde el puerto de Buenos Aires y “apenas llegó (a Uruguay) fue detenido y encarcelado, y no pudo participar de las elecciones, proscripto por aquel régimen”. Usó ese ejemplo para extenderlo a la actualidad con lo que sucede con Evo Morales (Bolivia) y Rafael Correa (Ecuador). “La historia se repite, con distintas caras, pero se repite”, razonó.

Y tras considerar que “es absolutamente necesario condenar estas expresiones” de la presidenta boliviana, pidió que “para que no desemboquemos en situaciones como esta, tenemos que tener cuidado los argentinos cuando abrimos la boca en relación a algunos temas esenciales y sensibles”. Señaló entonces que este jueves leyó declaraciones del senador nacional de Juntos por el Cambio Esteban Bullrich decir que “hubo fraude en la última elección”. “Además de parecerme ridículo, porque esta última elección la controlaba su propio gobierno, me parece peligroso que intentemos deslegitimar la democracia argentina. No hubo fraude, no habrá fraude. Tuvimos la elección más limpia de los últimos tiempos, como las anteriores”. “No dejemos que estas voces de desestabilización de la democracia un día nos enfrenten a situaciones oprobiosas como la de Bolivia”, concluyó.